Club atlético Boca Juniors 1953 I - Ulises Barreiro - E-Book

Club atlético Boca Juniors 1953 I E-Book

Ulises Barreiro

0,0

Beschreibung

Hablar de Boca Juniors desde el prisma de la cultura es hablar del símbolo de un barrio único, irrepetible e imprescindible: La Boca. Un barrio que es una República y como tal, portador de una historia tapizada de sucesos y protagonistas determinantes para el resto de la nación. Barrio que debe su nombre a la boca del Riachuelo, cuando este río vierte sus aguas en el Río de la Plata. Lugar fundacional para muchos historiadores –en rigor, la mayoría de ellos– en donde en el año 1536, Pedro de Mendoza erigió la Ciudad de Santa María de los Buenos Ayres, cabecera del centro portuario rioplatense. La vida cultural dentro de Boca Juniors ha tenido siempre una andadura sólida y permanente. Hombres y mujeres han dejado testimonio, año tras año, década tras década, de que la impronta del barrio se ha replicado en cada pasillo, en cada salón, en cada metro cuadrado del club. De esos hombres y esas mujeres y de sus obras, nos hablan Ulises Barreiro y Sebastián Martincic en este libro. Los consocios de Boca Juniors y colegas del equipo de investigación pisan en esta obra, estos terrenos, de una manera inédita –hasta donde tengo conocimiento– para cualquier otro gran club del mundo.

Sie lesen das E-Book in den Legimi-Apps auf:

Android
iOS
von Legimi
zertifizierten E-Readern
Kindle™-E-Readern
(für ausgewählte Pakete)

Seitenzahl: 276

Das E-Book (TTS) können Sie hören im Abo „Legimi Premium” in Legimi-Apps auf:

Android
iOS
Bewertungen
0,0
0
0
0
0
0
Mehr Informationen
Mehr Informationen
Legimi prüft nicht, ob Rezensionen von Nutzern stammen, die den betreffenden Titel tatsächlich gekauft oder gelesen/gehört haben. Wir entfernen aber gefälschte Rezensionen.



 

 

Club Atlético Boca Juniors 1953

Tomo I Historia Cultural

Ulises Barreiro - Sebastián Martincic

Una publicación de

Una de las grandezas de este deporte llamado fútbol consiste en que un Club, más allá de sus socios, abonados o seguidores es un elemento unificador. Entorno a ese Club se agrupan personas heterogéneas, sin distinción de religión, sexo, raza... que se identifican con unas siglas, unos colores y unos emblemas. La importancia de un Club puede variar geográficamente, transitando desde unas pocas calles de un barrio hasta una región o un país entero.

A su vez, ese Club, por su grandeza, puede llegar a ser un símbolo de unión entre personas de diferentes países o continentes, que pese a que no hablen un mismo idioma, comparten la misma pasión, usando para ello el lenguaje universal del fútbol.

Ese es el caso del Club Atlético Boca Juniors, que desde hace décadas lleva de manera triunfal el nobre del barrio de La Boca por Argentina y el mundo entero. Por otra parte, encontramos los lazos de unión que se crean entre clubes al haber jugadores que han vestido los colores de ambas entidades. Desde España, mi más sincera enhorabuena a la labor que realiza el grupo de Leyendas Xeneizes.

Domingo Manuel Muñoz Ruiz

Barreiro, Ulises Pastor

Club Atlético Boca Juniors / Ulises Pastor Barreiro. - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Imaginante, 2022

Libro digital, EPUB

Archivo Digital: descarga

ISBN 978-987-8919-48-5

1. Historia Argentina. 2. Clubes de Fútbol. I. Martincic, Sebastián. II. Título.

CDD 796.3340982

Edición: Oscar Fortuna.

© 2022, Ulises Pastor Barreiro

© 2022, Sebastián Martincic

© De esta edición:

2022 - Editorial Imaginante.

www.editorialimaginante.com.ar

www.facebook.com/editorialimaginante

Prohibida la reproducción total o parcial de esta obra bajo cualquier método, incluidos reprografía, la fotocopia y el tratamiento digital, sin la previa y expresa autorización por escrito del titular del copyright.

