La National Gallery. Guia de Arte - Carlos Javier Taranilla de la Varga - E-Book

La National Gallery. Guia de Arte E-Book

Carlos Javier Taranilla de la Varga

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Beschreibung

Conozca los fondos esenciales de una de las principales pinacotecas del mundo, que atesora lo más granado de la pintura europea desde el siglo XIII hasta finales del XIX, es decir, desde el prerrenacimiento hasta el posimpresionismo. Los grandes maestros de las escuelas italiana (Botticelli, Leonardo, Rafael, Miguel Ángel, Tiziano, Tintoretto), francesa (Poussin, Lorena, los impresionistas), española (El Greco, Velázquez, Zurbarán, Murillo, Goya), flamenca (Van Eyck, Van der Weyden, el Bosco, Rubens, Van Dyck), holandesa (Rembrandt, Hals, Vermeer, Hobbema, Van Gogh), inglesa (Hogarth, Constable, Turner), alemana y austriaca (Durero, Cranach, Holbein, Friedrich y Klimt). Un elenco imprescindible de las obras y artistas universales que exponen en sus salas en el bicentenario de su fundación.

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La National Gallery de Londres

La National Gallery de Londres

Carlos Javier Taranilla de la Varga

Prólogo de Joan Sureda

Idea, proyecto de negocio y coordinación: Santos Rodríguez

Dirección y gestión: Eva Huici

Asesoría corporativa: Sunny Bates

Marketing y redes sociales: Gabriel García

Colección: Grandes Museos - www.grandesmuseos.com

Título: La National Gallery de Londres

Autor: © 2024 Carlos Javier Taranilla de la Varga

Realización de cubierta: ExGaudia, Asociación Cultural

Diseño y maquetación de interiores: RodilHerraiz.com

Copyright de la presente edición: © 2024 Argonowta Digital SLL, Madrid, España. Reservados todos los derechos.

www.grandesmuseos.com es un proyecto de Argonowta.

 ARGONOWTA: Somos aventureros embarcados en una misión

www.argonowta.com

 Síganos:

www.grandesmuseos.news

https://www.instagram.com/grandesmuseos/

https://twitter.com/grandesmuseos

ISBN impresión digital: 978-84-1894-367-6

Fecha de edición: mayo 2024

Créditos fotográficos:

Wikimedia Commons, dominio público excepto págs.: 27 (Robert MacPherson-CC BY SA 2.0), 32 (Diliff-CC BY-SA 3.0), 34, 38 inferior y 40 inferior (Diego Delso-CC BY SA 4.0), 40 superior (Rudolf Schuba-Flickr: London-The National Gallery, CC BY 2.0), 41 (Mike Quinn-CC BY-SA 2.0), 42 (Richard George-CC BY 2.5), 114 (Sailko-CC BY 3.0).

No se permite la reproducción total o parcial de esta obra, ni su incorporación a un sistema informático, ni su transmisión en cualquier forma o por cualquier medio (electrónico, mecánico, fotocopia, grabación u otros) sin autorización previa y por escrito de los titulares del copyright. La infracción de dichos derechos puede constituir un delito contra la propiedad intelectual. Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de esta obra solo puede ser realizada con la autorización de sus titulares, salvo excepción prevista por la ley. Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos) si necesita fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra (www.conlicencia.com; 91 702 19 70 / 93 272 04 47).

A la National Gallery de Londres,en el bicentenario de su fundación(NG200)

Sumario

Índicede contenidosy listadode obrasmaestras

Índice de contenidos

Cuadro sinóptico de obras maestras

Prólogo

Presentación

Capítulo 1.Breve historia de la Galería Nacional de Londres

Reformas y remodelaciones del edificio original

LaSainsbury Wing

Las estatuas y relieves del exterior

El BicentenarioNG200

Capítulo 2.La pintura de escuela italiana

La pintura del Trecento. El Prerrenacimiento

El primer Renacimiento. La pintura del Quattrocento

La pintura del Cincuecento. El Renacimiento pleno

La escuela veneciana

Los pintores parmesanos y el manierismo

La pintura barroca de los siglos XVII y XVIII

El tenebrismocaravaggiesco

La corriente academicista

El género vedutista

Capítulo 3.La pintura de escuela francesa

El Barroco y el Rococó

La pintura neoclásica

El naturalismo

El impresionismo

Neoimpresionismo, posimpresionismo y pinturanaïf

El neoimpresionismo

El posimpresionismo

La pinturanaïf

Capítulo 4.La pintura de escuela española

El manierismo

El Barroco

La pintura de Goya

La pintura impresionista

Capítulo 5.La pintura de escuela flamenca

Los “primitivos flamencos” y el prerrenacimiento

La pintura barroca

Capítulo 6.La pintura de escuela holandesa

La pintura barroca en los Países Bajos

El posimpresionismo

Capítulo 7.La pintura de escuela inglesa

El gótico internacional

La pintura barroca y rococó

La pintura romántica

Capítulo 8.La pintura de escuela alemana y austriaca

Escuelas alemana y austríaca

La pintura gótica

El Renacimiento

El Romanticismo

La pintura modernista en la escuela austríaca

Bibliografía

Glosario

Cuadro sinóptico de obras maestras

OBRAS

ARTISTAS Y ESCUELAS

ESTILOS

IMAGEN

PÁG.

1

La Transfiguración (1308-1311)

Duccio de Buoninsegna. Italiana

Gótico Internacional

50

2

Pentecostés (c. 1310-1318)

Giotto y taller. Italiana

Prerrenacentista. Trecento

52

3

La visión de san Eustaquio (1438-42)

Pisanello. Italiana

Renacentista. Quattrocento

55

4

Bautismo de Cristo (c. 1437-1445)

Piero della Francesca. Italiana

Renacentista. Quattrocento

58

5

Nicolás Mauricio de Tolentino en la batalla de San Romano (c. 1438-1440)

Paolo Uccello. Italiana

Renacentista. Quattrocento

61

6

San Jorge y el dragón (c.1470)

Paolo Uccello. Italiana

Renacentista. Quattrocento

64

7

El martirio de san Sebastián (1475)

Antonio y Piero del Pollaiuolo. Italiana.

