La Guerra Civil española día a día - Eduardo Montagut - E-Book

La Guerra Civil española día a día E-Book

Eduardo Montagut

0,0

Beschreibung

La violenta, cruenta y durísima Guerra Civil española dejó más de medio millón de muertos y la herencia de lo que significó el paso del odio acumulado a la furia del derramamiento de sangre indiscriminado incluso entre miembros de la misma familia. Es por ello, que conocer sus orígenes y desarrollo detallado desde la perspectiva de la fría crónica de la Historia, se torna de máxima importancia ahora que, con el tiempo transcurrido, se hace imprescindible dejar atrás definitivamente la carga de un pasado condicionado por el dolor y la pérdida. Un libro que, de la mano de un historiador especializado en el estudio de la historia contemporánea, se torna imprescindible para conocer qué ocurrió día a día, cómo se sucedieron decisiones políticas y sucesos sociales, cómo se fraguó el levantamiento militar, cuáles fueron los episodios bélicos más importantes o cómo se posicionaron el resto de países ante el conflicto. Además, incluye un «quién es quién» de todos los principales protagonistas políticos, militares y sociales de aquellos hechos que aún determinan la convivencia entre españoles y que es preciso conocer con la mayor serenidad posible.

Sie lesen das E-Book in den Legimi-Apps auf:

Android
iOS
von Legimi
zertifizierten E-Readern
Kindle™-E-Readern
(für ausgewählte Pakete)

Seitenzahl: 303

Das E-Book (TTS) können Sie hören im Abo „Legimi Premium” in Legimi-Apps auf:

Android
iOS
Bewertungen
0,0
0
0
0
0
0
Mehr Informationen
Mehr Informationen
Legimi prüft nicht, ob Rezensionen von Nutzern stammen, die den betreffenden Titel tatsächlich gekauft oder gelesen/gehört haben. Wir entfernen aber gefälschte Rezensionen.



La Guerra Civil española día a día

Del 7 de enero de 1936 hasta el 1 de abril de 1939

Eduardo Montagut

https://www.libros-biblos.com/

© EDITATUM

© EDUARDO MONTAGUT

Queda prohibida, salvo excepción prevista en la ley, cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública y transformación de esta obra sin contar con la autorización de los titulares de propiedad intelectual. La infracción de los derechos mencionados puede ser constitutiva de delito contra la propiedad intelectual (art.270 y siguientes del Código Penal). El Centro Español de Derechos Repográficos (CEDRO) vela por el respeto de los citados derechos.

En la redacción del presente libro mencionamos logotipos, nombres comerciales y marcas de ciertas empresas u organizaciones, cuyos derechos pertenecen a sus respectivos dueños. Este uso se hace en virtud del Artículo 37 de la actual Ley 17/2001, de 7 de diciembre, de Marcas, sin que esta utilización suponga relación alguna del presente libro con las mencionadas marcas ni con sus legítimos propietarios. En ningún caso, estas menciones deben ser consideradas como recomendación, distribución o patrocinio de los productos o servicios o, en general, contenidos titularidad de terceros.

Primera edición: febrero de 2024

Imagen de la cubierta: Fotografía de ciudadanos republicanos armados practicando con armas en las calles de Barcelona, 28 de abril de 1937, durante la Guerra Civil española. Public Domain CC 1.0. Rijksmuseum. www.europeana.eu/item/90402/NG_2011_15

EDUARDO MONTAGUT

Es licenciado con premio extraordinario en Historia Moderna y Contemporánea por la UAM donde posteriormente alcanzó el doctorado. Colabora activamente en distintos medios impresos y digitales que compatibiliza con su carrera docente en Educación Secundaria en la Comunidad de Madrid.

Es autor de varios libros publicados en esta misma editorial, entre los que destacan: El Antiguo Régimen; El tiempo de las revoluciones; Historia del socialismo español; La España del siglo XVIII; Del Abrazo de Vergara al bando de guerra de Franco; Episodios que cambiaron la Historia de España; La organización territorial de España, el origen de las autonomías; Las relaciones Iglesia-Estado en España; Las Constituciones en España; El libro de la Gran Guerra, el fracaso de Europa; Diccionario de Historia Contemporánea; Europa en su cénit, el auge de Occidente; El republicanismo en España; Los liberales en España.

Este libro está dedicado a dos niños, Víctor y Eduardo, que en aquellos años de la Guerra tuvieron que recorrer los caminos de Cataluña.

