En la cultivada y supercivilizada Viena, una ciudad única en el mundo, se forma Zweig, uno de los más populares escritores de este curioso período comprendido entre las dos guerras mundiales. A causa de sus ideas pacifistas, se exilió durante la primera guerra mundial en Zurich y Salzburgo. Tras casarse con su secretaria, se establece en Inglaterra, aunque a poco de estallar la segunda guerra mundial tuvo que buscar refugio al otro lado del Atlántico, en Brasil. Convencido de la definitiva destrucción de los valores culturales y espirituales europeos bajo la bota totalitaria del nazismo, se quitó la vida junto a su esposa en Río de Janeiro en el año 1942.