Renacentista. Quattrocento

66

8

Venus y Marte (c. 1485)

Sandro Botticelli. Italiana

Renacentista. Quattrocento

69

9

La agonía en el huerto (1456)

Andrea Mantegna. Italiana

Renacentista. Quattrocento

72

10

Retrato de hombre (1475-76)

Antonello da Messina. Italiana

Renacentista. Quattrocento

75

11

Anunciación con san Emigdio (1486)

Carlo Crivelli. Italiana

Renacentista. Quattrocento

77

12

El dux Leonardo Loredan (1502)

Giovanni Bellini. Italiana

Renacentista. Quattrocento

80

13

La Virgen de las rocas (1492-1508)

Leonardo da Vinci. Italiana

Renacentista. Cincuecento

83

14

El cartón de Burlington House (c. 1500)

Leonardo da Vinci. Italiana

Renacentista. Cincuecento

86

15

El entierro de Cristo (c. 1500)

Miguel Ángel Buonarroti. Italiana

Renacentista. Cincuecento

89

16

Virgen de los claveles (c. 1506-7)

Rafael Sanzio. Italiana

Renacentista. Cincuecento

92

17

Virgen Aldobrandini (1510-11)

Rafael Sanzio. Italiana

Renacentista. Cincuecento

94

18

Una mujer rubia (1520)

Palma el Viejo. Italiana

Renacentista. Cincuecento

97

19

Noli me tangere (c. 1514)

Tiziano Vecellio. Italiana

Renacentista. Cincuecento

99

20

Baco y Ariadna (1520-23)

Tiziano Vecellio. Italiana

Renacentista. Cincuecento

101

21

La familia de Darío ante Alejandro (1565-67)

Veronés. Italiana

Renacentista. Cincuecento

104

22

Adoración de los Magos (1573)

Veronés. Italiana

Renacentista. Cincuecento

107

23

La Virgen de la cesta (c. 1524)

Correggio. Italiana

Manierista

110

24

José en Egipto (c. 1518)

Jacopo Pontormo. Italiana

Manierista

112

25

La resurrección de Lázaro (1517-19)

Sebastiano del Piombo. Italiana

Manierista

115

26

Alegoría con Venus y Cupido (c. 1545)

Bronzino. Italiana

Manierista

117

27

San Jorge y el dragón (c. 1555)

Tintoretto. Italiana

Manierista

120

28

El origen de la Vía Láctea (c. 1575)

Tintoretto. Italiana

Manierista

123

29

El sastre (1565-70)

Giovanni Battista Moroni. Italiana

Renacentista. Cincuecento

126

30

La cena de Emaús (1601)

Caravaggio. Italiana

Barroco. Tenebrista

130

31

Salomé recibe la cabeza del Bautista (1609-10)

Caravaggio. Italiana

Barroco. Tenebrista

133

32

Autorretrato como santa Catalina de Alejandría (c. 1615-17)

Artemisia Gentilleschi. Italiana

Barroco. Tenebrista

135

33

Cristo apareciéndose a San Pedro en la Vía Apia (1602)

Annibale Carracci. Italiana

Barroco. Academicista

137

34

La Adoración de los Pastores (1640)

Guido Reni. Italiana

Barroco. Academicista

140

35

El patio del cantero (c. 1725)

Canaletto. Italiana

Rococó

143

36

Una regata en el Gran Canal (c. 1740)

Canaletto. Italiana

Rococó

144

37

Venecia: la punta de la Dogana con Santa Maria della Salute (1770)

Francesco Guardi. Italiana

Rococó

147

38

La adoración del becerro de oro (1634)

Nicolás Poussin. Francesa

Barroco clasicista

152

39

Embarque de santa Úrsula (1641)

Claude le Lorrain. Francesa

Barroco clasicista

154

40

La escala del amor (1718)

Watteau. Francesa

Rococó

156

41

Madame Pompadour en su marco de tambor (1764)

François-Hubert Drouais. Francesa

Rococó

158

42

Autorretrato con sombrero de paja (1782)

Elisabeth Vigée Le Brun. Francesa

Rococó

161

43

Madame Moitessier (1856)

Jean-Auguste Ingres. Francesa

Romántico

163

44

La feria del caballo (1855)

Marie-Rosalie Bonheur. Francesa

Naturalista

166

45

Bañistas en la Grenuillère (1869)

Claude Monet. Francesa

Impresionista

169

46

El estanque de los nenúfares (1899)

Claude Monet. Francesa

Impresionista

171

47

La Avenida Sydenham (1871)

Camille Pissarro. Francesa

Impresionista

173

48

Día de verano (1879)

Berthe Morisot. Francesa

Impresionista

175

49

Miss La La en el Circo Fernando (1879)

Edgar Degas. Francesa

Impresionista

177

50

Después del baño, mujer secándose (1890-95)

Edgar Degas. Francesa

Impresionista

179

51

Los paraguas (1881-86)

Pierre-Auguste Renoir. Francesa

Impresionista

181

52

Bañistas en Asnières (1884)

George Seurat. Francesa

Puntillista

185

53

Las grandes bañistas (c. 1894-1905)

Paul Cézanne. Francesa

Posimpresionista

188

54

¡Sorprendido! (1891)

Henri Rousseau. Francesa

Naïf

190

55

Cristo expulsando a los mercaderes del templo (c. 1600)

El Greco. Española

Manierista

196

56

Escena de cocina con Cristo en casa de Marta y María (1618)

Velázquez. Española

Barroco

199

57

Felipe IV de España en marrón y plata (1632)

Velázquez. Española

Barroco

201

58

La Venus del espejo (¿1647-51?)

Velázquez. Española

Barroco

204

59

Santa Margarita de Antioquía (1630-34)

Francisco de Zurbarán. Española

Barroco

209

60

Las Trinidades celestial y terrenal (c. 1675-82)

Bartolomé Esteban Murillo. Española

Barroco

211

61

Doña Isabel Lobo Velasco de Porcel (c. 1805)

Francisco de Goya. Española

Romántico

214

62

El duque de Wellington (1812-14)

Francisco de Goya. Española

Romántico

216

63

Pescadores valencianos (1895)

Joaquín Sorolla. Española

Impresionista

219

64

¿Autorretrato? (1433)

Jan Van Eyck. Flamenca

Gótico flamenco

224

65

Los esposos Arnolfini (1434)

Jan Van Eyck. Flamenca

Gótico flamenco

226

66

La lectura de la Magdalena (c. 1435)

Rogier van der Weyden. Flamenca

Gótico flamenco

231

67

Tríptico Donne (c. 1478)

Hans Memling. Flamenca

Gótico flamenco

233

68

La Virgen y el niño con santas y donante (c. 1510)

Gerard David. Flamenca

Gótico flamenco

236

69

La coronación de espinas (c. 1510)

Hieronymus Bosch (El Bosco). Flamenca

Prerrenacentista

237

70

La Adoración de los Reyes (1510-15)

Jan Gossaert (Mabuse). Flamenca

Prerrenacentista

240

71

Sansón y Dalila (1609-10)

Pedro Pablo Rubens. Flamenca

Barroco

244

72

El sombrero de paja (1622-25)

Pedro Pablo Rubens. Flamenca

Barroco

246

73

El juicio de Paris (1632-35)

Pedro Pablo Rubens. Flamenca.