Introducción

Esta obra pretende ser un diario de los acontecimientos de la Guerra Civil desde los meses previos a su estallido hasta su final y, por lo tanto, ateniéndonos a un desarrollo cronológico. Es evidente que ha habido que elegir entre el aluvión de hechos que se produjeron en aquellos años de contienda entre españoles y también entre personas de distintas nacionalidades, pero creemos que hemos incluido los que se pueden considerar los más destacados, en un proceso histórico donde, como bien sabemos, hay controversias de todo tipo, y muchas de ellas, lamentablemente, más allá del análisis historiográfico.

He querido desarrollar más algunos hechos por su especial relevancia sobre otros porque pueden ayudarnos a entender mejor la Guerra. En este sentido, se ha priorizado todo lo que tiene que ver con ideologías, políticas, economía, sociedad y represión sobre lo exclusivamente militar, con excepciones, ya que ha habido que explayarse en las batallas decisivas.

Este libro gustará a unos y a otros no. Eso es inevitable cuando se escribe Historia, y más sobre la Guerra Civil. He intentado realizar un trabajo con distancia y serenidad, con un afán divulgativo, pero con rigor como seña de identidad. Pero usted, estimado lector, y usted, estimada lectora, tienen la última palabra, como no podía ser de otra manera. En fin, escribir sobre la Guerra Civil española es un ejercicio intenso y duro, pero sumamente necesario en este país.

Gracias por leer.

Año 1936

ENERO

Día 7

Disolución de las Cortes y convocatoria de elecciones para el 16 de febrero.

El primer Gobierno de Chapaprieta duró hasta finales de octubre de 1934. El escándalo del Estraperlo provocó que Lerroux saliera del mismo. El posterior caso de corrupción, el denominado Asunto Nombela, hundió para siempre al radicalismo español. En este contexto, Alcalá-Zamora volvió a encargar a Chapaprieta formar un nuevo ejecutivo. Pero su segundo Gobierno cayó el 14 de diciembre. Gil Robles estaba presionando dentro de su estrategia para hacerse con el poder. Sin el apoyo de la CEDA, y con un radicalismo desprestigiado, el ejecutivo no podía continuar. La excusa presentada por la derecha para retirar el apoyo a Chapaprieta fue el asunto de la reforma fiscal. Gil Robles quería la presidencia del Gobierno, pero Alcalá-Zamora, a pesar de su evidente conservadurismo, recelaba intensamente de la CEDA porque consideraba que no era una formación política completamente leal a la República, que solo había aceptado el juego político desde un calculado accidentalismo. Pero el presidente de la República tampoco quería ir a elecciones, y decidió encargar la responsabilidad de formar Gobierno a Manuel Portela Valladares, otro político independiente y que gozaba de la confianza y aprecio de Alcalá−Zamora. Esto ocurría el 15 diciembre. Pero era una solución muerta de antemano porque la CEDA no iba a otorgar su apoyo. En consecuencia, Alcalá−Zamora se vio obligado a disolver las Cortes. La Constitución permitía hacerlo al jefe del Estado, aunque solamente dos veces en su mandato.

Día 15

Se firman el Pacto y el programa del Frente Popular.

El Frente Popular estuvo formado por Izquierda Republicana, Unión Republicana, PSOE, UGT, Federación Nacional de Juventudes Socialistas, PCE, Partido Sindicalista y el POUM. El programa era republicano, con el añadido de la amnistía y rehabilitación política de los presos políticos, restituyéndoles en sus cargos y responsabilidades, condiciones ineludibles para el PSOE y la izquierda obrera. La gestación del Frente Popular se dilató más de un año, desde diciembre de 1934 hasta el 15 de enero de 1936, fecha del pacto. En el invierno de 1934−35 los republicanos entablaron conversaciones entre sí, y el 12 de abril anunciaron su unión electoral con un programa de gobierno. Antes, en enero, Azaña contactó con Prieto para insistir en la necesidad de establecer una conjunción republicano−socialista. En el PSOE se decidió escuchar a las bases sobre esta capital cuestión y se pasó una encuesta a las agrupaciones socialistas. El Partido Comunista expuso públicamente su estrategia de la Alianza Obrera, en junio.

