Me llamo Picasso - Eva Bargalló - E-Book

Me llamo Picasso E-Book

Eva Bargalló

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Beschreibung

Aunque soy famoso gracias a mis cuadros, he de decir que parte de mi celebridad la debo al hecho de haber conocido a muchas personas interesantes y de haber vivido muchísimos años, en una época apasionante y de una gran riqueza cultural. He tenido una vida intensa, en la que la pintura, las mujeres y los toros han sido mis principales pasiones, y en ocasiones mi perdición.

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Me llamo...Picasso

Proyecto y realización

Parramón PaidotriboDirección editorialLluís BorràsAyudante de ediciónCristina VilellaTextoEva BargallóIlustracionesVioleta MonrealDiseño gráfico y maquetaciónZink Comunicació S.L.

PicassoISBN:978-84-342-4263-0

ISBNEPUB:978-84-342-4300-2IBIC:YNM

Primera edición en rústica© 2019, ParramónPaidotribo www.parramon.com [email protected]

Derechos exclusivos de edición para todo el mundo

Prohibida la reproducción total o parcialdeestaobramediantecualquierrecursooprocedimiento,comprendidos la impresión, la reprografía,elmicrofilm,eltratamientoinformático,ocualquierotrosistema, sin permiso escrito de la editorial.

Aunque soy famoso gracias a mis cuadros, he de decir que partede mi celebridad la debo al hecho de haber conocido a muchaspersonas interesantes y de haber vivido muchísimos años, en unaépoca –buena parte del siglo XX– que ha sido una de las másprolíficas desde el punto de vista cultural. Viene a ser comoterminar un viejo libro y empezar otro repleto de nuevas ideas,conuna mirada puesta en el futuro. Los nuevos representantesde la cultura hemos aprendido de nuestros predecesores, perotambién hemos puesto en duda sus conocimientos y hemosbuscado un nuevo lenguaje más acorde con los tiemposmodernos. Pero, por desdicha, también ha sido una etapadeguerras cruentas, sociedades heridas de muerte y pueblosenfrentados entre sí.

Todo esto lo he vivido de primera mano, e incluso he sido unodesus protagonistas. Mi carácter inquieto e independiente, unidoa mis dotes innatas para la creación artística, me ha empujadoa buscar nuevos lenguajes de expresión, sin comprometermecon ninguno, y ha hecho de mí el mayor artista del siglo XX.

¡Por lo menos eso dicen los entendidos!

¡En fin!, no me puedo quejar. He tenido una vida intensa,en la que la pintura, las mujeres y los toros han sido misprincipales pasiones y, en ocasiones, mi perdición,ymi recuerdo siempre perdurará en las mentes detodas aquellas personas que se detengan ante unaobra firmada por mí.

Hola...

Nací en el siglo XIX, concretamente un 25 de octubre de 1881,en Málaga. Esta ciudad andaluza está bañada por el marMediterráneo, que envuelve de alegría y color la vida cotidianade las gentes que la habitan. Gracias a su puerto, en otrotiempo fue una ciudad próspera y dinámica. Durante los añosdemi infancia, sin embargo, sufría un estancamiento económicoque no superó hasta muchas décadas después, pero esto ya esotra historia. Sólo quiero dejar constancia de que a finales delsiglo XIXera una ciudad provinciana y culturalmente atrasada.

Dicen de mí que era un niño muy vivaz y que mi talento paraeldibujo floreció a una edad muy temprana. Claro que mi padre,José Ruiz Blasco, era profesor de dibujo en la Escuela de BellasArtes de San Telmo, por lo que yo heredé su amor por el arte.Era ya un hombre maduro cuando yo nací, pues tenía 43 años,ysu carácter era introvertido y, a veces, un tanto sombrío.

Mimadre, María Picasso López, diecisiete años más jovenque mi padre, era en contrapartida risueña y optimista.

6/ Me llamo...

Unainfancia

rodeado de mujeres

Mis primeros años en este mundo transcurrieronfelizmente, a pesar de las dificultadeseconómicas que padecíamos, pues el sueldodemaestro en aquellos tiempos era más bienescaso. No obstante, los afectuosos cuidadosque me dispensaron los incontablesmiembros femeninos de mi familia hicieronde mí un muchacho alegre y vivaracho,cuyos pasatiempos favoritos eran jugar ydibujar. Además, muy pronto tuve dosnuevas compañeras de juego: mishermanas Lola y Concepción.

De mi progenitor no sólo heredélaafición por el dibujo sino tambiénpor los toros y las palomas.¿Entendéis ahora por qué los herepresentado tantas veces en misobras? De hecho, uno demisprimeros cuadros, Elpicador,describe una escenainspirada en una corridadetoros.

No recuerdo con exactitud cuándo lo pinté, pero creo que fuehacia 1890, cuando tenía ocho o nueve años. Y por lo que serefiere a las palomas, ¿qué mejor homenaje que poner esenombre a mi hija o realizar los dibujos que han dado variasveces la vuelta al mundo y han servido y sirven como símbolode la paz? De todas mis obras en las que aparecen palomas,recuerdo con especial ternura Niña con paloma, que pintéen París a comienzos del siglo XX, durante mi segundaestancia en la entonces capital mundial del arte.

El cielo se tiñe de gris

En 1892 mi padre obtuvo una plaza de profesor en laEscuela de Bellas Artes da Guarda, en ACoruña.Este cambio nos obligó a trasladarnos a Galicia yabandonar el Mediterráneo y su luminosidad.

Eneste viaje también dejé atrás para siempre ladulzura y la inocencia de la infancia. Dicen queaquí me enamoré por primera vez; es posible,pero de esto hace ya tanto tiempo que...

Dado mi entusiasmo y mi aptitud para lapintura, mi padre decidió que debíacomenzar a cursar mis estudios artísticos enun centro oficial, por loque me matricularon

8/ Me llamo...