ISBN 978-987-8919-48-5

Conversión a formato digital: Libresque

Índice

CubiertaPortadaSobre este libroCréditosAgradecimientosDedicatoriaPrólogo de Domingo Manuel Muñoz RuizPrefacio de Héctor Pérez Della VallePrefacio de los autores Ulises Barreiro y Sebastián MartinciCapítulo 1. Himno del Club Atlético Boca JuniorsCapítulo 2. Cómo se debe hacer historia científica sobre el Club Atlético Boca JuniorsCapítulo 3. La identidad territorial del club de La Ribera, el proceso fundacional con una perspectiva de género y las raíces culturales de los primeros socios del clubCapítulo 4. Cultura musical xeneize¿Qué tangos de identidad xeneize se escuchaban en 1953?Capítulo 5. El cantautor Julio Elías MusimessiCapítulo 6. Escritores xeneizes que se cruzaron con la vida cultural de Boca Juniors en 1953Capítulo 7. El Departamento de Cultura del Club Atlético Boca Juniors en la temporada de 1953Capítulo 8. Socios xeneizes que pasaron a alentar desde el cielo estrellado durante esta temporadaCapítulo 9. Distintas subcomisiones que funcionaron en el Departamento de CulturaCapítulo 10. Departamento MédicoCapítulo 11. El primer deceso acontecido en La Bombonera durante un espectáculo deportivoCapítulo 12. BiografíasCapítulo 13. El merchandising existente en la temporada de 1953Capítulo 14. Pintores de La Boca y de pertenencia institucional xeneizeJuan Agustín BassaniBenito Quinquela MartínCapítulo 15. La Orden del TornilloConsideraciones finalesApéndice. La Cultura Xeneize a 8.000 Km de distancia de La BomboneraBibliografía

Agradecimientos

Jorge Amor Ameal, Alejandra Budeguer, Matías Burgos Sosa, Cecilia Sigler, Dr. Javier Vaca, Héctor Pérez Della Valle, Nino Kapitanović (Hajduk Split), Roberto S. Digón, Antea Žure (Hajduk Split), Maximiliano Murad, Manuel Kil, Dominique L. Gromez, Claudia Vogel, Javier Stanco, Adolfo Resnik, Martín Bustamante, Matías Rodríguez Conde, Domingo Manuel Muñoz Ruiz, Mariano Alliani, Carlos Scalesi, Michael Pahl, Leandro Chialvo, Juan Martín Mejia, Maia L. B. G., Agustina M. B., Gonzalo M. B., y Olimpia A. B. G.

A la memoria

de

Adolfo Jancevich

Y

Antonio J. Bucich

Prólogo

 

Una de las grandezas de este deporte llamado fútbol consiste en que un Club, más allá de sus socios, abonados o seguidores es un elemento unificador. Entorno a ese Club se agrupan personas heterogéneas, sin distinción de religión, sexo, raza… que se identifican con unas siglas, unos colores y unos emblemas. La importancia de un Club puede variar geográficamente, transitando desde unas pocas calles de un barrio hasta una región o un país entero.

A su vez, ese Club, por su grandeza, puede llegar a ser un símbolo de unión entre personas de diferentes países o continentes, que pese a que no hablen un mismo idioma, comparten la misma pasión, usando para ello el lenguaje universal del fútbol.

Ese es el caso del Club Atlético Boca Juniors, que desde hace décadas lleva de manera triunfal el nombre del barrio de La Boca por Argentina y el mundo entero. Por otra parte, encontramos los lazos de unión que se crean entre clubes al haber jugadores que han vestido los colores de ambas entidades.

En los años 70 y 80, ‘Chupete’ Guerini o Mario Husillos lucieron la elástica azul y oro de Boca Juniors y la blanquiazul del Club Deportivo Málaga. En época más reciente lo han sido jugadores como Pablo Trobbiani, Federico Insúa o Pablo Pérez, en este caso como futbolistas del Málaga Club de Fútbol, conjunto heredero del Club Deportivo Málaga. Desde España, mi más sincera enhorabuena a la labor que realiza el grupo de Leyendas Xeneizes.

 

Domingo Manuel Muñoz Ruiz

Área de Historia de la Fundación Málaga Club de Fútbol

Prefacio

Escribir sobre cultura –en cualquiera de sus manifestaciones– supone siempre un ejercicio arduo, porque son tantas y tan relevantes las aristas culturales de una sociedad, que bien podemos recordar aquel axioma que dice: “Todo es cultura”. La cultura resignifica a los pueblos. Es el catalizador que da sentido de nación, de pertenencia, de identidad. Ahora bien, cuando hablamos de cultura en el ámbito de una institución social y deportiva, sumamos un componente no menor: el amor que los protagonistas tienen por esa institución, y si tal institución es referente e ícono de un país, e inclusive de territorios muy distantes a la esfera nacional en donde tiene su sede social, la tarea de plasmarla y dejar testimonio vivo de ella es insoslayable.

