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- Herausgeber: SAGA Egmont
- Kategorie: Für Kinder und Jugendliche
- Serie: Ronin
- Sprache: Spanisch
- Veröffentlichungsjahr: 2019
En el último capítulo de la serie Ronin, Ronin viaja al Meifumadô para encontrar su destino y salvar la vida de Azami. Es mientras que lucha contra el Rey de la Oscuridad y su ejército de demonios que Ronin se entera de su pasado, su familia y cómo puede mantenerse fiel a sí mismo. En las circunstancias más desafiantes, Ronin debe recordar lo que lo convierte en un verdadero guerrero.Un chico se despierta en el medio del bosque sin el recuerdo de quién es o cómo llegó allí. En el curso de esta serie, Ronin emprende muchas aventuras que lo llevan al límite. En el camino, conoce personas que lo ayudan a crecer y aprender lo importante. Con la ayuda de su espada mágica y los poderes que le brinda, Ronin lucha por el bien. En cada aventura, Ronin se acerca cada vez más a entender quién es en realidad.
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Seitenzahl: 30
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Original title:Ronin 5: Opgøret Copyright © 2013, 2019 Jesper Nicolaj Christiansen and SAGA Egmont, Copenhagen All rights reserved ISBN: 9788711866795
1. E-book edition, 2019 Format: EPUB 2.0
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El rio
El bote se deslizaba por las aguas oscuras. El silencio los rodeaba. Era como si todos los sonidos del mundo hubieran desaparecido. Ninguno de ellos hablaba por el temor de que sus voces fueran demasiado fuertes como para destrozar el silencio como una roca a un vidrio. Cuando se movían, incluso mínimamente, el bote crujía y sonaba como un trueno. Incluso Daigoro, que nadaba al lado del bote, mantenía el silencio.
En la popa del bote estaba Okami de pie. Mantenía la mirada en el horizonte, que era absolutamente negro. Justo detrás de Okami estaba sentado Akama. Tenía una flecha entre los dientes y su arco entre los pies. Frente a él estaba Yeo, mirando el agua oscura y helada, con la lanza lista para atacar.
Frente a Ronin, Goseki limpiaba sus garras. Ronin ya no podía soportar el silencio.
—¿Goseki? —Su susurro sonó tan fuerte como un grito de guerra. Todos lo miraron y luego volvieron la mirada a la quietud del agua.
Goseki le indicó con un gesto que siguiera.
—Luché contra un hombre una vez: Shogun. Dijo que era de Goseki-ryû. ¿Ese eres tú?
Goseki asintió.
—Luego de dejar el daimyo, comencé mi propia escuela. Pero la cerré rápidamente cuando descubrí que mis estudiantes estaban utilizando sus nuevos conocimientos para su propio beneficio. Shogun fue uno de mis pupilos.
—¿Pero les enseñabas a tus estudiantes a pelear? —preguntó Ronin.
Goseki lo miró decepcionado.
—¿Eso es lo que piensas que es esto? ¿Pelear? Esto es una forma de vida, niño. Todos nosotros hemos elegido un camino, un sendero para nuestras vidas. Y estos caminos nos trajeron donde una vez comenzamos. Ahora es tiempo de terminar lo que empezamos.
—Shh. —Era Okami desde la popa del barco.
—Cuando eliges un camino —murmuró Goseki—, esa decisión trae responsabilidades. La responsabilidad de hacer lo correcto. Si te conviertes en médico, aprendes sobre el cuerpo humano y puedes utilizar esos conocimientos para curar o para causar daño. Todo conocimiento trae responsabilidad. La nuestra es ayudar a los necesitados. Tenemos que convertirnos en ejemplos a seguir. Si todos se ayudaran unos a otros, Nippon sería la nación más grandiosa del mundo y nadie sufriría.
Daigoro relinchó nervioso desde el agua. La espada de Ronin, Gôsuto Mêkâ, zumbó a su lado.
—Hay algo en el agua... —murmuró Yeo.
Ronin miró hacia el agua oscura que estaba quieta como la muerte.
—¿Es el dragón...? —le preguntó a Okami—. ¿Es el dragón del que me hablaste la primera vez que nos conocimos? El dragón de cuyo diente se forjó mi espada. ¿Es Maleficus?
Okami asintió.
Los otros guerreros miraron a Ronin.
—No es nuestra voz lo que atrae a Maleficus —murmuró Yeo.
—Tampoco es el caballo —dijo Akama en voz alta.
—¡El dragón ha venido por su diente! —gritó Okami.
En ese momento el río alrededor de ellos hizo erupción. Una columna de agua oscura se levantó hacia el aire y empapó a todos en el bote. El agua hedía e hizo que les ardieran los ojos.
