En diciembre del año 1980 Gustavo llegó con dieciséis años a la iglesia cristiana por primera vez. En sus inicios fue parte del coro de la iglesia y llegó a ser predicador del evangelio del Señor Jesucristo. Ocupó varios cargos como líder juvenil nacional durante catorce años, entre ellos los de tesorero y presidente. Luego fue llamado a formar parte de la directiva corporativa y, en forma paralela, trabajó como supervisor en una de las regiones más grandes de Chile. En 1981 conoció en la iglesia a Dania Leiva, quien es hoy su esposa y con quien tiene cuatro hijos. Actualmente pastorean una iglesia en Chile denominada templo Mauleon, en la que han trabajado por veintitrés años. En el área secular, desde hace treinta y tres años, tiene una empresa de metal mecánica.