Hace muchos años, estando en Brasil, fui hasta un puesto de revistas a comprar una publicación de la revista Placard1. Grande fue mi sorpresa cuando una de las notas tenía por título: “A maior paixao argentina depois do tango: Boca Juniors”. Recuerdo mi primera impresión: orgullo… genuino orgullo xeneize. Luego, me puse a pensar en la gran trascendencia de Boca Juniors, como para generar una nota así, en un país así… deportiva, política, económica y culturalmente tan importante. Y este también es un hecho cultural, pues la nota en cuestión no obedecía a ningún resultado deportivo coyuntural.

Hablar de Boca Juniors desde el prisma de la cultura es hablar del símbolo de un barrio único, irrepetible e imprescindible: La Boca. Un barrio que es una República y como tal, portador de una historia tapizada de sucesos y protagonistas determinantes para el resto de la nación. Barrio que debe su nombre a la boca del Riachuelo, cuando este río vierte sus aguas en el Río de la Plata. Lugar fundacional para muchos historiadores –en rigor, la mayoría de ellos– en donde en el año 1536, Pedro de Mendoza erigió la Ciudad de Santa María de los Buenos Ayres, cabecera del centro portuario rioplatense.

Lugar que fue puerto, antes que Buenos Aires tuviera su puerto, y que recibió como tal a las primeras corrientes inmigratorias de italianos, en su mayoría, y españoles, alemanes, franceses y griegos, entre otras y variadas procedencias.

Gente que traía de sus países ideas superadoras y libertarias, conviviendo en este conglomerado humano de características únicas, tanto socialistas, como radicales, masones, movimientos anticlericales, a la vez que sectores eclesiásticos, anarquistas y logias diversas, que hacia fines del siglo XIX habitaban la particular barriada boquense e impregnaban en cada metro cuadrado del barrio sus idearios políticos, sociales y culturales. A la luz de esa conciencia social y de su vientre fecundo surgió el primer diputado socialista de América latina: Alfredo Palacios (aunque él no era un hijo del barrio).

Y tuvo pues La Boca el primer Banco de la Ciudad… y el primer Cuartel de Bomberos Voluntarios de la ciudad, vital en una barriada como aquella, en donde las construcciones eran tan pintorescas y bellas como precarias. Fue en ese ámbito pletórico de etnias, costumbres, colores y labores de sol a sol, que florecieron hijos que asombraron al mundo en las más diversas manifestaciones del arte. El arte que no tiene papel ni rol… pero que es el vehículo para que las almas trasciendan, aún con su simple contemplación.

Así nos legó a Benito Quinquela Martín como nave insignia de una lista de nombres no menos talentosos y con un importante legado: artistas como Alfredo Lazzari, Juan del Prete, Alfredo Guttero, Fortunato Lacámera, Eugenio Daneri, Miguel Diomede, Víctor Cúnsolo, José Luis Menghi, José Arcidiácono y Miguel Carlos Victorica, quienes le dieron con sus pinceles y sus colores al barrio de La Boca el prestigio cultural del que goza y que tan bien ganado tiene. Fue –lo sigue siendo– la agrupación de gente de arte y letras Impulso, fundada en marzo de 1940, la que dio cobijo a todas estas expresiones culturales.

Tampoco sorprende entonces, que entre inmigrantes nacidos en el trabajo, que hacían las tareas más duras siempre con una canción en su garganta, La Boca le legara al mundo de la música a su propio Mozart… “el Mozart de La Boca”, como se conoce a Don Juan de Dios Filiberto, autor del inmortal tango Caminito (que ya devino en himno) y de otras gemas de nuestra música popular como Quejas de bandoneón, El pañuelito, Malevaje y Clavel del aire, entre muchos otros. Y es en ese barrio incomparable, exultante de colores, cantos, labores y jornadas que terminaban en cualquiera de sus muchos cafés antes de llegar a casa, que nacería un Club Social y Deportivo para asombrar al mundo. Para no pasar desapercibido. Para ser et pluribus unum (único entre muchos).

La vida cultural dentro de Boca Juniors ha tenido siempre una andadura sólida y permanente. Hombres y mujeres han dejado testimonio, año tras año, década tras década, de que la impronta del barrio se ha replicado en cada pasillo, en cada salón, en cada metro cuadrado del club.

