¡Megan Ha Cogido El Covid-19! - Owen Jones - E-Book

¡Megan Ha Cogido El Covid-19! E-Book

Owen Jones

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Beschreibung

En “¡Megan ha cogido el Covid-19!”, Megan y su escuela reciben una advertencia sobre la nueva variante de Covid 19, Omicron, que también está infectando a los niños, y se les informa de que la semana siguiente comenzará un programa de vacunación. Jane, la mejor amiga de Megan, tiene miedo a las agujas y ha oído rumores sobre una campaña patrocinada por el Estado para inyectar a todo el mundo un bicho rastreador. Megan no se cree la teoría de la conspiración. Cuando Jane empieza a sentirse mal, su madre la diagnostica erróneamente y reina la confusión. Finalmente, Wacinhinsha arroja luz sobre la pandemia de Covid-19.

La serie de la psíquica Megan consta de veintitrés novelas sobre la creciente conciencia de una niña de que es capaz de hacer cosas que nadie de su familia puede hacer. Megan tiene doce años en el primer volumen. Tiene dos problemas aparentemente insuperables. Su madre tiene miedo de las habilidades latentes de su hija y no sólo no la ayuda, sino que la desanima activamente; y no puede encontrar un profesor que la ayude a desarrollar sus poderes sobrenaturales y psíquicos, ya que ella no sólo quiere saber qué es posible hacer y cómo hacerlo, sino a qué fin debe destinar sus habilidades especiales. Megan es una buena chica, por lo que parecería obvio que tendería a usar sus poderes para el bien, pero no siempre es fácil hacer lo correcto aunque se sepa lo que es. Estas historias sobre Megan gustarán a cualquiera que tenga interés en los poderes psíquicos, lo sobrenatural y lo paranormal y tenga entre diez y cien años.
En “¡Megan ha cogido el Covid-19!”, Megan y su escuela reciben una advertencia sobre la nueva variante de Covid 19, Omicron, que también está infectando a los niños, y se les informa de que la semana siguiente comenzará un programa de vacunación. Jane, la mejor amiga de Megan, tiene miedo a las agujas y ha oído rumores sobre una campaña patrocinada por el Estado para inyectar a todo el mundo un bicho rastreador. Megan no se cree la teoría de la conspiración. Cuando Jane empieza a sentirse mal, su madre la diagnostica erróneamente y reina la confusión. Finalmente, Wacinhinsha arroja luz sobre la pandemia de Covid-19.

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Contenido

¡Megan ha Cogido el

Covid-19!

(Untitled)

OWEN JONES

Jorge Ledezma Millán

DEDICATORIA

CITAS INSPIRADORAS

Contenido

Capítulo Uno: Omicron

Capítulo dos: Los Problemas de Jane

Capítulo tres: La pandemia ataca el hogar

Capítulo cuatro: Cambia la suerte de los Evans

Capítulo cinco: Wacinhinsha

GLOSARIO

UNA NOCHE EN ANNWN

Owen Jones

1 WILLY JONES

Serie: La Psíquica Megan

¡Megan ha Cogido el

Covid-19!

¡Un Guía Espiritual, Un Tigre Fantasma y una Madre Terrorífica!

por

OWEN JONES

Traducido por

Jorge Ledezma Millán

Copyright © 14 Agosto 2022 Owen Jones Author

Todos los derechos reservados.

¡Megan ha Cogido el Covid-19!

por Owen Jones

Publicado por Megan Publishing Services

https://meganthemisconception.com

Se ha hecho valer el derecho de Owen Jones a ser identificado como autor de esta obra de acuerdo con las secciones 77 y 78 de la Ley de Derechos de Autor, Diseños y Patentes de 1988. Se ha hecho valer el derecho moral del autor.

En esta obra de ficción, los personajes, lugares y acontecimientos son producto de la imaginación del autor o se utilizan de forma totalmente ficticia.

Todos los derechos reservados.

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Otras novelas cortas de la misma serie:

Serie: La Psíquica Megan

¡Un Guía Espiritual, Un Tigre Fantasma y una Madre Terrorífica!

El error de concepción

Los trece años de Megan

El viaje escolar de Megan

Los exámenes escolares de Megan

Los seguidores de Megan

Megan y el gato perdido

Megan y la alcaldesa

Megan se enfrenta el escarnio

Visita de los abuelos de Megan

El padre de Megan cae enfermo

Megan se va de vacaciones

Megan y el ladrón

Megan y el ciclista

Megan y la anciana

El jardín de Megan

Megan va al zoo

Megan va de excursión

Megan y el W. I. Concurso de cocina

Megan monta a caballo

Megan va a navegar

Megan en Carnaval

Megan en Navidad

¡Megan ha cogido el Covid-19!