Al margen de los partidos políticos se vivió una intensa actividad en pro de una alianza de toda la izquierda: comités a favor de la amnistía, de ayuda las víctimas de la represión, mítines, fiestas unitarias, etc. El anarquismo optó por moderar sus ataques a los republicanos y socialistas, y cuando llegó el momento, a pesar de su tradicional defensa de la abstención, no hizo campaña contraria al Frente Popular y, de forma privada, apoyó a las candidaturas de izquierda. El 14 de noviembre de 1935, Azaña propuso oficialmente a Prieto una conjunción. Dos días después, el PSOE le respondió afirmativamente con la condición de que el pacto incluyese a la izquierda obrera. El Partido envió un programa a las organizaciones obreras como un documento−base para la negociación de la alianza. Comenzaron las reuniones entre republicanos y socialistas. Estos representaban en estas reuniones no solo al partido sino, también a las organizaciones obreras, por lo que tenían que reunirse, además con sus representantes. Estaríamos en una especie de negociación a tres bandas. No fueron fáciles las negociaciones dada la heterogeneidad de la izquierda. El PNR se retiró el 14 de enero por su resistencia a aceptar la presencia comunista.

FEBRERO

Día 4

Se constituye el Front d’Esquerres en Cataluña

. En Cataluña, el proceso de unión tuvo su primera etapa, en julio de 1935, cuando se firmó la

Coalició d’Esquerres Catalanas,

formada por la Esquerra Republicana, Acció Catalana Republicà, Partit Nacionalista Republicano Català y

Unió Socialista.

El 4 de febrero se constituía el

Front d’Esquerres en Cataluña,

con los grupos anteriores de la

Coalició más el Partit Comunista de Catalunya,

el

Partit Català Proletari,

el POUM y la

Unió de Rabassaires.

Día 16

Elecciones generales. Victoria del Frente Popular.

La victoria del Frente Popular fue ajustada en votos, aunque se tradujo en una mayoría absoluta en escaños.

Día 17

Manuel Portela Valladares autoriza la apertura de las Casas del Pueblo, cerradas desde la represión de la Revolución del 34.

Gil Robles, líder de la CEDA, solicita a Manuel Portela Valladares la declaración del estado de guerra, pero este se niega.

Gil Robles y Francisco Franco, jefe del Estado Mayor del Ejército, intentan contactar con el inspector general de la Guardia Civil, Sebastián Pozas y al ministro de la Guerra para que impongan la ley marcial ante posibles desórdenes.

Motines de presos políticos en distintas cárceles.

Asaltos a partidos y redacciones de periódicos de derechas.

Día 18

Los generales Franco, Goded y Fanjul con otros mandos estudian la posibilidad de declarar el estado de guerra.

Declaración del estado de alarma por parte del Gobierno durante ocho días.

Día 19

Azaña forma un nuevo Gobierno, constituido por miembros de partidos republicanos del Frente Popular.

Preside el Gobierno Santiago Casares Quiroga del O.R.G.A. El PSOE decide no participar.

Día 21

Franco es nombrado comandante militar de Canarias.

Se declara la amnistía para los represaliados de la Revolución de 1934.

La Diputación Permanente de las Cortes aprobaba la amnistía de todos los condenados por los sucesos de la Revolución de octubre de 1934, por propuesta de Azaña, y que constituía uno de los puntos más destacados del programa político del Frente Popular para las elecciones. Debe tenerse en cuenta que esta amnistía fue demandada desde la calle desde el primer momento en el que se produjo la victoria electoral de la izquierda. Era evidente que el encarcelamiento de miles de personas a raíz de aquellos hechos había generado un intenso malestar social, muy agudizado en Cataluña. El Decreto−ley fue aprobado por unanimidad por la Diputación Permanente, presidida por Santiago Alba. Constaba de un solo artículo, y se tuvo que debatir de forma muy rápida, con una convocatoria del día anterior hecha por telegrama, provocando que no pudieran acudir todos los diputados, aunque los no asistentes mandaron votos favorables. Al final, se reunieron dieciocho diputados, cumpliendo lo exigido por la ley, ya que se necesitaba un mínimo de catorce. Los propios diputados de la CEDA votaron favorablemente, animados por la necesidad de mantener el orden público, y porque era evidente que había sido una demanda que había ganado en las elecciones.

Día 23

El general Eduardo López Ochoa es detenido por su especial protagonismo en la represión de la Revolución de octubre.

Día 26

Restitución de la Generalitat de Cataluña.

Se recupera la normalidad institucional. El

Parlament

reelige a Lluís Companys.