De esos hombres y esas mujeres y de sus obras, nos hablan Ulises Barreiro y Sebastián Martincic en este libro. Los consocios de Boca Juniors y colegas del equipo de investigación pisan en esta obra, estos terrenos, de una manera inédita –hasta donde tengo conocimiento– para cualquier otro gran club del mundo. Separando en tres segmentos independientes uno del otro este trabajo superlativo:

El Cultural.El Deportivo.El Político.

Realizan esto apoyando sus saberes en un tridente muy difícil de amalgamar en un solo realizador:

Un amor inconmensurable y desinteresado hacia el club. No buscan réditos personales de ninguna índole y su norte es darle fulgor a cada actividad realizada en más de un siglo… y que nos ha convertido en lo que somos.Una capacidad de trabajo insuperable, sostenida por un rigor de investigación y búsqueda pocas veces visto por mí.Un talento y una amplísima cultura general que sorprende, pero contenidos en los modos y las maneras de unas personas, cordiales, sencillas, generosas.

He tenido la suerte de leer la historia gráfica de las grandes instituciones deportivas, sociales y culturales del mundo… ninguna como ésta, nunca. En compartimentos estancos para su mejor comprensión… y como una manera de preservar de modo irrefutable, cada una de estas áreas, rescatándolas del pasado y en virtud de los tiempos venideros.

Para mí es un orgullo poder sumarme a este nuevo proyecto. Nos une la amistad, que está regada por las savias invisibles del alma.

La cultura es el vehículo. Boca es el combustible… ¡Y es un placer hacer este viaje!

Héctor Pérez Della Valle

Investigador del equipo de Leyendas Xeneizes

1 La revista Placard (especializada en deportes en el pasado y hoy netamente de fútbol masculino), es de circulación mensual, pertenece en la actualidad al grupo editorial Abril y su primera edición es del 20 de marzo de 1970. Tuvo un corto período de tiempo en el cual se dejó de publicar, pero en el presente sigue editándose. Es una de las publicaciones más exitosas en todos los aspectos del mundo gráfico brasileño.

Prefacio de los autores

La historia de los clubes deportivos nunca es ajena a la historia de los Estados nacionales en que se encuentran, como tampoco a la de los conglomerados regionales económicos en los cuales están insertos como estructuras asociativas. Como bien lo manifestó Héctor Pérez Della Valle en su prefacio.

De esta forma, en el período espacio-temporal trabajado en este libro, que se corresponde al año 1953, veremos acontecimientos que ocurrieron en el año 1952, que tuvieron injerencia en la vida política, deportiva y cultural del Club Atlético Boca Juniors, y en la vida de otros clubes.

Si se preguntan por qué comenzamos con el año 1953, les contamos que nos pareció oportuno clarificar muchos aspectos acontecidos este año y que poco se sabe de ellos, por ejemplo Editorial Eyfel 2 en sus libros publicados en el año 1956, destina solamente nueve hojas a la historia xeneize del año 1953.

Otro libro que pasa por este período, pero salta de 1944 a 1954, sin ni siquiera tocar el año 1953, es el de los autores Pelegrino y Rodríguez Ponziolo3, así podríamos seguir con otros libros que pasan por alto este año de la historia del Club Atlético Boca Juniors, en este sentido decidimos trabajar la temporada de 1953, para hacer un aporte interesante a la historicidad del CABJ. Vale recalcar que todas estas obras anteriormente citadas son dignas de ser leídas, y poseerlas en todas las bibliotecas de la familia xeneize. Inclusive el libro de Pelegrino y Rodríguez Ponziolo a nivel metodológico es una de las mejores publicaciones sobre la historia xeneize.

Estamos en el período de la historia argentina que se caracteriza desde el plano del Poder Ejecutivo Nacional, con el 2º gobierno del general Juan Domingo Perón, desde ese marco estructural, hacia abajo comprenderemos muchos hechos de los clubes de ese momento, desde cuestiones económicas hasta políticas. No es motivo de los autores emitir juicios de valor al respecto, sino tan sólo enunciar algunas cuestiones estructurales sobre en qué contexto se desarrolló la historia del Club Atlético Boca Juniors durante la temporada deportiva de 1953.

