La fuerza del pensamiento en la empresa y la vida cotidiana (Traducido) - William Walker Atkinson - E-Book

La fuerza del pensamiento en la empresa y la vida cotidiana (Traducido) E-Book

William Walker Atkinson

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Beschreibung

Para la mayoría de la gente, el término Magnetismo Personal transmite la idea de una corriente que irradia de la persona del individuo magnético, atrayendo hacia él a todos los que están dentro del radio de su fuerza magnética. Esta idea, aunque en general es errónea, contiene el germen de la verdad real. Hay una corriente de fuerza de atracción que irradia del hombre, pero no es una fuerza magnética en la medida en que el término "magnetismo" implica alguna conexión con la piedra de toque o la electricidad. La corriente magnética humana, aunque tiene cierta semejanza con estas dos fuerzas familiares en sus efectos, no tiene ninguna conexión real con ellas en lo que se refiere a su origen o naturaleza intrínseca.

Lo que llamamos Magnetismo Personal es la corriente sutil de ondas de pensamiento, o vibraciones de pensamiento, proyectadas desde la mente humana. Cada pensamiento creado por nuestra mente es una fuerza de mayor o menor intensidad, que varía según el ímpetu que se le dé en el momento de su creación. Cuando pensamos, enviamos desde nosotros una corriente sutil, que se desplaza como un rayo a menudo muy alejado de nosotros por el espacio, un pensamiento fuerte irá en su misión cargado de un poderoso poder, y a menudo derribará la resistencia instintiva de las mentes de los demás a las impresiones exteriores, mientras que un pensamiento débil será incapaz de obtener una entrada Trance en el castillo mental de otro, a menos que ese castillo no esté más que mal guardado. La repetición de pensamientos en la misma línea, enviados uno tras otro, a menudo efectuará una entrada donde una sola onda de pensamiento, aunque sea mucho más fuerte, será rechazada. Es una exhibición de una ley física en el mundo psíquico, y ejemplifica el viejo dicho sobre el goteo constante que desgasta una piedra.

Los pensamientos de los demás nos influyen a todos mucho más de lo que creemos. No me refiero a sus opiniones, sino a sus pensamientos. Un gran escritor sobre este tema dice muy acertadamente: "los pensamientos son cosas". Son cosas, y cosas muy poderosas. A menos que comprendamos este hecho, estamos a merced de una fuerza poderosa, de cuya naturaleza no sabemos nada, y cuya existencia misma muchos de nosotros negamos. En cambio, si comprendemos la naturaleza y las leyes que rigen esta maravillosa fuerza, podemos dominarla y convertirla en nuestro instrumento y ayudante. Cada pensamiento creado por nosotros, débil o fuerte, bueno o malo, sano o malsano, envía sus ondas vibratorias, que afectan, en mayor o menor medida a todos aquellos con los que entramos en contacto, o que pueden entrar en el radio de nuestras vibraciones de pensamiento. Las ondas del pensamiento son como las ondas de un estanque causadas por el lanzamiento de un guijarro, se mueven en círculos que se amplían constantemente, irradiando desde un punto central. Por supuesto, si un impulso proyecta las ondas del pensamiento con fuerza hacia un determinado objeto, su fuerza se sentirá con mayor intensidad en ese punto.

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La fuerza del pensamiento en la empresa y la vida cotidiana

 

 

William Walker Atkinson

 

 

1906

Traducción del inglés y edición 2021 de David De Angelis

Todos los derechos reservados

CONTENIDO

 

PREFACIO

Capítulo 1: SALUDO

Capítulo 2: LA NATURALEZA DE LA FUERZA

Capítulo 3: CÓMO PUEDE AYUDARTE LA FUERZA DEL PENSAMIENTO

Capítulo 4: INFLUENCIA PSÍQUICA DIRECTA

Capítulo 5: UN POCO DE SABIDURÍA MUNDANA

Capítulo 6: EL PODER DEL OJO

Capítulo 7: LA MIRADA MAGNÉTICA

Capítulo 8: LA FUERZA VOLICA

Capítulo 9: VOLACIÓN DIRECTA

Capítulo 10: VOLACIÓN TELEPÁTICA

Capítulo 11: LA CALIDAD ADUCTIVA DEL PENSAMIENTO

Capítulo 12: CONSTRUCCIÓN DEL CARÁCTER MEDIANTE EL CONTROL MENTAL

Capítulo 13: EL ARTE DE CONCENTRARSE

Capítulo 14: LA PRÁCTICA DE LA CONCENTRACIÓN

Capítulo 15: VALEDICTORIA

 

