Respiración consciente - Samuel Ganes - E-Book

Respiración consciente E-Book

Samuel Ganes

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  • Herausgeber: Integral
  • Kategorie: Ratgeber
  • Sprache: Spanisch
  • Veröffentlichungsjahr: 2023
Beschreibung

DESCUBRE EL PODER TRANSFORMADOR DE LA RESPIRACIÓN CONSCIENTE. Bienvenido a la espiroterapia, una ciencia del bienestar que utiliza técnicas de respiración controlada y consciente para mejorar el equilibrio físico, emocional y mental para aprender a cuidarse a uno mismo.  Samuel Ganes transmite, en esta obra de referencia, todo su conocimiento en pranayamas para la iniciación en este arte de vivir y respirar. Se trata de una compilación de más de 50 técnicas de respiración distintas, derivadas de pranayamas originales y complementadas con prácticas modernas, que constituyen un amplio abanico de opciones para aprovechar todos los beneficios de la respiración y transformarla en un ritual de bienestar propio en la vida cotidiana.  Aliviar el estrés, desintoxicar el cuerpo, relajarte, reconectarte contigo mismo, potenciar tu sistema cardiovascular, mejorar tu sueño… Son muchos los beneficios de la respiración y muchas las técnicas para beneficiarte de ella que podrás probar con este libro.

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PORTADA

RESPIRACIÓN CONSCIENTE

Mejora tu bienestar con 50 ejercicios de espiroterapia

Samuel Ganes

traducción de ana duque

RESPIRACIÓN CONSCIENTE

PORTADILLA

NOTA IMPORTANTE: en ocasiones las opiniones sostenidas en

«Los libros de Integral» pueden diferir de las de la medicina oficialmente

aceptada. La intención es facilitar información y presentar alternativas,

hoy disponibles, que ayuden al lector a valorar y decidir responsablemente

sobre su propia salud, y, en caso de enfermedad, a establecer un diálogo

con su médico o especialista. Este libro no pretende, en ningún caso,

ser un sustituto de la consulta médica personal.

Aunque se considera que los consejos e informaciones son exactos

y ciertos en el momento de su publicación, ni los autores ni el editor

pueden aceptar ninguna responsabilidad legal por cualquier error

u omisión que se haya podido producir.

© del texto: Samuel Ganes. 2022.

Título original francés: Spirothérapie.

© Éditions Solar, un sello de Édi8, París, Francia, 2022.

© de la traducción: Ana Duque, 2023.

© de esta edición: RBA Libros y Publicaciones, S.L.U., 2023.

Avda. Diagonal, 189 — 08018 Barcelona.

rbalibros.com

Primera edición: octubre de 2023.

rba integral

ref: obdo229

isbn: 978-84-9118-924-4

el taller del llibre•realización de la versión digital

Queda rigurosamente prohibida sin autorización por escrito

del editor cualquier forma de reproducción, distribución,

comunicación pública o transformación de esta obra, que será sometida

a las sanciones establecidas por la ley. Pueden dirigirse a Cedro

(Centro Español de Derechos Reprográficos, www.cedro.org)

si necesitan fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra

(www.conlicencia.com; 91 702 19 70 / 93 272 04 47).

Todos los derechos reservados.

CRÉDITOS

Cuando te levantes por la mañana, piensa en el privilegio de vivir:respirar, pensar, disfrutar, amar.

Marco Aurelio, filósofo estoico romano

La vida no es más que un soplo.

Libro de Jacob

La vida de un ser vivosolo es un soplo que se le asemeja.

Lao-Tse

CITAS

Dedicado a Josepha Jeunet.Y a todos los que invitan a respirar de forma consciente, a respirar para curarse, a respirar para existir, a todos esos sabios que han creado y codificado el arte de respirar, y lo han transmitido a lo largo de los siglos, más allá de su último aliento.

DEDICATORIA

PARTE I

la terapia respiratoria

Espiroterapia 17

Respirar 41

Trastornos respiratorios y patologías 71

PARTE II

PREPARACIÓN Y MÉTODOS

Preparación 85

Métodos 113

PARTE III

PRÁCTICA Y SESIONES

Consideración del microcosmos y del macrocosmos 261

Diseño de una sesión 275

Los ejes de las sesiones 287

ÍNDICE

ÍNDICE

PRÓLOGO • 11

PRÓLOGO

Respirar para vivir

Preguntad a vuestro círculo cercano cuáles son los elementos más vitales para el ser humano. Sin duda alguna, las respues-tas más habituales serán el agua y la comida, luego vendrá el dinero y el sueño y, para los más románticos, el amor. Con fre-cuencia olvidamos lo que debería ocupar el primer lugar de esta lista, nuestro bien más preciado y más esencial: el aire que respiramos.