DEDICATORIA

Esta edición está dedicada a mi esposa y mejor amiga Pranom, que hace todo lo posible para facilitarme la vida, y lo consigue fenomenalmente.

El karma se lo pagará a todos con la misma moneda

CITAS INSPIRADORAS

No creas en nada simplemente porque lo has escuchado,

No creas en nada simplemente porque lo han dicho y rumoreado muchos,

No creas en nada simplemente porque se encuentra escrito en tus textos religiosos,

No creas en nada simplemente por la autoridad de maestros y ancianos,

No creas en las tradiciones porque se han transmitido durante generaciones,

Pero después de la observación y el análisis, si algo concuerda con la razón y es conducente al bien y al beneficio de uno y de todos, acéptalo y vive de acuerdo con él.

Gautama Buda

––

Gran Espíritu, cuya voz está en el viento, escúchame.

Haz que crezca en fuerza y conocimiento.

Haz que siempre contemple la puesta de sol roja y púrpura.

Que mis manos respeten las cosas que me has dado.

Enséñame los secretos que se esconden bajo cada hoja y piedra, como has enseñado a la gente en el pasado.

Permíteme usar mi fuerza, no para ser más grande que mi hermano, sino para luchar contra mi mayor enemigo: yo mismo.

Permíteme presentarme siempre ante ti con las manos limpias y el corazón abierto, para que cuando mi vida terrenal se desvanezca como la puesta de sol, mi espíritu vuelva a ti sin vergüenza.

(Basado en una oración tradicional Sioux)

Contenido

Capítulo Uno: Omicron

Capítulo Dos: Los Problemas de Jane

CapítuloTres: La Pandemia Ataca la Escuela Feyton

Capítulo Cuatro: Los Cambios de Suerte de Evan

Capítulo Cinco: Wacinhinsha

Glosario

Capítulo Plus: Una noche en Annwn

Capítulo Uno: Omicron

“¡Silencio, niños, por favor!”, exclamó la señora Henshaw, la maestra de Megan. “Tengo que hacer un anuncio importante, que los afectará a todos y cada uno de ustedes. También tengo una carta que deberán entregar a sus padres o tutores en cuanto lleguen a casa. No se preocupen, no es un informe escolar sobre sus capacidades académicas. Es una breve explicación sobre lo que les voy a comunicar ahora. Por cierto, todos los cursos están recibiendo esta misma charla en este mismo momento.

“Tiene que ver con ese espantoso virus Covid-19 que está haciendo la vida de todos tan difícil, así que por favor escuchen con ambos oídos.

“Como sabrán, los niños no se han visto muy afectados por las cepas de Covid-19 que hemos experimentado hasta ahora, y por eso la mayoría de los niños no se han vacunado. Sin embargo, hay una nueva cepa del virus en camino, que parece que también infectará a los miembros más jóvenes de la sociedad.

“Y, sí, Jonny, eso significa que todos ustedes, ¡dejen de hablar!” Hubo una carcajada contenida ante la pequeña broma de la profesora, ya que a todos les caía bien.

“¿Está diciendo que tendremos que ponernos una inyección, señorita?”, exclamó Jane desde el pupitre adyacente al de Megan.

“¿Qué te he dicho sobre gritar, Jane Thomas-Davies?”

“Lo siento, señorita”, contestó ella levantando la mano, pero aún buscando una respuesta en el rostro de la profesora.

“Ya llegaremos a eso más tarde. No tengan tanta prisa. Entonces, ¿dónde estaba? Ah, sí. Las cartas para tus padres. Por favor, tomen una y pasen las otras”. Les dio a los seis alumnos sentados al frente de las filas cinco sobres cerrados a cada uno.

Megan cogió su carta, le dio la vuelta, le pasó las otras por encima del hombro y miró a Jane. Sin duda, parecía un poco mareada.

“¿Estás bien?”, susurró. La única respuesta de Jane fue girar las comisuras de la boca hacia abajo y sacudir la cabeza casi imperceptiblemente. Megan sabía que odiaba las agujas.

“Omicron, la última variante está atacando a los niños, pero la buena noticia es que no es tan potente como sus predecesores. Es más virulenta, lo que significa que es más difícil bloquearla, pero no hace, bueno, rara vez hace tanto daño como las otras. Es probable que los niños se contagien, e incluso que caigan enfermos, aunque no será grave. Sin embargo, eso no significa que no pueda enfermar gravemente a una persona mayor, si se la transmiten.