Barroco

248

74

Retrato ecuestre de Carlos I (c. 1638)

Anton van Dyck. Flamenca

Barroco

251

75

Joven sosteniendo una calavera (1626-28)

Franz Hals. Holandesa

Barroco

258

76

El festín de Belsasar (1636-38)

Rembrandt van Rijn. Holandesa

Barroco

260

77

Autorretrato a los 34 años (1640)

Rembrandt van Rijn. Holandesa

Barroco

263

78

Mujer bañándose en un arroyo (1654)

Rembrandt van Rijn. Holandesa

Barroco

265

79

El patio de una casa de Delft (1658)

Pieter de Hooch. Holandesa

Barroco

267

80

Mujer joven de pie ante un virginal (1672)

Johannes Vermeer. Holandesa

Barroco

270

81

La avenida de Middelharnis (1689)

Meindert Hobbema. Holandesa

Barroco

273

82

Jarrón con girasoles (1888)

Vincent van Gogh. Holandesa

Posimpresionista

276

83

Campo de trigo con cipreses (1889)

Vincent van Gogh. Holandesa

Posimpresionista

278

84

Díptico de Wilton (c. 1395-1400)

Maestro del Díptico de Wilton. Inglesa o francesa

Gótico internacional

283

85

La vendedora de camarones (1740-45)

William Hogarth. Inglesa

Rococó

286

86

Matrimonio a la moda I-VI (c. 1743)

William Hogarth. Inglesa

Rococó

288

87

Los Andrews (c. 1750)

Thomas Gainsborough. Inglesa

Rococó

293

88

El paseo matutino (1785)

Thomas Gainsborough. Inglesa

Rococó

295

89

Whistlejacket (1762)

George Stubbs. Inglesa

Naturalista

298

90

Lady Cockburn y sus tres hijos mayores (1773)

Sir Joshua Reynolds. Inglesa

Neoclásico

299

91

El carro de heno (1821)

John Constable. Inglesa

Romántico

302

92

El Temerario luchador (1839)

Joseph M.W. Turner. Inglesa

Romántico

305

93

Lluvia, vapor y velocidad: el gran ferrocarril occidental (1844)

Joseph M.W. Turner. Inglesa

Romántico

307

94

Tres santos (c. 1450)

Stephan Lochner. Alemana

Gótico internacional

312

95

San Jerónimo penitente (c. 1496)

Alberto Durero. Alemana

Renacentista

314

96

La Trinidad y la Piedad mística (1512)

Hans Baldung Grien. Alemana

Renacentista

317

97

Cupido quejándose a Venus (1526-27)

Lucas Cranach el Viejo. Alemana

Renacentista

319

98

Los embajadores (1533)

Hans Holbein el Joven. Alemana

Renacentista

322

99

Paisaje de invierno (1811)

Caspar David Friedrich. Alemana

Romántico

326

100

Retrato de Hermine Gallia (1904)

Gustav Klimt. Austríaca

Modernista

328

Prólogo

Tras los pinceles de la Historia: un viaje visual a la National Gallery de Londres

Es un placer para mí presentar este sugestivo libro que nos sumerge en el corazón de una de las instituciones culturales europeas más emblemáticas: la National Gallery de Londres.

Como historiador, estudioso y amante del arte, he tenido el privilegio de viajar a lugares muy diversos y explorar y examinar numerosas obras maestras a lo largo de mi carrera. Sin embargo, la National Gallery siempre ha ejercido un magnetismo especial sobre mí. Es un lugar donde el arte cobra vida, donde las paredes revelan acontecimientos de épocas pasadas y donde cada pintura cuenta una historia.

El libro que el lector tiene en sus manos descubre cómo se formó la colección y los desafíos que afrontó a lo largo de sus diversas épocas. Presenta un análisis detallado de 100 obras que abarcan desde el mundo tardomedieval hasta el alba del siglo XX. Pinturas seleccionadas cuidadosamente, cada una acompañada de su imagen y un análisis profundo que nos permite apreciar su belleza y comprender su relevancia histórica y artística.

Desde las majestuosas obras del Renacimiento italiano hasta las exquisitas pinturas flamencas, desde las cautivadoras piezas del Barroco hasta las emocionantes y renovadoras pinturas del siglo XIX, nos lleva en un viaje a través del tiempo y el espacio, invitándonos a contemplar la grandeza del arte en toda su plenitud.

Muestra cómo los grandes maestros de la pintura han capturado con sus pinceles la esencia de la humanidad a lo largo de los siglos. Cómola pintura puede reflejar tanto la serenidad de un enigmático paisaje rocoso como la intensidad emocional de un trágico claroscuro, y por qué las vibrantes pinceladas del impresionismo francés no ceden en belleza y expresión a las icónicas imágenes mitológicas y religiosas renacentistas.

Lo excepcional del libro es, sin embargo, la forma en que el autor combina la erudición con un lenguaje claro y comprensible, haciendo que el arte sea accesible para todos.

Tanto si uno es un aficionado ocasional al arte como un estudioso ávido, el libro le abre las puertas a un universo de imaginación y asombro. Le ofrece una aventura inolvidable a través de los caminos de la historia del arte, donde cada página desvela una nueva maravilla que espera ser descubierta. Un pasaporte a un mundo de belleza, emoción e inspiración.

Joan Sureda Pons, catedrático emérito de Historia del Arte de la Universidad de Barcelona.

