El juego de la vida - Adriana Hernández Planillas - E-Book

El juego de la vida E-Book

Adriana Hernández Planillas

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Beschreibung

El tablero de ajedrez es una lúcida representación del juego de la vida. Hay logros que precisan avances pequeños y humildes, como los del peón; otros que solicitan pasos seguros y contundentes, como los de la reina. Hay pérdidas y retrocesos, pero también cambios de estrategia que nos devuelven el control de la partida, el poder sobre nuestro destino. En este libro, cada una de las 64 casillas del tablero nos ofrece una lección vital. - Estrategias para el éxito basadas en la inteligencia. - Anécdotas del mundo del ajedrez: las vicisitudes de los grandes jugadores, los torneos y partidas míticas. - Un sinfín de fábulas y leyendas que ejemplifican cada una de las enseñanzas de vida. - Ejercicios para la realización personal.Mueve pieza hacia la realización personal y el éxito. El arte de vivir en 64 lecciones.

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el juego DE LAv da

el juego de lav    da

adriana hernández planillas

el juego DE LAv    da

La sabiduría del ajedrez

aplicada a la vida cotidiana

Edición de Francesc Miralles

© del texto: Adriana Hernández Planillas, 2021.

© de la nota del editor: Francesc Miralles, 2021.

© de esta edición: RBA Libros y Publicaciones, S. L. U., 2021.

Avda. Diagonal, 189 - 08019Barcelona.

rbalibros.com

Primera edición: octubre de 2021.

ref.: obdo974

isbn: 978-84-9187-908-4

el taller del llibre, s.l.•realización de la versión digital

Queda rigurosamente prohibida sin autorización por escrito

del editor cualquier forma de reproducción, distribución,

comunicación pública o transformación de esta obra, que será sometida

a las sanciones establecidas por la ley. Pueden dirigirse a Cedro

(Centro Español de Derechos Reprográficos, www.cedro.org)

si necesitan fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra

(www.conlicencia.com; 91 702 19 70 / 93 272 04 47).

Todos los derechos reservados.

A todos los grandes maestros de la vida,por la luz que dan a este mundo.En especial a los que no tuvieron oportunidadesy, aun así, sembraron de generosidad el futuro.

A mis maravillosos padres, Andrés y Ana,al mayor regalo que me dieron: mi hermano Xavi,a mis abuelos Mariano Planillas y Encarnación del Fresno,

y a mis abuelos Andrés Hernández y Juana Díaz,por su confianza, su generosidad y su compañía,a mis tías Encar, Esther y María Jesús, por su apoyo y su entusiasmo.A la memoria de las dos J que me protegen:

mis tíos Julián y Javi.

El ajedrez es un espejo del alma.

Observa cómo un hombre juega y comprenderás su esencia.