Y sin embargo, el aire y la respiración constituyen una nece-sidad universal. Es posible sobrevivir a carencias de hidratación, de comida, de luz o de contacto con nuestros semejantes durante algunas horas, o días, pero ante la ausencia de la respiración apenas podremos sobrevivir algunos segundos. La respiración no solo es fuente de vida, sino que es la vida misma para la mayoría de los seres vivos: humanos, mamíferos, peces, árboles, plantas. Siempre que hay vida, hay respiración, un intercambio entre un organismo y su entorno exterior. En todo momento, de día y de noche, en todas las estaciones y en cada rincón de nuestro plane-ta, cada ser vivo respira de forma ininterrumpida.

El aire y la respiración forman parte de nosotros hasta tal punto que ya no los percibimos. A menudo se dice que el ser hu-mano nace, vive y muere solo; eso supone olvidar que nuestro aliento es nuestro compañero de vida más íntimo, la esencia de la existencia con la que venimos al mundo y con la que nos volvemos a ir a la hora de nuestra muerte. Desde el «primer grito» al «últi-mo suspiro» nuestra existencia se desarrolla a imagen y seme-

PRÓLOGO

12 • 

janza de nuestra respiración. Como dice el adagio, «vivo quod spiro»: vivo como respiro.

El modo en que respiramos define nuestra forma de vivir y, por tanto, cómo vamos a envejecer.

Respirar lentamente para tener buena salud

Numerosas corrientes ancestrales esotéricas venidas de Orien-te valoran la vida de un individuo según su respiración: la edad depende de la cantidad de respiraciones efectuadas a lo largo de la vida, y no de los años transcurridos desde nuestro nacimiento. Cuanto más lenta y profunda sea la respiración, menos rápido envejeceremos. El cuerpo, la mente y la espiritualidad de una persona que realiza diez ciclos respiratorios por minuto se man-tendrá dos veces más joven que en el caso de quienes efectúan veinte ciclos.

En la actualidad, la ciencia ya reconoce lo que antaño intuía la tradición del yoga. Numerosos estudios han demostrado el im-pacto directo de la respiración en el estado de nuestro cuerpo. Hoy en día se sabe que una respiración rápida, provocada por el estrés o una situación emocional negativa, deteriorará más rápi-do el sistema cardiovascular. Del mismo modo, la relación entre el nivel de oxígeno en la sangre y el equilibrio ácido-básico del metabolismo, entre lo profunda que sea la respiración y la pro-porción de dioxinas en el cuerpo, incluso la interconexión entre la respiración y las emociones, ya han quedado más que demos-tradas.

En la adolescencia, yo mismo pude comprobar la importancia de la respiración en el equilibrio físico, emocional y mental. Sufrí ataques de ansiedad y bloqueos respiratorios, sin duda debidos a un simple accidente sucedido en mi primera infancia (que me ex-plicó mi madre más adelante), cuando de bebé resbalé en un barre-ño de agua. Experiencias similares pueden darse con frecuencia en la infancia y provocar un trauma susceptible de favorecer un estado de angustia en el adulto, que además podría verse agra-vada por una respiración rápida e irregular, mientras que la prác-

PRÓLOGO • 13

tica de la terapia respiratoria, por el contrario, contribuirá a la relajación.

Respirar conscientemente para reeducar la respiración

Sabemos, pues, lo que debemos hacer: transformar nuestra for-ma de respirar. ¿Cómo? Simplemente tendremos que llevarla a nuestra consciencia y ralentizarla.

Esta idea no es nueva: la respiración ya ocupaba un lugar primordial en la cultura védica, especialmente la del yoga, hace más de cuatro mil años. Por aquel entonces era la base de una ciencia del bienestar que en la actualidad todavía se llama «el control del aliento vital», o pranayama. A lo largo de los siglos, se ha ido recopilando un amplio conjunto de técnicas respira-torias con sus correspondientes denominaciones y la especifi-cación de sus beneficios, hasta llegar a nuestros días. Actual-mente su eficacia es tal, que numerosos métodos de respiración «novedosos» han retomado aquellas técnicas ancestrales, aunque no las mencionen siquiera. La respiración cuadrada de la coherencia cardiaca se inspira directamente en el método sama vritti; la respiración holotrópica de Stanislav Grof, por su parte, recoge las enseñanzas de bhastrika, un trance respira-torio que también fue muy popular entre las comunidades hi-ppiesy new agede los años sesenta.

El arte de la respiración

Las tres fases que acabamos de mencionar (respirar para vivir, respirar para tener buena salud y respirar para reeducar la res-piración) cimentan el camino que nos permite a todos y cada uno de nosotros pasar de ser ignorantes de la propia respiración a llegar al conocimiento consciente de esta, con el fin de hacer del acto respiratorio un arte de vivir y de sanación.