Atendiendo estas cuestiones invitamos a las lectoras y a los lectores a que hagan un viaje mental en el tiempo para disfrutar de este espléndido capítulo del año de 1953, de la historia xeneize. Cuando lean al Club Atlético Estudiantes de La Plata, tienen que tener en cuenta que en 1953, su denominación oficial era Estudiantes de Eva Perón, asimismo la ciudad de La Plata se llamaba Ciudad Eva Perón y el Club Gimnasia y Esgrima de La Plata, se llamaba Gimnasia y Esgrima de Eva Perón. Esto se debió a que el 26 de julio de 1952, muere Eva Duarte de Perón. Dos semanas después, la Legislatura de la Provincia de Buenos Aires sanciona una ley que cambia la denominación a la ciudad de La Plata, por el de Ciudad Eva Perón. Así, muy poco tiempo después los clubes deportivos y demás asociaciones sean educativas o de otra índole cambiaron sus nombres. En el caso de los pincharratas, el 22 de octubre de 1952, el hasta entonces club Estudiantes de La Plata, pasa a llamarse Club Estudiantes de Eva Perón4.

El club, vale aclarar, había sido intervenido algunas semanas antes por conflictos políticos con la Confederación General del Trabajo, aunque los dirigentes destituidos continuaron reuniéndose en el club Everton de La Plata5.

No quisimos hacer anacronismo en este libro, pero es importante para las lectoras y lectores que entiendan qué club es el que enfrenta Boca en diversos deportes, dado que si no se generarán confusiones. La misma postura tomamos cuando nos referimos a la Ciudad de La Plata, si bien se llamaba ciudad Eva Perón, muy pocos lectores recuerdan que en 1953 era su nombre oficial, motivo por el cual la denominamos ciudad de La Plata. Lo mismo sucederá cuando se trabaje el período 1955-1956, dado que con el golpe de Estado realizado al gobierno del general Juan Domingo Perón, muchos clubes con nombres referidos a Juan Perón o Eva Duarte, o el 17 de Octubre, debieron cambiar su denominación. Por el momento nos quedamos en 1953, esperamos que disfruten de la lectura de esta obra boquense.

Por último, queremos tocar un debate sobre metodología de la investigación, dado que muchas obras de Boca Juniors que salen publicadas aparecen basadas netamente en la visagra de la historia oral. Eso significa que la única variante que toman es la de la entrevista de los sujetos en cuestión y luego en base a eso se confecciona el libro a publicar, pero desde el colectivo de Leyendas Xeneizes, ponemos un llamado de atención, porque la historia oral si no se la cruza con otros métodos de investigación puede llevar a falacias de razonamientos.

Es muy sencillo, la memoria de los sujetos humanos, con el pasar de los años, se va deteriorando, confundiendo, o inclusive la mente humana va reinventando sus propias vivencias, como si fuera un ente vivo dentro del cuerpo. Eso no significa que haya mala fe del sujeto que uno entrevista, es algo innato a la vida humana, que nos pasará a todos cuando querramos recordar algo acontecido más de 30 años atrás… Por ejemplo, tomemos este breve caso del célebre ídolo xeneize Antonio Ubaldo Rattin cuando quiere recordar con mucho amor cómo fue que colaboró con su núcleo familiar para la construcción de un baño dentro de la casa en la cual vivían él y sus padres. Les contamos que por lo general antiguamente los habitantes del Delta del Tigre de la Provincia de Buenos Aires, tanto los que vivían en la orilla del continente o en la isla, habitaban casas en donde los baños estaban construidos en los fondos de las viviendas.

Analicemos dos libros distintos que narran la misma historia que cuenta Rattin, pero que tienen diferentes matices de cómo sucedieron los hechos, y sin embargo ambos citan una entrevista que le realizaron a Rattin donde manifiesta cómo consiguió el dinero para construir su baño, y en ambas declaraciones hay marcadas diferencias que son producto de que la mente en los sujetos humanos con el paso del tiempo difiere la forma en que recuerda esos sucesos. Las declaraciones de Rattin en dos libros diferentes hablan sobre el mismo recuerdo.

En el libro “Antonio Ubaldo Rattin - El caudillo” del autor Alfredo Luis Di Salvo, la secuencia de que Boca Juniors comenzaba concentrar en el Hindú Club es igual a la declaración anterior, el presidente Riglos lo lleva hasta la casa y luego de allí seguirían hasta la concentración, pero nos centramos en el eje de la construcción del baño. Riglos le manifiesta mientras iban para el baño: “¿Che, pero esto es muy incómodo, cuando llueve y hace frío cómo hacen? –Y… nos arreglamos… Cuando tengamos plata lo vamos a construir adentro… (Rattin) –Hacé una cosa. Pedí un presupuesto de todo lo que haya que hacer en el baño y traémelo a la oficina; el club se hará cargo (Riglos). El presupuesto ascendió a la suma de 27.500 pesos, se realizaron todas las reformas y Boca pagó el gasto. Finalizados los trabajos Rattin se reunió con Riglos y luego de agradecerle, le preguntó. ¿Cómo me va a descontar el dinero? ¡Mire que gano poco…! (Rattin) –No se preocupe que no vamos a descontarle nada. Esa plata la consideraremos como la prima de este año (Riglos). Así sucedió. Sin haber firmado el contrato profesional, recibió la primera prima de Boca: 27.500 pesos”6.