MARZO

Día 8

Se produce una reunión, en el domicilio madrileño de un amigo de Gil Robles, de generales entre los que estarían Emilio Mola, Luis Orgaz, Ángel Rodríguez del Barrio, Andrés Saliquet y Francisco Franco, entre otros, así como el teniente coronel Valentín Galarza, miembro de la UME.

La Unión Militar Española fue creada en diciembre de 1933, teniendo carácter semisecreto y con la finalidad de terminar con la República. En la reunión se resuelve organizar un alzamiento militar, acordando dar el mando de la Junta Militar que debía constituirse al general Sanjurjo exiliado en Portugal después de verse conmutada su pena de muerte por el golpe de agosto de 1932 y excarcelado en el segundo bienio de la República. Por el momento, se designa como coordinador al general Ángel Rodríguez del Barrio.

Dada la extensión de la UME entre la oficialidad contraria a toda la política militar que puso en marcha Azaña desde el primer momento de la República, se estableció que había que aprovechar su organización. En lo político todavía no se establece un programa evidente. La fecha para la sublevación se fija para el 20 de abril.

Día 12

El diputado socialista y destacado jurista Luis Jiménez de Asúa sufre un atentado en Madrid por parte de falangistas.

El político sale ileso pero su escolta, el policía Jesús Gisbert, muere en el atentado. En consecuencia, el Gobierno prohíbe el partido de Falange y el día 14 detiene a José Antonio Primo de Rivera.

ABRIL

Día 5

Se constituyen las Juventudes Socialistas Unificadas.

La organización juvenil política, que jugaría un destacado papel en la Guerra, fue el fruto de la unión de las Juventudes Comunistas de España, vinculada al PCE con las distintas Federaciones de Juventudes Socialistas del PSOE. Su primer secretario general sería Santiago Carrillo. Muchos de sus militantes estuvieron ligados a las Milicias Antifascistas Obreras Campesinas (MAOC), el germen del Quinto Regimiento.

Día 7

Se vota en las Cortes la destitución del presidente Niceto AlcaláZamora.

La Constitución permitía al presidente de la República dos disoluciones de las Cortes, pero la segunda debía someterse al juicio de las mismas, pudiendo procederse a la destitución del presidente si se consideraba que se había cometido alguna irregularidad. La izquierda así lo consideró. En todo caso se planteó un debate porque hubo diputados que consideraron que, en realidad, la segunda había sido la única que había practicado Alcalá−Zamora porque no podía contarse la anterior por tratarse de las Cortes Constituyentes. La votación arrojó 238 votos favorables a la destitución por solamente 5 en contra, pero 174 diputados se ausentaron o abandonaron el hemiciclo. Aunque el presidente se resistió, terminó por admitir su cese. Diego Martínez Barrio, como presidente de las Cortes, asumió de forma interina la Jefatura del Estado.

El general Queipo de Llano, que conspiraba por su cuenta, visita a Mola en Pamplona, donde se llega a la conclusión de la necesidad de colaborar en los esfuerzos conspirativos.

Día 13

Es asesinado el magistrado del Tribunal Supremo, Manuel Pedregal, por parte de falangistas, como represalia por haber actuado como ponente en el juicio por el atentado a Jiménez de Asúa.

La Falange estaba difundiendo listas negras contra los jueces para intimidarlos, con amenazas concretas a magistrados que había dictado sentencias contra miembros del partido.

Día 14

Desfile militar en el madrileño Paseo de la Castellana para la conmemoración del quinto aniversario de la proclamación de la República.

Estalla un artefacto cerca de la tribuna principal y se producen disparos que matan a Anastasio de los Reyes, guardia civil, aunque no se encontraba de servicio, además de herir a varias personas. Se produce un cruce de acusaciones entre la derecha y la izquierda a raíz del atentado.

Día 15

Entierro del guardia civil que terminó siendo una manifestación contra la República a pesar de los intentos del Gobierno para que fuera exclusivamente un entierro.

Asisten José María Gil Robles, líder de la CEDA y José Calvo Sotelo, destacado líder de la extrema derecha. También están presentes militares y falangistas armados. Se producen tiroteos, con seis muertos y tres heridos. Uno de los muertos es el primo de José Antonio, el estudiante y falangista Andrés Sáenz de Heredia. Entre los heridos estaría el tradicionalista José Llaguno Acha. En represalia, se intentó linchar al teniente José del Castillo, militar y ahora miembro de la Guardia de Asalto, conocido por su compromiso socialista. Castillo estaba al frente de la dotación de guardias de asalto que trató de disolver la manifestación, y se le acusa de la muerte de Sáenz de Heredia y de las heridas a Llaguno. El teniente Castillo es conducido a la Dirección General de Seguridad, siendo puesto después en libertad sin cargos. Ante las amenazas que recibe, sus superiores le proponen un traslado que Castillo no acepta. Sufrirá dos atentados fallidos posteriores antes de su asesinato en julio.