Presentación

En este cuarto tomo de la colecciónGrandes Museos,de editorial Argonowta, presentamos una selección de las cien obras maestras esenciales custodiadas en la Galería Nacional de Londres, donde se halla una de las más importantes colecciones de pintura europea que existen en el mundo. Cronológicamente, abarca desde la segunda mitad del siglo XIII hasta finales del XIX, es decir, desde la Baja Edad Media hasta las corrientes pictóricas inmediatamente anteriores a las primeras vanguardias del arte contemporáneo del siglo XX, por lo que en sus salas es posible observar la evolución de la historia de la pintura desde el protorrenacimiento y Renacimiento temprano hasta el posimpresionismo.

Al contrario de lo que sucede en otros museos de arte, la Galería Nacional de Londres no posee entre sus fondos esculturas, artes decorativas ni aplicadas (piezas artísticas que alberga el Museo Victoria y Alberto de la capital londinense), sino que está dedicada únicamente a la exposición y estudio de la evolución de la pintura europea a lo largo del citado periodo de tiempo, fiel al espíritu con el que nació de atesorar, con ánimo selectivo, las obras más trascendentales de los grandes maestros de la pintura europea. Se trata, por tanto,stricto sensu, de una pinacoteca.

Respecto al público, la Galería Nacional de Londres, como otros importantes museos de la capital británica (entre los que no figura diariamente el British Museum), esdigna de reconocimiento, puesto que su entrada es totalmente gratuita con el fin de facilitar y fomentar el acceso a la cultura a través del conocimiento de sus grandes tesoros artísticos.

Capítulo /1

Breve historiade la GaleríaNacionalde Londres

Plano delpiano nobiley la primera planta de la Galería Nacional de Londres,firmado por el arquitecto William Wilkins en 1836. Colección Frederick Crace.Biblioteca Británica. Londres.

Fundada en 1824, la Galería Nacional de Londres es una de las pinacotecas europeas más recientes. No nació con origen en las colecciones reales, como otras entidades del continente (Museo del Louvre de París, Museo Nacional del Prado de Madrid, Galería Uffizi de Florencia), al no haber existido en Gran Bretaña en tiempos pasados monarcas ni gobernantes protectores de las artes como Felipe IV de España o Cosme de Médicis en Italia, sino como museo público aprobado por el Parlamento inglés con un crédito de 57.000 libras esterlinas destinado a la adquisición, conservación y exposición al público de la Colección Angerstein, compuesta por treinta y ocho obras que habían sido propiedad del acaudalado marchante ruso residente en Londres John Julius Angerstein (fallecido en 1824) y estaban en trance de ser vendidas al extranjero. Ante esta circunstancia, elpremierLord Liverpool y el propio monarca, Jorge IV, decidieron tomar medidas para que tal conjunto de obras de arte no saliera del país, como había ocurrido en 1777 cuando, al no haber prosperado en la Cámara de los Comunes lapropuesta del parlamentario John Wilkes para adquirir la colección deSirRobert Walpole, que habían puesto a la venta sus herederos, estas obras de arte terminaron en poder de Catalina II la Grande de Rusia, y hoy se exponen en el Museo del Hermitage de San Petersburgo. Un año antes, es decir, en 1823,SirGeorge Beaumont, mecenas de Constable –detractor, por cierto, de la creación de la galería londinense–, había prometido donar su colección de arte a la nación –entre la que figuraba la primera pintura de Canaletto que albergaría la pinacoteca:El patio del cantero– con la condición de que se expusiera en un lugar adecuado para su exhibición y conservación. La donación se llevaría a efecto en 1826, una vez inaugurada la pinacoteca.

La apertura al público de la Galería Nacional tuvo lugar el 10 de mayo de 1824, con sede en la misma casa Argenstein, situada en el número 10 de Pall Mall, próxima a Trafalgar Square.

Entre las primeras obras de renombre que se expusieron se hallaba la que lleva el número 1 en el inventario del museo:La resurrección de Lázaro, de Sebastiano del Piombo, además de la serie de seis cuadrosMatrimonio a la moda, de William Hogarth, y distintas obras de importancia salidas del pincel de Rubens, Van Dyck, Rembrandt y Claudio Lorena. No era, por tanto, la pintura inglesa lo más granado de la exposición pero, en contrapartida, ofrecía un gran elenco de pintura europea con preferencia por la Italia del Renacimiento y el clasicismo francés del siglo XVII, representado por Poussin y el citado Lorena.

No faltaron algunos coleccionistas entusiastas por la nueva pinacoteca que decidieron donar sus pinturas, destacando en 1831 las treinta y cinco obras del reverendo William H. Carr, entre las que figurabanMuchacha bañándose en un río, de Rembrandt, ySan Jorge y el dragón, de Tintoretto, contribuyendo así de manera extraordinaria a elevar la calidad de las pinturas expuestas en la recién estrenada Galería Nacional de Londres.

Por su parte, ya desde 1825, la nueva pinacoteca había iniciado una política de adquisiciones mediante compra de cuadros de calidad, como laVirgen de la cestade Correggio (primer cuadro adquirido individualmente), a la que siguieron en años sucesivos otras obras de maestros de especial renombre comoBaco y Ariadna, de Tiziano.

Corría el año 1834 cuando la Galería Nacional abandonó la casa Argenstein, que se había quedado pequeña debido a la continua afluencia de pinturas que iban engrosando sus fondos. La nueva sede se ubicó,temporalmente, en el número 105 de la misma calle, un lugar lúgubre y angosto, impropio para albergar tesoros artísticos.

Ese mismo año se inició la construcción de la nueva y actual sede en el lugar que ocupaban las antiguasKing’soQueen’s Mews(según se hallase en el trono un rey o una reina),también llamadasRoyal MewsyRoyal Stables(los establos del rey, donde se confinaban desde 1377 los halcones mientras mudaban sus plumas y no se llevaban de caza), proyectadas por William Kent en 1745 sobre el edificio original de 1663. La ubicación en Charing Cross, Westminster, área norte de Trafalgar Square, corazón londinense, entre el acomodado West End y las zonas más pobres del este, se llevó a cabo con el argumento de facilitar a personas de todas las clases sociales el acceso a la contemplación de las obras de arte. Así lo volvió a recordar la Comisión Parlamentaria de 1857 cuando se llegó a plantear la posibilidad de trasladar la Galería Nacional a South Kensington, al oeste del centro urbano.

Trafalgar Square, según litografía de Thomas Picken en 1852. Museo Británico.Londres. En el centro, preside la plaza la columna honorífica del almiranteNelson. Al fondo, en el lado norte, la Galería Nacional. A la derecha, en el flancooriental, la iglesia de San Martín del Campo.

