Otto Rodolfo Manzolillo (1959), pertenece a una familia de clase media. Su padre Otto Eliseo Manzolillo es médico y su Madre Olga Lía Carloni es artista plástica. Luego de un exilio de 9 años en Venezuela donde nacieron su hermana Iris Adelina y él, sus padres decidieron radicarse en Empedrado, provincia de Corrientes, Argentina. Allí Inició sus estudios primarios y, posteriormente, motivado por su interés en el conocimiento técnico cursó parte de la secundaria en la escuela técnica de la ciudad de Corrientes. Luego, por razones de salud, de orden familiar y de temporalidad, regresó a Empedrado a completar la secundaria. No obstante el regreso, su interés de conocimiento cualquiera sea, no decayó, pudiendo optar para sus estudios universitarios entre las carreras de Medicina e Ingeniería; y, aunque la primera de ellas le resultaba más cómoda y favorable por la profesión de su progenitor, se decidió por la Ingeniería Civil, profesión frustrada de aquel. Con su padre, de muy fuerte personalidad y formación básicamente agnóstica; aunque en sus finales Masón y luego Rosacruz, mantuvo desde muy chico extensas conversaciones respecto de la vida y la importancia del Amor, en términos de "Única Religión" según le explicara; por lo que nunca dejó de observar el dilema del Ego como la base de las relaciones humanas; estableciéndose en su mente la búsqueda del conocimiento al respecto, manteniendo el objetivo de la comprensión de los hechos del comportamiento humano, su evolución, y prospección. Su base de formación, más allá de la instrucción meramente académica, está en pequeños grandes hechos de su muy estricta educación paterna y familiar, y frases clave observadas o aportadas por los educadores de todas sus etapas de instrucción, quienes moldearon su esencia ayudándolo en su detallada observación de la vida, la que realizara en silencio desde muy pequeño en todas sus relaciones y en cada uno de los individuos que conociera; como así del aporte de la música y de famosos compositores y cantautores. Se graduó de ingeniero civil (1983) bajo una hermosa experiencia de vida universitaria compartida con un particular grupo de compañeros de facultad de muy diferentes personalidades pero de notable altruísmo (con quienes a la fecha mantiene una resputuosa amistad), como así de sus profesores. Terminados los estudios universitarios, contrajo matrimonio y se afincó en Río Gallegos (1984), donde nacieron sus tres primeros hijos. Durante esos años, mas allá de su marcado interés en el conocimiento técnico y su experiencia laboral, continuó con sus registros de vida tanto externos como propios; y la con la aparición de la computadora que entregaba una perfecta oportunidad para el desarrollo de sus ideas personales y profesionales, encausó el objetivo de su permanente búsqueda personal y a la vez poniéndola al su servicio laboral. La intensidad de las contingencias diarias familiares y laborales, como la vorágine de las ideas; no le permitieron adentrarse en la lectura filosófica, tanto por falta de tiempo, como por no permitirse intrusiones que pudieran desviar sus esquemas de pensamiento; y perder, equívocamente o no, la esencia de los mismos. Su independencia laboral (1986), le permitió su desarrollo profesional como consultor (Hasta la fecha), dedicado básicamene a obras públicas. Con el devenir de los años formó nueva pareja (2006) de la cual nacieron otros dos hijos, con quines luego se afincó en la ciudad de El Calafate hasta la fecha.