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"Equilibrio Interior" es un viaje profundo hacia la paz mental y el bienestar emocional, que explora las técnicas de la psicología positiva y el autoconocimiento. A través de este libro, los lectores serán guiados en el proceso de sanar heridas pasadas, disfrutar del presente y construir un futuro próspero, mediante la provisión de herramientas prácticas para superar la ansiedad y el estrés. El enfoque principal es fomentar un equilibrio duradero y una vida plena.
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Seitenzahl: 170
Veröffentlichungsjahr: 2024
NATALIA DI DOMÉNICO
Di Doménico, Natalia Estabilidad emocional : el arte de vivir en paz mental / Natalia Di Doménico. - 1a ed - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Autores de Argentina, 2024.
Libro digital, EPUB
Archivo Digital: descarga y online
ISBN 978-987-87-5046-0
1. Desarrollo Personal. I. Título. CDD 158.1
EDITORIAL AUTORES DE [email protected]
AUTOESTIMA
TU VOZ INTERIOR
CREENCIAS
AUTOESTIMA 2
EL MIEDO
LA CULPA
ACEPTACIÓN
INTELIGENCIA EMOCIONAL
ESTRÉS
CREES CREAS
EL ÉXITO NO LLEGA POR CASUALIDAD
PERSONAS CORTISOL
PERSONAS FAVORITAS
RESOLVER
METAS Y OBJETIVOS
HÁBITOS
PROPÓSITO
MINDFULNESS PARA LA VIDA
RESUELVE EL PASADOVIVE EL PRESENTECONSTRUYE EL FUTURO
Mis palabras de agradecimiento van directamente al corazón de aquellos que, de alguna manera, hicieron mi camino más desafiante. Agradezco profundamente por enseñarme que ese no era mi destino final, que había algo más grandioso aguardándome.
A todos aquellos que confían en mi experiencia y abren sus corazones para unir fuerzas en la búsqueda de lo extraordinario. A Paulina, Lucas y Simón, quienes representan el infinito mismo, llenándome de dicha e inspirándome a superarme cada día.
A Juanma, mi fiel compañero de vida, con quien disfruto cada preciado instante. A mis padres, por regalarme el tesoro más precioso: la vida.
Y por último, pero no menos importante, gracias Nati, por tu determinación, tu pasión ardiente, tu entrega inquebrantable, y por tu deseo genuino de ayudar a otros a encontrar la felicidad.
Cada línea de este libro está impregnada de amor y gratitud, y espero que al leerlas, sientas la misma pasión y emoción que yo al escribirlas.
Se considera que el estado natural de una persona es estar en equilibrio y bienestar. Esto implica que, a pesar de los desafíos y obstáculos que enfrentamos en la vida, nuestra tendencia innata es hacia la salud mental y emocional.
Desde esta perspectiva, es importante reconocer que experimentar momentos de malestar o dificultad no nos define como personas. Es parte natural de la condición humana el atravesar altibajos emocionales y enfrentar situaciones estresantes.
La psicología positiva, por ejemplo, se enfoca en cultivar las fortalezas y virtudes humanas para promover el bienestar y la felicidad. Nos enseña a enfocarnos en lo que está funcionando bien en nuestras vidas y a desarrollar estrategias para potenciar nuestro crecimiento personal.
Por lo tanto, entender que lo normal es estar bien no significa negar nuestras emociones negativas, sino más bien reconocerlas como parte del proceso de crecimiento y aprendizaje. Aprender a gestionar nuestras emociones y pensamientos de manera saludable nos permite recuperar ese estado natural de equilibrio y bienestar.
Podemos afirmar que lo normal es estar bien cuando nos esforzamos por cultivar una mentalidad positiva, trabajar en nuestro desarrollo personal y buscar ayuda profesional cuando sea necesario para superar los desafíos que se nos presentan en la vida.
En la vida cotidiana, es común encontrarnos con situaciones que nos llevan a experimentar emociones como el estrés, la ansiedad, el pánico, los miedos, las angustias y relaciones poco saludables. Estos sentimientos negativos se han vuelto tan habituales en nuestra sociedad actual que a menudo los consideramos parte normal de la vida. Vivimos en un mundo saturado de información negativa que puede afectar nuestra percepción de la realidad y nuestras expectativas.