Hermoso libro el de Alfredo Luis Di Salvo, recomendamos su lectura, claro está. Pero en materia metodológica omite citar en qué año entrevistó a Rattin, inclusive el libro salió publicado sin la fecha del año en que se imprime. Pasemos al otro libro.

En el libro “Esto es Boca - El oro y el barro” del autor Leandro Contento se lee: “Una tarde me estaba aplicando onda corta (terapia kinesiológica que ayuda a fortalecer los músculos) en la vieja sede de Boca. El presidente, Miguel De Riglos, me comentó que iba para la concentración en el Hindú Club y se ofreció a llevarme. Antes tenía que armar el bolso, así que le pedí si no podíamos pasar dos minutos por mi casa y seguíamos viaje, y así fue. Mientras yo preparaba todo él se quedó charlando con mis viejos en la vereda, le dieron ganas de orinar y mi papá lo hizo pasar al fondo. Esperó a irnos y cuando subimos al auto, me dijo: ‘Rata, pasá presupuesto que te hacemos el baño. Me aconsejó que encargara el juego completo, con inodoro, bidet, bañadera, azulejos y los caños para la conexión del agua caliente. ¡Un lujazo! El clu me dio una mano grande, pero al final todo el año ‘57 lo jugué para pagar la obra. No me olvido más: me costó 32.000 pesos”7.

El libro de Leandro Contento es bueno, interesante, simplemente en cuestiones metodológicas omitió poner citas al pie para poder ver en qué año fueron realizadas esas declaraciones de Rattin, por eso es muy importante a la hora de hacer libros de historia ser muy minuciosos para todos estos debates. Si no, los libros se convierten en narraciones históricas que son otra cuestión. El libro de Contento fue publicado en el año 2017, posterior al de Alfredo Luis Di Salvo, estimamos que es cercano al 2010, dado que Contento lo cita a este libro, pero no sabemos la declaración de Rattin de qué año es para establecer la edad de Rattin al ser entrevistado.

El libro de Di Salvo salió sin el año de publicación, como dije. Esos son errores garrafales para el trabajo histórico científico y en materia de metodología de la investigación. Pero repetimos, tanto el libro de Di Salvo como de Contento son dignos de ser tenidos en la biblioteca xeneize. Pero si nos centramos en los debate sobre la historia oral, vemos cómo una misma situación recordada con 10 años de diferencia puede variar un poco en los detalles en que la mente fracciona y trae al presente nuestros recuerdos.

En una ocasión recordó la cifra de 27.500 pesos y en otra de 32.000, imaginemos toda la biografía de un sujeto deportista, si se basa solamente en entrevistas, puede variar dependiendo el capital vital que tenga el sujeto al momento de ser entrevistado. No es lo mismo hacer la biografía del sujeto a los 40 años de edad, a los 50 años de edad o a los 70 años. No porque sea degradatoria la memoria con el paso del tiempo siempre, sino que dependiendo del estado de ánimo del sujeto y otras variables puede cambiar la forma en que la mente recuerda esos sucesos.

Inclusive si nos entrevistaran a nosotros con un lapso de 10 años a los 30 años de edad, a los 40, a los 50 y a los 60 años, sobre un acontecimiento de los 15 años de edad, iremos recordando la historia de manera muy distinta en cada entrevista.

Cerrando el ejemplo de Rattin, queremos que quede claro que Rattin es una gloria xeneize y no por citar este ejemplo se le resta grandeza a este sujeto que amó a Boca Juniors y fue admirado por el Jugador Nº12. “Rattin y Boca un solo corazón”, coreó por años la hinchada boquense… Nuestros honores a este prócer de La República de La Boca. Con respecto al debate de la historia oral, dejamos marcada nuestra posición sobre los libros que salen publicados sobre la historia xeneize y que solamente se basan en entrevistas.

