Minucias - Darío Rodríguez - E-Book

Minucias E-Book

Darío Rodríguez

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Beschreibung

Minucias es un libro hecho de diálogo del aforista consigo mismo en el que, por los temas comunes, algún lector puede sentirse incluido; o por las miradas singulares del aforista, ese mismo lector puede sentirse curioso, atraído o distanciado. Estos aforismos son como constantes invitaciones: ventanas abiertas a pequeños paisajes. El lector encontrará una obra que habla por sí misma, producto de una experiencia atenta, arriesgada, en la observación, la lectura y la reflexión. Felipe Restrepo David

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Darío Rodríguez

Minucias

Editorial Universidad de Antioquia®

© Darío Rodríguez

© Editorial Universidad de Antioquia®

ISBN: 978-958-501-099-4

ISBNe: 978-958-501-101-4

Primera edición: abril del 2022

Motivo de cubierta: imagen tomada de Pixabay, bajo licencia CC0

Diseño de cubierta y diagramación: Imprenta Universidad de Antioquia

Hecho en Colombia /Made in Colombia

Prohibida la reproducción total o parcial, por cualquier medio o con cualquier propósito, sin la autorización escrita de la Editorial Universidad de Antioquia®

Editorial Universidad de Antioquia®

(57) 604 219 50 10

[email protected]

http://editorial.udea.edu.co

Apartado 1226. Medellín, Colombia

Imprenta Universidad de Antioquia

(57) 604 219 53 30

[email protected]

Para Darío Jaramillo Agudelo

Presentación

Es bien conocida la tradición del aforismo en Occidente. Poco puede comentarse acerca de este procedimiento literario cuya esencia se encuentra en la escritura súbita, el ingenio y la reflexión.

Quien escribe aforismos en el siglo xxi es, por sí, más que un escritor, un lector calificado del género. Y sus aportes, si los tuviera, se orientan a la proximidad con maestros del pasado —Cioran, Elias Canetti, Lichtenberg, Nietzsche, Marie Linage— mediante la refutación o la actualización de sus propuestas. También, aunque en tono menos filosófico que poético, van dirigidos a la conquista del arte de la alusión y del silencio meditativo; esto como respuesta a la explosión expresiva de nuestros tiempos, que ha vindicado los textos breves gracias a internet.

La presente colección de aforismos es deudora del objetivo que para la obra propia se trazara el pensador colombiano Nicolás Gómez Dávila: escribir de una manera “corta y elíptica”, tocando apenas “las cimas de la idea, una dura punta de diamante”. Así lo afirma en el inicio de Notas, su primer libro. Secundando esas búsquedas se hallarán aquí referencias a textos literarios y filosóficos, así como consideraciones de algunos fenómenos inherentes a la condición humana, bajo la tutela de un estilo reticular no ajeno a cierto deseo de lucidez requerido por la aforística.

En otro sentido, Minucias se acerca a una capacidad de síntesis poética que puede reflejarse en la anécdota narrada por George Plimpton en el documental Cuando fuimos héroes:

Hubo un estallido de aplausos al final. Y entonces alguien gritó: “¡Queremos un poema!”. Todo el mundo se quedó callado.

El poema más corto en lengua inglesa según el libro de citas de Bartlett se titula “Sobre la antigüedad de los microbios”; el poema dice: “Adán los tenía”. Es muy corto.

Pero el poema de Muhammad Ali fue: “Yo, Nosotros”. Dos palabras.

Le escribí una carta a Bartlett y le dije:

—Fíjese, esto es más corto que “Adán los tenía”; ¿Quiere incluirlo? Además significa algo más que el poema en sí mismo.

“Yo, Nosotros”... Ali, menudo boxeador y menudo hombre.

El autor de este libro agradece a las obras de Érika Martínez, Ramón Eder, Juan Manuel Uría, Manuel Neila y Éric Chevillard, sin las cuales Minucias no hubiera sido posible.

Minucias

Una idea errónea, además inofensiva, que no perturbe ni siquiera a los susceptibles, está cerca de la poesía.

Existen ideas caóticas que se vuelven sistemáticas gracias a las glosas escritas para ellas.

Pudor de una inteligencia por encargo.

Muchas veces se llega a la libertad porque se estaba luchando por algo muy diferente de ella.

La ética civil y la ética cristiana han derivado en literaturas. No es imprudente solicitarle cierta poesía a esta y una mejor narrativa a aquella.

De los aparatos en desuso solo sobreviven sus almas.

Intentar arder para, después, lograr el anhelado enfriamiento.

No al contrario.

Nunca.

Tratar de congelarse, y enfriarse para, después, lograr el anhelado arder, las llamas.

No al contrario.

Nunca.

Los funerales de la novela son, en realidad, la celebración de su bautismo.

La atención desmedida a un teléfono móvil, o a cualquier pantalla, es una forma del arrobamiento místico.

Una obra maestra carece de biografía.

La expectativa estética se basta a sí misma.

Un joven Tzvetan Todorov sospechaba que se comenta el arte sin hablar de él. Sin un “cómo”.

La aceptación no sucede al asombro. Lo precede.

Cierto libro de poemas leído como si fuera una colección de aforismos. Cierto libro de aforismos leído como si se tratara de un compendio poético.

Un buen acicate para el ejercicio de la reflexión es ignorar si se está dormido o despierto.

La filosofía debería tener sus propios condensadores de partículas.

A las temáticas no les alcanza el tiempo para elegir a los autores pues su especialidad es la trashumancia.

El alma es un ferrocarril alado.

Solucionar problemas del realismo en literatura requiere altas dosis de irrealidad, absurdo y fantasía.

Los planes de la campaña presidencial del escritor Macedonio Fernández son casos atractivos para el estudio político: fueron más efectivos que sus resultados, se hallaban por encima de ellos.

Las raíces de la originalidad (si se da plena) son reprochables plagios e insolentes homogeneidades.

Debe hablarse del prójimo pues las raciones de ficción siempre son necesarias.

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