En la búsqueda constante de la felicidad, a veces caemos en la trampa de creer que esta puede lograrse de manera inmediata, con un simple acto o decisión. Sin embargo, la verdadera felicidad requiere esfuerzo, dedicación y un cambio profundo en nuestra forma de pensar y actuar. No es algo que se pueda alcanzar de la noche a la mañana, sino que implica un compromiso constante con uno mismo y con nuestro bienestar emocional.
Es fundamental aprender a postergar la gratificación instantánea y trabajar en nuestra estabilidad emocional. Al centrarnos en nuestro crecimiento personal y en el fortalecimiento de nuestro ser interior, podemos transformar nuestra realidad externa. Es un proceso gradual que requiere paciencia, perseverancia y autodisciplina.
Para lograr este cambio positivo en nuestra vida, es importante rodearnos de una red de apoyo emocional sólida. Crear un entorno donde sea normal sentirse bien y buscar el bienestar emocional es fundamental para nuestro desarrollo personal. Te invito a formar parte de este movimiento hacia una vida más plena y equilibrada, donde la felicidad sea el resultado de un trabajo constante en uno mismo. ¡Únete a esta transformación y comencemos juntos este viaje hacia una vida más plena y satisfactoria!
“Soy psicóloga social psicoanalítica, especializada en vínculos y bienestar. Y sí, quiero acompañarte a que mejores el vínculo contigo mismo, porque creo firmemente que el autoconocimiento es la base de una vida plena y satisfactoria. Y sí, quiero acompañarte a que entiendas el origen de tus conductas y resultados, porque sé que al comprender tus patrones podrás transformarlos de manera consciente y positiva. Y sí, quiero acompañarte en la comprensión y análisis de tus emociones para que puedas gestionar lo que te pasa de una forma más asertiva, permitiéndote vivir de manera más equilibrada y auténtica. Y sí, quiero ser en gran parte una red de contención para que puedas salir de tus miedos, angustias y desafíos emocionales, brindándote el apoyo necesario para superarlos y crecer. Y sí, quiero que juntos aprendamos que los vínculos son la base de nuestra existencia, y que en ellos encontramos la oportunidad de crecer, sanar y conectar de forma significativa. Solo falta que tú decidas ser parte de este desafío de crecimiento personal y bienestar emocional. ¡Estoy aquí para acompañarte en este camino hacia una vida más plena y consciente!”
La preocupación, desde la perspectiva de la psicología del desarrollo personal, puede ser entendida como un estado mental caracterizado por la anticipación de posibles problemas, peligros o situaciones negativas futuras. Se manifiesta a través de pensamientos recurrentes que generan ansiedad, estrés e inquietud en la persona que la experimenta.
En el ámbito del desarrollo personal, la preocupación puede ser un obstáculo significativo para el crecimiento y el bienestar emocional. Cuando una persona se preocupa en exceso, su energía mental se enfoca en escenarios negativos que pueden no llegar a materializarse, lo que puede limitar su capacidad para disfrutar del presente y para concentrarse en metas y objetivos positivos.
Un ejemplo cotidiano de preocupación podría ser alguien que constantemente se preocupa por el futuro de su carrera profesional. Esta preocupación constante puede llevar a la persona a experimentar altos niveles de estrés, dificultades para concentrarse en el trabajo presente y una sensación de insatisfacción constante. Como resultado, la preocupación puede impedir que la persona avance en su carrera o que disfrute plenamente de sus logros actuales.
Desde la psicología, es importante aprender a manejar la preocupación de manera efectiva. Esto puede incluir técnicas como la meditación, la visualización positiva, la práctica de la gratitud y el establecimiento de límites claros con los pensamientos negativos. Al desarrollar habilidades para gestionar la preocupación, una persona puede liberar su mente de la ansiedad constante y enfocarse en construir una vida más plena y satisfactoria.
En resumen, la preocupación puede ser un aspecto natural de la experiencia humana, pero es fundamental abordarla de manera saludable para promover el desarrollo personal y el bienestar emocional. Al aprender a gestionar la preocupación y a enfocar nuestra energía en pensamientos constructivos y positivos, podemos cultivar una mentalidad más resiliente y orientada al crecimiento en nuestro camino hacia una vida plena y satisfactoria.
Para dejar de preocuparte y comenzar a ocuparte, es importante cambiar la forma en la que enfocas tu energía mental y emocional. Aquí te dejo algunos tips y explicaciones para ayudarte a ocuparte en el día a día:
1. *Identifica tus preocupaciones:* El primer paso es ser consciente de las cosas que te preocupan. Identifica cuáles son los pensamientos recurrentes que generan ansiedad en ti.