miguel najdorf

11

CONTENIDO

Nota del editor15

El arte de vivir en 64 lecciones17

a1   El tablero de la existencia21

b1   Cuando te sacan de tus casillas25

c1   Blancas y negras: una supuesta ventaja29

d1   La Dama: el poder femenino33

e1   El Rey: un paso cada vez38

f1   El Alfil: la memoria de los elefantes42

g1   El Caballo: el arte de saltar dificultades45

h1   La Torre: en línea recta hacia tus objetivos48

a2   El Peón: kaizeny transformación52

b2   El Peón envenenado: no hay mal pequeño56

c2   Bobby Fischer: la audacia sin fronteras60

d2   Ajedrez en el país de las maravillas: la partida de Alicia66

e2   El turco: el autómata que venció a Napoleón70

f2   La victoria es trabajo de dos74

12 contenido

g2   El arte de las aperturas78

h2   Estar presente82

a3   Phiona Mutesi: aprender perdiendo86

b3   Sé auténtico y flexible92

c3   El caso Polgár: todos tenemos talento96

d3   Ten al menos un mal plan100

e3   La intuición es conocimiento 103

f3   La máquina como aliada107

g3   Una buena defensa es el mejor ataque112

h3   Capablanca y Alekhine: encontrar el equilibrio116

a4   Un trabajo de artesanos124

b4   El poder de la anticipación y la profilaxis127

c4   Boris Spassky: vivir tras el éxito y el fracaso131

d4   Gambito de Dama: el sacrificio que lleva al éxito136

e4   Las dos caras de la leyenda Judit Polgár140

f4   Descifrar el código144

g4   Garry Kaspárov: trabajar duro es un talento148

h4   El espíritu de principiante: shoshin153

a5   Dominar el medio juego157

b5   Magnus Carlsen y el pensamiento lateral161

c5   Los seis sombreros para pensar165

d5   Los récords de ajedrez169

e5   Anatoly Kárpov: estar en el lugar adecuado175

f5   A ciegas: el palacio de la memoria180

g5   Harry Potter y la física cuántica185

h5   Las fotografías mentales de Zsuzsa Polgár190

a6   El momento de pedir tablas194

b 13

b6   Fahim Mohammad: vivir al límite197

c6   El ajedrez como fenómeno global 202

d6   Viswanathan Anand y la inteligencia emocional206

e6   Para abrir camino (1): el ajedrez en la pantalla211

f6   Miguel Najdorf: la verdadera resilIencia218

g6   El ajedrez y el fútbol223

h6   Mijaíl Botvínnik: el maestro231

a7   La importancia de la empatía235

b7   Jessica Lauser:más allá de los sentidos238

c7   El ajedrez como terapia243

d7   El misterio del Rey Enigma248

e7   Para abrir camino (2): el ajedrez en la literatura253

f7   Arturo Pomar: suerte versusvoluntad259

g7   El ajedrez en el arte264

h7   Hou Yifan Y Wenzhe269

a8   Cuando conviene abandonar273

b8   Sé fiel a tus principios278

c8   El ajedrez y las matemáticas: la partida infinita283

d8   El juego del mañana288

e8   La música del tablero292

f8   Las siete etapas: de peón a Dama296

g8   El maestro en busca de sentido299

h8   Jaque mate: el ajedrez y la muerte303

Epílogo: El ajedrez como unión307

Bibliografía309

Agradecimientos313

15

Nota del editor

Me encontraba en una isla de México cuando tuve la primera conversación sobre este libro con su autora. Sabía que Adria-na era una apasionada del ajedrez, pero no imaginaba hasta qué punto había indagado en su historia y protagonistas para componer este manual de autoayuda, que es muy distinto a todos los que haya leído.

Me preguntó si quería hacer la edición del texto para ver cómo encajaban los temas ajedrecísticos con las partes de psicología y desarrollo personal. Estas últimas son mi espe-cialidad desde hace un cuarto de siglo, así que acepté con gusto.

En cuanto al juego en sí, debo reconocer que hasta leer este libro no había oído nunca hablar de Capablanca o de Alekhi-ne. Hasta este punto era ignorante del universo del ajedrez, al que jugué unas pocas veces siendo niño.

«No vas a entender nada», me dije al sumergirme en el texto con cierta reticencia y mucha curiosidad.

El juego de la vidame sorprendió ya desde los primeros capítulos. La autora ha encontrado la forma de conducirnos por los secretos del ajedrez sin necesidad de tener conocimien-to previo alguno. Resulta muy atractivo para un profano como yo, que ha aumentado su comprensión de este fascinan-te universo en un 10.000 % o más.

16 el juego de la vida

Además de los entresijos del juego, por sus páginas pasan los grandes protagonistas de torneos y partidas míticas. Y lo mejor de todo es que cada capítulo, además de centrarse en una cuestión del ajedrez, tiene una dimensión práctica para el arte de vivir, incluyendo un ejercicio final.

Son64capítulos, tantos como casillas tiene el tablero, tru-fados de anécdotas sorprendentes, referencias literarias y con-sejos prácticos para realizarnos. En suma, un libro de auto-ayuda para gente inteligente.

Felicito a su autora por un trabajo tan exhaustivo y ex-traordinario, e invito al lector a dejarse llevar por el juego de la vida, ya que, además de iniciarse de forma muy amena en la historia del ajedrez, aprenderá valiosas estrategias para mane-jarse en el tablero de la existencia.

francesc miralles

17

El arte de vivir en 64 lecciones

Este manual es distinto a cualquier otro que hayas tenido en las manos porque aúna el juego más fascinante del mundo con el arte de vivir. Desde que jugué mi primera partida, hacia los seis años, con mi abuelo, siempre pensé que lo que sucedía en el tablero era como un cuento, una fábula que van creando dos jugadores.

La mayoría de las fábulas tienen un mensaje, a veces, incluso una lección secreta, y justamente esta es la misión de este libro: trasladar a la vida cotidiana la sabiduría del ajedrez.

En la célebre película El séptimo sello, el caballero cruza-do que interpreta Max von Sydow se juega su alma en una partida de ajedrez contra la Muerte. Sin necesidad de poner-nos tan lúgubres, si llevamos nuestros movimientos en la vida a un tablero de ajedrez, lo que está en juego es nuestro destino.

El futuro no es un escenario lejano que solo los oráculos pueden anunciar. Es la suma de muchas pequeñas causas y efectos que parten de uno mismo. Cada uno de nuestros movimientos tiene sus consecuencias, y, a su vez, estas pro-vocan reacciones y nuevas acciones, generando el efecto ma-riposa.

Justamente de eso va también el ajedrez. Se dice que el ni-

18 el juego de la vida

vel de un maestro se puede medir por la cantidad de movi-mientos que puede prever, suyos y de su contrincante.

Trasladado a la vida, las personas que van a la deriva son aquellas que no son conscientes de las consecuencias de sus actos, ni para ellas ni para los demás. Digamos que son ju-gadores de nivel 0. El arte de vivir consiste en comprender todos los mecanismos —favorables o perjudiciales para nuestros intereses— que activamos cada vez que movemos pieza.

De esto trata este libro.

Una película, un libro y un juego

Aunque el ajedrez siempre ha sido una pasión para mí, como lo son la filosofía y la literatura, reconozco que nunca me habría animado a escribir este libro de no haber visto la se-rie Gambito de Damaen los meses sombríos del confina-miento.

Beth Harmon, la protagonista de la serie, me fascinó desde el primer capítulo y, aunque nunca he caído en adicciones, me identifico con ella en muchas cosas. Su primera partida con el bedel, en el subterráneo del internado, me recordó mucho a la primera que jugué con mi abuelo.