La tensión en la calle se multiplica durante la primavera con una cincuentena de víctimas entre las organizaciones obreras a manos de los falangistas y una cifra ligeramente inferior entre los falangistas. Se asaltan o se incendian un centenar de edificios religiosos, aunque ningún miembro del clero fue víctima de la violencia política de la izquierda. El desarrollo de las organizaciones y milicias paramilitares en los dos lados del espectro político y en el de los nacionalismos sin Estado, así como el evidente ejercicio de la violencia política, generó más que una situación real de caos en España en la primavera de 1936, una percepción del mismo por parte de la derecha que acusó al Gobierno de ser incapaz de mantener el orden público. La prensa conservadora y de extrema derecha comenzó a incitar para que se produjera una rebelión para frenar una supuesta deriva dictatorial y anticlerical por parte de la izquierda.El clima guerra civilista comenzó a ser asfixiante, aunque un análisis sereno de la situación entre febrero y julio de 1936 permite observar que, a pesar de que existían una clara crisis y una evidente polarización política, no se estaba dando una situación revolucionaria. En todo caso, la percepción de lo que estaba ocurriendo en las calles de España por parte de los sectores más extremos de la derecha sirvió para constituir una las principales justificaciones del golpe del 17-18 de julio, obviando que una parte evidente de la tensión era debida también al ejercicio del pistolerismo falangista.

Día 17

Reunión en la casa del general Manuel González Carrasco.Los generales comprometidos con la conjura se reúnen al día siguiente del entierro del guardia civil Anastasio de los Reyes.

Se ratifica lo acordado en la reunión del 8 de marzo, y se dispone que el 20 de abril se ponga en marcha la sublevación. A este grupo ya está incorporado el general Queipo de Llano. Se tomaría el Ministerio de la Guerra, y en la primera hora se sublevarían Barcelona, Burgos, Navarra y La Rioja, además de Valencia y Sevilla. Se alertó a las milicias falangistas y del Requeté. El plan fracasa ante la indecisión de Rodríguez del Barrio, enfermo de cáncer, por la negativa a sumarse del general Pozas, inspector generalde la Guardia Civil, y por el marcaje de la policía a los generales sospechosos. Se detiene a los generales Orgaz y Varela. El primero es confinado en Canarias y el segundo en Cádiz. Rodríguez del Barrio es destituido de su responsabilidad como inspector general del Ejército. La policía se hace con documentos con los nombres de quienes iban a dirigir la Junta que se haría con el poder.

De este fracaso los sublevados sacaron la conclusión de que el plan de la sublevación no podía partir de la capital, ganando fuerza la alternativa marroquí. Los conspiradores deciden que la coordinación de la conspiración pasase a Mola, y para la preparación del golpe en Madrid se designa al teniente coronel Valentín Galarza. Incomprensiblemente, el Gobierno no fue excesivamente contundente ante una realidad palpable, y se conformó con destituciones, destierros y cambios de destino.

Día 19

Mariano Ruiz Funes, ministro de Agricultura, presenta en las Cortes la derogación de la contrarreforma agraria de 1935 para que entrase en vigor plenamente la Ley de Reforma Agraria de 1932.

Día 25

Emilio Mola ,«el director », dicta la primera de las cinco instrucciones que emitió sobre el golpe.