2. *Diferencia entre preocupación y ocupación:* La preocupación se centra en problemas futuros, mientras que la ocupación implica tomar acción en el presente para abordar esos problemas. Es importante distinguir entre ambos y enfocarte en lo que puedes hacer ahora.
3. *Establece metas claras:* Define metas y objetivos concretos que quieras lograr. Esto te ayudará a enfocar tu energía en acciones específicas y tangibles.
4. *Haz un plan de acción:* Una vez que tengas claras tus metas, elabora un plan detallado con pasos concretos a seguir. Esto te permitirá organizarte y avanzar de manera efectiva hacia tus objetivos.
5. *Practica la atención plena:* La meditación y la atención plena pueden ayudarte a estar presente en el momento actual y a reducir la ansiedad relacionada con el futuro.
6. *Encuentra actividades que te apasionen:* Dedica tiempo a actividades que te gusten y te hagan sentir bien. Esto te ayudará a mantener un equilibrio emocional y a reducir la preocupación.
7. *Aprende a delegar:* Si sientes que estás abrumado/a por las responsabilidades, aprende a delegar tareas y a pedir ayuda cuando la necesites. No tienes que hacerlo todo tú solo/a.
8. *Practica el autocuidado:* Cuida de tu bienestar físico, emocional y mental. Duerme lo suficiente, come de forma saludable, haz ejercicio y dedica tiempo a actividades que te relajen y te renueven.
Al aplicar estos tips en tu día a día, podrás dejar de preocuparte en exceso y comenzar a ocuparte de manera efectiva en tus tareas y metas. Recuerda que el cambio de enfoque requiere práctica y paciencia, pero con determinación y constancia podrás cultivar una mentalidad más orientada a la acción y al crecimiento personal. ¡Mucho ánimo!
Comenzar hablando de uno mismo es el primer paso hacia el éxito, tanto en lo personal como en lo profesional. Conocerse a uno mismo y trabajar en el interior es el puente que conecta nuestras aspiraciones con la realidad. Al comprender nuestras fortalezas, debilidades, valores y metas, podemos trazar un camino claro hacia el crecimiento y el logro. Este autoconocimiento no solo nos empodera a nivel individual, sino que también impacta positivamente en nuestras interacciones y desempeño en el ámbito laboral. ¡El viaje hacia el éxito comienza desde adentro!
Somos seres únicos, complejos y en constante evolución. Estamos formados por nuestras experiencias, valores, creencias y aspiraciones. Nuestra identidad se moldea a través de nuestras interacciones con el mundo que nos rodea. Somos la suma de nuestras elecciones, acciones y relaciones. A medida que exploramos y comprendemos quiénes somos, encontramos la base para construir una vida significativa y satisfactoria.
Si te descubres dentro de la vasija como en el proverbio, serás el ser más feliz de la tierra.
EL problema es que la mayoría de las personas no trabaja en sí misma, porque es invisible y difícil de moldear.
Si te identificas sólo con aquello que ves fuera de tí, entonces el televisor te mirará, el auto te conducirá, la casa te vivirá, el trabajo te hará trabajar y las emociones te harán dudar. Necesitas trabajar en tí para que sepas cómo manejar una vida y dónde está el volante para dirigirla.
¿Qué beneficios tendrá para ti vivir conscientemente?
¿Qué cambiaría en ti si supieras quién eres?
¿Qué emociones tienes de tu pasado que no te dejan ser libre hoy?
“La autoestima es como un imán que atrae el éxito y la felicidad. Cuando crees en ti mismo, el mundo entero cree en ti. Cultivar una autoestima saludable es como regar las semillas de tus sueños; te permite crecer, florecer y alcanzar nuevas alturas. Recuerda, eres único, valioso y capaz de lograr todo lo que te propongas. Levántate cada día con la convicción de que mereces lo mejor, porque lo haces. ¡Eres suficiente, eres poderoso y mereces brillar!”
Las bases fundamentales de la autoestima son esenciales para el desarrollo personal:
Autoconocimiento: Conocerse a uno mismo es el primer paso para desarrollar una autoestima saludable. Esto implica entender tus fortalezas, debilidades, valores, creencias y emociones.