 

 

PREFACIO

 

 

En honor a mí mismo, creo que es bueno declarar que este trabajo ha sido preparado de manera un tanto apresurada a partir de las notas utilizadas por mí en algunas conferencias, las lecciones que aquí se dan son prácticamente los programas de dichas conferencias. En las conferencias, y en este trabajo, mi único propósito ha sido familiarizar a los estudiantes con los medios para desarrollar y utilizar eficazmente las fuerzas poderosas latentes dentro de él - el magnetismo personal y la influencia psíquica. Con este fin, he eliminado todas las pretensiones de estilo literario y todos los intentos de asegurar la felicidad de la dicción. He sentido que tenía un mensaje que transmitir, y me he esforzado por transmitirlo con prontitud, claridad y sencillez, sin ningún intento de "escritura fina". Si una palabra casera parecía expresar mi pensamiento, la utilizaba. Si un término de argot o una frase de semilenguaje parecían encajar, la utilizaba.

 

Confío en que mis críticos se ahorren la molestia de señalar mis numerosos defectos de estilo y composición, de los que soy plenamente consciente. He subordinado todo lo demás, en mi esfuerzo por hacer esta obra sencilla y práctica. Esta es una explicación, no una disculpa.

 

Con el anterior entendimiento entre nosotros, someto este pequeño trabajo a su amable consideración. Aunque soy plenamente consciente de sus defectos, sigo pensando que será útil para algunos de los muchos que se esfuerzan por superar entornos desfavorables, a los que puede servir de poste indicador, señalando el pasado hacia cosas mejores. Siento que hará su parte del trabajo de eliminar el pensamiento del miedo de las mentes de los hombres, de reemplazar el "no puedo" con el "puedo y lo haré". Siento que debo hacer estas cosas, porque contiene en su interior los gérmenes de una poderosa Verdad.

 

 

W.W.A. CHICAGO, ILL, 4 DE DICIEMBRE DE 1900

 

 

Capítulo 1SALUDO

 

Puntos de vista de otros escritores - Teorías erróneas - Vegetarianismo - Celibato - Fluido vital - Respiración profunda - Progreso real realizado por la investigación, no por las teorías - Existencia del magnetismo personal incuestionable - Una verdad evidente - Resultados, no teorías - No se proponen teorías de mascotas - No aceptes nada que no puedas demostrar.

 

"Las teorías no son más que poderosas pompas de jabón, con las que se divierten los hijos mayores de la ciencia". La mayoría de los escritores sobre este tema han dedicado casi todos sus esfuerzos, así como su espacio, a demostrar, en primer lugar, que el magnetismo personal realmente existía; y, en segundo lugar, que el fenómeno se explicaba mejor por alguna teoría propia. Algunos atribuyen el poder de influenciar a los hombres al uso de una dieta vegetariana, a pesar del hecho de que algunos de los individuos más "magnéticos" "hacen cementerios de sus estómagos." Otros insisten en que en el celibato y la abstinencia de relaciones sexuales puede encontrarse el secreto, a pesar de que la mayoría de los individuos "magnéticos" no difieren en sus costumbres sexuales de sus hermanos menos magnéticos. Otros sostienen que la fuerza "magnética" abunda en el aire que nos rodea para absorber grandes cantidades del fluido vital, cargándonos de fuerza a la manera del acumulador. Y así sucesivamente, cada uno con su pequeña teoría de mascotas.

 

Ahora bien, no tengo nada que objetar a los sistemas antes mencionados. Aunque no llevo una vida de celibato, veo mucho bien en la doctrina de la continencia, y no puede haber dos opiniones en cuanto a los méritos de la castidad; aunque no acepto la teoría de la absorción de la "fuerza magnética" de la atmósfera terrestre, soy un firme defensor y creyente de la "respiración profunda", y creo que si se practicara universalmente, muchas enfermedades y debilidades físicas desaparecerían de la tierra. Todas estas cosas son buenas, pero un poco de reflección mostrará a cualquiera que no son los factores principales en la producción de la cualidad conocida como "Magnetismo Personal". Los escritores sobre el tema suelen concluir hablando a sus lectores de las maravillosas posibilidades que se abren a cualquiera que pueda adquirir este poder y aprender a utilizarlo. Sin embargo, dicen poco o nada sobre cómo se puede adquirir esta fuerza, es decir, más allá de exponer sus teorías. Dan discursos, pero no instruyen.