Es sorprendente —y una buena noticia para la humani-dad— que una serie sobre ajedrez haya cosechado tanto éxi-to. Sin duda, la interpretación de Anya Taylor-Joy tiene mu-cho que ver con ello. Pero, más allá de su carisma, este juego siempre ha estado en nuestro imaginario porque lo relaciona-mos con la inteligencia, la estrategia y la paciencia, tres valo-res más que necesarios en los tiempos que corren.

Tras disfrutar de la serie, quise leer el libro para ahondar un poco más en la historia que cuenta. Gambito de Damaadapta la novela homónima de Walter Tevis, quien basa las drogodependencias de Beth en su experiencia personal.

El arte de vivir en 64 lecciones 19

Además de ese componente autobiográfico, se cree que el autor pudo basarse también en Bobby Fischer, quien aprendió ruso con el único objetivo de entender las revistas soviéticas de ajedrez que quería estudiar.

Ellas también juegan (y muy bien)

El hecho de que la protagonista sea una chica, en lugar del típico genio masculino, no es ninguna casualidad. Aunque no fue hasta el siglo xixcuando en los Países Bajos se fundaron los primeros clubes de ajedrez exclusivos para mujeres, la in-corporación de la mujer al rey de los juegos es una realidad desde hace ya un siglo.

La primera en romper el techo de cristal fue Vera Menchik, que de muy joven entró con fuerza en los torneos masculinos. Su muerte temprana en Londres, al ser alcanzada por una bomba alemana en la Segunda Guerra Mundial, truncó su carrera.

Y si hablamos de campeonas, es indispensable mencionar, en tiempos más recientes, a la húngara Judit Polgár, que con solo quince años ya era gran maestro internacional. En 2002, derrotó a Kaspárov y fue la primera vez en la historia que una mujer ajedrecista ganó al número uno del mundo.

Existen muchas similitudes entre esta ajedrecista y el per-sonaje de Beth, aunque la novela se publicó en 1983, cuando Polgár tenía solo siete años.

Pero basta ya de introducciones.

Vamos a jugar con las piezas y situaciones que encontra-mos en el juego. Las he agrupado en 64lecciones porque son las casillas que hay en el tablero.

Como decía Beth Harmon en la serie: «Es todo un mundo en solo 64cuadrados. Me siento segura en él. Puedo contro-larlo, puedo dominarlo y es predecible. Así que, si me hago daño, solo me tengo a mí misma para culparme».

20 el juego de la vida

Deseo que estas inspiraciones, además de ayudarte a com-prender y amar mejor el juego, te enseñen a encontrar salida a los conflictos y desafíos de la vida, además de desarrollar tu talento e intuición innatos.

¡Empieza la partida!

adriana hernández planillas

21

a1   El tablero de la existencia

El diseño del tablero de ajedrez ha trascendido el juego. Lo encontramos en algunos embaldo-sados, en la bandera de salida de la fórmula 1o —sustituyendo el negro por el rojo— en el escudo de Croacia, entre muchos otros lugares.

A mí me hace pensar en el Yin y el Yang, en una pugna entre la luz y la oscuridad. Esa lucha existe dentro de cada persona, ya que somos capaces de lo mejor y de lo peor.

Volviendo al tablero, no se sabe exactamente cuándo sur-gió tal como lo conocemos hoy en día, pero su antecedente más antiguo es el chaturanga, un juego indio del que tenemos constancia ya en el siglo iii a. C.

De hecho, una de las fábulas más famosas sobre la crea-ción del tablero de ajedrez se remonta a los siglos vo vi. Se cuenta que el rey indio Shirham pidió a uno de sus sabios, Sissa ben Dahir, que inventara un pasatiempo para paliar su aburrimiento. El sabio le presentó un juego de guerra sobre un tablero de madera con las casillas que hoy conocemos.

Lleno de agradecimiento, el rey le ofreció como recompen-sa aquello que desease. El sabio le pidió entonces un grano de trigo sobre el primer recuadro del tablero, dos sobre el segun-do y así sucesivamente, doblando en cada casilla la cantidad. Al rey le pareció una cantidad modesta y accedió. Sin embar-

22 el juego de la vida

go, al calcular el resultado, supo que la cantidad ascendía a 18.446.744.073.709.551.615granos.

¡No existía tanto trigo en todo el reino! El sabio, satisfe-cho por la lección matemática y la felicidad procurada al rey, renunció a su retribución.

Fábulas aparte, se sabe que aquel primer juego de la India llegó a Persia y al mundo árabe a principios del siglo vii, don-de acabaría cristalizando en el ajedrez que conocemos ahora. En la Ruta de la Seda, durante el largo viaje, el tablero y sus piezas servían de entretenimiento a los mercaderes, que aca-baron llevando el juego a sus países de origen.

Hoy en día, el tablero más antiguo que se conserva es el que el califa Harún al-Rashid regaló a Carlomagno en el si-glo ix. Está en la Biblioteca Nacional de Francia.

DE LA GARRIGA A LAS ESTRELLAS

Los tableros que aparecen en Gambito de Damase fabrican en España, más concretamente en La Garriga, un pequeño municipio situado a unos 50 kiló-metros de Barcelona.

