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Espíritus desgarrados desde la niñez, tan lejana. Adquirimos y poseemos. La obligación de seguir buscando sin conocer la necesidad. Nos erigimos por sobre las demás especies. Violentos, colonizamos. Echamos raíces inoportunamente. Nos escudamos en el eterno inconformismo. Siempre esperamos más. Añoramos un refugio, un puerto seguro donde amarrar. Anhelamos la perfecta conexión. Deseos que devienen lazos, que se rompen y sangran. Luego se recrean en redes frágiles y amenazantes. Como una araña colgando del techo que va descendiendo, lenta e inexorablemente. Desasosiego. La satisfacción inmediata como único recurso. Falsas promesas nos conducen hacia el oscuro desencanto. Un vagabundo se pierde en la ciudad como una sombra, ávido y desangelado. Se vuelve violento entre la escasez y el olvido. El ruido que deseamos escuchar, las sirenas cantando su melodía fatal. Es el silencio tan temido, del universo interior. El que luego nos susurra, el secreto que buscamos por tanto tiempo.
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Seitenzahl: 87
Veröffentlichungsjahr: 2015
Claroscuros del alma
Vanesa P. Labonia
Editorial Autores de Argentina
Labonia, Vanesa
Claroscuros del alma. - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Autores de Argentina, 2014.
130 p. ; 20x14 cm.
ISBN 978-987-711-245-0
Editorial Autores de Argentina
www.autoresdeargentina.com
Mail: [email protected]
Arte de tapa: Laura Martín
Corrección Literaria: Silvana Scardino
Ilustraciones interiores: Malisa Canle
Maquetado y diagramación: Maximiliano Nuttini
© 2014 Vanesa P. Labonia
Contacto autor: [email protected]
A“Los Blindados”
Rosana Scardino y familia (Laurita, Gabriel, Claudio), Walter Bonifazio y familia (el recuerdo de Laura), Silvana Scardino y esposo, Claudio Bonifazio, Marcela y familia,Christian Bonifazio y Marcela. Teresa Nelida Labonia (Tia Ñata), Pascual Torchio y Teresa (tio Pali y tia Tere), Lorena Torchio y esposo, Martin Torchio y Familia, Hector, Monica Torchio y familia, Rosa Scardino Auad, Hector Grau, Esther, Gabriel Grau y familia, Maria Laura Grau, Nini Richard y mama, Ines Castiglione, Paula y Titi Camarotta, Xristo, Amalia Suarez.
y por este lado del mundo
Malisa Canle Gil y familia (Fiona y Olivia), Jack, Tobey,Tucker Franca Scarlatta y Maria Scardino, Magaly Rojas, Carlos y familia, Lilesvara, ISKCON, Rocio Diaz, Dany, Luciana Vallejo, Familia Milla, Arelis Rivas y familia, Johana Paredes, Keon, Shayne.
PRÓLOGO
Muchas personas han sido una valiosa fuente de inspiración para estos cuentos, relatos y poemas.
Pero quienes realmente inspiran mi vida y me definen como persona hoy y siempre, son:
Mis padres, Cecilia Y José. Ellos son mis pilares, mis referentes, mis amores primarios.
La eterna memoria de mi querido hermano Pablo.
Su legado, a quien observo crecer maravillada, mi sobrina Abril.
Mi amado esposo y “angel de la guarda”, Joe Grimard III.
Todos los que nos tienen “blindados” (como dice mi padre), con su amor, su compañía y su respaldo incondicional.
A todos ellos...
INFINITAS GRACIAS
Poemas
Nuevo comienzo
El auto se estacionó justo frente a la entrada de la playa,
que estaba aún cubierta de nieve.
Corrí dejando mis huellas
hasta acercarme al mar, calmo y azulado.
Llena de expectativas,
con la alegría de una niña.
Respiré hondo.
Volví a hundir mis abrigados pies en la nieve,
bordeando la orilla.
La brisa invernal congelaba mi sonrisa.
Todo volvía a comenzar
(otra vez).
Hoy me encuentro en ese mismo lugar.
Las primeras caminatas de la primavera,
bajo el sol de abril.
Dos años después,
comenzando desde otro punto de partida.
Tan distante y cercano a la vez.