La propuesta resulta aún más prometedora si tenemos en cuenta que el arte de la respiración no presenta riesgos, no es

14 • 

complicado, puede practicarlo todo el mundo en cualquier parte (apenas influye la edad, la morfología o el grado de inmovilidad del cuerpo en caso de que exista una disfuncionalidad o una le-sión), y se pueden obtener innumerables beneficios de forma to-talmente autónoma. En un mundo en el que el estrés y la contami-nación están generalizados, y en el que probablemente sentimos la necesidad real de combatir esta carga negativa cotidiana, la terapia respiratoria representa más que nunca una solución per-tinente, que ya se encuentra al alcance de todos.

Esta es la promesa y la iniciativa que ofrece la presente obra: aportar los conocimientos necesarios para descubrir todos los beneficios de la terapia respiratoria gracias a un enfoque histó-rico, científico y práctico, con más de cincuenta técnicas de res-piración disponibles y perfectamente explicadas.

Aprender, comprender, emprender: he aquí las tres claves para experimentar un arte de vivir esencial, abrir un paréntesis para vol-ver a conectar con uno mismo, y equilibrar la armonía del meta-bolismo.

Tomaos tiempo para vosotros y respirad.

Insuflaos vida a vosotros mismos

y a todo cuanto os rodea.

PARTEI

la terapia respiratoria

PARTE I. LA TERAPIA RESPIRATORIA

espiroterapia

LA TERAPIA RESPIRATORIA

espiroterapia

ESPIROTERAPIA

espiroterapia • 19

Las raíces

del aliento

vital

La etimología de una palabra a menudo revela toda la riqueza de su significado. Exploremos pues el término «espiroterapia».

Según los diccionarios bilingües de latín-español, «spiro» es una raíz latina que ha dado origen a varias palabras derivadas:

•Spirare: soplar, respirar.

•Spiramen: narinas, fosas nasales.

•Spiramentum: canal, conducto, poro.

•Spiraculum: orificio respiratorio, apertura.

•Spiratio: aliento.

•Spirantia: palpitante.

•Spiritus: soplo, aire que se desplaza, vida, espíritu, inspira-ción.

•Spiritalis: propio de la respiración, inmaterial, espiritual.

Actualmente podemos encontrar la raíz «spiro» en numerosos términos de nuestra lengua: inspirar («in-spiro»), espirar («ex-spiro»), respirar, aspirar, transpirar, conspirar, suspirar, etc.

Cualquier persona puede darse cuenta de que los deriva-dos de «spiro» tienen significados bien distintos, aunque todos guardan alguna relación entre sí. Desde la concreción más abso-luta (fosas nasales, canal, poro) hasta la abstracción en grado sumo (espíritu, inspiración, espiritual), todos apuntan a una re-lación entre cuerpo y espíritu, y dicha relación constituye el nú-cleo de la terapia respiratoria. El término «terapia» deriva del griego antiguo «therapeia». No descubrimos nada nuevo al decir que significa «cura», «cuidado», «tratamiento», y también «mantenimiento». De «therapeia» deriva el término «therapon», es decir, terapeuta, que significa «servidor» o «aquel que cuida

Las raíces del aliento vital

20 • LA TERAPIA RESPIRATORIA

de otra persona». Así pues, la «espiro-terapia» es el método que facilita el cuidado de uno mismo o de otras personas mediante la respiración. Y lo que es aún más importante: al actuar directamen-te sobre la relación cuerpo-espíritu, también entraña una prome-sa de mejora de nuestro equilibrio físico, emocional y mental.

El vínculo cuerpo-espíritu, una noción que ya existía en la antigua Grecia

Pneumaes el equivalente en griego de la raíz latina spiro. Significa «respiración», «espíritu santo», pero también «neutro». Se encuen-tra como morfema en muchos términos de uso común en nuestro idioma: neumonía, neumólogo, neumotórax, neumococo o incluso nervio neumogástrico.

Claudio Galeno, célebre médico griego de la antigüedad, contem-plaba tres formas de pneumasdistintas:

Pneuma physikon, en latín spiritus naturalis: la forma física.

Pneuma zootikon, en latín spiritus vitalis: la forma vital.

Pneuma psychikon, en latín spiritus animalis: la forma psíquica.

Como en el caso de los derivados de «spiro», resulta evidente la progresión de las formas de «pneuma», de las más concretas a las más espirituales. De hecho, en la antigua Grecia se creía que la res-piración era el vínculo de unión entre el cuerpo y el alma.

Los griegos, que ya conocían el yoga desde el siglo v a. C. gracias al intercambio con la cultura hindú a través del grecobudismo, llama-ban a esta disciplina «la sabiduría del aliento».

espiroterapia • 21

La respiración:

de la función vegetativa

a la práctica consciente

La mayoría de nosotros seguimos ignorando el arte de la respira-ción, a pesar de que en la actualidad despierta cada vez más inte-rés. Esto se debe a cinco importantes razones, que tal vez sea conveniente analizar aquí.

Una función vegetativa

Al igual que la circulación sanguínea, las secreciones glandula-res, la digestión e incluso el mecanismo termorregulador, la res-piración es una función vegetativa. Eso significa que el sistema nervioso autónomo, también llamado «sistema nervioso vegeta-tivo», se asegura de que esta se lleve a cabo.