La plaza de Trafalgar Square data de los años 20 del siglo XIX, a partir del diseño urbanístico encargado por la Comisión de Parques y Bosques (posteriormente, Comisión de Obras) al arquitecto John Nash, quien lo presentó en 1826 proponiendo el derribo de las caballerizas reales para levantar en su lugar un gran edificio con columnas, sede de la futura Galería Nacional de Pintura y Escultura. En el centro de la plaza proyectó un gran templo clásico, gemelo del Partenón de Atenas, en el que se alojaría la Real Academia de las Artes, flanqueado por sendas estatuas de Jorge III y Jorge IV.

La urbanización fue llevada a cabo por Charles Barry, quien concluyó la obra en 1845. Preside el centro de la plaza el monumento al almirante Horacio Nelson, según diseño en 1838 del arquitecto William Railton. La estatua, de 5,5 metros de altura, se halla elevada hasta los 51 metros sobre una columna honorífica de orden corintio, cuyo pedestal (decorado en bajorrelieve con las victorias del almirante en el Cabo de San Vicente, en la Batalla del Nilo y en la de Copenhague, así como con su propia muerte en la de Trafalgar) está situado sobre dos escalones emplazados en una plataforma rectangular. La escoltan cuatro leones de bronce diseñados porEdwin Landseer, fundidos con los cañones capturados al enemigo en la batalla de Trafalgar. Dos fuentes, remodeladas por Edwin Lutyens en los años 30 del pasado siglo, renovadas en 2003 e iluminadas espectacularmente con luces LED de colores en 2009, realzan el monumento.

La Galería Nacional desde Trafalgar Square.

Rechazado el proyecto de Nash para la Galería Nacional, básicamente a causa de la recesión económica, el arquitecto encargado de trazar los planos del nuevo edificio fue William Wilkins (1778-1839), entusiasta de la Antigüedad Clásica, cuya moda introdujo en su país al regreso de sus viajes a Italia y Grecia, que había podido realizar gracias a una beca otorgada por la Universidad de Cambridge.

Wilkins diseñó en estilo neoclásico tardío un edificio de planta rectangular organizado en torno a un vestíbulo central, con las distintas naves dispuestas en sentido axial e iluminadas cenitalmente. Debido a la escasa profundidad con la que contaba por existir un cuartel y un asilo inmediatamente detrás, y a que tampoco se autorizó ampliar espacio para no obstaculizar la vista de la iglesia neoclásica de San Martín del Campo, una planta subterránea albergaba las dependencias administrativas. Para realzar la extensa fachada con la grandeza de un templo clásico situado sobre el nivel de la vía pública y de las personas que la transitan, se levantó sobre un alto basamento provisto de escalinatas laterales un pórtico central saliente, sostenido por ocho columnas corintias (reaprovechadas de la Carlton House, antigua residencia del príncipe regente, que había sido demolida en 1825) coronadas por un frontón triangular de tímpano liso. Sobre el friso, desde la reforma de 2004, figura en letras doradas la inscripción THE NATIONAL GALLERY. A cada lado, rompiendo la monotonía de las alas laterales de la fachada, se construyeron resaltados dos edículos tetrástilos del mismo orden arquitectónico, accesibles por escalerillas frontales y coronados por un ático. Con el mismo fin se edificaron ligeramente resaltados dos pórticos, uno en cada extremo, con dobles pilastras adosadas a cada lado de la entrada; sobre ambos se alzan sendas torrecillas octogonales gemelas de cubierta poligonal, cuyos vanos están cerrados con celosías pétreas. Una gran cúpula central semiesférica, recubierta en su exterior de pizarra, rematada con linterna y sostenida sobre un alto tambor circular rasgado por ventanales de medio punto peraltado que se cierran con celosías de piedra, completaron el edificio en 1838, siendo inaugurado por la reina Victoria el 9 de abril de ese mismo año.

Pórtico octástilo de estilo neoclásico tardío, edificado sobre un alto basamento con escalinatas laterales de acceso por William Wilkins, entrada principal a la Galería Nacional en Trafalgar Square.

La obra tuvo detractores ya en sus primeros tiempos. El rey Guillermo IV la definió como “pequeño y desagradable agujero”. James Fergusson, en suHistoria de los Estilos Modernos, publicada en 1862, hablaba del edificio como de “un penoso resultado en Trafalgar Square”. El historiador de arquitectura John Summerson (1904-1992) describió irónicamente la fachada en relación a la disposición de la cúpula y las dos pequeñas torres en el mismo nivel como “el reloj y los jarrones sobre una repisa de la chimenea, sólo que menos útiles”.

Los legados y donaciones continuaron lloviendo sobre la Galería Nacional. Así, en 1845, Robert Vernon dejó un importante legado de pintura británica que, por falta de espacio, hubo de exhibirse en su casa, sita en el número 50 de Pall Mall.

El problema se agudizó en 1851 con el gran legado de William Turner que, al no encontrar espacio suficiente en esta sede, hubo de ser expuesto también en otras dependencias, como ocurre en la actualidad, pues parte de su obra se halla depositada en la Tate Britain. No obstante, se diocumplimiento a una de las estipulaciones de su testamento, que obligaba a exhibir dos de sus cuadros junto a otras dos pinturas de su admirado Claudio Lorena, hecho que sigue vigente en la galería.

El primer director de la Galería Nacional, nombrado en 1855 por un periodo de diez años, fue el pintor y entonces conservador del museo, y presidente también de la Royal Academy, Charles Lock Eastlake, en cuyo mandato se inició una época de florecimiento que dio lugar a la adquisición de importantes obras de arte, hasta ciento treinta y siete cuadros, entre los que cabe destacar una de las tres tablas de laBatalla de San Romano,de Paolo Uccello, elBautismo de Cristo,de Piero della Francesca,La lectura de laMagdalena,de Rogier van der Weyden,Alegoría de Venus y Cupido,del Bronzino,La familia de Darío ante AlejandroyLa adoración de los Magos, del Veronés, yEl Juicio de Paris,de Rubens.

Hasta 1869 la imponente construcción había albergado también la Royal Academy of Arts (Real Academia de las Artes), con lo que en su interior convivieron dos instituciones durante más de treinta años, restándose espacio una a la otra, hasta que esta última fue trasladada a Burlington House.

En 1872, con el nuevo director al frente de la institución, William Boxall, después de un debate sobre la permanencia del edificio, se acordó una ampliación de la galería, que veremos más adelante.