Parece mentira que todas esas cosas hayan pasado en tan corto tiempo. Es como si un tornado hubiera desafiado todas mis creencias volviéndolas a colocar en otra dimensión. En la misma playa, las olas son diferentes entre sí. Nunca una es igual a otra, en su ciclo infinito. La nieve se derritió, pero volverá más pronto de lo imaginado. Estoy con mis pies, descalzos ahora, sobre la arena. Se mojan en la orilla. Miro hacia el mar con otros ojos. Abarco la inmensidad.
Caprichos del calendario
El último día de este año
me encuentra sentada nuevamente
frente a la playa nevada.
La tormenta ya pasó
y dejó sus rastros,
que lentamente se diluyen
con los rayos de sol.
Miro hacia el horizonte,
la maravillosa creación.
Mil veces caer
y mil veces levantarse.
Algunos magullones
y cambios de rumbo.
El silencio,
las gaviotas que lo quiebran.
Será este el último día? Necesitamos medir el tiempo y así pretender que somos algo más que un soplo en la inmensidad del universo. Me sacudo la arena y sigo andando...
Realidad paralela
A veces tenemos una historia, toda formada.
Hasta con detalles.
Trazan una realidad paralela que nos enceguece.
La podemos palpar,
dejamos que nos atormente
y nos puede seguir hasta el fin de nuestros días.
Lo maravilloso y lo sublime
se puede acercar al fango, a lo ramplón.
Un día nos invaden las miserias
y luego se van.
Una sutil melodía se mezcla con el bullicio disonante.
La risa, el abrazo.
Una lágrima sincera que cae, y todos nos aunamos.
Los polos opuestos,
la paleta de colores (fríos y cálidos),
Todos son el mismo en un prisma infinito.
El temor como un bandido oculto en las sombras.
Mi corazón aloja amor como el tuyo.
La incertidumbre
o la errónea certeza de una verdad inventada.
Un sombrío laberinto
sin salida a la vista
o un jardín luminoso
bordeado de flores,
de aromas y colores subyugantes.
Caminamos maravillados.
A veces nos quedamos inmóviles
o giramos aturdidos.
El terror al vacío.
El hilo dorado que nos ata a la vida.
Senderos que se bifurcan
y se vuelven a unir,
en una milésima de segundo.
Sincronicidad
El universo interior
reflejado en los ojos,
y el triste pozo negro de la ignorancia
sostienen la mirada brevemente.
Al final seguirán, cada uno, su propio camino.
El testigo silencioso
Recostada sobre el piso de madera
una lágrima corre por su rostro
Mientras el gato mira por la ventana.
Las cortinas translúcidas
se agitan levemente con la brisa de verano.
Abre los ojos y mira a su alrededor.
Esa habitación, su mundo de hoy.
Conteniendo sus mínimas posesiones.
Liviana, para el viaje.
Desde que cerró aquella puerta
para no volver,
dejando atrás toda una pequeña vida.
Un par de sueños inconclusos,
cargando la vieja maleta,
se fue.
Ahora mira hacia atrás.
Es tan fácil mecerse en la nostalgia!
Es como navegar en las aguas calmas.
Si oprime el corazón, luego pasa,
y queda solo el regocijo de una antigua felicidad.
Llegan y se retiran (como las olas)
Pero no es tiempo de adentrarse en el mar.
Es la bruma del eterno amanecer
que nunca llega.
Se queda mirando con los ojos entrecerrados
como la espuma se apega a la orilla.
Dulce compás de espera sin fin.
Deseos ahogados.
La fiebre de la ciudad allá afuera.
Manifestación divina
Un espíritu que se eleva
alcanzando la paz
Despierta!
Etérea. Vuela!
No temas,
no volverás.
“Xpander”
Esto que ves, esta ilusión convincente...
Descubres el vacío,
la certeza del final,
la cruz del destino.
No llegarás muy lejos
siguiendo la indulgencia del deseo.
Universo en expansión.
Almas que regresan.
Entidad indivisible,
en plena manifestación.
Una mariposa
puede convertirse en oruga
y un anciano en niño.
El silencio trae la respuesta,
libera el camino.
Llega la conciencia
de la luz interior.
Se abren las puertas del ser.
El alma se eleva
y vuelve a su fuente.
“Dios ama a todas sus criaturas”
Soy lo que eliges ignorar.
Atrapado en tu memoria, invisible.
Toca una de mis cuerdas
y un volcán hará erupción en ti.
Ardiendo en tu interior.
Oleadas, difíciles de controlar.