Esperamos que estos debates metodológicos al menos les hayan interesado, para que cuando lean un libro, se pregunten al mejor estilo de un lector crítico, cuáles son las fuentes que manejaron esos autores o autoras, o ese autor e singular. Motivo por el cual debemos ir construyendo una masa de asociados y asociadas que conozcan la historia del xeneize en todos sus planos, no podemos permitir que haya socios de Boca Juniors que no sepan quién fue Benito Quinquela Martín por ejemplo, o muchos otros sujetos que fueron Leyendas Xeneizes, y en el plano cultural, y no nos referimos simplemente al plano dentro del club, sino también al espacio territorial cultural del Mundo Boca Juniors que comprende los territorios de La Boca, San Telmo, Barracas y La Isla Maciel, que son las zonas que durante 1953 más utilizaba el espacio xeneize. Nombrar a Quinquela Martín y no esgrimar un poema en su nombre es una falta de respeto en el paradigma cultural xeneize:

Expósito

“Carbonillo”

Nació desnudo

Se vistió de tela

Prestada por Quinquela

Inventó el humo

Jorobado de La Boca; y aunque

Juzguéis su gloria poca

y su pincel sencillo,

es inquilino eterno

de la bruma más loca

que un tango triste

azul y amarillo.

Poeta Seminara (Ciudad de La Plata)8

Lógicamente, todos los demás barrios porteños y de la provincia de Buenos Aires unas cuantas veces al año atravesaban las actividades culturales del club, recordemos que por ejemplo Daniel Gil, presidente de Boca durante casi todo el año 1953 hasta que en diciembre asume Alberto José Armando, ambos se domiciliaban por el barrio de Recoleta, o sea había asociados por toda la ciudad.

En esta serie de publicaciones que sacaremos desde Leyendas Xeneizes, pondremos siempre la forma en la cual nosotros entendemos nuestro marco conceptual de cómo se debe hacer historia xeneize, como verán más adelante, y algunas cuestiones que nos refuercen la pertenencia institucional con el club, como con nuestra cultura boquense. Como lo es el himno del club, entre otras cuestiones. Esperamos que les sea de agrado la lectura de esta obra, que está apuntada a inmortalizar sucesos históricos que sucedieron bajo la denominada historia de Boca Juniors, pero que no son temas deportivos, sino del eje cultural, pero no por eso dejan de ser temas históricos, la historia social es muy importante en el presente de la sociedades humanas dentro de este inicio del siglo XXI.

2 Chaponick, Héctor; “Historia de Boca Juniors”, Editorial Eyfel, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina, 1956. Fueron 2 tomos los publicados.

3 Pelegrino, Antonio Nilo, Rodríguez Ponziolo, Rubén H.; “Boca Juniors - Cien años de historia, pasión y gloria”, Lulemar Ediciones, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina, 2005, página 72.

4 Troisi Melean, J (2015). “Solo contra todos: Estudiantes de La Plata frente al peronismo”. En: Rein, Raanan, compilador. “La cancha peronista: fútbol y política (1946-1955)”. Universidad Nacional de San Martín, San Martín, Provincia de Buenos Aires, Argentina, pp. 158.

5 Martínez, Mario; “Reseña histórica, 1905-1970. En una ciudad de plata, un club de oro”. Manuscrito, s/f., página 20. (Mario Martínez era miembro de la Comisión Directiva en el momento en que presidía el ingeniero César Ferri, desde 1951 a 1952, cuando es depuesto por la intervención y luego de 1955 a 1957. Mario Martínez sería presidente del club en el período de 1970 a 1971).

6 Di Salvio, Alfredo; “Antonio Ubaldo Rattin - El caudillo”, New Press Grupo Impresor S.A., Avellaneda, Provincia de Buenos Aires, Argentina, S/D de año, página 68.

7 Contento, Leandro; “Esto es Boca - El oro y el barro”, Editorial Librofutbol.com, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina, 2017, página 37.

8 Poema escrito en la servilleta del bar Astro, ubicado en la Ciudad de La Plata, en el año 1975, durante una reunión en donde estuvo presente el socio y poeta Atilio Milanta.

Capítulo 1 Himno del Club Atlético Boca Juniors 9

Boca Juniors, Boca Juniors

Gran campeón del balompié

Que despierta en nuestro pecho

Entusiasmo, amor y fe.

Tu bandera azul y oro

En Europa tremoló

Como enseña victoriosa

Donde quiera que luchó.

Tu bandera azul y oro

En Europa tremoló

Como enseña victoriosa

Donde quiera que luchó.

Con tu enseña victoriosa

Que es de fuego y cielo azul

En la cancha se entusiasma

Nuestra fuerte juventud.

Electrizan tus colores

Viejo Boca vencedor

Y en los campos de combate

Es glorioso tu perdón.

Electrizan tus colores

Viejo Boca vencedor

Y en los campos de combate

Es glorioso tu perdón.