En otras palabras, respiramos sin tener que pensar en ello. La respiración es hasta tal punto inconsciente que a veces ni si-quiera nos damos cuenta de que va a sufrir una alteración, ya que el estímulo que se halla en el origen de dicha alteración ya ocupa nuestra mente, y con frecuencia nos vuelve «sordos» con res-pecto a nuestro propio aliento.

Lo innato y lo adquirido

Puesto que se trata de una función vegetativa, la respiración siempre se ha considerado algo innato. Lo cual resulta compren-sible si tenemos en cuenta que desde nuestra más tierna infan-cia nos enseñan a hablar, a caminar y a comer correctamente, pero nadie nos enseña a respirar.

La respiración no se aprende, no se ve, no se perciben sus vir-

La respiración: de la función vegetativa a la práctica consciente

22 • LA TERAPIA RESPIRATORIA

tudes, y, en consecuencia, no se la valora como se merece. Sin em-bargo, aquellas personas que respiran mal, con respiraciones bre-ves o entrecortadas, o cuyo ritmo respiratorio se ve afectado a la menor fluctuación nerviosa o emocional, seguirán haciéndolo mal a lo largo de toda su vida. Y lo que es peor, es muy posible que su problema se agrave con el tiempo. Por consiguiente, y en vista de que vivimos como respiramos, una persona que respira «mal», debi-do a un deficiente estado de salud física, psíquica o emocional, corre el riesgo de que su organismo entre en una deriva caótica.

Afortunadamente, la buena noticia es que, de todas las fun-ciones vegetativas de nuestro metabolismo, la respiración es la única que el individuo puede llevar a un plano de conciencia, y por tanto, la única que puede modificar. Eso quiere decir que posee-mos la capacidad de controlar nuestra respiración, y que po-demos conectar conscientemente con esta, si previamente la desconectamos de su función primaria vegetativa.

Más adelante regresaremos a esta cuestión, por supuesto, pero lo que ya sabemos hasta ahora nos indica que contamos con los medios para mejorar nuestra respiración. Una buena respira-ción se adquiere, no es innata. Por eso tenemos que volver a aprender a respirar.

Un recurso accesible y gratuito

Respirar de forma consciente es algo accesible a todas las perso-nas, en todo momento y en todo lugar. Y lo que es más importante: desde el momento en que se integran los diferentes métodos de la respiración consciente, esta resulta gratuita. Paradójicamente, esta característica, que constituye una de las mayores ventajas del arte de la respiración, suele resultar perjudicial. En nuestra sociedad consumista, con frecuencia damos por hecho aquello que está a nuestra disposición, y por tanto lo juzgamos carente de interés. Todo lo que es gratis rara vez despierta nuestro anhelo.

Lo cual no ayuda a la hora de valorar la respiración. Aunque ob-viamente el aire que respiramos se considera útil e incluso vital, no parece especialmente portador de beneficios prometedores.

espiroterapia • 23

Los beneficios ignorados

Preguntad a vuestro alrededor: «¿Qué nos aporta la respiración?». Podríamos apostar a que muy pocas respuestas contendrán una palabra distinta de «oxígeno». De hecho, las demás funciones de la respiración, así como su impacto en los distintos órganos del metabolismo, suelen pasarse por alto. Nuestro desconocimiento de los beneficios de la respiración es, en efecto, una realidad.

He aquí cinco anécdotas que tal vez nos permitan formarnos una idea inicial del poder de nuestra respiración:

• Según un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de New South Wales publicado en 2018 en la re-vista British Medical Journal, cabe dar gracias al acto de respirar por el 80 % del total de la grasa que nuestro cuer-po elimina cada día. De la eliminación del 20 % restante son responsables nuestros fluidos corporales, como el sudor, la orina, las lágrimas, etc.

• En una respiración normal, solo utilizamos del 20 % al 30 % de nuestra capacidad pulmonar. Tras apenas algunos se-gundos de respiración profunda, esa cifra aumenta hasta el 80 %, incluso al 90 %.

• Según unos estudios publicados por el Instituto HeartMath (conocido por haber creado el método de coherencia car-diaca), cinco minutos de respiraciones más amplias bastan para ralentizar el ritmo respiratorio y conseguir que las ins-piraciones y espiraciones sean más profundas, lo cual supo-ne un aumento del nivel de oxígeno en sangre, así como un fuerte descenso del dióxido de carbono, con lo que se consi-gue que el pH sanguíneo vuelva a ser alcalino (un beneficio que perdura durante las cuatro horas siguientes).

• De acuerdo con un estudio de 2015 realizado en UCLA (Uni-versidad de California, Los Ángeles), una sesión de respiración profunda supone un gasto calórico equivalente al 140 % del que se obtiene en un paseo en bicicleta de veinte minutos.

