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Escrito en 1886, ¿Cuánta tierra necesita un hombre? es una modernísima parábola sobre la ambición del ser humano. Pajom es un campesino al que ninguna extensión de tierra satisface: cuanta más tiene, más necesita. Al conocer que los habitantes de una lejana región, los bashkirios, le ofrecen tanta tierra como pueda recorrer en un día, no lo dudará e intentará abarcar la mayor cantidad posible... La prosa de Tolstói —decía Nabokov— late al ritmo de nuestro corazón. Elena Odriozola (Segundo Premio Nacional de Ilustración 2006) ha captado ese pulso narrativo y nos lleva con sus imágenes a la tierra que vio nacer a Pajom, permitiéndonos acompañarle en su viaje por la estepa rusa, marcado por el ritmo de su ambición. Las vacas serán testigo de ese afán.
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Seitenzahl: 29
Veröffentlichungsjahr: 2015
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¿Cuánta tierra necesitaun hombre?
Lev Tolstói
Ilustraciones de Elena Odriozola
Título original: Mnogo li cheloveku zemli nuzhno
© De las ilustraciones: Elena Odriozola
© De la traducción: Víctor Gallego Ballestero Traducción cedida por Alba Editorial, s.l.u.
Edición en ebook: julio de 2015
© Nórdica Libros, S.L.
C/ Fuerte de Navidad, 11, 1.º B 28044 Madrid (España)
www.nordicalibros.com
ISBN DIGITAL: 978-84-16440-14-6
Diseño de colección: Diego Moreno
Corrección ortotipográfica: Ana Patrón
Maquetación ebook: leerendigital.com
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Lev Tolstói
(Yasnaia Poliana, 1828 - Astapovo, 1910)
Novelista ruso, profundo pensador social y moral, y uno de los más eminentes autores de narrativa realista de todos los tiempos.
Después de un breve y poco afortunado intento por mejorar las condiciones de vida de los siervos de sus tierras, se entregó a la disipada vida de la alta sociedad aristocrática moscovita. En 1851 decidió incorporarse al ejército. En el Cáucaso entró en contacto con los cosacos, que influyeron mucho en sus novelas cortas. Tolstói regresó a San Petersburgo en 1856, y se sintió atraído por la educación de los campesinos. Abrió en Yasnaia Poliana una escuela para niños campesinos en la que aplicó sus métodos educativos, que anticipaban la educación progresista moderna. En 1862, se casó con Sonia Andréievna Bers, miembro de una culta familia de Moscú. Durante los siguientes quince años formó una extensa familia, administró con éxito sus propiedades y escribió sus dos novelas principales, Guerra y Paz (1869) y Ana Karenina (1877)
Elena Odriozola
Nació en 1967 en San Sebastián, ciudad en la que ha vivido siempre. Empezó ilustrando libros de texto hace unos veinte años mientras trabajaba en una agencia de publicidad. Luego, una cosa llevó a la otra, y ahora lleva unos cien libros publicados, la mayoría de literatura infantil y juvenil. En esta misma colección ha publicado Frankenstein y Cenicienta.
Contenido
Portadilla
Créditos
Autor
Ilustraciones
I
II
III
IV
V
VI
VII
VIII
IX
Contraportada
I
Una hermana mayor fue al campo a visitar a su hermana menor. La mayor vivía en la ciudad y estaba casada con un comerciante; la menor, mujer de un campesino, residía en la aldea. Las hermanas bebieron té y charlaron. La mayor empezó a alabar las ventajas de vivir en la ciudad, comentando qué espaciosa y limpia era su casa, qué bien vestidos iban, qué elegantes prendas lucían sus hijos, cuántas cosas buenas comían y bebían, cómo iba en carroza, acudía al teatro e iba de paseo.
La menor, sintiéndose ofendida, empezó a menospreciar la vida de los comerciantes y a ponderar la de los campesinos.
—No cambiaría mi vida por la tuya —dijo—. Será todo lo gris que quieras, pero no sabemos lo que es el miedo. Es verdad que vuestro estilo de vida es más refinado, pero no es menos cierto que, aunque algunas veces obtenéis grandes ganancias, al día siguiente podéis perderlo todo. Recuerda lo que dice el proverbio: «La ganancia es hermana de la pérdida». A menudo sucede que hoy eres rico y mañana estás mendigando un pedazo de pan. En cambio, la vida del campesino es más segura: modesta, pero larga; nunca seremos ricos, pero siempre tendremos qué comer.
Entonces la mayor dijo:
