Nocturnos y otros poemas de amor - Carlos Aburto - E-Book

Nocturnos y otros poemas de amor E-Book

Carlos Aburto

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Beschreibung

Los nocturnos son poemas reflexivos, descriptivos, en donde la mulata dormida, la noche, se apropia de los versos y las metáforas. Su yo lírico es un ente que vive diferentes momentos, desde el atardecer, el ocaso, el crepúsculo, la noche, la medianoche y la profunda medianoche. La Luna, las estrellas y todo el universo con sus astros son testigos de su dolor, su amor y su búsqueda de la pareja. Estos poemas nos pasean por diferentes estados del alma, como la soledad, la nostalgia, el dolor, el deseo, el amor, lo prohibido, el sentimiento de sentirse Dios a veces y viajar a través del tiempo y del espacio. Son todos poemas de amor, sensibles y sentimentales, que harán identificarse a una gran cantidad de lectores y lectoras.

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NOCTURNOS Y OTROS POEMAS DE AMOR

Carlos Aburto

PRIMERA EDICIÓN Diciembre 2023

Editado por Aguja LiterariaNoruega 6655, dpto 132 Las Condes - Santiago - Chile Fono fijo: +56 227896753 E-Mail: [email protected] Sitio web: www.agujaliteraria.com Facebook: Aguja Literaria Instagram: @agujaliteraria

ISBN: 9789564091082 

DERECHOS RESERVADOSNº inscripción: 2023-A-12879Carlos Enrique Aburto MuñozNocturnos y otros poemas de amor

Queda rigurosamente prohibida sin la autorización escrita del autor, bajo las sanciones establecidas en las leyes, la reproducción parcial o total de esta obra por cualquier medio o procedimiento, incluidos la reprografía y el tratamiento informático

Los contenidos de los textos editados por Aguja Literaria son de la exclusiva responsabilidad de sus autores y no necesariamente representan el pensamiento de la Agencia 

TAPAS Imagen de portada: Ultima_Gaina (iStock)Diseño: Jimena Cortés 

ÍNDICE

NOCTURNO I 

NOCTURNO II

NOCTURNO III

NOCTURNO IV

NOCTURNO V

NOCTURNO VI

NOCTURNO VII

NOCTURNO VIII

NOCTURNO IX

NOCTURNO X

NOCTURNO XI

NOCTURNO XII

NOCTURNO XIII

NOCTURNO XIV

NOCTURNO XV

NOCTURNO XVI 

NOCTURNO XVII 

NOCTURNO XVIII 

NOCTURNO XIX

NOCTURNO XX

NOCTURNO XXI

NOCTURNO XXII

NOCTURNO XXIII 

NOCTURNO XXIV

NOCTURNO XXV

POEMAS DE AMOR

AGUIJÓN DE ROSA

COMPAÑERA 

TUS OJOS

TU BOCA

TU MIRADA

TU BESO

TRAICIÓN

NOCTURNO I  

Anochece: preñada está la Luna

y suave el viento.

Diamantes siderales

giran saltarines

en exótica danza nocturna.

Mi alma se dispersa

de estrella en estrella

y quiere detener

la expansión de los astros.

¡Pero, cuidado! El universo es perfecto.

La energía celeste

es perfecta, más perfecta

de lo que sospecha el Creador.

Ahora, seres alados

de ambientes paradisíacos

vienen hasta aquí

y giran en torno mío

al compás de mis suspiros.

Mi alma está ebria

de danza nocturna

y se deshace en lágrimas.

 “El amor es celeste y

es prodigio divino”.

Me lo dijo un ser alado

en esta plateada noche del

grandioso plenilunio. 

NOCTURNO II

La mulata dormida

respira sutilmente

su perfumado aliento.

La pálida llama de una vela

termina con la noche

y mis pensamientos

con la aurora matinal.

Los acordes de guitarra

 y el canto de los jóvenes

sube armonioso

en el apacible titubeo nocturno.

Un perro aúlla

embrujado por la vieja Luna

y su desarticulado eco

se eleva lastimero

sobre la ciudad dormida.

La canción de la noche

se eleva a las estrellas

y mi suspiro de enamorado

traspasa el universo,

porque mi alma es canción

y mis versos son el eco

de una melodía sin fin... 

                                            

NOCTURNO III

Mi mirada se dirige

al abandono de la tarde

y persigue al arrebol distante

que huye cual fantasma.

La noche vino

con su manto mortuorio

borrando imperceptiblemente

la estética del color

y la soledad me acompaña

otro día hasta mi glacial lecho

de lobo sideral.

El céfiro gira

trizando el silencio

con aterciopelada suavidad,

mientras la hechicera Luna

me dirige su sonrisa

de coqueta milenaria.

Tarde, noche, luna,

soledad, silencio;

y un beso inmaculado

me envuelve con tibieza

hasta alcanzar el alba.

NOCTURNO IV

Salgo al jardín a la hora más silenciosa

del beso con la noche

y allí está ella: la bruja milenaria

sonriendo seductora

sobre una infinita alfombra de diamantes.

¡Oh, paraíso nocturno, 

circundante quietud