Aceptación personal: Aceptar quién eres, con todas tus imperfecciones y virtudes, es crucial para construir una autoestima sólida. Reconocer y aceptar tus limitaciones te permite trabajar en ellas de manera positiva.
Auto aceptación: Aprender a perdonarte a ti mismo por tus errores y fracasos es parte integral del desarrollo de la autoestima. La autocompasión y la comprensión hacia uno mismo son componentes clave de la auto aceptación.
Autoconfianza: Creer en tus habilidades y capacidades es fundamental para fortalecer la autoestima. Desarrollar la confianza en ti mismo te permite enfrentar desafíos con valentía y optimismo.
Autenticidad: Ser fiel a uno mismo y vivir de acuerdo con tus valores y creencias promueve una sensación de integridad y coherencia, lo que a su vez fortalece la autoestima.
Estos conceptos fundamentales forman la base de una autoestima sólida y saludable. Al comprender y cultivar estas bases, las personas pueden embarcarse en un viaje de autodescubrimiento y crecimiento personal.
“Este libro está diseñado como una guía integral para el crecimiento personal y el desarrollo de herramientas que te ayuden a vivir de manera más consciente y feliz. A lo largo de estas páginas, los lectores encontrarán una variedad de temas que abarcan desde la autoconciencia y el autoconocimiento hasta estrategias para mejorar la autoestima, fortalecer la resiliencia emocional, cultivar la gratitud y fomentar relaciones saludables.”
Además, se explorarán técnicas de gestión del estrés, la importancia del autocuidado, la práctica de la atención plena y la búsqueda de propósito y significado en la vida. El objetivo es proporcionar a los lectores las herramientas prácticas y los conocimientos necesarios para fomentar un crecimiento personal continuo, promoviendo así una vida más plena, consciente y feliz.
A través de la combinación de teoría, ejercicios prácticos y ejemplos inspiradores, este libro busca empoderar a los lectores para que puedan embarcarse en un viaje de autodescubrimiento, transformación personal y bienestar integral.
Resolver el pasado puede tener muchos beneficios. Algunos de ellos incluyen:
Liberación emocional: Al resolver el pasado, podemos liberarnos de la carga emocional que puede estar afectando nuestra vida presente. Podemos dejar atrás sentimientos de culpa, tristeza o enojo que nos están impidiendo avanzar.
Aprendizaje: Resolver el pasado nos permite aprender de nuestras experiencias y errores pasados. Al reflexionar sobre lo que sucedió, podemos identificar lo que hicimos bien y lo que podríamos haber hecho mejor. Este aprendizaje puede ayudarnos a tomar mejores decisiones en el futuro.
Mejora de relaciones: Resolver el pasado también puede mejorar nuestras relaciones interpersonales. Al abordar problemas del pasado, podemos encontrar formas de solucionarlos y mejorar la comunicación con las personas involucradas.
Bienestar emocional: En general, resolver el pasado puede tener un impacto positivo en nuestra salud mental y bienestar emocional. Nos permite liberarnos de sentimientos negativos, aprender de nuestras experiencias y mejorar nuestras relaciones interpersonales.
Resolver el pasado puede ser importante por varias razones. En primer lugar, puede ayudarnos a liberarnos de la carga emocional y mental que puede estar afectando nuestra vida actual. Además, al resolver el pasado, podemos aprender de nuestros errores y experiencias pasadas para tomar mejores decisiones en el futuro. También puede ayudarnos a mejorar nuestras relaciones interpersonales al abordar problemas pasados y encontrar formas de solucionarlos. En general, resolver el pasado puede tener un impacto positivo en nuestra salud mental y bienestar emocional.
Nuestro cerebro tiende a volver al pasado debido a varios factores. La memoria juega un papel importante en este proceso, ya que solemos recordar experiencias pasadas, tanto positivas como negativas. Además, nuestras experiencias pasadas influyen en la forma en que percibimos el mundo y tomamos decisiones en el presente. El cerebro a menudo busca patrones y conexiones entre eventos pasados y presentes para ayudarnos a comprender y adaptarnos a nuevas situaciones. Esta tendencia a volver al pasado puede ser útil para aprender de experiencias pasadas, pero también puede llevar a la rumiación excesiva o a sentimientos de nostalgia.