En la instrucción se hace evidente que el alzamiento debía ir acompañado por una durísima represión, «aplicándose castigos ejemplares (…) para estrangular los movimientos de rebeldía o huelgas». Mola está ultimando el golpe, pero es consciente de las dificultades del mismo porque no todas las Fuerzas Armadas ni toda la alta oficialidad se implicaría, además de que las fuerzas políticas republicanas, pero sobre todo las organizaciones obreras, no iban a permanecer pasivas, de ahí la dureza de todas las instrucciones y directrices que impartió en relación con la represión. También fueron complicadas las negociaciones con los carlistas. Mola había ideado un plan en el que el control de Madrid debía ser clave, deponiendo a las autoridades republicanas, suspendiendo la Constitución, y procediendo a detenciones masivas de políticos y miembros de las organizaciones obreras, así como de los militares leales a la República, empleando la máxima violencia. La idea era crear una especie de Directorio Militar con el general Sanjurjo a la cabeza, que debía regresar por avión desde Lisboa. Todo esto estaba más o menos claro entre los sublevados, pero no se había llegado a un acuerdo sobre qué régimen instaurar a continuación, aunque sí la formulación de dicho Directorio como eje de una dictadura militar para restablecer, según las instrucciones de Mola, el orden, y sin dar participación a ninguna opción política, es decir, que debía ser un movimiento militar. A pesar de algunas contradicciones del plan diseñado y de las divisiones internas, Mola consiguió el apoyo de toda la derecha antirrepublicana. La conspiración contó con el generoso apoyo financiero del banquero Juan March. El Gobierno sabía que continuaban los movimientos y conspiraciones, pero se destacó por su pasividad, no tomando medidas para impedir o dificultar las actuaciones de los conspiradores.

Día 26

Elecciones de compromisarios para participar en el proceso de elección del nuevo presidente de la República.

Para elegir al nuevo presidente de la República hubo que proceder a la elección de compromisarios, aunque la CEDA boicoteó el proceso porque argumentó que había una situación de deterioro del orden público y porque no estaba de acuerdo con las resoluciones de la Comisión de Actas de las Cortes sobre los resultados de febrero en Cuenca y Granada. La abstención fue muy alta, y en las elecciones vencieron las candidaturas del Frente Popular.

MAYO

Día 1

Manifestación del primero de mayo en Madrid.

La plaza de Atocha de Madrid se llenó de manifestantes socialistas y comunistas. En la presidencia estarían Francisco Largo Caballero, Luis Araquistáin, Wenceslao Carrillo, pero también dirigentes del PCE como José Díaz, o de las Juventudes Marxistas como Santiago Carrillo. Como era habitual en las manifestaciones del Primero de Mayo, se llevó a las autoridades un documento con las peticiones obreras. El propio Manuel Azaña recibió a la comisión y recogió el pliego. En este año abundaron las peticiones de carácter político, relacionadas con la situación política española y mundial, dadas las tensiones en los dos ámbitos. Se solicitó que se cumpliese el programa que había planteado el Frente Popular. En segundo lugar, se insistió en la necesidad de resolver el paro obrero mediante la adopción de una política de obras públicas, así como el establecimiento de subsidios de desempleo. En tercer lugar, se solicitaba la semana laboral de 40 horas. Además, se pedía que se anulase el crédito que el último Gobierno de centro−derecha había aprobado para acudir a las Olimpiadas que el nazismo había organizado para ese año en Berlín y que el dinero se destinase al fomento del deporte popular. Se debían depurar las responsabilidades por la represión de la Revolución de octubre de 1934. Los mutilados y represaliados en dicha Revolución tenían que ser auxiliados. Debían disolverse los grupos armados fascistas y monárquicos, que, como es bien sabido, estaban muy activos en aquella primavera. Se solicitaba, además, una ampliación de amnistía e indulto para los presos comunes. Por fin, había una petición de tipo internacional: el fin de la guerra imperialista y en defensa de la URSS.

Indalecio Prieto participa en un mitin en Cuenca con motivo de la segunda vuelta de las elecciones, en favor de la candidatura del Frente Popular, frente a la de la derecha en la que se encontraba José Antonio Primo de Rivera.

En el mitin, Prieto defendió el establecimiento de una política de gasto público de signo keynesiano y se pronunció contra la violencia. Pero lo más importante del mismo fue su advertencia de que se estaba organizando una sublevación militar comandada por Franco. Por fin, Prieto hizo un alegato en favor del patriotismo. El discurso fue intensamente criticado por el sector de Largo Caballero, ahondando más la división en el seno del Partido.

Día 10

Manuel Azaña es elegido presidente de la República por 754 votos de los 847 diputados y compromisarios.

La votación de diputados y compromisarios tuvo lugar en el Palacio de Cristal del Retiro madrileño. Al día siguiente, prometía el cargo. Azaña encarga el 13 de mayo formar gobierno a Santiago Casares Quiroga, y donde no había socialistas. El sector del PSOE liderado por Largo Caballero vetó cualquier posibilidad de que Indalecio Prieto fuera designado presidente del Consejo de ministros.

Día 31

El mitin de Écija que iba a protagonizar Indalecio Prieto es boicoteado por el sector «caballerista» del PSOE.