 

Son predicadores, no maestros. Se detienen en las teorías - y descuidan los hechos.

 

Los verdaderos progresos en esta rama de la investigación científica no han sido realizados por escritores o teóricos, sino por unos pocos investigadores serios que han llevado a cabo numerosos experimentos y han explorado todas las vías de información, y que han sacado este maravilloso tema de los reinos de la mera especulación y lo han colocado sobre una base científica.

 

El autor ha estudiado e investigado este tema durante muchos años, y el presente trabajo es un intento de dar a sus estudiantes algunos de los principios fundamentales derivados de las investigaciones y experimentos prácticos suyos y de sus colaboradores en este campo. Nuestras lecciones, por lo tanto, se limitarán, en la medida de lo posible, a la exposición de hechos probados y a la instrucción práctica, tocando la teoría sólo cuando sea absolutamente necesario.

 

En mi opinión, insultaría su inteligencia si le presentara un argumento elaborado, cuyo propósito sería un intento de probar la existencia de esa maravillosa fuerza, latente en el hombre, desarrollada por unos pocos, pero posible de adquirir por todos; esa misteriosa cualidad llamada, a falta de un nombre mejor

- Magnetismo personal.

 

Tratar de demostrar su existencia sería como intentar convencer al hombre inteligente de la edad media de que el imán influye en la aguja, de que los rayos X penetran en el cuerpo del hombre o en un objeto más sólido, de que un mensaje se transmite por electricidad, por un rayo de luz o incluso por telegrafía sin hilos, a través del aire sin necesidad de ningún otro medio. Toda persona inteligente conoce la existencia de los fenómenos mencionados, y no necesita que se le demuestre lo mismo. Si está interesado en el tema, desea que se le enseñe cómo impregnar estas fuerzas, para poder reproducir los experimentos por sí mismo. Esto es igualmente cierto para el estudiante de Magnetismo Personal. Hace tiempo que ha aprendido que esa fuerza existe. La ve a su alrededor todos los días y conoce las maravillas que se logran con su ayuda. Posiblemente sabe que ha desarrollado la fuerza hasta cierto punto, y lo que quiere, en cualquier caso, es conocer los medios por los que puede desarrollar plenamente y utilizar inteligentemente la fuerza latente en su interior. Por lo tanto, no intentaré demostrar la existencia de la fuerza, creyendo que es evidente.

 

También tengo la intención de evitar una discusión agotadora de las numerosas teorías que se han propuesto para explicar el fenómeno del magnetismo personal. Yo no tengo ninguna teoría favorita que proponer. Me esforzaré por enseñarle cómo obtener resultados, y usted podrá entonces leer sobre el tema de las teorías, o posiblemente formular una nueva teoría propia. Expondré brevemente mi propia concepción de la causa que subyace a los fenómenos a los que se alude en este trabajo, pero no intentaré imponerle mis puntos de vista. Son ustedes libres de aceptar o rechazar cualquier teoría, ya que el resultado no depende en absoluto de ninguna forma especial de creencia. Muchos de los que han obtenido los mejores resultados, han descartado una teoría tras otra, y ahora dicen que no intentan explicar la causa real que subyace a los resultados, contentándose con trabajar, sin una teoría dogmática, mientras sepan cómo obtener los resultados. Con esta explicación, dejaré el terreno de la teoría y entraré en el de la práctica, y me esforzaré por instruiros en las líneas de desarrollo y uso de esta poderosa fuerza, para que podáis reproducir los resultados ya obtenidos por otros, y quizás podáis convertiros en investigadores y líderes en el trabajo de abrir el camino a través de los bosques de superstición y misterio con los que el tema ha estado rodeado durante tanto tiempo. Les pediré que no acepten nada que no puedan probar.

Capítulo 2LA NATURALEZA DE LA FUERZA

 

- —

La fuerza no magnética en su naturaleza - Corriente sutil de las ondas de pensamiento - Los pensamientos son cosas - Nuestros pensamientos nos afectan a nosotros mismos así como a los demás - Cambio de apariencia tras el cambio de ocupación - El pensamiento es la mayor fuerza del mundo - "Puedo y quiero" frente a "No puedo" - Instrucción práctica no dis- curso trascendental - El poder aductivo del pensamiento - El miedo pensado la raíz del pensamiento perjudicial.