Se ha comprobado que muchas personas viven continuamente en su pasado como si fuera una película que continuamente colocan play, esto se debe muchas veces a que si contamos la “historia” esa historia que provoca un montón de emociones, al repetir esa información y con ella las emociones, estamos viviendo en ese pasado ya que el cerebro no entiende de temporalidad, es decir no sabe que ese suceso es pasado.
¿Qué hago con ese pasado entonces?
Si nos aferramos constantemente al pasado, nuestro progreso se ve obstaculizado, ya que nuestras emociones seguirán siendo las mismas y nuestro cerebro interpretará que esas situaciones están ocurriendo en el presente. A lo largo del tiempo, evolucionamos y cambiamos; muchas decisiones pasadas de las que nos arrepentimos fueron tomadas desde un estado emocional y de conciencia que ya no es el mismo. Por lo tanto, es fundamental comprender que esas experiencias anteriores llegan para enseñarnos, fortalecernos, moldearnos de manera diferente y permitirnos adoptar una nueva perspectiva.
Desde temprana edad, nos han enseñado que cometer errores equivale a fracasar, lo que nos lleva a creer que cada paso en falso es un motivo para castigarnos severamente. En la escuela, resaltaban los errores con bolígrafo rojo para hacerlos más evidentes, mientras que nuestros padres nos decían “¡NO!” repetidamente en lugar de elogiarnos.
Desde la infancia, nos han inculcado la idea de enfocarnos en los errores en lugar de en nuestros éxitos y habilidades. Si reflexionas, es probable que recuerdes más las reprimendas que los elogios.
Hemos sido influenciados con la creencia de que seremos castigados si intentamos algo nuevo.
Si piensas que no debes cometer errores, entonces te advierto que te sentirás frustrado eternamente. Recuerda cuando aprendiste a caminar; ¿te imaginas si no te hubieras levantado después de la primera caída? Todavía no sabrías caminar, correr, andar en bicicleta o conducir un auto.
Los obstáculos son parte del crecimiento personal; te brindan valiosa información. Es fundamental tener la habilidad de interpretar lo que realmente significa esa situación.
¿Cuántos logros has alcanzado hoy en tu vida?
¿Tuviste miedos en el camino? ¿Cómo los superaste?
¿Cuáles fueron tus aptitudes para llegar a esos logros?
Todos los días agradece que tienes la oportunidad de luchar por tus sueños. Sólo debes ir por ellos.
Cada mañana, al despertar, te encuentras con tus metas, sueños, propósitos y deseos. Al mirarte en el espejo, contemplas tu realidad. Si buscas a alguien que cambie tu vida, permíteme presentártelo: te está mirando desde el espejo. Eres quien ha construido la vida que tienes hoy, por lo tanto, eres responsable de mejorarla si así lo deseas. De lo contrario, simplemente vive en la conformidad.
Una vez que aprendes de tu pasado, comprendes por qué actuaste de cierta manera y conectas con tu ser, estás listo para liberarte, ¡dejar ir! Dejar ir implica entender que ese pasado es parte de mi historia pero no me limita, no me castiga ni me deprime. Ese pasado ahora es mi fuerza para construir mi mejor presente.
“Soltar el pasado” en psicología se refiere a dejar ir las emociones, pensamientos o situaciones pasadas que nos causan angustia o nos impiden avanzar. Se trata de liberarse de la carga emocional que proviene de experiencias pasadas, permitiéndonos vivir en el presente y mirar hacia el futuro con una perspectiva más positiva. Este proceso puede implicar el perdón, la aceptación y la reconstrucción de la propia identidad sin estar atado a eventos pasados.
Aquí tienes tres preguntas de reflexión sobre soltar el pasado:
1. ¿De qué manera me están afectando emocionalmente las experiencias pasadas que aún no he superado?
2. ¿Qué lecciones puedo extraer de mis experiencias pasadas que me ayudarán a crecer y avanzar en mi vida?
3. ¿Qué acciones concretas puedo tomar para liberarme de la influencia negativa que el pasado tiene en mi presente y futuro?
“El pasado es un lugar en el que podemos aprender, pero no un lugar en el que debemos habitar. Resolver los asuntos pendientes del pasado nos libera para vivir plenamente en el presente y construir un futuro más prometedor. Recuerda, el pasado no define quien eres, sino que te brinda lecciones para crecer y evolucionar. Acepta lo que fue, aprende de ello y sigue adelante con valentía hacia nuevas experiencias y oportunidades. ¡Tu poder está en el presente, no en el pasado!”