Erhalten Sie Zugang zu diesem und mehr als 300000 Büchern ab EUR 5,99 monatlich.
El presente trabajo tiene como propósito contribuir a la comprensión psicoanalítica de los aspectos más profundos de los cuentos de hadas clásicos. Tras definir, caracterizar y contextualizar los cuentos de hadas clásicos, se aborda el tema del simbolismo que estos portan. Posteriormente se revisan, critican e integran las diferentes interpretaciones del simbolismo en los cuentos de hadas clásicos propuestas por algunos de los psicoanalistas pioneros más importantes en este ámbito: Sigmund Freud, Otto Rank, Géza Róheim y Bruno Bettelheim. Se pone especial énfasis en el análisis de algunos cuentos de hadas escritos por los hermanos Grimm, debido tanto a la relevancia de su obra como al hecho de que la mayoría de los autores mencionados analizó algunos de sus relatos. En forma posterior, se propone un modelo integrador estructural que organiza el simbolismo de los cuentos de hadas en tres estratos de acuerdo al desarrollo psíquico: preedípico, edípico y postedípico. Esos tres estratos tienden a coexistir en los distintos cuentos de hadas analizados. Finalmente, se aborda la cuestión sobre la existencia de símbolos universales en los cuentos de hadas, analizando los postulados de los autores revisados y proponiendo algunas delimitaciones de este fenómeno.
Sie lesen das E-Book in den Legimi-Apps auf:
Seitenzahl: 65
Veröffentlichungsjahr: 2025
Das E-Book (TTS) können Sie hören im Abo „Legimi Premium” in Legimi-Apps auf:
I Introducción
II Cuentos de hadas y Psicoanálisis
III EL LENGUaje simbólico de los cuentos de hadas
IV SIMBOLISMO UNIVERSAL Y fantasías de cumplimiento de deseos
V Conclusiones
VI REFERENCIAS
introducción
Los cuentos de hadas1 son un fenómeno muy extendido que cuenta con raíces antiquísimas y un profundo simbolismo que subyace a su aparente simplicidad. Estos cuentos entrañan una regresión al referirse a la infancia, lo que permite que emerjan elementos inconscientes con una mayor transparencia que otros productos literarios, con la excepción de algunos mitos.
Este trabajo tiene por objeto comparar, criticar e integrar las diferentes visiones relativas al simbolismo en los cuentos de hadas planteadas por los primeros autores que dedicaron sus esfuerzos a la interpretación psicoanalítica de ellos. De esta manera se revisan tanto las obras seminales de Sigmund Freud y Otto Rank como las contribuciones posteriores de Géza Róheim y Bruno Bettelheim. Se pone un énfasis especial en la interpretación de los cuentos de hadas clásicos de Jacob y Wilhelm Grimm, debido tanto a lo paradigmático de estos relatos como al hecho que la mayoría de dichos autores analizó, en mayor o menor medida, tales obras.
Para integrar las diferentes interpretaciones sobre el simbolismo en los cuentos de hadas, se propone un modelo del desarrollo psicosexual que supone la existencia de diferentes capas de la psique. Por otra parte, se discute la idea, compartida por la totalidad de los autores revisados, de la existencia de símbolos universales en los cuentos de hadas.
La relevancia de esta investigación radica en el hecho de que la interpretación psicoanalítica de los cuentos de hadas ofrece una importante vía para entender el inconsciente y su lenguaje simbólico, siendo su estudio complementario a otros materiales determinados por el inconsciente, tales como el chiste, los sueños y los mitos. Por otra parte, esta investigación viene a llenar un vacío en relación a un análisis sistemático y coordinado de los aportes realizados por los psicoanalistas pioneros en esta área.
1 Este término es inexacto, pues rara vez aparecen hadas en ellos. Sin embargo, se utiliza debido a que está muy extendido en español. Por otra parte, el término “cuentos infantiles” es también inexacto, pues los niños no eran los destinatarios principales en un comienzo.
Cuentos de hadas y Psicoanálisis
Una definición clara y útil de los cuentos de hadas es proporcionada por Dundes (1987) quien los entiende como la clase de historias populares que versan sobre la fantasía más que sobre la realidad y donde los protagonistas son niños. Los cuentos de hadas fueron en sus orígenes historias populares orales transmitidas de generación en generación, suponiéndose su fuente hace siglos o incluso milenios atrás. Estos relatos fueron recogidos y transcritos de forma relativamente tardía, dándoseles una forma fija.
Actualmente los cuentos de hadas continúan siendo un fenómeno popular tanto para niños como para adultos, reapareciendo y siendo transformados en libros, películas, cómics, etc., y, a pesar de que algunos de ellos han sido mutilados, banalizados, moralizados y usados para fines personales, otros han sido transformados en historias sublimes y profundas (Heisig, 1977; Zipes, 2014b).