Una nueva época dorada para la Galería Nacional se abrió a partir de 1874 durante el mandato del director Frederick W. Burton (ejerció su cargo durante veinte años), que incrementó la calidad de los fondos con obras de la categoría deLa Virgen de las rocas, de Leonardo da Vinci,Retrato ecuestre de Carlos I de Inglaterra, de Van Dyck oMujer de pie ante un virginal, de Vermeer de Delft.

En 1897 se fundó la Galería Nacional de Arte Británico, conocida como Tate Gallery, a la que se decidió trasladar la obra de los pintores británicos nacidos con posterioridad a 1790.

En 1903, tras un periodo de sequía económica en cuanto a contribuciones estatales, debido a la considerable merma de ingresos del fisco, tuvo lugar la creación del Fondo Nacional de Colecciones de Arte, una sociedad de suscriptores que surgió para detener la venta de obras a los magnates norteamericanos, que estaban aprovechando las necesidades económicas de sus propietarios, la aristocracia inglesa, sacudida por lascrisis agrarias. Su primera adquisición, en 1906, fueLa Venus del Espejo, de Velázquez, que después de su lamentable salida de España cuando la rapiña de la “francesada”, se hallaba en Rokeby Park (Yorkshire), de donde procede otra de sus denominaciones:Venus de Rokeby.

En 1907 se procedió al derribo de los cuarteles de Saint George, por lo que se pudieron erigir cinco nuevas dependencias en el ala occidental, que fueron inauguradas en 1911.

Nuevos legados y donaciones en las dos primeras décadas del siglo XX continuaron enriqueciendo los depósitos de la Galería Nacional. En 1923, el Fondo Courtaul, que lleva el apellido de este magnate y coleccionista de arte, subvencionó la compra, entre otras, de la obra maestra de George Seurat,Bañistas en Asnières.

Durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), los bombardeos alemanes causaron abundantes destrozos en el edificio vecino del establecimiento de muebles Hampton aunque, por fortuna, las obras de la pinacoteca habían sido puestas a buen recaudo en distintos refugios al norte del País de Gales. Sin embargo, tras la caída de Francia en poder de Alemania, hubo de buscarse otros emplazamientos. Así y todo, los tesoros artísticos no sufrieron daños.

Al término de la contienda, se retomaron las adquisiciones gracias a distintas contribuciones económicas, a pesar de la carestía desorbitada del mercado de arte.

Durante la dirección del historiador del arte Neil Mac Gregor (1987-2002) se tomó la decisión de organizar los fondos del museo por criterios cronológicos, prescindiendo del anterior sistema de clasificación por escuelas nacionales, introducido por Eastlake, aduciendo el interés que podía reportar al visitante la comparación entre obras de artistas de diferentes países, pero cultivadores del mismo estilo.

En 1996 se modificó el criterio para la asignación de obras a la Galería Nacional y a la Tate, señalándose el año 1900 como frontera entre la primera y la segunda sede de arte.

Durante el cuarto de siglo que ha transcurrido prácticamente ya del nuevo milenio, se han incrementado las campañas destinadas a la recaudación de fondos económicos que permitan la adquisición de nuevas obras. Actualmente, a la fecha de publicación de esta guía artística, todo el interés está centrado en la conmemoración, a lo largo de 2024, del bicentenario de la fundación, como veremos más adelante.

Reformas y remodelaciones del edificio original

Desde el final de su construcción e inauguración en 1838 (cinco salas que atendían a unos 200.000 visitantes al año), el edificio que alberga la Galería Nacional no ha dejado de ser remodelado y ampliado para atender al crecimiento prácticamente exponencial de aficionados al arte que en 2022, tras el bache que supuso la pandemia del coronavirus, se acercaron a la cifra de tres millones (algunas estadísticas indican un número superior), a pesar de contar con la competencia del Museo Británico y la Tate Modern en el mismo Londres, tercer y cuarto museo por número de visitantes a nivel mundial tras el Louvre y los Museos Vaticanos.

A lo largo de las décadas de 1850 y 1860 se plantearon diversas propuestas como la del arquitecto que había participado en la reconstrucción del palacio de Westminster, Charles Barry, en 1853, consistente en remodelar completamente la sede. Se habló también de trasladarla a lugares más espaciosos en Kensington.

La primera reforma importante fue la construcción de una larga galería sobre el vestíbulo principal, que contó con una abundante decoración, añadida en 1860-61 por James Pennethorne.

En 1867 el arquitecto Edward Middleton Barry, hijo de Charles Barry, propuso reemplazar el edificio Wilkins por otra construcción de inspiración clásica con cuatro cúpulas, pero se le acusó de haber presentado un plagio de la catedral de San Pablo.

Entre 1872 y 1876, demolido el asilo que se encontraba en la parte posterior, y con el nuevo director al frente de la institución, William Boxall, E. Barry construyó en el lado oriental el ala que lleva su nombre, diseñada en forma de cruz griega en torno a un gran octógono central (cerrado con una gran cúpula acristalada), proporcionando una estructura axial al edificio, que continuaron simétricamente las posteriores adiciones. Con ello, se añadieron ocho nuevas salas de exhibición, incluyendo el octógono. La decoración, de inspiración neorrenacentista, con lujosas columnas pareadas de mármol negro en cada lado del octógono, resaltando sobre paredes decoradas en rojo y sosteniendo arcosolios acristalados alternando con otros ornamentados, no resultó del agrado general, puesto que contenía anacronismos fuera de lugar, como los nombres de artistas británicos del siglo XIX inscritos en la decoración del techo de la galería italiana de los siglos XV y XVI.

El octógono de las Barry Rooms y la cúpula acristaladade la cubierta, obra de Edward Middleton Barry entre 1872 y 1876.

En los años 80 se llevaron a cabo por parte de John Taylor nuevas reformas. Entre 1885 y 1887 fue demolida la galería de Pennethorne y se construyó la sala de entrada con la monumental escalera y la cúpula semiesférica gallonada de cristal.

Las modificaciones y ampliaciones continuaron en el siglo XX. En 1929 se construyó, dentro de la corriente del eclecticismo histórico que se había extendido por Europa, una galería financiada por el marchante Lord Duveen. La financiación corrió a cargo de mecenas privados, principalmente del industrial y coleccionista de arte Samuel Courtauld y de la hija del fundador de la firma de Bolsa Nelke Philipps & Co., Maud J. A. Russell, esposa del banquero Gilbert Russell.

