La Bitácora de los Sueños. - Alexandra Gallego - E-Book

La Bitácora de los Sueños. E-Book

Alexandra Gallego

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Beschreibung

La Bitácora de los Sueños.es un libro que a partir de metáforas con el mar y sus elementos relacionados: la brújula, el barco, el marinero, el capitán, el puerto, el faro, las velas, entre otros recursos creativos; explica aspectos teóricos de la psicología para abordar el tema de plan de vida, su importancia y estrategias para diseñarlo. La autora utiliza cuentos y diferentes ejercicios de reflexión y aplicación para explicar aspectos del plan de vida como la autorrealización, la motivación, el sentido de vida, los autoesquemas, la autoeficacia y la autoestima; este enfoque le permite al lector una aproximación clara, sencilla y práctica de todos los componentes del plan de vida. A partir de la metáfora con el mar y sus elementos relacionados, la autora desarrolla el tema en siete capítulos, de la siguiente manera: 1. Plan de vida: La brújula interna que señala el norte. 2. Dimensiones del plan de vida: Las rutas por las cuales navegar. 3. La bitácora de los sueños: Una herramienta para llegar a buen puerto. 4. Autoconocimiento: El puerto desde el cual zarpar. 5. La Autorrealización: El faro que orienta la ruta. 6. Autoeficacia: Concentrarse en las velas, no en el viento. 7. Autoestima: Un timonel fuerte para dirigir el barco.

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Seitenzahl: 201

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Bitácora de sueños

Autoconocimiento y plan de vida

Fanny Alexandra

Gallego Lopera

© Fanny Alexandra, Gallego Lopera

© Bitácora de sueños. Autoconocimiento y plan de vida

Junio 2023

ISBN ePub: 978-84-685-7597-1

Editado por Bubok Publishing S.L.

[email protected]

Tel: 912904490

Paseo de las Delicias, 23

28045 Madrid

Reservados todos los derechos. Salvo excepción prevista por la ley, no se permite la reproducción total o parcial de esta obra, ni su incorporación a un sistema informático, ni su transmisión en cualquier forma o por cualquier medio (electrónico, mecánico, fotocopia, grabación u otros) sin autorización previa y por escrito de los titulares del copyright. La infracción de dichos derechos conlleva sanciones legales y puede constituir un delito contra la propiedad intelectual.

Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos) si necesita fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra (www.conlicencia.com; 91 702 19 70 / 93 272 04 47).

Para mis hijos Selene y Emanuel que estuvieron en mi mapa de sueños desde que yo era adolescente.

Gratitud a mis padres Fanny y Rodrigo, por darme la vida.

Índice

Antes de embarcar

El viaje de Emanuel

Mapa de ruta para el viaje

ITINERARIO 1 PLAN DE VIDA

Plan de vida

Relevancia del plan de vida

Componentes del plan de vida

Misión: El propósito dador de sentido

Metas: Son los sueños con fecha

Valores: Nuestro centro de referencia

Roles: Nuestros papeles vitales

Recursos: ¿Qué necesitamos para el viaje?

ITINERARIO 2 Dimensiones del plan de vida

Dimensión cognitiva: Para aprender

Dimensión social: Para convivir

Dimensión física: Para vivir

Dimensión afectiva: Para amar

Dimensión productiva: Para transformar

Dimensión espiritual: Para trascender

ITINERARIO 3 La bitácora de los sueños

Precisión de términos

Metas vs sueños

Características de las metas

La ruta que sigue una meta

Esquema personal de autosabotaje

ITINERARIO 4 Autoconocimiento

La necesidad de quietud y silencio

Los espejos que nos reflejan

El darse cuenta

Inteligencia intrapersonal

Autoconocimiento y plan de vida

ITINERARIO 5 Autorrealización

La escala de necesidades humanas

La triada mágica: Creatividad-trabajo-autorrealización

Personas centradas en la autorrealización

Haga de su vida una obra de arte

ITINERARIO 6 Autoeficacia

La percepción de incontrolabilidad

El lugar donde ponemos el control

El papel de las expectativas en la autoeficacia

ITINERARIO 7 Autoestima

Conversación con uno mismo

Crítica patológica

Autoafirmaciones

Narcisismo no es autoestima sana

El amor propio como fundamento de la ética

La asertividad, expresión de una sana autoestima

ITINERARIO ESPECIAL Bitácora de viaje para emprendedores

Los inevitables problemas en el viaje emprendedor

¿Cuáles son los valores del equipo emprendedor?

¿Cuáles son los riesgos del equipo?

¿Qué tipo de emprendedores existen?

¿Cómo es un emprendedor determinado?

¿Cómo es un emprendedor influyente?

¿Cómo es un emprendedor sereno?

¿Cómo es un emprendedor concienzudo?

Roles y responsabilidades en el emprendimiento.

¿Quién hace qué?

¿Cuáles son los cargos mínimos para arrancar?

¿Polivalencia o desorden?

Para terminar el viaje

BIBLIOGRAFÍA

Antes de embarcar

“Tenemos que obligar a la realidad a que responda a nuestros sueños, hay que seguir soñando hasta abolir la falsa frontera entre lo ilusorio y lo tangible, hasta realizarnos y descubrir que el paraíso perdido está ahí, a la vuelta de todas las esquinas.”Julio Cortázar

Han pasado catorce años desde la primera edición de este libro. El mismo ha sido el producto de un sueño que por varios años estuvo en el baúl de los pendientes, ese oscuro y polvoriento lugar a donde son exiliados aquellos deseos que nos parecen imposibles, locos o innecesarios; esos mismos que nos otorgan poder personal cuando decidimos sacarlos a la luz para darles vida.  

Resulta desafiante abordar la temática de la magia, los sueños y otros elementos que habitan el terreno de la utopía en un contexto marcado por diversos problemas económicos, políticos, sociales y ambientales a nivel local y mundial.

Ahora, más que nunca necesitamos el poder que otorga la posibilidad de seguir soñando con mejores futuros, porque ¡qué fácil es seguir el norte cuando los vientos soplan a nuestro favor! La prueba real para el alma que capitanea, está en ser capaz de continuar en medio de la tormenta y perseguir los sueños aun cuando el barco de la vida bordea el abismo. Es ahí cuando nuestra confianza le gana la batalla al miedo y nos damos cuenta si tenemos o no el coraje suficiente para estar a la altura de nuestros sueños. En tiempos de abrumadora realidad, soñar es una apremiante necesidad.

Mi propósito con este libro sigue siendo rescatar los sueños del baúl del después...

Para que usted como lector se entere de dónde proviene este deseo y todo esto que está leyendo, y leerá. Para ello, le presento el siguiente cuento que es origen y causa de todo esto.

“Los vientos de gracia soplan incesantemente, nos toca a nosotros izar las velas”. Rama Krishna.

El viaje de Emanuel

Después de navegar por incontables rutas en los mares del mundo, ese día Emanuel volvió al puerto donde años atrás se convirtió en marinero. Su corazón siempre albergó este sueño: el de ser capitán, tener su propio barco. Sin embargo, desde aquel día, desde ese regreso, han pasado muchos años y su sueño se ha ido diluyendo en la rutina, ha olvidado la importancia de este. 

En los últimos meses, él se ha sentido cómodo, tiene la certeza de ser marinero. No obstante, en algunos momentos llega la angustia, aparece en su corazón una amarga tristeza. No importa si quiere explorar otros mares y conocer otros cielos; es otro, parece ser otro, quien toma todas estas decisiones mientras se consume en la peor de las batallas: la lucha del alma consigo misma.

Emanuel se sentía perdido, sin entusiasmo, sin rumbo. Decidió entonces optar por un nuevo comienzo. Sin embargo, luego de conseguir el barco, una brújula, los mapas y otros instrumentos de navegación, la duda acechaba su decisión. —¿Si no me va bien?, ¿si me encuentro solo frente a esas grandes tormentas?, ¿qué sucederá si pierdo el afecto de los marineros?,¿si me pierdo en las rutas?, ¿qué me falta?, ¿por qué siento tanto temor? Pensaba.

Así, después de dar muchas vueltas por el puerto tratando de responder a todas las preguntas que lo angustiaban, recordó que entre sus objetos tenía un obsequio que alguna vez recibió de una mujer de tierras lejanas a quien todos llamaban con distintos apelativos: maga, sabia, musa, hechicera, consejera. Hay quienes han llegado a llamarla diosa creativa, diosa de la luna, luz de luna. Su nombre real era Selene. Los viajeros la visitan en busca de orientación cuando se sienten perdidos en su rumbo.

En su encuentro con Selene, Emanuel recibió un cuaderno para elaborar una bitácora. Le servía para anotar el estado de la atmósfera, la aparición de los vientos, el rumbo, la fuerza de las máquinas, la velocidad del barco, las distancias y todos los acontecimientos de importancia en la navegación.

Este cuaderno tenía escrito siete principios de viaje:

El primero indica el lugar para zarpar, llamado también, puerto del autoconocimiento. Su escritura señala la coherencia de una ruta consecuente con sus fortalezas de viaje. Esto favorecerá el afrontamiento de los vientos, el rumbo, la partida.

El segundo principio es una recomendación para el trayecto. Indica el encuentro con el faro de la autorrealización como búsqueda y crecimiento permanente.

El tercero recuerda que el mar tiene un horizonte inagotable como la vida misma.

El cuarto indica el agradecimiento, la mirada y la bendición al mar, al viento, al sol. La honra a los seres de encuentro en la ruta.

El quinto refiere la necesidad de gestionarse para los lugares de llegada, los tiempos de experiencia, las fechas, los planes.

El sexto muestra la importancia de mantener vigentes los sueños, de no abandonarlos y nunca navegar en contra de los propios anhelos.

Y el séptimo reafirma la importancia de este cuaderno como guía. Su argumento sustenta la escritura como evidencia de viaje.

Así, además de la bitácora, Selene le mencionó tres secretos de viaje que calman el agobio en las tormentas. —Nunca un mar calmo formó un buen marinero. Si no sabes a dónde vas, cualquier viento te servirá, piensa bien esto. Y por favor, no luches contra el viento, encárgate de controlar las velas, le dijo.

Este recibimiento otorgó renovación a Emanuel; ganó confianza, la confianza del viaje. Fue así como sintió que el miedo se diluye cuando se acogen herramientas para la navegación. Por ello decidió afrontarse como capitán, emprendió el viaje, visualizó un horizonte.

Los siete principios para el viaje y los tres secretos que aprendió esa noche, renovaron el poder personal de Emanuel, sintió que ya tenía todo para emprender su viaje y aunque el miedo eventualmente lo acompañaba ya no tenía la fuerza para detenerlo. Fue capaz de comenzar a ser el capitán de su existencia siendo coherente con los anhelos de su alma; decidió que sería así hasta que el sol saliera por última vez en su horizonte.

Mapa de ruta para el viaje

Como en este cuento, el libro está organizado en siete capítulos a los cuales denomino itinerarios. La invitación es la del viaje. Repase su vida con este libro, evoque puertos, recree rutas y acoja las reflexiones que le posibilite la lectura. 

En el primer itinerario, realizo una descripción del plan de vida como concepto, su estructura, componentes e importancia partiendo de un esquema denominado brújula interna. En el segundo, explico cada una de las facetas del desarrollo vital: física, espiritual, cognitiva, afectiva, social y productiva. El tercero está escrito para que busque intereses y motivaciones y se permita identificar los sueños, determine estrategias y metas, comprenda las implicaciones. En el cuarto escribo sobre la importancia del viaje interior en búsqueda de la propia verdad y las metodologías desde la psicología para realizar esta importante tarea. En el quinto desarrollo temas como la motivación, el potencial, las opciones de crecimiento y el bienestar. Ya en el sexto hay una referencia a la importancia de la autoeficacia y la necesidad de fortalecer los hábitos, actitudes y comportamientos. Y en el séptimo, analizo los aspectos del ser que se encuentran en contacto permanente con el mundo; su relación con el autoconcepto, la ética personal, el amor propio y la asertividad. 

En esta edición agregué un itinerario especial denominado Bitácora de viaje para emprendedores, donde abordo elementos del plan de vida y temas conexos que considero pertinentes para quienes le han apostado a la aventura de hacer empresa. Adicionalmente, en los demás itinerarios comparto elementos teóricos de autores que considero valiosos y útiles; esta selección no obedece a ningún argumento diferente al de mi experiencia, gusto e intuición; por ello, usted como lector, se dará cuenta que este acercamiento a otros autores para enriquecer mi propuesta en este libro es bastante ecléctico. Por lo que el recorrido teórico, reúne elementos de las diferentes corrientes psicológicas, pasando por algunos referentes que aportaron maestros espirituales y de desarrollo personal y hasta frases o fragmentos poéticos que permiten ilustrar las ideas que quiero compartir.

La poesía y los cuentos son protagonistas en este libro, por este motivo querido lector encontrará en los diferentes itinerarios cuentos que buscan ilustrar de manera amable los conceptos abordados; las frases de diferentes autores y los poemas, también me han servido para este propósito. En esta edición me he atrevido incluso a aportar algunos de mis versos.

Lo invito apreciado lector a que interactúe con este libro. Aprópiese en su intimidad de lo que cada página le comunica. Escoja las frases que le gustaría leer varias veces, y al lado escriba lo que piensa y siente; no se guarde los aspectos que le han gustado o no. Dibuje las imágenes que pasan por su mente; use signos de admiración, interrogación, asteriscos o lo que quiera. El libro es suyo. Ahora bien, en esta edición es probable que esté leyéndolo en la digitalidad, lo invito a que acompañe la lectura con un cuaderno o libreta, también puede complementar el ejercicio con el libro Bitácora de viaje: Actividades de autoconocimiento y plan de vida, el cual desarrollé como apoyo con herramientas para trabajar los diferentes temas abordados en el libro. Dése la oportunidad, aproxímese a las técnicas en su propia vivencia. Escriba su historia como la quiere vivir. 

¡Buen viento y buena mar!

ITINERARIO 1 Plan de vida

Plan de vida: La brújula interna que señala el norte.

Relevancia del plan de vida.

Componentes del plan de vida.

Misión: El propósito dador de sentido.

Metas: Los sueños con fecha.

Valores: Nuestro centro de referencia.

Roles: Nuestros papeles vitales.

Recursos: ¿Qué necesitamos para el viaje?

ITINERARIO 1 PLAN DE VIDA

La brújula interna que señala el norte

“El viaje más largo siempre es el viaje hacia adentro. El viaje hacia casa para encontrarse uno mismo dura toda la vida… y tal vez más”.Jurgen Moltmann.

Cuando me propuse abordar el tema de plan de vida, con sus dimensiones y elementos, quería expresarlo de una manera diferente. Deseaba algo creativo pero sencillo que superara el nivel de las frases y párrafos explicativos. Para lograrlo era indispensable salirme un poco del terreno de la lógica y la linealidad, para adentrarme en los dominios de la lúdica y aprovechar la riqueza de las imágenes y las formas, que también permiten la expresión creativa de las ideas y los conceptos.

Por eso, estuve buscando una representación gráfica, y, aunque contaba con las metáforas del cuento El viaje de Emanuel, sentía que no era suficiente. Me propuse entonces la tarea de estructurar un esquema que me permitiera dibujar la idea. A partir de ese proceso resultó brújula interna, que se convirtió en mi visión favorita de lo que es un plan de vida. En ella se condensan todos los elementos que desarrollaré a lo largo del libro.

Antes de intentar traducir en palabras lo que quiero comunicar con esta propuesta, que es básicamente un esquema, lo invito también para que se detenga y lo lea, relea, lo observe, lo piense. Mírelo completo, luego revise cada uno de los elementos que lo integran; fíjese en las formas, las líneas, las conexiones y las palabras. Porque, aunque más adelante compartiré mi intención comunicativa completa con el gráfico, esta explicación que expongo es una mirada de lo que es el plan de vida; es mi perspectiva. Lo más importante es que usted pueda encontrar la suya y a partir de ella diseñar su propio camino.

Con éste y otros ejercicios que voy a proponer, hay pues una invitación respetuosa para construir su propia ruta, un impulso a su autonomía. Espero que la lectura, con las reflexiones que encontrará, le permitan generar un diálogo claro y honesto con usted mismo. Hágase preguntas y recuerde lo que en la profundidad de su alma ya sabe, pero que posiblemente ha olvidado.

Dedique unos minutos a observar el gráfico y hágase preguntas.

Figura 1. Plan de vida: Brújula interna

En la figura, encontramos los componentes del plan de vida, la misión, que es el punto central de esta propuesta, y a su alrededor, en coherencia con este propósito esencial, están las metas, los valores, los roles y los recursos. Estos elementos responden, en su orden, a las preguntas: ¿Qué queremos lograr?, ¿por qué queremos lograr precisamente eso?, ¿qué roles implica asumir dichos propósitos?, y finalmente, ¿qué recursos tenemos o debemos conseguir para tal fin?

Alrededor de estos elementos giran las áreas o dimensiones de desarrollo de nuestra vida: la física, la afectiva, la espiritual, la productiva, la social y la cognitiva. Es recomendable que puedan mirarse y abordarse en su totalidad a la hora de diseñar el plan de vida, especialmente para procurar el equilibrio entre los diferentes componentes para fortalecerlos.

Es importante resaltar que cada uno de estos aspectos tiene una connotación diferente de acuerdo con la etapa de la vida en la cual nos encontremos. Por ejemplo, el significado e implicaciones que tiene el desarrollo físico/orgánico en la adolescencia es muy diferente al que le atribuimos en otra etapa de la vida, la adultez.

La dimensión afectiva es otro buen ejemplo para ilustrar esta cambiante perspectiva. En la infancia, lo afectivo gira en torno a nuestros padres y familiares más cercanos. A medida que crecemos va cambiando su configuración y su radio de acción se expande; entran en escena los amigos de infancia y adolescencia, las primeras relaciones amorosas, la formación de una pareja y posiblemente el establecimiento de una familia.

Añadido a esto, cabe mencionar que en cada una de estas áreas se derivan también los roles que asumimos a lo largo de nuestra vida, se configuran las interacciones que tenemos y las vinculaciones con sus correspondientes responsabilidades.

Veamos ahora qué es el plan de vida, sus componentes e importancia.

Plan de vida

Es un conjunto de elementos organizados que estructuran y permiten trazar la ruta que se desea recorrer en el transcurso de nuestra existencia, guiados todos por un propósito central que le confiere sentido. En dicha planeación, se reconocen los valores fundamentales, se clarifican los roles, se visibilizan las metas y se identifican los recursos necesarios para recorrer de manera coherente dicho camino. Éste se traza en un entorno particular, que influye, pero nunca determina el recorrido.

Un plan de vida no se agota en las metas o propósitos que queremos alcanzar en algún área determinada. Nuestro plan de vida no es únicamente el proyecto profesional o el proyecto familiar. Es más bien, un conjunto de proyectos dinámicos y las metas y propósitos pueden cambiar de acuerdo con experiencias, aprendizajes y mayores niveles de madurez alcanzados. Por este motivo prefiero nombrarlo “plan”, y acoger este concepto, que el de “proyecto de vida”. El plan es mucho más abarcador y puede integrar varios proyectos en las múltiples áreas de nuestro desarrollo vital.

“Dentro de 20 años lamentarás más lo que no has hecho que lo que has hecho. Derriba las barreras, abandona la protección del puerto, despliega las velas al viento. Explora, sueña”. Mark Twain

Relevancia del plan de vida

Asumir el compromiso de responsabilizarnos de nuestra vida, estableciendo prioridades y clarificando valores, permitirá ir alcanzando el equilibrio interior y mayor satisfacción de ser quienes queremos ser. Estos aspectos son fundamentales para nuestra realización como seres humanos cuando queremos alcanzar una vida plena, una vida vivida con satisfacción y consciencia de nuestras más íntimas acciones.

Cuando no hay luces, confianza, y no sabemos hacia dónde queremos navegar, sentimos frustración, angustia completa, corremos el riesgo de terminar en parajes en los que no habríamos querido estar. Terminamos realizando trabajos insatisfactorios, manteniendo vínculos afectivos desgastantes, y teniendo un estilo de vida con el cual no nos identificamos. Tomamos decisiones importantes de manera improvisada, seguimos sólo las rutas que se presentan, creemos que no hay opciones, descreemos posibilidades. Funcionamos por debajo de nuestras reales potencialidades alejándonos cada vez más de la experiencia de una vida satisfactoria, donde el bienestar sea el patrón, la regla, lo común, no la excepción.

“El reconocimiento de que tú eres la causa y no el efecto, hará que no tengas más miedo: sentirás una nueva sensación de poder”. Robert Fisher

El compromiso y la responsabilidad con nuestra propia vida favorecen en sí mismos la estructuración del plan. Su carencia nos conduce inevitablemente a permanecer a la deriva en un mundo cada vez más exigente y cambiante. Ser responsables con nosotros mismos implica tener una actitud activa y proactiva, asumirnos como los protagonistas de nuestra historia y tomar de manera consciente e íntegra, cada reto que se nos presente. Experimentar la sensación de que somos nosotros los que lideramos nuestro proceso, nos otorga el magnífico poder de extraer de los momentos difíciles, valiosos aprendizajes para enriquecer nuestro viaje.

Cuando vivimos la dificultad evidentemente hay obstáculos para reconocer el aprendizaje o los caminos hacia el mismo. Toda nuestra energía está puesta en sortear la situación actual, en el cómo y en la carga misma. Sin embargo, al acudir a las posibilidades de un plan de vida, habrá luces, perspectiva, visión, una posible comprensión. Y, la angustia, la dificultad y el dolor, tomarán nuevas formas, vendrá una valoración diferente de las mismas y el logro de interpretarlas, adaptarlas y hacer que encajen en nuestra vida. Así, todo, hasta lo que parece más oscuro, aportará su matiz para la belleza total del cuadro. Considero pues, que es una buena práctica mirar las cosas siempre en perspectiva para soltarnos de la asfixiante inmediatez de la emoción y el drama.

…el drama del desencantado que se arrojó a la calle desde un décimo piso, y a medida que caía iba viendo a través de las ventanas de la intimidad de sus vecinos, las pequeñas tragedias domésticas, los amores furtivos, los breves instantes de felicidad, cuyas noticias no habían llegado nunca hasta la escalera común, de modo que en el instante de reventarse contra el pavimento de la calle había cambiado por completo su concepción del mundo, y había llegado a la conclusión de que aquella vida que abandonaba para siempre por la puerta falsa valía la pena ser vivida.Gabriel García Márquez1

Componentes del plan de vida

Retomando los elementos compartidos en el apartado anterior con la figura 1, que integran el plan de vida: misión, metas, valores, roles, recursos y dimensiones del desarrollo. El último componente de las áreas del desarrollo lo abordaremos en el itinerario 2, ahora vamos a revisar cada uno de los demás elementos que es necesario considerar a la hora de trazar nuestro plan.

Misión: El propósito dador de sentido

La misión es el “para qué”, es el norte que guía todo lo que hacemos. No es un lugar de llegada, porque el camino no se agota; es el gran motivo que nos impulsa, es la dirección hacia la cual apunta siempre nuestra brújula interna. No es simplemente una meta, es el significado; es la poderosa razón por la cual movilizamos nuestra energía.

“El privilegio de una existencia es llegar a ser quién eres verdaderamente”. Carl Jung

La misión es el hilo conductor de cada una de nuestras metas y decisiones; por ello es importante clarificarla y traducirla en palabras e imágenes. Esto nos permite ubicarnos en el mundo para que al final de nuestro viaje estemos en paz teniendo una idea del sentido de nuestra existencia, para saldar la deuda de la consciencia de nosotros mismos, de quiénes fuimos, para sentir que hemos estado viviendo finalmente como quisimos.

Metas: Son los sueños con fecha

Carecer de metas en la vida y desear un determinado tipo de bienestar o felicidad, es como lanzar mil flechas en diferentes direcciones con la ilusión de que alguna tenga suerte y se encuentre con una diana a la cual no hemos decidido apuntar. Es difícil lograr satisfacción con una vida que no hemos elegido conscientemente; las decisiones fundamentales de quien no tiene metas pueden ser respuestas improvisadas a exigencias que se presentan en el camino. No son producto de la determinación consciente y de la coherencia entre lo que quiere ser y lo que hace.

“Vivir sus deseos, agotarlos en la vida, es el destino de toda existencia”. Henry Miller

En el cuento El viaje de Emanuel, el quinto principio se refiere a la importancia de los lugares de llegada, los tiempos, las fechas y los planes. Cuando ponemos una fecha a un sueño, lo convertimos en un lugar de llegada.

Muchas veces nos escuchamos a nosotros mismos, o a otros, decir: yo siempre he soñado con…qué bueno hacer tal cosa… a mí me gustaría mucho esto o aquello. El sueño no cumplido se va tornando, poco a poco, en lamento: yo siempre he querido hacer tal cosa, pero nunca he podido; si tuviera más dinero, algo que haría…, si tuviera más tiempo, yo…

La espiral de estas manifestaciones siempre sigue. Sin darnos cuenta vamos pasando al terreno de la queja estéril, donde dejamos de ser creadores y pasamos a ocupar el lugar de víctima, buscando justificar por qué no vivimos la vida que aparentemente queremos vivir. Cuando se escuche usted mismo decir yo siempre he querido… deténgase, tómese en serio y pregúntese: ¿y por qué no?, ¿y por qué no ahora? Preste muchísima atención a las respuestas que se da, cuáles son los argumentos que usted mismo se da para seguir aplazando lo que quiere. El aplazamiento es una de las estrategias de autosabotaje que anula la posibilidad de cumplir sueños a partir de la construcción de ‘argumentos razonables’, por los cuales no podemos empezar a navegar hacia donde hemos deseado siempre:

“Un joven describió entusiasmado lo que soñaba hacer con su vida. ¿Y cuándo piensas hacer realidad tus sueños? Le preguntó el maestro. Tan pronto como llegue la oportunidad de hacerlo, respondió el joven. La oportunidad nunca llega, replicó el maestro. La oportunidad ya está aquí”. Anthony de Mello