El nombre de la empresa es Rechapados Ferrer. Y lo más curioso es que su director, David Ferrer, no se enteró hasta que se lo comentó un amigo que estaba viendo la serie.

Se trata de una compañía modesta, con doce empleados en plantilla, pero antes del éxito de Netflix ya tenía pedidos en todo el mundo. Lógicamente, la serie ha catapultado aún más las ventas del modelo Noguera Standard, que aparece en los primeros capítulos, aunque la joya de la corona es el tablero con el que Beth Harmon se enfrenta a Vasily Borgov en Moscú, que incluye un ribete interior.

Es tal el volumen de pedidos que actualmente no hay stock, y se han con-vertido en piezas de coleccionista.

a1 el tablero de la existencia 23

Juego interior y juego exterior

Antes de poner las piezas sobre el tablero, este elegante diseño de zócalos blancos y negros tiene algo que decirnos sobre el campo de juego de la vida: tus posibilidades son infinitas, pero cada decisión la tomas tú. No hay otro destino que el que creas con tus movimientos. De hecho, en su origen, el juego ancestral hindú se utilizaba para enseñar el arte de go-bernar y defender.

En ese sentido, el ajedrez no deja de ser una versión eleva-da al infinito de los populares libros de Elige tu propia aven-tura. ¿Te acuerdas? Empezabas a leer y al final de cada capí-tulo tenías dos o tres opciones. Según la que escogías, te mandaba a una página determinada, donde la aventura pro-seguía por un determinado camino para que volvieras a deci-dir al final del capítulo. Una decisión acertada te llevaba a un final feliz, y la más desafortunada podía conllevar la cárcel o incluso la muerte.

Sin llegar a estos extremos, el mensaje del tablero de 64casillas, de la partida por empezar, es que eres responsable de lo que te sucede. En el ajedrez cada movimiento acarrea con-secuencias, y lo mismo ocurre en la vida. Lo que sucede no es fruto del azar, sino de las semillas que hemos ido sembrando por el camino.

El tablero contiene todas las posibilidades, igual que la vida, y nuestra fortuna depende de la inteligencia con la que realizamos nuestros movimientos. A lo largo de este libro, los mejores maestros y maestras de este arte van a darnos valio-sos consejos al respecto.

Ya llegaremos ahí, pero antes de ir al ejercicio —hay uno para cada capítulo del libro—, quiero señalar algo importan-te: nuestro juego exterior es un reflejo de nuestro juego inte-rior. Ya lo decía el Kybalión, para algunos el libro más anti-guo de la humanidad: como es afuera es adentro.

Las personas que chocan continuamente contra el mundo,

24 el juego de la vida

siempre enzarzadas en conflictos con los demás, en realidad no están en paz con ellas mismas. Como no son capaces de resol-ver sus guerras interiores —sus complejos, inseguridades o traumas del pasado—, las trasladan afuera y buscan culpables.

Contra este desgobierno, uno de los requisitos para mo-vernos bien en cualquier ámbito de la existencia es trabajar el juego interior: dejar de culpar al mundo, perdonar y perdo-narnos, hacer las paces con nosotros mismos y actuar en lugar de preocuparnos. Esto nos dará la serenidad necesaria para lograr grandes partidas en el tablero de la vida.

Como decía Lao Tse hace dos milenios y medio: «Quien ob-tiene una victoria sobre otra persona, es fuerte; pero quien obtiene una victoria sobre sí mismo, es poderoso».

EJERCICIOEl juego de los errores

Cuando Beth Harmon pierde su primera partida en un cam-peonato, luego reproduce los movimientos realizados en su propio tablero. Quiere entender dónde falló para no volver a caer en la misma trampa.

No se trata de culpabilizarnos, sino de evolucionar. Para ello te propongo que revises tu vida y determines cuál ha sido tu último GRAN ERROR, respondiendo a continuación estas preguntas:

1. ¿Cuál fue tu parte de responsabilidad en este hecho?

2. ¿Qué motivó que actuaras de forma poco inteligente?

3. ¿Qué has aprendido de esta equivocación?

4. ¿Cómo actuarás en adelante, en una situación similar?

Si practicas este ejercicio cada vez que te equivoques, no tardarás en alcanzar la maestría en el juego de la vida.

25

b1   cuando te sacan de tus casillas

En muchas ocasiones en que algo o alguien nos hace perder la paciencia, le espetamos que nos «saca de nuestras casillas». ¿Tiene algo que ver esto con el ajedrez?

Atendiendo a lo que José María Iribarren expone en su li-bro El porqué de los dichos, el origen de esta expresión pro-cede del juego backgammon, que en España también recibe el nombre de «chaquete» o «tablas reales».

Este juego era muy popular antiguamente, en especial en-tre los nobles, que solían enfrentarse a sus sirvientes. Cuan-do una de las fichas caía en una de las casillas que ocupaba el sirviente, se la echaba fuera, haciendo que el lacayo tuvie-se que empezar desde el principio. De ahí la impotencia y el enfado de estos. Literalmente, «les habían sacado de sus ca-sillas».

