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El detective Hércules Poirot es contratado por la señorita Violeta Marsh para resolver un extraño caso. La muchacha ha sido desafiada por su tío fallecido, Andrew Marsh, y sólo recibirá la enorme fortuna que debe heredar si logra probar su inteligencia. Vivirá durante un mes en la mansión de su tío y durante ese tiempo deberá resolver el acertijo. Si no lo logra, todos sus bienes pasarán a instituciones de caridad. ¿Podría alguien elegir a alguien mejor que Poirot para semejante misión?
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Seitenzahl: 14
Veröffentlichungsjahr: 2020
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El caso del testamento desaparecido
El caso del testamento desaparecido
El caso presentado por la señorita Violeta Marsh fue un cambio muy agradable en nuestro trabajo rutinario. Poirot había recibido una nota breve de aquella dama en la que solicitaba una entrevista, y él le respondió pidiéndole que fuera a verlo a las once del día siguiente.
Ella llegó puntualmente. Era una joven alta, muy hermosa, sencilla pero bien vestida, con un aspecto muy decidido.
—El asunto que me trae aquí es un tanto desacostumbrado, monsieur Poirot —dijo después de aceptar una silla—. Será mejor que empiece por el principio y le cuente toda la historia.
—Como guste, señorita.
—Soy huérfana. Mi padre era uno de los dos hijos de un modesto campesino de Devonshire. La granja era muy pobre, y el hermano mayor, Andrew, emigró a Australia, donde le fue muy bien, y gracias a una hábil negociación con unos terrenos se convirtió en un hombre muy rico. Mi padre, el hermano menor Roger, que no tenía inclinación por la vida de campo, consiguió un empleo en una empresa poco importante. Mi padre falleció cuando yo tenía seis años. A los catorce, mi madre también murió y el único pariente que me quedó con vida era mi tío Andrew, que hacía poco acababa de regresar de Australia. Compró una pequeña casa, Crabtree Manor, en su país natal, y se portó muy bien conmigo. Me llevó a vivir con él y me trató como si fuera su propia hija.