El piso del vestíbulo de Taylor fue decorado con mosaicos del artistaruso afincado en Londres, Boris Anrep (1885-1969), realizados en su estudio de París. En 1928 labróLos trabajos de la vida(vestíbulo oeste) yLos placeres de la vida(vestíbulo este), compuestos de doce imágenes independientes. En el primero se presenta la naturaleza constructiva y creativa del ser humano: la ingeniería (un taladro eléctrico), las ciencias de la naturaleza (el estudio de un diplodocus en el Museo de Historia Natural), la exploración (filmación de una cebra), el comercio (un reportero en el mercado de Covern Garden), la música (una concha y una flauta), el teatro (un contorsionista). En el segundo, como su título indica, las distracciones y el ocio: la natación, el baile, el fútbol, el cricket o la caza.

En 1933 realizó en el rellano central un nuevo mosaico que lleva por títuloEl despertar de las musas; constituye una vinculación de los dos anteriores: al canto del gallo entran en acción seres mitológicos representados por personajes de la actualidad: Baco (el crítico Arthur Clive Bell), patrón de los placeres, y Apolo (el escritor Sir Osbert Sitwell), que inspira los trabajos, despiertan a las “musas” del momento, entre ellas, la escritora Virginia Woolf portando una pluma en la mano como Clío, musa de la historia; Greta Garbo como Melpómene, musa de la tragedia; Lydia Lopokova, primera bailarina, como Terpsícore, musa de la danza y el coro.

En 1952 el mosaiquista ruso, afín al grupo Bloomsbury, formado por escritores y artistas que defendían el arte contemporáneo, añadióLas virtudes modernasen el suelo del vestíbulo norte, quince escenas que incluyen figuras alegóricas de intelectuales de los años treinta y cuarenta; entre ellas, el filósofo Bertrand Russell (Lucidez), elpremierWinston Churchill desafiando a una bestia con forma de esvástica (Defiance), labailarina Dame Margot Fonteyn (Delectation), el poeta Thomas S. Elliot(Ocio), el crítico de arte Clive Bell (Baco), el astrónomo Fred Hoyle o el físico atómico Ernest Rutherford (Curiosidad: un átomo subdividiéndose).

El Staircase Hall o Sala de las escaleras y la cúpula semiesférica de cristalque la cubre, construidas entre 1885 y 1887 según diseños de John Taylor.

MosaicoLas virtudes modernas, realizado en 1952por Boris Anrep en el pavimento del vestíbulo norte.

En 1975 se concluyó la ampliación del ala norte y, entre 1986 y 1991, se acometió la remodelación más importante en el antiguo edificio de la Galería Nacional, después de que diversas propuestas a principios de los años 80 no terminaran de cuajar ni siquiera con el concurso (forzado por la opinión pública y la prensa) del Gobierno británico (reacio a invertir en arte), que había adquirido el antiguo solar Hampton. Pero el proyecto ganador, tachado de excesivamente moderno, no resultó del agrado, digamos, de nadie, ni siquiera del Príncipe de Gales, que lo describió en su discurso en la Gala Real celebrada con motivo del 150 aniversario del RIBA (Royal Institute of British Architects) como “monstruoso carbunclo en la cara del más querido y elegante amigo”.

La Sainsbury Wing

En tales circunstancias, habiéndose hecho público el 2 de abril de 1985 el ofrecimiento de los hermanos Sainsbury (John, Simon y Timothy), hijos del barón Sainsbury y nietos del magnate fundador de una importante compañía de alimentación y abastos, para costear el nuevo edificio en Hampton Sitepara la ampliación de la Galería Nacional, dedicado a la colección de pintura del primer Renacimiento, así como para situar otros espacios destinados a salas de exposiciones temporales, un auditorio público para conferencias, una sala de información, tiendas y un restaurante, se constituyó un comité encargado de elegir el estudio de arquitectura que lo llevaría a efecto. El 24 de enero del año siguiente, tras ganar la segunda fase del concurso internacional que de los veinticuatro estudios de arquitectura presentados se había reducido a seis, el arquitecto seleccionado fue Robert Venturi, de la firma Venturi, Rauch y Scott Brown, con sede en Filadelfia (EE. UU.).

LaSainsbury Wingtal como fue construida, vista desde Trafalgar Square.

Concluida en 1991, la nuevaSainsbury Wing, situada en la esquina noroeste de Trafalgar Square, provocó un acalorado debate. Algunos críticos afirmaron que su fachada era una parodia de la existente. Y efectivamente, las cornisas, las pilastras corintias no estructurales de orden gigante y el revestimiento de piedra de Portland en la fachada principal suponen una continuación de la construcción, pero también se combinan con grandes vanos, cristaleras, ladrillo visto, ventanas ciegas y columnas metálicas que le otorgan un ritmo nuevo y armónico. Laspilastras agrupadas en el extremo oriental de la fachada pretenden crear (en palabras de Venturi) “un vínculo formal entre la arquitectura del nuevo edificio y la de la Galería Nacional”. Entretanto, hubo voces como la del periodista británico Simon Jenkins, que lo elogiaron como una de las mejores galerías del siglo XX.

Con una ampliación de 11.148 metros cuadrados, que supuso para la Galería Nacional alcanzar una superficie total de 46.396 metros cuadrados, el ala Sainsbury alberga una de las colecciones de pinturas del Renacimiento temprano italiano, flamenco, holandés y alemán más visitadas del mundo.

Consta de planta baja, dos pisos subterráneos y dos niveles en altura. En el nivel cero, una amplia entrada a pie de calle, ubicada en la zona norte de Trafalgar Square, facilita el acceso a todo el público. La comunicación con el edificio principal se lleva a cabo mediante una estructura circular cerrada con cristal, bajo la cual existe un paso peatonal. Ya en el interior, una escalera señorial, coronada con vigas de hierro sujetas al techo y decoradas con arcos dobles, conduce al piso superior y a las salas de exposiciones. En el nivel 1, donde se ubican un restaurante y servicios para el público, una gran superficie acristalada permite la entrada de torrentes de luz natural y ofrece espléndidas vistas a Trafalgar Square. En el nivel 2 se encuentran las dieciséis salas de exposición, iluminadas por la luz natural que penetra a través de los cristales, y con la temperatura y humedad ambiental reguladas. En el primer sótano, se construyó un teatro con capacidad para trescientos espectadores, que sirve también como sala de conferencias y proyecciones. El segundo sótano se destinó a albergar exposiciones temporales.