Las casillas del backgammon son huecos en forma de pun-ta donde se alojan las piezas circulares, en contraposición con el ajedrez, cuyo tablero es liso y la pieza no se saca literalmen-te de su sitio, sino que se desplaza.

26 el juego de la vida

b1 cuando te sacan de tus casillas 27

constituir la religión de las seis caras, que aplicará también en su consulta psiquiátrica.

Elegido en su momento por la BBC como uno de los cin-cuenta libros más influyentes de los últimos cincuenta años, la novela se abre con una cita de El libro del dado:«Al principio fue el azar... y el azar estaba con Dios y el azar era Dios. Esta-ba con Dios desde el principio. Todas las cosas fueron hechas por el azar y sin él nada de lo hecho habría sido hecho. En el azar estaba la vida y la vida era la luz de los hombres».

Sin llegar a entregarlo todo al azar, como hace el hombre de los dados, para romper con la fijación del control sobre nuestra vida, podemos introducir de vez en cuando una deci-sión aleatoria, como...

• Ver una película de la que no sabemos nada, solo porque el título nos intriga.

• En la sección que te interese de una biblioteca, elegir un libro con los ojos cerrados y leer al menos un par de capítulos.

En ambos casos, intenta ver luego si hay mensajes en estas elecciones «al azar» para tu vida cotidiana.

EJERCICIODime qué te saca de tus casillas y te diré cómo eres

En la vida, como ocurre con el backgammon, todo parece estar dispuesto para que nos saquen una y otra vez de nues-tras casillas. Sin embargo, aquello que nos pone más nervio-sos a menudo oculta una importante pista para progresar.

Lo que más nos molesta en los demás suele ser algo pendiente de resolver dentro de nosotros mismos. Por ejemplo, las personas tacañas suelen ser muy conscien-

28 el juego de la vida

tes de la tacañería de los demás, mientras que alguien muy generoso no se dará cuenta de que hay alguien en un grupo que nunca paga la cuenta.

Siguiendo esta lógica reveladora, te propongo que es-cribas tres situaciones que suelen sacarte de tus casillas:

1. ...

2. ...

3. ...

A continuación, pregúntate hasta qué punto tienes el mismo problema y qué puedes hacer para resolverlo.

29

c1   Blancas y negras: una supuesta ventaja

Una de las eternas discusiones sobre el juego que inspira este libro es la llamada «ventaja de salida», ya que el jugador que tiene las blancas hace el primer movimiento.

La mayoría de los jugadores coinciden, por lo general, en que esa salida da ventaja a las blancas. Pero ¿es suficiente para ganar? Depende del jugador. De hecho, sobre el tablero, un juego perfecto por las dos partes debería implicar tablas.

Sí es cierto que un error por parte de las negras tiene más consecuencias que por parte de las blancas, que solo perde-rían su iniciativa inicial. El privilegio de las blancas, además, supone una ventaja informativa para su contrincante, ya que revela sus intenciones primero, permitiendo que las negras re-accionen sobre la base de la estrategia del oponente.

¿Y qué dicen las estadísticas? Los datos compilados desde 1851hasta nuestros días dan un porcentaje de victorias a las blancas de entre un 52% y un 56%, cifra que se incrementa a medida que mejora el nivel de juego. El beneficio es menor en partidas de ajedrez rápido y entre jugadores no expertos, cuyos errores no harían de esta ventaja un factor decisivo.

En su libro Cómo la vida imita al ajedrez,1Garry Kaspárov

1. Kaspárov, G., Cómo la vida imita al ajedrez, Madrid, Debate, 2020.

30 el juego de la vida

señala que la ventaja de las blancas es significativa, sobre todo en el juego de élite, donde permite que estas «presionen y amenacen» la posición de las negras.

La regla de que las blancas mueven primero es mucho más reciente de lo que parece. A mediados del siglo xix, esta prác-tica aún no estaba fijada. Serían los dos primeros campeones del mundo, Wilhelm Steinitz y Emanuel Lasker, quienes em-pezarían a decir en sus obras que las blancas tenían el primer movimiento.

EL COLOR DE LAS CASILLAS

Las casillas del ajedrez no siempre han sido blancas y negras. Como señaló Howard Staunton —campeón del mundo no oficial entre 1843 y 1851—, en los primeros tableros no había ninguna diferencia de color.

De hecho, en los escritos antiguos de ajedrez se hace referencia al rojo y al negro, porque esos eran los colores de tinta que estaban disponibles para pintar a mano o imprimir los cuadros.

Vivir con negras

La ventaja del primer movimiento tiene una clara traducción en la vida. Mover primero es como causar una buena impre-sión: una ventaja que antecede al juego mismo. Como decía Oscar Wilde: «Nunca hay una segunda oportunidad para cau-sar una buena primera impresión».

La importancia de la «apertura» está presente también en la vida. En el juego medio —a medida que avanzamos hacia nuestro objetivo—, se empieza a revelar la importancia de las primeras decisiones. Como decía Steinitz: «La acumulación de pequeñas ventajas lleva a una supremacía considerable».

c1 blancas y negras: una supuesta ventaja 31

Si observamos el punto de partida existencial de distintas personas, está claro que algunas empiezan a vivir «con ne-gras». Nacer en una familia disfuncional o sin recursos, o haber sufrido violencia física o psicológica en la infancia, su-pone una desventaja a la hora de jugar el torneo de la felici-dad. Sin embargo, no es en absoluto decisivo, al igual que las negras ganan casi la mitad de las partidas.