• En el caso de las retenciones (o apneas) con vaciado de pulmones, nuestro cerebro tarda 555 milésimas de segun-

24 • LA TERAPIA RESPIRATORIA

do en dar la orden al bazo de producir glóbulos rojos, y de esa forma se recupera el oxígeno acumulado en músculos y órganos para evitar la muerte cerebral. Gracias a las ap-neas prolongadas y repetidas, los bajaus, una tribu nómada de los mares de Indonesia, ha desarrollado a lo largo de va-rias generaciones esta facultad: los miembros de esta tribu son capaces de permanecer bajo el agua más de diez minu-tos, y los bebés nacen con un porcentaje de glóbulos rojos tres veces mayor que el resto de los humanos (un buen ejemplo de epigenética).

Al margen de sus sorprendentes e insospechadas cualidades, gran parte del poder de la respiración se deriva de su interacción per-petua con el cuerpo y la mente. Mal empleada, la respiración pue-de dar pie a una salud deficiente, que puede cronificarse, e incluso ir a peor. Afortunadamente, el proceso se puede invertir: gracias a la respiración consciente, el círculo vicioso puede convertirse en un círculo virtuoso.

Círculo vicioso:una emoción, un pensamiento o un estado cróni-co o generador de negatividad respiración entrecortada y/o de repeticiones cortas desgaste del metabolismo agrava-miento de la emoción, del pensamiento o del estado crónico que genera la negatividad.

Círculo virtuoso:respiración tranquila relaja y equilibra el me-tabolismo emoción, pensamiento o estado crónico que gene-ran positividad la respiración serena se prolonga en el tiempo.

Autonomía e independencia

Una vez comprendidas y asimiladas las técnicas, la terapia respi-ratoria permite practicarlas de una forma totalmente autónoma e independiente. No es necesario ningún «gurú» o maestro: cada persona puede practicarla por sí misma. Esta es otra de sus grandes ventajas, además de su carácter accesible y gratuito.

espiroterapia • 25

Sin embargo, esta ventaja también puede suponer un freno a la hora de practicar dicha respiración. De hecho, no siempre es fácil tener el rigor y la disciplina necesarios para practicar en so-ledad a largo plazo. Cabe recordar a este respecto que, tras vein-tiún días, un ritual cotidiano se convierte en un hábito para nuestro cerebro.

No obstante, para aquellas personas que se sientan más mo-tivadas con las indicaciones de una voz y la compañía de una mi-rada, es decir, cuando cuentan con la guía por otra persona, una solución sería buscar sesiones colectivas de terapia respiratoria en algún lugar cerca de donde viven.

En resumen: hay que tener presente que una respiración de calidad no es algo innato, sino que debe adquirirse; que debemos dirigir la conciencia hacia el acto de respirar para que este no se vea afectado por ningún estímulo negativo; y reconocer sus be-neficios e instaurarlos en la vida de cada uno como un ritual ínti-mo para el propio bienestar. ¡Bienvenidos a la práctica de la tera-pia respiratoria!

La herencia

de la cultura védica

ancestral

El lugar primordial de la respiración en la cultura védica

No seríamos capaces de comprender totalmente la terapia res-piratoria sin remontarnos a sus orígenes, más concretamente a un periodo de la historia que supo prestar a la respiración toda la atención que merecía: la era védica.

En la India, la era védica fue un periodo fundacional: a lo largo

La herencia de la cultura védica ancestral

26 • LA TERAPIA RESPIRATORIA

de esta época se redactaron en sánscrito los textos hinduistas canónicos (entre los cuales se encuentran los cuatro Vedas, los Brahman, los Aranyaka y los Upanishad).

La era védica abarca aproximadamente desde el tercer mile-nio antes de Cristo hasta el año 600 d. C.

Además, es —sobre todo— durante ese lapso de casi tres mil años cuando se recopilaron los métodos ancestrales de respira-ción, los mismos que constituyen la base de la terapia respirato-ria y de todos los «nuevos» métodos de respiración, aunque por lo general se ignore su origen.

Para empezar, el hecho de dividir la respiración en tres fases, tal como hacemos en la actualidad, se remonta a esa época, en la que ya se distinguía:

• La inspiración (purakaen sánscrito): el acto que purifica.

• La espiración (rechakaen sánscrito): el acto que desecha.

• La retención (kumbhakaen sánscrito): la jarra pequeña (los pulmones inmóviles recuerdan la figura de una peque-ña jarra en el imaginario védico).

Cabe destacar que el sentido que la cultura védica otorga a la inspiración demuestra que los sabios del valle del Indo se dieron cuenta enseguida de la función purificadora que la respiración ejerce sobre el metabolismo.

Dos tipos de retención

La retención (kumbhaka) está muy presente en los textos védicos, que la consideran aún más importante que la inspiración y la espi-ración. La retención puede dividirse en dos categorías:

•Puraka kumbhaka, es decir, la retención que sigue a la inspira-ción, con los pulmones llenos de aire.