La asombrosa permanencia e interés en los cuentos de hadas en nuestro tiempo, a pesar de que pueden parecer a un lector moderno como inocentes y anticuados, parece basarse en que estos relatos expresan simbólicamente fenómenos inconscientes de la psique. Al hacer esto logran sortear la represión y satisfacer las pulsiones sexuales y agresivas inconscientes de forma sublimada.
Es necesario aclarar que los cuentos de hadas recopilados por los hermanos Grimm son solo una diminuta parte del vasto legado de cuentos, canciones, fábulas, leyendas y sagas europeos estudiados por ellos (Zipes, 2014a). En cuanto a los cuentos de hadas recopilados por los hermanos Grimm, estos publicaron siete ediciones, las que Wilhelm se mantuvo cambiándolas y corrigiéndolas. Sin embargo, la primera edición conserva el sabor de las narraciones orales y no contiene la ideología cristiana y puritana de las ediciones posteriores, que fueron embellecidas para ser del gusto de los lectores de clase media y volverlas más adecuadas para los niños (Zipes, 2014a; 2014b).
Dundes (1987) es crítico de la recopilación de los hermanos Grimm ya que ellos no recolectaron las narraciones orales de forma literal, sino que le dieron una forma literaria. Este autor explica que los hermanos Grimm cometieron un error metodológico al combinar elementos de diferentes versiones del mismo cuento recopilados de distintos informantes. Para Zipes (2014a) no hay tal error, pues aclara que los hermanos Grimm no viajaron para recolectar los cuentos de los campesinos, sino que, por el contrario, se basaron en informantes de diferentes clases sociales, aunque mayormente de gente educada. Ellos estudiaron cientos de variantes de historias populares y extrajeron y adaptaron cuentos contenidos en escritos antiguos. Esta metodología estaba en sintonía con el enfoque romántico, ya que ellos creían que estaban recuperando la, en parte perdida, verdadera y pura literatura germánica producida por la gente común (Zipes, 2014a; 2014b).
La cuestión sobre cuál era la audiencia original a la que estaban dirigidos los cuentos de hadas de los hermanos Grimm es controversial. Para Dundes (1987) estos cuentos apuntaban a los niños, pero debido al Zeitgeist nacionalista y romántico, los hermanos Grimm omitieron los contenidos sexuales y obscenos. De la misma opinión es Bettelheim (1976), para quien los cuentos de hadas fueron creados principalmente para una audiencia infantil a fin de ayudar a los niños a comprender y resolver -de una forma inconsciente- sus conflictos del desarrollo. Sin embargo, este punto de vista contrasta con el de los hermanos Grimm, para quienes los cuentos de hadas fueron originalmente dirigidos tanto a una audiencia infantil como adulta. Por otra parte, Zipes (2014a) señala que, a pesar de su nombre, los cuentos de hadas recopilados por los hermanos Grimm no fueron dirigidos a los niños, sino que primariamente a otros estudiosos y adultos.
Respecto a la comprensión psicoanalítica de los cuentos de hadas, tanto Róheim (1941) como Bettelheim (1976) los definen en oposición a los mitos. Ambos concuerdan en que mientras en el mito los actores son mayoritariamente divinos o sobrehumanos, en el cuento de hada son gente común, especialmente el héroe, cuyos enemigos frecuentemente son seres sobrenaturales. En los cuentos de hadas, los actores no tienen nombres o si los tienen son nombres comunes y la escena transcurre en un lugar indefinido, mientras que los mitos ocurren en locaciones definidas; pero de forma más importante, los cuentos de hadas tienen un final feliz, a diferencia del mito.
Aunque Róheim y Bettelheim coinciden en el final feliz de los cuentos de hadas y trágico de los mitos, evalúan a ambos de manera antitética. Es así que, para Róheim los primeros tienen un final feliz porque fomentan las ilusiones sobre la realidad, es decir, se fijan en la infancia, mientras que los mitos terminan trágicamente porque encaran la realidad y promueven la maduración; mientras que para Bettelheim los cuentos de hadas promueven la integración del Yo y el mito promueve la desesperación (Segal, 1999).
Bettelheim (1976) señala algunas características de los cuentos de hadas; a saber, en ellos se simplifican todas las situaciones, se eliminan los detalles superfluos, los caracteres están polarizados al igual que la mente del niño, incapaz de comprender las complejidades del comportamiento humano y, por último, permiten al niño la identificación con el héroe, con quien comparte sus problemas y sufrimientos.
Probablemente dos de los precursores más influyentes en la interpretación psicoanalítica de los cuentos de hadas fueron Sigmund Freud y su discípulo Otto Rank. La contribución de Freud a este campo fue esencial, aunque fragmentaria, debido a que su interés por los cuentos de hadas fue solo secundario. Por otra parte, Rank logró profundizar más en este objeto de estudio.