Tal como vimos en el capítulo anterior, hay personas de bue-na cuna, con una familia complaciente, un físico agradable se-gún los estándares, estudios de élite y buena salud que llevan vidas miserables. No les sirve de nada jugar con blancas.

En el extremo opuesto, las personas resilientes saben con-vertir sus inicios en mera anécdota, ya que para ellas no cuen-ta de dónde vienen, sino adónde van. Tres ejemplos:

• Ralph Lauren era un chico humilde del Bronx que, mientras trabajaba de dependiente vendiendo corbatas, se preguntaba si no podrían hacerse diseños más boni-tos. Hoy, además de ser un icono de la moda, es una de las personas más ricas del mundo.

• Oprah Winfreycreció en una familia pobre de Misisipi, pero luchó para obtener una beca que le permitiera ir a una universidad estatal. Con diecinueve años era la pri-mera corresponsal afroamericana de su estado. Hoy es la persona más exitosa de los medios de comunicación mundiales.

• Román Abramóvich se quedó huérfano a los cuatro años y tuvo que criarse con la familia de un tío que vivía en una región rusa del Ártico. De muy joven empezó a idear juguetes de plástico, y este modesto negocio financió la aventura de lo que acabaría siendo la cuarta mayor pe-trolera del mundo.

32 el juego de la vida

EJERCICIOTu día perfecto

Olvídate de si abriste juego con blancas o de si llegaste a este mundo jugando con negras. Lo que importa, como en los ejemplos que acabamos de ver, es lo que piensas hacer con el resto de tu vida. Para ello, hay una práctica muy uti-lizada en el coachingque consiste en imaginar —por ejem-plo, a cinco o diez años vista— cómo sería tu día perfecto.

Sé lo más específico posible:

1. Imagina dónde vives. En qué ciudad y en qué tipo de casa. Allí es donde te levantas para iniciar tu día per-fecto.

2. Visualiza lo que haces a lo largo de la mañana. Con quién desayunas, tus tareas para empezar el día, tu rutina en esa jornada ideal.

3. A lo largo del resto día, decide las actividades que emprendes, tus reuniones y encuentros, etc.

4. Termina recreando el final de tu jornada.

Una vez clarificas cómo sería tu día perfecto, tienes ya una meta. Lo siguiente es dar, un día tras otro, pequeños pasos que te llevarán a la situación que anhelas.

33

d1   La Dama: el poder femenino

Cuando preparaba la estructura de este libro y deci-dí numerar los capítulos siguiendo el orden de las casillas, me dije que debía respetar la posición natu-ral de las piezas. Al fin y al cabo, cuando un aficio-nado o un gran maestro piensa en d1, la pieza que ve es la Dama.

También tiene sentido empezar con la Dama y su poder, teniendo en cuenta la inspiración de este libro. De la apertura que da nombre a la novela de Walter Tevis y a la serie habla-remos en el capítulo d4.

Esta pieza, además, tiene una historia interesante.

En el chaturanga—el antecesor del ajedrez del que habla-mos en el primer capítulo— no existía la Dama tal como la conocemos hoy. Entonces era el firzano firzquien ocupaba su lugar, y simbolizaba al consejero real. Sería durante la Edad Media cuando la Dama comenzaría a sustituirlo. Esto coincidió con el reinado de Isabel I de Castilla, por lo que es posible que otras reinas influyesen en la inclusión de esta figura femenina.

La Dama (D) es una de las piezas mayores del juego y la de mayor valor absoluto, valorada con nueve puntos. Se mueve en cualquier dirección, combinando los movimientos de la Torre y el Alfil, por filas, columnas y diagonales.

34 el juego de la vida

Se utiliza, sobre todo, en el medio juego del ajedrez.1A me-dida que quedan menos piezas en el tablero, la Dama se vuelve más valiosa. Por eso mismo, su sacrificio suele darse a cambio de otra Dama o en posiciones que determinan el resultado de la partida. Los finales de partida con la Dama oponente en el tablero entrañan bastante dificultad, debido a su capacidad de movimiento y a la posibilidad de jaque perpetuo. Al igual que ocurre con la Torre, es capaz —con ayuda del Rey— de ganar una partida contra un Rey soli-tario.

No olvidemos que puede haber más de una Dama de un color en el tablero a consecuencia de la coronación de un peón. De eso hablaremos más adelante.

LA PARTIDA DEL SIGLO

Si hay algún momento de la historia del ajedrez en el que el sacrificio de la Dama emociona y fascina es en la denominada Partida del Siglo. Se disputó el 17 de octubre de 1956, durante un torneo en Nueva York, entre Bobby Fischer —por aquel entonces, con apenas trece años y jugando con ne-gras— y Donald Byrne.

Sucedió en el movimiento diecisiete. En vez de poner a salvo su Dama, Fis-cher la ofreció para sacrificarla e hizo historia.

Tan solo dos años después se convertiría en el gran maestro más joven del mundo, a la edad de quince años. Era el principio de una leyenda.