El diseño original sigue en gran parte intacto y han sido escasas las modificaciones desde su finalización, habiendo obtenido varios premios desde que la construcción fue inaugurada. En 2018 el gobierno británico le otorgó el estatus de Grado I, agregándola a la Lista del Patrimonio Nacional de Inglaterra. En 2019 obtuvo el Premio a los Veinticinco Años del Instituto Americano de Arquitectos (AIA, por sus siglas en inglés), con sede en San Francisco (California).

En 2004, dentro de la Fase de Desarrollo del Ala Este, a cargo de Jeremy Dixon y Edward Jones, se llevó a cabo la apertura de la entrada Paul Getty, denominada en honor a este magnate norteamericano (1932-2003) con ciudadanía británica, que en 1985 había efectuado una donación de cincuenta millones de libras esterlinas destinada a la adquisición de nuevas obras, entre ellas, de artistas del nivel de Caravaggio, Holbein el Joven y Nicolás Poussin.

En 2005 concluyeron las obras de remodelación del vestíbulo y se reabrió la entrada en Trafalgar Square, con el concurso del diseñador de interiores David Mlinaric. Finalizó, asimismo, la restauración del techo del siglo XIX que había realizado su colega, John Dibblee Crace en estilo victoriano. Se eliminó la pintura blanca y se quitaron los nuevos revestimientos de mármol de la escalera principal para dejar a la luz las paredes de mármol rosa, procedente de las canteras de Túnez, que había sido utilizado por John Taylor en 1887.

Igualmente, se creó el Annenberg Court, un nuevo espacio que originalmente era un patio interno y, a la vez que alberga exposiciones temporales, sirve de enlace entre las galerías del nivel 2, las instalaciones para visitantes del nivel 0 y la entrada Getty.

Entre 2018 y 2020, gracias a una donación del fondo benéfico The Julia and Hans Rausing Trust, se acometió la renovación de la sala 32, que forma parte del ala realizada en 1876 por E. Barry.

En marzo de 2023 se abrió al público la Galería B, una ampliación de 200 metros cuadrados diseñada por Purcell Arquitectos, destinada no sólo a exposiciones, sino también a albergar espacios educativos. Con esta nueva ampliación, los visitantes pueden observar todas las galerías de la planta baja al tiempo que avanzan hacia el piso principal.

Inmediatamente detrás, en su lado norte, se encuentra desde 1896 el edificio de la Galería Nacional de Retratos, que se fundó en 1856 para albergar retratos de personajes destacados de la historia de Gran Bretaña ya fallecidos, si bien esta norma hoy no existe. Sus fondos, ordenados cronológicamente, comprenden, en total, más de diez mil piezas entre fotografías, pinturas, dibujos, caricaturas y esculturas; no de exclusivo valor artístico, aunque existen obras de artistas de prestigio (Van Dyck, W. Hogarth, Reynolds), sino histórico e incluso anecdótico.

Las estatuas y relieves del exterior

Las esculturas situadas en la fachada fueron reaprovechadas del Marble Arch, el arco de triunfo construido en mármol de Carrara con tres vanos circulares (el central más elevado que los laterales, a imitación del arco del emperador Constantino en Roma), diseñado por John Nash en 1827como entrada oficial alCour d’honneur(patio principal) del Palacio de Buckingham, conmemorando la victoria en las guerras napoleónicas (1803-1815). Una vez construido, fue desmontado y trasladado de lugar varias veces. Actualmente, está ubicado en un cruce de carreteras que lleva su nombre en uno de los accesos a Hyde Park. Las piezas escultóricas que lo adornan fueron diseñadas por John Flaxman hasta su fallecimiento en 1826, encargándose posteriormente Edward Hodges Bayli y John F. Rossi, y concluyendo la obra Edward Blore en 1833. Las estatuas que finalmente no fueron utilizadas en el arco, al reducirse la altura diseñada, se colocaron en la Galería Nacional.

Wilkins modificó las esculturas, reemplazando las armas y atributos bélicos por símbolos de paz. Las hornacinas situadas encima de las entradas Getty y Oeste contienen figuras femeninas alegóricas. Originalmente, eran personificaciones de la Victoria, flanqueadas por pares de figuras más pequeñas, que simbolizaban trofeos, también conmemorativos de la victoria militar contra Napoleón en 1815. Actualmente, sostienen pinceles y coronas de olivo para simbolizar el arte y la paz.

En la hornacina situada sobre el pórtico central, labradas por Rossi, se contraponen dos figuras femeninas alegóricas, desnudas de cintura para arriba, sosteniendo a la par una corona de laurel diseñada para contener el busto en relieve del duque de Wellington, que finalmente Wilkins decidió trasladar a la parte trasera de la construcción, mirando al cuartel que entonces estaba allí ubicado; hoy se encuentra en el interior de la entrada oeste. Dispuestas a la grupa de un caballo y un camello representan, respectivamente, a Europa y Asia. Flanquean estas imágenes dos figuras femeninas en pie, vestidas con largas túnicas, emplazadas en el interior de sendas hornacinas.

Sobre el césped que bordea las alas laterales de la fachada del edificio se encuentran dos estatuas de bronce fundido: al este, una réplica de la estatua en mármol de George Washington, original del escultor francés de estilo rococó Jean-Antoine Houdon (1741-1828), regalo del estado de Virginia, emplazada sobre suelo importado de los Estados Unidos al objeto de cumplir el juramento del primer presidente de la nueva nación acerca de que nunca más pondría pie en suelo británico; al oeste, la estatua del rey Jacobo II de Inglaterra (1633-1701) representado como emperador romano, obra del taller del holandés Grinling Gibbons en 1685.

En el extremo este del conjunto arquitectónico, mirando a la iglesia de San Martín del Campo, se eleva majestuosa, procedente del Arco de Mármol, una estatua sedente que originalmente personificaba a Britania, cubierta su cabeza con casco y armada con lanza y escudo, adornado con la efigie de Nelson en conmemoración de su victoria en la batalla naval de Trafalgar. Fue diseñada por John Flaxman y, tras la muerte de este, completada por Edward H. Baily, quien retiró del frente del escudo la cabeza del almirante para convertir a Britania en una representación de la diosa Minerva.

El BicentenarioNG200