 

Recordando a Victoriano Caffarena: Para conocer la historia del himno de Boca Juniors, de la marcha, como se la denominaba allá en la primera mitad del siglo XX, tenemos que nombrar al Toto, a Victoriano Caffarena, quien además bautizó ese amor incondicional que sentimos socias y socias al seguir estos colores, en el deporte que sea y en las canchas que sean. Toto Caffarena le propuso a Ítalo que componga una marcha, un allegado a ambos, el periodista del barrio de La Boca Juan Ribatallada, también le propone a Ítalo Goyeneche que componga esa pieza musical10. A los días el músico la compuso y la lleva hasta la casa de Toto Caffarena, y una de las hermanas de Toto la toca en el piano, y fue maravilloso, dicen que se emocionaron todos los presentes en ese día del año 1926. En esta línea también lo encuentran los autores Daniel Palermo y Raúl Rodríguez en su libro ““Cancionero de Boca – La mitad más uno” publicado en el año 2016.

Luego, le tocó el turno al escritor renombrado de ese entonces Jesús Fernández Blanco11 para que le ponga la letra a la canción, y así sucedió. Fernández Blanco recorría el mundo tanguero de La Boca, San Telmo y Barracas, era un escritor de lo que hoy en día se denomina popular. No se lo encontraba por la calle Florida con Jorge Luis Borges y Bioy Casares, por ejemplo, tomando café, sino que andaba por otros espacios, esos espacios que forjaron la identidad de pueblo del xeneize.

Jesús Fernández Blanco, alias el Gallego Fernández como se lo conocía en el ambiente de la música, creador de la letra del himno del Club Atlético Boca Juniors12

.

Luego, por el momento sabemos que la primera vez que se tocó en público fue en el año 1928, acá hay dos versiones que difieren entre sí sobre el motivo que hubo para estrenar el himno públicamente, observemos ambas:

Según la historia oral, en un restaurante de La Boca, en ocasión de que se había disputado un partido con el equipo escocés Montherwell13, es donde oficialmente se tocaba la marcha xeneize, ante presencia de todos los vecinos14. El partido existió, el xeneize jugó con un equipo formado por algunos titulares y otros jugadores suplentes, ganó Boca Juniors por dos goles a 0. Y figura en el libro de Memoria y Balance del club. Se realizó el día 9 de junio de 192815. También es verdad que se agasajó a los jugadores escoceses con un lunch finalizado el encuentro, motivo por el cual apelando a la intuición y a la deducción podemos decir que muy posiblemente se haya tocado el himno de Boca Juniors en esa oportunidad.

C. A. Boca Juniors: M. Merello; L. Strada y R. Mutis; A. Amoia, M. Fleitas Solich y A. Ellí (Capitán); A. Bergamini, R. Sarco, D. Penella, E. Kuko y M. Evaristo.

Motherwell F. C.: A. Mac Clory; J. Little y W. Frame; J. Johnman, A. Craig y D. Tackeray; A. Mac Murtrie, J. Keenann, W. Mac Fayden, G. R. Ferrier.

Goles: Penella (BJ) y Kuko (BJ). Cancha: Boca Juniors. Árbitro: Servando Gómez. El puntapié inicial del partido lo dio el doctor Arturo Goyeneche, quien había sido especialmente invitado por la Comisión Directiva16.

En el libro de Memoria y Balance del club de La Ribera, se coloca con orgullo el triunfo ante un club escocés de los más antiguos de su territorio17

.

b) Una vez que se tuvo que recibir en el puerto de La Boca a cuatro futbolistas de Boca Juniors que habían integrado los juegos olímpicos en Amsterdan18 ese año19 y estaban regresando del viaje. Estos jugadores eran Ludovico Bidoglio, Domingo Tarascone, Segundo Médice y Roberto Cherro. Hasta ese entonces se había tocado en la casa de Toto, y ahí en el puerto. En este punto estos jugadores también viajaron a los juegos olímpicos, por ende también regresaron a La Boca en barco. Los juegos olímpicos se desarrollaron entre el 17 de mayo y el 12 de agosto, entendiendo que se tardaba unos 40 días promedio de viaje en barco desde Europa a La Boca, los jugadores de Boca Juniors regresaron entre el 12 de septiembre y el 20. Por lo tanto, si se tocó el himno acá en el regreso de estos jugadores también, nos queda como fecha más añeja la anterior versión de la historia oral, en el tercer tiempo ante el Motherwell F. C.

Es necesario también contar que el libro de Memoria y Balance del club hace mención a que “