1. El medio juego es la fase del juego que empieza tras la apertura. En ella, se desarrollan los acontecimientos más importantes de la partida: ata-que, defensa, maniobras posicionales, etc.

d1 la dama: el poder femenino 35

Reina de la autoestima

La Dama es a su vez escudo y espada. Se trata de la figura más poderosa y decisiva, ya que protege a la pieza de la que depen-de el destino final de la partida: el Rey.

Pero ¿qué podría simbolizar la Dama en la vida real? Para mí, encarna la autoestima, que por algo es una palabra femenina.

Arrastramos un lastre de siglos en los que el valor de la mu-jer era fijado por hombres, a no ser que fueras la monarca de un país. La mujer considerada deseable veía elevado su auto-concepto, mientras que la que no suscitaba la apreciación mas-culina se sentía poca cosa. El aún elevado índice de parejas disfuncionales es fruto de esa falsa creencia. La felicidad pro-viene de ti y es la consecuencia de amarte, seas mujer u hombre. Nadie más puede ser responsable de tu felicidad.

En este sentido, la escritora y activista Eleanor Roosevelt afirmaba: «Nadie puede hacerte sentir inferior sin tu consen-timiento».

Con ello quería decir que, para sentirte menospreciado o infravalorado a causa de la visión de otros, primero hay que entregarles ese poder. Cuando la Reina es libre de la opinión de los demás y despliega su poder en las casillas de la vida, ninguna pieza puede hacerle sombra. Ni siquiera el lento Rey, que se mueve en las mismas direcciones, pero solo una casilla cada vez y temiendo siempre por su vida.

Una Reina empoderada toma conciencia de todo lo que es capaz de hacer, de sus dones y sus pasiones. La pintora mexi-cana Frida Kahlo lo resumía así: «Enamórate de ti, de la vida. Y luego de quien tú quieras».

La autoestima es determinante en la partida de tu vida. Y, como ocurre con la coronación del peón en Dama, nunca es tarde para recuperarla.

Volviendo a la serie televisiva, Magnus Carlsen —desde 2013, actual campeón del mundo— la calificó como «extre-

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madamente agradable» y elogió la última partida de Harmon contra Borgov, cuando ella sacrifica la Dama a pesar de tener otras maneras de ganar.

Ese sacrificio tiene fuerte carga simbólica. Si Beth ha gana-do es porque ha recuperado la confianza en sí misma. La en-trega de la Dama en ese momento de su carrera y de su vida es una reafirmación de su poder.

EJERCICIOEl test de la autoestima de Álex Rovira

Coautor de La buena suerte, entre muchos otros éxitos in-ternacionales, este referente de la formación humanística anima a los alumnos que ingresan en su escuela digital a medir su autoestima con este test* que quiero compartir contigo:2

1. Cuando acudes a un acto social, tu actitud es de...

a) Discreción, te gusta pasar desapercibido.

b) Te acercas solo a las personas que conoces.

c) Hacer con gusto nuevas amistades y relaciones, no te supone problema alguno.

2. Si te encuentras ante alguien con un enorme talento...

a) Te sientes muy poca cosa, no puedes evitar com-pararte.

b) Piensas que tiene suerte de ser así, te causa admi-ración.

c) Procuras trabar amistad, seguro que puedes apren-der de ese genio.

* Fuente: «12pasos para la autoestima» (Escuela Humanista Digital de Álex Rovira).

d1 la dama: el poder femenino 37

3. En tu trabajo se rumorea que eres la persona elegida para un ascenso. Tu actitud es...

a) Te pones muy nervioso. Tienes el síndrome del im-postor.

b) De sorpresa, tal vez has tenido un golpe de suerte.

c) Sientes alegría por poder demostrar tu capacidad en el nuevo cargo.

4. En el campo del amor, siempre que te ha gustado alguien...

a) Casi siempre lo has callado, convencido de que no tenías ninguna posibilidad.

b) Has esperado a recibir una señal de que se ha fi-jado en ti.

c) Has dado un paso adelante para ver si tu senti-miento es correspondido.

5. Al pensar en el futuro...

a) Sientes miedo e incertidumbre. El mundo está muy mal.

b) Lo ves un 50 % fruto de las circunstancias que se den y un 50 % de lo que tú hagas.

c) Sabes que depende casi enteramente de ti, de lo que estás haciendo momento a momento.

VALORACIÓN: cada (a) computa 0, la (b) 1 punto y la (c) 2 puntos.

De 0 a 4 puntos supone un suspenso en autoestima, pero tienes mucha capacidad de crecimiento.

De 5 a 7 puntos tienes un nivel de autoestima aceptable o incluso notable. Tu misión debe ser subir nota.

De 8 a 10 puntos. Tienes una gran autoestima. Tienes herra-mientas para ayudar a otros a alcanzarla.

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e1   El Rey: un paso cada vez

El Rey es el fundamento mismo del ajedrez, la pieza más importante. Su captura es el único objetivo del juego. Su valor es incalculable, aunque los programas informáticos le otorgan un valor arbitrario que puede llegar al millón de puntos.

Fueron los persas quienes adaptaron el nombre a su jefe de Estado, el sah o shah, lo que originó la expresión «jaque mate», Shah Mat, literalmente «el rey emboscado». En los niveles de élite, los jugadores no están obligados a anunciarlo, aunque es una práctica muy habitual entre aficio-nados.