“El gobierno recomienda, por tanto, que a partir de ahora se vacune a todos los niños en edad escolar lo antes posible… y a tu pregunta, Jane, eso significa una inyección en la parte superior del brazo. Sin embargo, es bastante indolora. Yo ya me he puesto tres y no he sentido nada. Mira, ni siquiera una marca”, dijo levantando la manga corta de su blusa.

Megan levantó la mano y la señora Henshaw asintió. “¿Cuándo ocurrirá, señorita?”

“Buena pregunta, Megan. Bueno, hoy es viernes, así que tus padres tendrán el fin de semana para leer la carta, y algún tiempo la semana que viene para hacer cualquier pregunta que tengan. El programa de inoculación comenzará el martes de la semana que viene. Un grupo de personal médico vendrá a la escuela para facilitar las cosas, y se instalará en el vestíbulo.

“¿Alguna pregunta?” Miró alrededor de la clase, pero sólo la mano de Jane se levantó.

“¿Jane?”

“¿Tenemos que ponérnosla, señorita?”

“La verdad es que no lo sé. No veo cómo pueden vacunarte en contra de la voluntad de tu médico de cabecera, o de tus padres… o si estás pateando y gritando en el suelo… Sin embargo, es la opción recomendada, así que tendrás que hablarlo con tu familia. Ahora, una última cosa antes de dispersarnos a la primera lección, si alguien quiere discutir esto conmigo, que me busque. Muy bien, ¡vamos!”

Megan ayudó a su amiga de aspecto enfermizo con su mochila y salieron de la sala.

La primera oportunidad que tuvieron las dos amigas para hablar fue a la hora de la comida, pero ninguna quiso ser la que sacara el tema. Se sentaron en un banco cerca de la pista de tenis y abrieron sus cajas de bocadillos.

“¡Oh, otra vez pasta de pescado!”, gimió Jane. “¡Es justo lo que necesito hoy!” Empezó a llorar en voz baja, pero Megan lo sabía. No sólo conocía bien a su amiga, sino que podía ver la tristeza en su aura, y Grrr había puesto su cabeza en el regazo de Jane. Jane había progresado mucho en poder ver al tigre fantasma en las últimas semanas, pero no mostraba ningún signo de ello en ese momento.

“¡Vamos, Jane! Espabila. Todavía no ha pasado nada, y aún tienes que hablar con tus padres.

“Mira, incluso Grrr está preocupado por ti. Ha puesto su cabeza en tu regazo”.

Jane abrió los ojos, se secó las mejillas y dio una palmadita a treinta centímetros por encima de su regazo, aterrizando justo en el pelaje del enorme tigre.

“Gracias, Grrr. Eres una buena chica, ¿verdad?”. Miró a Megan para que le confirmara que su mano estaba en la zona correcta, y Megan asintió sonriendo.

“Vamos, Jane. Pocas cosas son realmente tan malas como creemos. Nuestra imaginación no siempre juega a nuestro favor. Ya verás. Te cambio un sándwich de queso, tomate y lechuga por uno de tu pasta de pescado”.

Jane sonrió, hizo el intercambio y dijo: “Ese Davy Thomas parece estar en forma con su equipo de tenis, ¿verdad?”.

Megan levantó la vista. “Sí. También es un buen jugador”, pero a Jane no le interesaba el tenis. Se está recuperando, pensó Megan.

El timbre para el comienzo de la sesión de la tarde pareció llegar rápidamente, pero Megan sabía que el drama aún no había terminado. Su amiga tenía un extraño tipo de cerebro que parecía no sólo detenerse en un problema, sino revolotear de un tema a otro.

Recogieron sus cosas y se dirigieron a su aula de formación para el registro de la tarde.

La siguiente oportunidad que tuvieron las amigas para hablar fue de camino a casa desde la escuela, pero su calle estaba a sólo doscientos metros de las puertas de la escuela, y Megan quería saber qué era lo que preocupaba a su mejor amiga.

“Ya me conoces, Jane”, dijo una vez fuera, “puedo ver en tu aura que algo te preocupa. ¿Vendrás a tomar un pastel y un batido conmigo para que podamos hablar de ello?”.

“¿Pagas tú?, porque yo estoy en la inopia. Hasta el sábado no me dan el dinero de bolsillo”.

“Claro, yo invito”.

Se sentaron en una mesa vacía fuera de la charcutería de la Media Luna y esperaron a que les atendieran. Grrr se sentó frente a ellas, con su cola agitándose en el tráfico de la carretera.

“Tu madre no te va a esperar, ¿verdad, Jane?”

“¡Cómo no!”, respondió ella. “¿Y la tuya?”