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Un joven se pierde en un camino en medio del bosque. El tiempo se distorsiona, la noche lo alcanza y una boca negra que es el fin, la muerte, lo atrapa. Un misterioso ser lo intentará liberar, pero su ego y orgullo no le permiten ver que son sus propios errores los que abrieron la boca en la tierra que ahora lo devorará. Este personaje mágico toma diferentes formas, a veces es visto como una bestia, otras como una bella joven que busca interactuar con el hombre para poder guiarlo, enseñarle un nuevo camino o librarlo de sus miedos. El ser humano ha perdido su conexión consigo mismo y el universo que lo rodea, pero su sanación es la clave para salvar este mundo. Charly Chisio crea "Cuentos de la Boca Negra" que es una serie de relatos donde están todos entrelazados, sin embargo cada uno se define a sí mismo, como a la vez crea conceptos que permiten entender a los demás. Todos los cuentos juntos buscan resignificar y romper la lógica con la que percibimos la realidad y así formar un nuevo universo literario.
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Seitenzahl: 42
Veröffentlichungsjahr: 2023
Chisio
Chisio Cuentos de la boca negra / Chisio. - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Autores de Argentina, 2023.
Libro digital, EPUB
Archivo Digital: descarga y online
ISBN 978-987-87-4220-5
1. Cuentos. I. Título. CDD A863
EDITORIAL AUTORES DE [email protected]
Introducción
La Boca Negra
La Brasa
La Canción
El Laberinto de Cuarzo
El Inmortal
El Viajero
Jade
Dedicado a mis padres gracias por darme la oportunidad de estar en este mundo, en esta vida. Para mis hermanos de sangre y para los hermanos de la vida gracias por salvarme siempre.
¡¡¡Este es mi regalo para ustedes mis seres amados!!!
Por último, dedicado a mí, para aquel niño, aquel
adolescente y adulto no estás solo. Gracias infinitas.
Cada cuento de este libro fue escrito de un solo tirón, como si una voz me los dictara. Cada relato trata sobre situaciones y sentimientos que son comunes para todos los seres humanos. El amor, la muerte, el abandono, el encuentro, la perdida, la libertad, etc. Cosas que pueden estar o no a la simple vista. Las interpretaciones siempre dependerán del lector y sus condiciones. Es a propósito que rondan en cada relato las repeticiones, la falta de características, de detalles de los personajes o de los lugares. Quizás todo sea un intento de romper estructuras, de que el propio lector sustituya lo que falte o crea que falte, con su imaginación. Quizás exista una vinculación entre todos los cuentos, estén conectados por personajes o situaciones similares o todo puede estar sucediendo a una misma vez. Quizás son galerías de un laberinto que no llevan a ningún lado. Quizás cuando alguien se pierde en la vida, algo que es superior, indescriptible, llega para guiarnos o salvarnos. El tiempo y el espacio tal vez nunca serán lo más importante, por eso es que en su mayoría son suprimidos. Quizás cada relato son escenas que intentan componer una imagen, una idea, un nuevo concepto. Descubrir esto es meramente una tarea que debe realizar el lector al momento de fluir en la narración. Quizás todo se encuentra cayendo hacia una boca negra que todo lo comprime, lo curva y distorsiona. Es por esto de las anomalías en los relatos y solo alcanzamos a ver un reflejo de lo que realmente debería ser.
Chisio.
Dejó el mallín atrás, se miró los pies, el barro negro se les caía. Al parecer fueron pocos los palos firmes, o las pisadas acertadas. –Nunca, nunca más –repitió.– Volveré por la vieja quebrada y tampoco dejaré que me vean sus ojos, rajaron bien adentro aquella vez primera y, al parecer, ya saben lo que siento; por eso persisten en quedárseme fijos enfrente de los míos cada vez que me encuentran.
El trillo por donde continúo caminando se perdió entre las lengas. La noche comenzaba a penetrarlo todo. Él se detuvo en medio de los árboles doblados. Agitó su cabeza como si despertara de un extraño y largo sueño. Cuando retomó la conciencia se dio cuenta de que había cometido un grave error. “En el camino nunca te debe encontrar la noche”. Era la premisa que desde chico había escuchado miles de veces. Intentó recordar en qué momento se pasaron sus últimas horas, fue algo que no pudo explicar. Estaba seguro de haber calculado con exactitud el tiempo justo para regresar a la Casa de Palos.
Cuando terminó de reflexionar se vio de repente solo en el bosque, sin un camino, sin una luz. La boca negra de tierra comenzaba a abrirse; en su interior se preguntó si había llegado la hora de ser devorado por ella. Al caer en esta idea se desesperó, sintió pavor, avanzó en distintas direcciones, quedó enredado entre notros y cañas. Como pudo se liberó de esa prisión y trató de tranquilizarse para no caer en la sensación de estar perdido. Pero el frío de la helada descendió bruscamente sobre sus hombros. Entonces comenzó a sufrir tanto miedo como nunca antes había sentido. Todo el orgullo, la valentía con la que siempre vivió, se esfumó de repente. Tanta lozanía y ego se disolvió con la fría noche.