El Rey (R) no puede permanecer bajo la amenaza de las piezas del contrincante en ningún momento. En caso de ata-que, retrocederá para protegerse.

Su movimiento es limitado. Aunque puede moverse en ho-rizontal, vertical o diagonal, solo puede desplazarse un esca-que cada vez.

Eso sí, solo esta pieza puede realizar el movimiento cono-cido como «enroque». También es la única ocasión en la que se pueden mover dos piezas a la vez: el Rey y una de las Torres, que se intercambian posiciones. Pero el enroque no puede lle-varse a cabo siempre. Deben cumplirse las siguientes reglas:

e1 el rey: un paso cada vez 39

• Que el Rey y la Torre nunca se hayan movido.

• Que los escaques entre ellos estén desocupados.

• Que el Rey no esté en jaque.

• Que ninguno de los escaques por los que pase o se quede esté bajo ataque.

UNA ANÉCDOTA SOBRE EL ENROQUE

En la vigésimo primera partida del Torneo de Candidatos de 1974, celebrada en Moscú, que enfrentaba a Víktor Korchnói y Anatoly Kárpov, ocurrió algo curioso. Antes de hacer la jugada número 18, Korchnói llamó al árbitro para preguntarle si podía enrocar estando su Torre amenazada.

Leontxo García —periodista español especializado en ajedrez— señala: «[...] la probabilidad de que Korchnói no recordase que su enroque era legal es pequeñísima. Por tanto, la interpretación lógica es que, al ver que con esa jugada obtenía ventaja ganadora, quiso regodearse antes de hacerla y aumentar el dolor del golpe que Kárpov estaba a punto de recibir».

Esta fue una de las derrotas más dramáticas de la carrera de Kárpov, a pesar de que terminó ganando el torneo.

En el juego final, la escasez de piezas permite al Rey huir del jaque con facilidad. Es conveniente llevarlo hacia el centro del tablero, donde podría aplicar «el tenedor», la táctica para atacar a dos o más piezas oponentes al mismo tiempo, esperando una ganancia de material al capturar una de ellas.

Cuando el Rey se encuentra solo en el tablero, sin otra pieza de su color, se habla de «Rey solitario».

40 el juego de la vida

Rey y kaizen

Esté en soledad o protegido por el resto de las piezas, ¿qué simboliza el Rey en la vida? En este caso está muy claro. El Rey eres tú. Sin ti, no hay juego.

Moverse escaque a escaque podría encarnar una manera de ir paso a paso, la esencia del kaizen, el arte japonés de la mejora continua a la que dedicaremos más espacio en el capí-tulo dedicado al peón. Tal como lo define Masaaki Imai: «La esencia del kaizenes que no debería pasar un solo día sin al-guna clase de mejora».

Veamos otros principios de este referente en la filosofía del progreso diario que ha encumbrado fábricas como Toyota, pero que cada persona puede aplicar a su realidad cotidiana:

• La complacencia es el enemigo del progreso.

• Solo puedes avanzar si eres capaz de reconocer cuál es el problema por superar.

• Cada vez que resuelves un problema, aparecen otros diez (la mejora continua es un camino de crecimiento sin fin).

• No existe la solución perfecta, todas son provisionales.

• No puedes aplicar el kaizenuna o dos veces y esperar resultados de inmediato. Se trata de un proceso a largo plazo.

EJERCICIO¿En qué eres el Rey?

«El Rey», la ranchera escrita por José Alfredo Jiménez, es todo un clásico del folclore mexicano e incluye, sin pre-tenderlo, la filosofía del kaizenque hemos visto en este capítulo:

e1 el rey: un paso cada vez 41

Me dijo un arriero

Que no hay que llegar primeroPero hay que saber llegar.

Visión a largo plazo como alternativa a la velocidad.

Y si nos detenemos en el fragmento más célebre de esta letra, dice:

No tengo trono ni reina

Ni nadie quien me comprenda

Pero sigo siendo el rey.

Así se puede sentir alguien en el proceso de reconocerse y definir cuál es su marca personal.

Una ley fundamental del marketing es que debes ser el rey de tu categoría. Y, si no lo eres, tendrás que inventar una nueva categoría donde sí puedas reinar.

Por ejemplo, si no puedes ser el mejor diseñador de pá-ginas web porque hay ya mucha competencia, tal vez pue-das ser el mejor diseñador de páginas web de ajedrecistas, por poner solo un ejemplo de especialización.

¿En qué eres el rey?

Encuentra un nicho en el que puedas ser el mejor, coró-nate en esa categoría y házselo saber al mundo.

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f1   El Alfil: la memoria de los elefantes

El Alfil es otra figura con una historia interesante. No formaba parte del chaturanga, sino que fue incluido más tarde, aproximadamente en el siglo xii.

El significado de alfilen árabe es «elefante», ya que originalmente representaba la tropa a lomos de elefan-tes, aunque, a partir de la Edad Media, el diseño recuerda a la mitra que utilizaban los obispos de la época.

El valor de esta pieza equivale a tres peones. Se mueve en diagonal, no puede saltar piezas y captura ocupando el