Sólo eso necesito.
Un guiño y ahí me tendrás.
Estoy sentado plácidamente en tu jardín,
y no me ves.
Preocupado, recorres tus propias huellas.
Allí me paro desafiando tu instinto,
me libero con el olor de tus temores.
Pequeña criatura aterrada que
se hace un ovillo en el mismo rincón
de siempre.
Por fin se entibia el aire,
y estiras tus piernas para volver a andar.
No has podido tocarme aún, mucho menos doblegarme.
Ni te imaginas cómo comenzar a descubrirme.
Y amarme.
El pájaro sangra y se estrella nuevamente
contra los barrotes,
sin advertir que la puerta de su jaula está abierta.
Encantado y perdido (navegar)
Remontar las olas embravecidas que nos acechan.
No esperaré a que aclare ese cielo que amenaza
con caer sobre mí.
Libre.
Aunque las amarras lastimaron mi piel.
De tanto en tanto, contemplo mis cicatrices.
Aunque me estremezca en las noches de tormenta,
agobiado por el frío y la soledad.
Aunque la muerte me tome las manos en mis sueños.
Libre ahora,
en el medio del océano
o en el momento de llegar a mi destino.
Aunque no tenga un rumbo cierto,
y mi brújula se haya malogrado hace tiempo.
Cuánto?
Aquí el tiempo apenas se tiene en cuenta.
El sol sobre mi cabeza, el sol a mis espaldas.
El resplandor que precede al amanecer.
Las estaciones se suceden y me transforman
Así transcurren mis días.
El testigo silencioso II
Siento unos pasos,
sigilosos detrás de mí.
Me detengo y se detienen.
Volteo y veo una sombra
que se recorta en su huida, veloz.
Deja una estela en el aire, tan particular.
Te vi y te escapaste.
Lentamente retomo la marcha.
Para descubrir que aquellos pasos
me seguirán por siempre.
Del testigo silencioso II (chakras)
Olvidarás que tienes
un cuerpo prestado
El cosmos late
como un corazón ardiente
dentro de ti.
Deberás perdonar.
Creíste que podías escapar?
Son siete golpes clave
en cada una de tus puertas.
Así como el patriarca
hace sonar su melodía.
El día menos pensado,
sanarán las almas heridas
que penan sin rumbo.
Ahora verán los insensatos!
El silencio se hará oír!
Ahuyentará a los demonios
y nos conectará con la luz.
Y fuimos felices
Feliz, feliz.
Efímera sensación.
A veces se sostiene,
y los ángeles arrullan en tus sueños
por inolvidables temporadas.
Te dejas mecer,
te entregas a las aguas tibias y celestes.
Se logra detener el tiempo.
Detener las ideas y recuerdos invasivos.
Respirar y liberar nuestro ser
Hasta la última amarra.
Nos devuelve a la vida,
y se la lleva.
El sol brillará
Llega, siempre llega.
Quizás avisa.
Si, envía señales.
Las percibimos a diario.
Viene llegando y, mientras tanto,
observamos y actuamos convencidos.
Confundidos, avasallamos,
o nos atraviesan los días sin remedio.
Aquí y ahora.
esta presente, vivo.
Además esta tan cerca que puede tocarte
No puede esperar.
Luego del silencio, sobreviene la duda.
La angustia, la incertidumbre.
Algunas lágrimas de autocompasión idiota.
A veces caemos en esos círculos de oscuridad.
De nuestro viejo ser,
domesticado y temeroso.
Sin embargo,
la luz siempre llega y podemos seguir.
Llega el amor
con su fuerza irrefrenable.
Te abrazo mil veces en mi corazón.
Faro de vida infinita.
La partida del amigo
Por qué el universo se pierde un valioso misionero?
Y por qué me encuentro imposibilitada, hoy
de poder misionar para la luz universal?
Quizás tenga oportunidad
en otra vida,
o en muchas mas.
A veces me entristece mi prisión.
Últimamente,
más que nunca.
Es inminente un desenlace
Hacia cualquier punto del destino
Simplemente, me entrego...
Poema K
Ciclos infinitos
La semilla debe germinar.
Simultáneos eventos darán lugar al milagro.
Si alguno de ellos fallará, la vida no sería posible o sucedería lo que muchas veces sucede
(la planta no llega a ver la superficie, o sus raíces son demasiado débiles para absorber los nutrientes y el agua)
