Erhalten Sie Zugang zu diesem und mehr als 300000 Büchern ab EUR 5,99 monatlich.
¿Sabías que los sentimientos tienen colores? La autora de este poemario ha escogido el Amaranto para hablar sobre el amor. Pero no es solo amor romántico lo que late en sus páginas, sino amor al mundo. Un sentimiento que mueve personas, montañas y ciudades; que nos hace grandes y, a la vez, muy pequeñas. Amaranto habla de cómo cambiar el mundo con amor si cambiamos la mirada de lo que el amor significa, o creemos que significa. Palabras sencillas que encierran un homenaje a todas las personas que no se marchitan, que resisten las embestidas de la vida. Que permanecen siempre vivas.
Sie lesen das E-Book in den Legimi-Apps auf:
Seitenzahl: 54
Das E-Book (TTS) können Sie hören im Abo „Legimi Premium” in Legimi-Apps auf:
Primera edición: mayo 2022 Campaña de crowdfunding: equipo de Libros.com Imagn de cubierta e interiores: Julia San Millán Maquetación: Patricia Escolar Corrección: Míriam Villares Revisión: Maite Lecue Santovenia
Versión digital realizada por Libros.com
© 2022 Mónica Gallego © 2022 Libros.com
ISBN digital: 978-84-19174-16-1
Índice
Portada
Créditos
Título y autor
Intro
Eterna raíz
Empezar por decir adiós
Cercanías lejanas
Lejanías cercanas
Sí pero no
Parar para avanzar
¿En esencia o aprendizaje?
Vivir para no soñar
Cúmplete siempre
Locura impuesta
Cordura como respuesta
Cimientos
Vacío: ¿caída libre o sentido?
Siempre vivas
Seres mitológicos
Soltar o morir
Maltratada
Amor humano
Amor del sano
Corre
Mujer
Inmensa
Vuela
Equilibrio en la balanza
¿Sembrar olvido?
Esto también pasa
La vida era esto
De otro planeta
¿Inconformismo?
Cielo como atajo
En rebajas
Privilegios
Camino en movimiento
¿Quién?
¿Cuántos lunes han pasado?
Olvidados
Mirar hacia otro lado
Trenes que pasan
de camino a casa
Supervive
Hoy no espera a mañana
Darse del todo
¿Cuánto hay de cambio?
Casa
Inmarcesible
Nos presento
Cosquillas de primavera
(Co)razón a la duda
Aunque no lo creas
¿Qué quieres de mí?
Desde que le quiero
Búscame, que yo te encuentro
Sentimientos encontrados
Vestido de valiente
1, 2, 3, 4... ¿nos contamos?
Billete de ida
De la A a la Z
Arte abstracto
A nuestro ritmo
Desastre artificial,
maravilla natural
Sincero y sin peros
Estoy dispuesta
Hogar
Epílogo
Mecenas
Contraportada
Entendí que la libertad
no reside en acomodarse,
valiente, en el brillo de mis alas.
Que unos brazos al cerrarse, encarcelan.
Pero cuando se abren al abrazo, aman.
Que en la tormenta se encuentra
también la calma.
Que en la oscuridad de la noche
siempre hay una luz
que sobrepasa la ventana.
Que los trucos también son magia.
Que somos seres cambiantes.
Que estaba equivocada.
Lo que ayer era gris,
puede ser de color mañana.
Que algunas manos aprietan fuerte,
pero otras acompañan.
Que solo viviendo en amor
desalojamos el miedo de nuestras entrañas.
Eterna raíz
Aquello que se desprende de lo aprendido
y es con todo lo que su esencia implica.
Empezar por decir adiós
Entre la pared y la espada,
me quemo
si apuesto siempre al mismo juego.
Pero revive lo que mi piel reclama.
Es el mismo fuego,
quizá otra llama.
a la duda que se alberga
en el punto exacto de mi cabeza
en el que todos los contras
ganan siempre a mis pros.
a la mancha eterna
de un cielo que promete,
de un infierno que se queja
y renuncia a mi yo.
a la continua carga
sobre la espalda,
al miedo a ser devorada
por un miedo mayor.
a las espesas nieblas
que absorben mi vida,
mi tiempo y mi corazón.
a ver cómo el mundo se quiebra
mientras muchos se alimentan
del tirano dolor.
Adiós a dejar que crezca una semilla
en mi alma con su sol.
Ahora el fruto que busco
se riega con otra flor.
que nos hizo esclavos y dueños
de su completo amor.
Cercanías lejanas
Cerca pero lejos.
¿Qué nos roba el tiempo, la dirección del viento, los sueños?
En qué invertimos y qué queremos.
de los santos con despiste;
del que elige ser feliz solo por un rato;
del que siempre vive triste.
de los besos sin abrirse
el corazón a pleno;
de la respiración
que no quiere salir del pecho;
de exigir el cien
y no querer pasar del cero.
lejos de amar sin compartir la vida;
de los chistes por prototipo;
de una verdad vacía.
del verso inverosímil;
de los lunes con rutina.
del «quiero, pero no puedo»;
del «puedo»,
pero con prisa;
de favores por dinero;
de amistades con mentira.
de una opinión cerrada;
de la coherencia manchada
de «por un rato»;
de jugar al juego
del rechazo.
de tachar días en el calendario;
de ver cómo la oportunidad pasa
y se va volando;
de cruzar la calle mirando de lado a lado;
de esperar el verde;
de callar hablando.
y mirar desde abajo
mi vida,
sin perspectiva.
Lejanías cercanas
La ola de mi vida
la cogí una noche de tormenta.
y la tuve tan cerca
que naufragué en ella
todos mis temores.
Cada vez más cerca
del vulnerable valiente;
del impostor indefenso;
del culpable inocente
con delitos conversos.
sin perder un segundo de tiempo;
del que elige qué espinas
se clavan en su valioso cuerpo.
cerca de besar sin exigir los besos;
de trabajar las alas, no la huida.
Cerca de plantar el éxito en los versos
y el milagro en la ruina.
sin «mí primero».
«Conmigo será mi vida».
Cerca de la responsabilidad con el resto
sin caer siempre en la misma herida.
de, yo también, ser la que cuida;
de querer ser el faro de mi propio puerto
y sea mi alma billete de ida.
tan cerca
de saberme vencida,
que no cobarde;
de quererme cumplida
y, por tanto,
soñadora constante.
Sí pero no
Acostumbrada al «sí», a veces, tiene que ser que no.
tras el eco de mi sombra.
Me niego a que no sobreviva
por ella misma.
en el que depositó su cuerpo firme
después de tantas caídas.
a que me espere
en una casa que no tiene
más de cuatro paredes.
se aproxima
a un precipicio de vacío libre
y sin paracaídas.
Ya no quiero ver
cómo echa a perder
su vida.
de llegar sola al final
de este callejón sin salida.
Parar para avanzar
Los coches pasan mientras la carretera
se mueve ante mí a toda velocidad.
Bajo mis pies, todo parece irreal.
Otra manera de entender,
otro punto que mirar.
un sonido de alarma,
todo mi mundo se para.
que todo va a ir bien.
Que el sol aún sigue
dándome en la cara.
mientras mis pupilas hablan.