Prieto tiene que abandonar la ciudad, sufriendo su coche un tiro, teniendo que salir a gran velocidad, con la escolta de la conocida como «La Motorizada», es decir, la milicia socialista creada tras la victoria del Frente Popular, y formada por partidarios de Prieto frente a los de Largo Caballero, y que luego tendría un evidente protagonismo en el secuestro y asesinato de Calvo Sotelo.

JUNIO

Día 2

Huelga general de la construcción.

El conflicto paraliza las obras y se radicaliza hasta que el día 4 de julio termina gracias al arbitraje gubernamental, favorable a los huelguistas, aunque seguiría habiendo conflictos por las diferencias entre la UGT y la CNT.

Día 3

Viaje del director general de Seguridad a Pamplona para investigar a los conspiradores.

José Alonso Mallol visita la capital navarra buscando pruebas. Mola recibe un aviso previo del comisario Santiago Martín Báguenas y se puede zafar de la investigación. La investigación es un fracaso.

Día 5

Traslado de José Antonio Primero de Rivera a la prisión de Alicante.

Día 7

Entrevista entre Mola y el general Cabanellas en las Bardenas Reales.

Cabanellas se compromete a sublevarse y a mandar armas a Mola para los requetés. A cambio, quiere que se respete el régimen republicano y que se convoquen Cortes Constituyentes.

Día 15

Llegan informes al Gobierno sobre movimientos en Navarra.

El gobernador civil de Navarra informa a Casares Quiroga de que se ha producido una reunión de militares que conspiran en Irache, y presidida por Mola. El Gobierno ordena no actuar. Ya a finales de mayo, el director general de Seguridad había entregado al presidente de la República y al del Gobierno un listado con el nombre de hasta quinientos implicados en la conspiración con la recomendación de que fueran detenidos. Hasta la misma víspera del 16 de julio llegaron al ejecutivo informaciones fidedignas de lo que se estaba fraguando. En ese día, la Unión Militar Republicana Antifascista visitó al presidente para que destituyese a los principales implicados.

Día 16

Sesión parlamentaria tormentosa en relación con el orden público.

Tiene lugar una sesión en las Cortes protagonizada por Calvo Sotelo y Gil Robles desde la derecha, y Dolores Ibárruri y Santiago Casares Quiroga desde la izquierda.

Día 23

Franco firma una carta dirigida al jefe del Gobierno Santiago Casares Quiroga.

El general alerta al presidente del malestar en el seno del Ejército al considerar que era su deber castrense informar.

Día 24

Envío de instrucciones a los conspiradores del Protectorado de Marruecos sobre desembarco de tropas en la Península.

Mola remite a los conspiradores en Marruecos unas instrucciones para el desembarco de sus tropas en Málaga y Algeciras cuando triunfe el golpe en el Protectorado.

Día 28

Referéndum en Galicia.

Por amplia mayoría se aprueba el proyecto de Estatuto de Autonomía. El texto sería entregado en las Cortes por Gómez Román y Castelao el 15 de julio. No en entró en vigor por el estallido de la Guerra Civil. Sería admitido a trámite en febrero de 1938, pero no se avanzó legislativamente. Las Cortes en el exilio mexicano terminaron por aprobarlo.

JULIO

Día 1

Actuaciones de Mola.

En el denominado «informe reservado» Mola cambia distintos aspectos de la sublevación y presenta un plan definitivo. Además, recibe medio millón de pesetas de los fondos electorales de la CEDA.

Día 4

Juan March financia un avión para el traslado de Franco.

El financiero Juan March entrega un cheque en blanco al marqués de Luca de Tena, propietario del ABC, con el fin de que se pudiera contar con avión que traslade a Franco desde Canarias a Marruecos. March se convertirá en el principal financiador del golpe.

Día 5

Comienzan unas maniobras en el Llano Amarillo (Ceuta), donde distintos generales, con Yagüe como gran protagonista, ultiman los detalles de la sublevación en Marruecos.

Yagüe informó a Mola el 13 de julio, terminadas las maniobras, que las tropas estaban preparadas en África.

Se contrata el Dragon Rapide.

Luis Botín se pone en marcha, por orden de Luca de Tena para contratar el «Dragon Rapide», con el asesoramiento de Juan de la Cierva.

Día 9

Complicaciones con los carlistas.

