Erhalten Sie Zugang zu diesem und mehr als 300000 Büchern ab EUR 5,99 monatlich.
"Pasaron varias noches de alucinaciones, de despertar casi nadando en una cama empapada de sudor y de sexo, tal vez no en una cama sino en un barco, en una playa, o en una torre, disfrutando de los poderes de teletransportación de Michelle." Melina se encuentra en Reikiavik por razones laborables, y parece que todo el mundo le ha encontrado el lado mágico a la ciudad menos ella. La monotonía del frío y las largas horas en la oficina hacen que cada noche termine abatida en su habitación de hotel sin hacer poco más que dormir. Una tarde, dos compañeras de trabajo la convencen para ir a tomar algo en un bar, donde conocerá a Michelle, una preciosa camarera que asegura tener poderes de teletransportación. A partir de esa noche, Melina empieza a recibir visitas nocturnas por parte de Michelle. Pero, ¿es Michelle una hada, un ser fantástico que aparece y desaparece a su merced o una persona de carne y huesos con la que Melina volverá a recuperar el fuego interior, las ganas de vivir y explorar el mundo?
Sie lesen das E-Book in den Legimi-Apps auf:
Seitenzahl: 23
Das E-Book (TTS) können Sie hören im Abo „Legimi Premium” in Legimi-Apps auf:
Leonora Ríos
Lust
El fuego interno
Cover image: Shutterstock
Copyright ©2022, 2023 Leonora Ríos and LUST
All rights reserved
ISBN: 9788728443439
1st ebook edition
Format: EPUB 3.0
No part of this publication may be reproduced, stored in a retrieval system, or transmitted, in any form or by any means without the prior written permission of the publisher, nor, be otherwise circulated in any form of binding or cover other than in which it is published and without a similar condition being imposed on the subsequent purchaser.
www.sagaegmont.com
Saga is a subsidiary of Egmont. Egmont is Denmark’s largest media company and fully owned by the Egmont Foundation, which donates almost 13,4 million euros annually to children in difficult circumstances.
—Si hay algo que siempre he considerado mi debilidad es mi falta de paciencia — pensó en voz alta Melina en su cuarto de hotel, mientras se amarraba sus botas de cuero altas estilo militar, hasta la pantorrilla, acomodaba sus guantes y ajustaba su gorra de lana verde, un uniforme de colores negros y verdes oliva que la hacían sentir camuflar perfectamente entre los colores pálidos de esta ciudad ajena a su forma de ser y de existir, pero ahora, su casa temporal durante tres meses… —demasiado tiempo en el congelador —decía, fruñendo el ceño y ajustando el cinturon de su chaqueta de cuero y su hoodie de piel negra, probablemente de foca, algo que le incomodaba saber, pero que la abrigaba de forma perfecta en los días de tormenta, y que además era de segunda mano, un regalo de una de sus compañeras de trabajo que sí sabía de estos climas tan atroces.