•Rechaka kumbakha, la retención que sigue a la espiración, con los pulmones vacíos.

espiroterapia • 27

Pero la aportación principal de la cultura védica reside sobre todo en el papel que desempeña esta noción central: el prana, el «soplo», que también se suele traducir como «energía vital».

El prana en el ayurveda

Según el ayurveda, el prana se absorbe a través de los pulmones, que purifican el aire inspirado antes de redistribuirlo por el orga-nismo mediante el sistema sanguíneo y el corazón. Los canales que transportan el prana de los pulmones al resto del organismo son el dosha kaphay sobre todo los prana vaha srotas. Junto con el anna vaha srota, que aprovisiona el cuerpo de nutrientes, y los ambhu vaha srotas, que le suministran el agua, los prana vaha srotasson considerados como los canales más importantes, por ser de vital relevancia.

Un individuo con buena salud mental, física y espiritual cuen-ta con un metabolismo lleno de prana. Pero si algunas células no reciben la cantidad necesaria, si no se asimila correctamente, entonces aparecen desequilibrios.

Las causas de una mala asimilación del prana son variadas: falta de ejercicio físico, respiratorio o meditativo; sueño insufi-ciente o de mala calidad; alimentación incorrecta debido a un régimen no adecuado; estado emocional y mental negativo (an-siedad, depresión, profunda tristeza, trauma, etc.); polución at-mosférica o contaminantes alimentarios; mala postura; aler-gias, etc.

El prana o la energía vital

Prana es un término sánscrito compuesto de pra, un prefijo que an-tecede al verbo y que significa «hacia delante» (parecido a pro- en castellano), y de ana, que quiere decir «respirar». El prana es, por tanto, un arrebato de aliento, del alma, y de ahí deriva su traducción habitual como «energía vital».

28 • LA TERAPIA RESPIRATORIA

Volvemos a encontrarnos con la noción de círculo vicioso ya mencionada anteriormente: un problema en el metabolismo, como una indigestión, por ejemplo, puede conllevar problemas respi-ratorios que alteran la asimilación del prana, lo cual provocará a su vez otros desequilibrios. Esta interdependencia entre el sis-tema respiratorio y el resto del metabolismo pone de relieve la importancia de la respiración en nuestro estado de salud espiri-tual, físico y mental. Además, permite comprender que no basta con practicar ejercicios de respiración para solucionar los tras-tornos respiratorios.

Prana y qi

El prana de la cultura védica vendría a ser un concepto equivalente bien conocido en la cultura ancestral china de la misma época: el qi. Qidesigna la fuerza de la vida, cuyo desequilibrio se encuentra en el origen de cualquier patología.

El prana en el yoga y el tantrismo

En la cultura más esotérica del yoga y el tantrismo, el prana es una de las cinco corrientes de vida esenciales. Estas remiten a los cinco dioses superiores del viento (los Vayus) en la mitología de la India: Apana, Udana, Samana, Vyana y, finalmente, Prana.

Mukhya Vayu, «el Vayu soberano», es en cierto modo el jefe de los cinco dioses. De una belleza excepcional, gobierna sigiloso en el aire sobre su carro tirado por caballos blancos y de color viole-ta (cuarenta y nueve... o mil, según la versión), controla los cinco flujos que recorren el cuerpo y, al ser estos sus intermediarios, todos los procesos biológicos:

•Apana controla la expulsión de los residuos fuera del orga-nismo, del bajo vientre al exterior del cuerpo, todo lo que es inútil para la vida.

•Udana controla la regulación del sonido emitido por las

espiroterapia • 29

cuerdas vocales y conforma la energía consciente utilizada para hablar, cantar, reír y llorar.

•Samana controla la digestión, la producción y la recupera-ción de las células del cuerpo, y contribuye por tanto al de-sarrollo de la persona.

•Vyana controla las contracciones y las dilataciones del cuerpo, así como los movimientos musculares; controla las frecuencias cardiaca y respiratoria; y proporciona la ener-gía indispensable para la fuerza vital, que nos permite funcionar de forma óptima en el plano mental, emocional y físico.

El yoga refuerza la capacidad de dirigir y controlar mentalmente el prana, con lo cual también aporta más vitalidad. ¿Cómo? Gra-cias a la práctica regular de las posturas (asanas), de la medita-ción (dhyana), y también de los métodos respiratorios que vamos a comentar a continuación: los pranayamas.

El control

del aliento vital:

los pranayamas

Aunque con denominaciones diversas, todos los métodos de res-piración existentes desde hace siglos proceden, sin excepción, de los pranayamas originales. Comprender los pranayamasper-mite, por tanto, comprender todas las técnicas de respiración que derivan de estos.

Por lo general, el origen de esta palabra se atribuye a dos po-sibles etimologías en sánscrito, que en realidad están muy próxi-mas entre sí.

El control del aliento vital: los pranayamas

30 • LA TERAPIA RESPIRATORIA

•Pranayama(prana, la fuerza vital, el aliento; -yama, control, dominio): el control del aliento vital.

•Pranayama(prana, la fuerza vital, el aliento; a-yama, reten-ción): la retención del aliento vital.

La primera mención escrita de los pranayamasse remonta al cuarto Veda, Atharvaveda Samhita, un antiguo texto védico es-crito alrededor del año 3000 a. C. En esta obra densa, un com-pendio de ciencias de la vida y rituales místicos, encontramos «la disciplina del aliento vital», además de una recopilación que esti-pula por primera vez los principios del ayurveda, la medicina tra-dicional hindú. Los Vedas ulteriores mencionan a menudo los pranayamas, que suelen asociarse a la recitación de mantras.

A continuación reproducimos algunos versículos extraídos de uno de estos Vedas, el Hatha Pradipika, que permitirán hacer-se una idea de cómo concebían lospranayamasaquellos sabios védicos y, sobre todo, de la importancia que otorgaban a la re-tención, que es en sí misma una definición de la respiración cons-ciente y controlada.

Cuando el movimiento de las respiraciones se detiene

gracias a la atención (puesta en los intervalos),

la (conciencia) no mental

surge por sí misma y sin esfuerzo. (2, 27)

Mientras la respiración esté detenida en el cuerpo,

el espíritu estará libre de enfermedad.

Mientras la mirada esté posada entre las cejas,

¿cómo podría nadie temer a la muerte? (4, 28)

La retención fácil de la respiración,

que deja a un lado la inspiración y la espiración:

esa pausa en la respiración

es lo que se entiende como «retención pura».

Cuando se domina la retención pura,

desprovista de la inspiración y la espiración,

nada resulta difícil de conseguir

en los tres mundos.

espiroterapia • 31

Con el dominio de la retención pura,

se puede retener la respiración a voluntad,

y se obtiene el reino del yoga real

sin la menor duda. (4, 64-65)

¿Cómo el conocimiento podría vivir en el espíritu

mientras están presentes la respiración y la mente?

Cuando la respiración y la mente desaparecen,

El hombre consigue la libertad.

No hay otro método. (7, 18-19)

En los Upanishad, un conjunto de textos filosóficos que confor-man la base teórica de la religión hindú, se mencionan de nuevo los pranayamas, especialmente en el Brihadaranyaka, escrito en-tre el 800 y el 700 a. C. El pranayamase asoció rápidamente a los rituales de la mañana, el samdhyao el agnihotravédico. Se trata de un conjunto de rituales practicados por los brahmanes para despertar, que deben realizarse durante el «tiempo de Brahma» (brahma muhurta), es decir, en el intervalo de los 96 a los 48 mi-nutos previos a la salida del sol. El pranayamatambién se impuso gradualmente en los rituales vespertinos.

En adelante, el yoga se encargará de reforzar y confirmar la práctica de los pranayamas, y hará que evolucionen desde su condición de ritual místico y religioso practicado por los brah-manes hacia la condición de ritual propio de los yoguis: aunque la dimensión mística y sagrada perdura, en lo sucesivo los pranaya-masse asociarán al arte y al bienestar.

Cabe destacar la mención de los pranayamasen los versícu-los 49 a 53 de los Yoga Sutrasde Patanjali:

II. 49 – Tras conseguir la postura perfecta, se practica el control de la respiración regular. Los movimientos de la exhalación e inha-lación deben ser controlados.

II. 50 – Ese pranayamaconsta de tres movimientos, la exhala-ción, la inhalación, y la suspensión. Al llevar la atención al lugar don-de se halla la respiración, su amplitud y ritmo, se consigue que esta sea lenta y sutil.

II. 51 – El cuarto pranayamasobrepasa el plano de la conciencia, en la que se distingue entre inspiración y espiración.

32 • LA TERAPIA RESPIRATORIA

II. 52 – Entonces, lo que cubría la luz se desvanece.

II. 53 – La mente adquiere o desarrolla la capacidad de adoptar distintas formas de concentración.

El pranayama no es solo una herramienta que facilita la elevación del alma, algo susceptible de asociarse a la magia, sino que se convierte en una disciplina por sí misma en su totalidad: la cuar-ta de las ocho del yoga. En el caso de los yoguis, el arte de respi-rar de forma consciente deviene terapéutico. Se observan unas reglas de higiene y se codifican los mudras, es decir, los gestos y posiciones adecuadas. Como consecuencia, las reglas de oro para la práctica de los pranayamasse pueden resumir en cinco:

• Respetar las reglas de higiene de la nariz cada mañana.

• Respetar las reglas de higiene de la boca cada mañana.

• Lavarse las manos y la cara antes de cada práctica.

• Favorecer la siguiente proporción: una espiración dura dos tiempos.