 

 

Para la mayoría de la gente, el término Magnetismo Personal transmite la idea de una corriente que irradia de la persona del individuo magnético, atrayendo hacia él a todos los que están dentro del radio de su fuerza magnética. Esta idea, aunque en general es errónea, contiene el germen de la verdad real. Hay una corriente de fuerza de atracción que irradia del hombre, pero no es una fuerza magnética en la medida en que el término "magnetismo" implica alguna conexión con la piedra de toque o la electricidad. La corriente magnética humana, aunque tiene cierta semejanza con estas dos fuerzas familiares en sus efectos, no tiene ninguna conexión real con ellas en lo que se refiere a su origen o naturaleza intrínseca.

 

Lo que llamamos Magnetismo Personal es la corriente sutil de ondas de pensamiento, o vibraciones de pensamiento, proyectadas desde la mente humana. Cada pensamiento creado por nuestra mente es una fuerza de mayor o menor intensidad, que varía según el ímpetu que se le dé en el momento de su creación. Cuando pensamos, enviamos desde nosotros una corriente sutil, que se desplaza como un rayo a menudo muy alejado de nosotros por el espacio, un pensamiento fuerte irá en su misión cargado de un poderoso poder, y a menudo derribará la resistencia instintiva de las mentes de los demás a las impresiones exteriores, mientras que un pensamiento débil será incapaz de obtener una entrada Trance en el castillo mental de otro, a menos que ese castillo no esté más que mal guardado. La repetición de pensamientos en la misma línea, enviados uno tras otro, a menudo efectuará una entrada donde una sola onda de pensamiento, aunque sea mucho más fuerte, será rechazada. Es una exhibición de una ley física en el mundo psíquico, y ejemplifica el viejo dicho sobre el goteo constante que desgasta una piedra.

 

Los pensamientos de los demás nos influyen a todos mucho más de lo que creemos. No me refiero a sus opiniones, sino a sus pensamientos. Un gran escritor sobre este tema dice muy acertadamente: "los pensamientos son cosas". Son cosas, y cosas muy poderosas. A menos que comprendamos este hecho, estamos a merced de una fuerza poderosa, de cuya naturaleza no sabemos nada, y cuya existencia misma muchos de nosotros negamos. En cambio, si comprendemos la naturaleza y las leyes que rigen esta maravillosa fuerza, podemos dominarla y convertirla en nuestro instrumento y ayudante. Cada pensamiento creado por nosotros, débil o fuerte, bueno o malo, sano o malsano, envía sus ondas vibratorias, que afectan, en mayor o menor medida a todos aquellos con los que entramos en contacto, o que pueden entrar en el radio de nuestras vibraciones de pensamiento. Las ondas del pensamiento son como las ondas de un estanque causadas por el lanzamiento de un guijarro, se mueven en círculos que se amplían constantemente, irradiando desde un punto central. Por supuesto, si un impulso proyecta las ondas del pensamiento con fuerza hacia un determinado objeto, su fuerza se sentirá con mayor intensidad en ese punto.

 

Además de afectar a los demás, nuestros pensamientos nos afectan, no sólo temporalmente, sino también de forma permanente. Somos lo que pensamos que somos. La afirmación bíblica de que "como un hombre piensa en su corazón, así es él" es literalmente correcta. Todos somos criaturas de nuestra propia creación mental. Usted sabe lo fácil que es pensar en un estado mental "azul", o lo contrario, pero no se da cuenta de que el pensamiento repetido sobre una determinada línea se manifestará no sólo en el carácter (que ciertamente lo hace), sino también en la apariencia física del pensador. Esto es un hecho demostrable, y no tienes más que mirar a tu alrededor para darte cuenta de ello. Habéis observado cómo la ocupación de un hombre se manifiesta en su aspecto y en su carácter general. ¿Qué supones que provoca este fenómeno? Nada más y nada menos que ese pensamiento. Si has cambiado de ocupación, tu carácter general y tu apariencia han seguido el ritmo de tu cambio de hábitos de pensamiento. Tu nueva ocupación hizo surgir un nuevo tren de pensamiento, y "Los pensamientos toman forma en la acción". Puede que nunca hayas adoptado este punto de vista del asunto, pero, sin embargo, es cierto, y puedes encontrar una amplia prueba de su corrección con sólo mirar a tu alrededor.