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Un encuentro casual en una parada de colectivo desencadena un viaje que cambiará sus vidas. Él, atrapado como en un sueño por su presencia, reúne el coraje para pedir su número de WhatsApp. La conexión inmediata rompe barreras y une sus vidas de manera inesperada. Cada instante es una oportunidad, un susurro de él a los oídos de ella, que es un torbellino. A través de una prosa poética, Cuerpos sin fronteras, primera parte de la Trilogía del Viento, invita al lector a explorar un bosque de sensaciones, donde el deseo y el amor son hojas incendiarias.
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Seitenzahl: 21
Veröffentlichungsjahr: 2024
ABRAHAM JURADO
Abraham Jurado Cuerpos sin fronteras / Abraham Jurado. - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Autores de Argentina, 2023.
Libro digital, EPUB
Archivo Digital: descarga y online
ISBN 978-987-87-4628-9
1. Poesía. I. Título. CDD A861
EDITORIAL AUTORES DE [email protected]
RETOÑO DE AGUA - (comienza la primavera)
bienvenida
fila
rastro
ella
lejos
tocado
quién
sueño
millonésima
creer
bajar
vivir
alas
ENVIAR O NO ENVIAR - (esa no es la cuestión)
contemplar
remolino
semilla
ramo
escribir
limbo
casi
hazaña
VUELO BLANCO - (el comienzo)
con la brisa
dibujo
tarde
risa
navegar
allá
peces
tocar
gotas
bocabajo
origen
ápice
DESEO - (otro roce más)
quieto
por qué
marcha
rendido
parada
paisaje
fotografía
ir
diferentes
apagón
milagro
DE A GOTAS - (quiero lo suave)
quiero
nido abierto
sin aliento
ella
relámpago
inevitable
ven
aferrado
unión
oleaje
otoño
enigma
diálogo
cenizas
camino
infinito
PLANEAR - (por un sueño de luz)
metamorfosis
testigo
voy
flotar
vamos
reflejos
no
futuro
“Un cruce de miradas es también creación,
puede nacer una vida, un libro,
o un sueño”.
Amanda Buns
a la sombra de la rama que florece
el invierno poco a poco se despide
el sol
acurrucado en el charco
crece
el frío ya no penetra como antes
aunque el ruido de la ciudad
sigue siendo incalculable
y termina por despertarme
hay mucha gente haciendo fila en la parada
nubes negras amenazan un temporal
pero tengo tiempo, un buen abrigo
y la suerte de estar entre los primeros
la mañana transcurría como una más
jugando con los pájaros
correspondiendo mi silbido con su canto
cuando sentí un viento leve
y te vi llegar
justo al final del invierno
pasaste
tu aroma de naranja y canela
tu pelo: agua de manantial
me inundó
ella es un pedazo de mar
una isla pequeña
de agua perlada
que ningún pájaro conoció
con razón ese vaivén
ese ir y venir desde sus costas
un movimiento pausado