• Utilizar siempre la mano derecha para la cara y la izquierda para contar los ciclos de respiración (véase «Métodos tra-dicionales tántricos», pág. 144).

Imprescindible saber

En el yoga, los pranayamassuelen asociarse a la práctica de asanas (posturas) y de dhyana(meditación). Cuando únicamente se prac-tican pranayamas, como en el caso de la terapia respiratoria, resul-ta aconsejable acabar con un tiempo de reposo, para que el cerebro integre los beneficios de la sesión. Para ello se adopta la postura llamada «del cuerpo inerte» (savasana), tumbado sobre la espalda, con el cuerpo totalmente relajado.

espiroterapia • 33

Del pranayama

a la terapia respiratoria:

las técnicas respiratorias

a lo largo de la historia

La Antigüedad, de Oriente a Occidente

Una vez catalogados en los textos védicos, desde el Atharvaveda Samhitashasta los Yoga Sutraspasando por los Upanishad, los pranayamashan sido la base del arte de la respiración en el con-junto de las corrientes culturales y terapéuticas.

En efecto, desde el tercer milenio antes de Jesucristo es evi-dente la huella de las prácticas respiratorias en la cultura china, sobre todo en el taoísmo, que las considera «esenciales para la buena salud y la longevidad». Simultáneamente, en el antiguo Egipto, numerosos escritos mencionan el cuerpo y sus fluidos en relación con el arte de la momificación. En dichos escritos se ha-lla la primera mención al vínculo entre la ventilación pulmonar y la circulación sanguínea.

Tras las conquistas de Alejandro Magno, los intercambios lla-mados «grecobudistas» que datan del periodo de los reinos in-dogriegos facilitaron la circulación de ideas entre los territorios helénicos (Grecia) y los de la cuenca del Indo (la India), que enri-quecieron a ambas culturas.

Dato curioso

Los griegos no llamaban a los practicantes de yoga «yoguis», sino «gimnosofistas».

Del pranayama a la terapia respiratoria: las técnicas respiratorias a lo largo de la historia

34 • LA TERAPIA RESPIRATORIA

Durante el Imperio helénico, Anaxímenes (585-525 a. C.) fue uno de los primeros en interesarse por la respiración. Destacó que contribuye a la buena salud al afirmar que «el aire se encuentra en el origen del fuego, del agua y de la tierra», lo cual ya sugería un vínculo con el ayurveda. Hipócrates (460- 377 a. C.), el padre de la medicina occidental, sostenía, a propósito de su medicina de los humores, que los pulmones y el corazón generan el calor corporal, mientras que la respiración refresca el corazón. En la misma época, Platón (428- 347 a. C.) insistió en la importancia de equilibrar ese calor interior mediante la respiración. Así pues, él fue quien por vez primera formuló la hipótesis de que la ventilación pulmonar de-sempeñaba una función equilibradora.

El oscurantismo, de la Edad Media al Renacimiento

A partir de la Edad Media, las múltiples invasiones serán motivo de intercambios, pero también de una forma de resistencia y de auge de la respiración consciente. La cultura de los eruditos («el saber»), que los científicos, todavía laicos, registraban por escri-to, posteriormente quedaría oculta para evitar la inquisición de las nuevas religiones, deseosas de imponer su cultura por oposi-ción a la ciencia naciente. A pesar de esa desconfianza inicial, las técnicas de respiración serán asimiladas y mantenidas por las prác-ticas religiosas.

Efectivamente, los métodos de respiración se integraron en los rituales de los distintos cultos para perdurar, como en el caso del dhikr del sufismo, de los leitmotivs presentes en oraciones y cánticos, que provocan un estado de trance en las tradiciones hebraica y cristiana. Por aquel entonces, la respiración se perci-bía como un factor que contribuía a la alquimia del alma y al víncu-lo con la divinidad. Cabe indicar, no obstante, que dicha asimi-lación en todo caso se realizó contraponiendo las técnicas de respiración a su fuente de origen, es decir, a las corrientes eso-téricas orientales como el yoga, que en aquella época se consi-deraba una práctica herética.

espiroterapia • 35

Los pranayamasy el islam

Los pranayamastuvieron cierta difusión en la literatura islámica iraní e hindú del siglo xvi, antes de sufrir un retroceso y ser deja-dos de lado en el trascurso del siglo posterior.

Encontramos referencias a la doctrina hindú en numerosos tratados sufíes antiguos, como la obra de referencia Taleem e Ghousia, del autor Shah Gul Hasan Qalandar Qadri. Algunas obras célebres sobre yoga, como Amritakundao los Yoga Sutras, tam-bién fueron objeto de numerosas traducciones al árabe, persa y urdu. Incluso el gran poeta y filósofo persa Mir Findiriski (1562-1640) escribió sobre el yoga.

Prueba del interés por los pranayamas en la cultura musul-mana de la época son las palabras que escribió en sus tratados sufíes el erudito y reformador Shah Wali