Se rompen las negociaciones entre Mola y la Comunión Tradicionalista. Se mantienen las diferencias con los carlistas, dirigidos por Manuel Fal Conde, interesados todavía en su propia sublevación.

Día 11

Entrevista al presidente Santiago Casares Quiroga.

Al ser preguntado ante los rumores de una posible sublevación contestó, «¿Así que me dicen que los militares se van a levantar? ¡Pues yo me voy a acostar!».

Se agilizan las relaciones con los carlistas.

Sanjurjo comunica a Mola en una carta que acepta los planteamientos de los carlistas.

Día 12

En la noche del domingo día 12 de julio es asesinado en la madrileña calle de Fuencarral el teniente de la Guardia de Asalto José del Castillo por pistoleros de la Comunión Tradicionalista o por falangistas. El 13 de julio, en represalia, es asesinado José Calvo Sotelo por un grupo de guardias de Asalto y de las milicias socialistas.

En el Cuartel de Pontejos, donde estaba destinado José del Castillo, compañeros suyos y miembros de las milicias socialistas, algunos de ellos pertenecientes a «La Motorizada», se reúnen en un clima enardecido y con deseos de venganza, saliendo varios vehículos policiales de dicho Cuartel con guardias de asalto y miembros de dichas milicias socialistas, destacando Luis Cuenca, Santiago Garcés, y el capitán de la Guardia Civil de paisano Fernando Condés, que acababa de ser readmitido en la Benemérita. Se dirigieron a casa de un militante falangista pero la dirección que tenían no era correcta. Después marcharon al domicilio del líder de Renovación Española, Antonio Goicoechea, pero estaba ausente. Tampoco encontraron al líder de la CEDA, José María Gil-Robles, por lo que, al final enfilaron hacia el domicilio del líder de extrema derecha, José Calvo Sotelo, al que le comunicaron que tenían que ir a la Dirección General de Seguridad. Al poco de arrancar el coche, Luis Cuenca le disparó dos tiros en la nuca, muriendo en el acto. El asesinato sorprendió al resto de los ocupantes que decidieron ir Cementerio del Este, arrojando el cuerpo de Calvo Sotelo. La familia denunció la detención a la policía, iniciándose una investigación hasta que unas horas después se encontró el cadáver.

Día 14

Tiene lugar el sepelio de Calvo Sotelo, proliferando los saludos fascistas en la capilla ardiente.

Antonio Goicoechea pronunció un intenso epitafio. En el acto estuvieron presentes el vicepresidente y el secretario de las Cortes que fueron increpados. Al finalizar el acto hubo altercados con la policía con muertos y heridos. El asesinato de Calvo Sotelo fue una verdadera conmoción por el hecho en sí y por quien lo había cometido, al considerar que el Estado no controlaba a las fuerzas de seguridad. El crimen provocaría que en muchos sectores de la derecha se llegara a la conclusión de que había que sublevarse contra la República. En todo caso, la conspiración, como hemos comprobado, era previa.

Día 15

Franco recibe en Santa Cruz de Tenerife la noticia de que el avión Dragón Rapide para trasladarle al Protectorado marroquí y poder ponerse al frente de los sublevados se encuentra en el aeródromo de Gando en Gran Canaria.

Se suspenden las sesiones parlamentarias durante ocho días.

Día 16

Entrevista entre Mola y Batet en el Monasterio de Irache.

Mola asegura ante su superior, el general Batet, jefe de la VI División Orgánica, que no participa en ninguna conspiración.

Muere el general Amado Balmes, comandante militar de Gran Canaria.

El general Balmes muere por accidente al manipular su arma, aunque es muy posible que hubiera sido un asesinato al no querer sumarse a la sublevación, y su muerte poder convertirse en un pretexto para que Franco pudiera viajar a Las Palmas a su sepelio.

Se produce el primer movimiento conducente a la sublevación entre Villa Jordana y Melilla.

El Tercer Tabor de Regulares de Alhucemas nº 5, al mando del comandante Joaquín Ríos Capapé y por orden del teniente coronel Juan Bautista Sánchez González, abandona su acuartelamiento de Villa Jordana hacia Melilla.

Día 17

Temprano se remiten de parte de Mola tres radiotelegramas en clave para Franco, destinado en Canarias, Sanjurjo en su exilio lisboeta y al coronel Juan Seguí en Melilla, para recordar el inicio del levantamiento ese mismo día, viernes, a las 17 horas.

Algunos opinan que la fecha era el 18, y que todo se adelantó en Melilla para evitar la detención de los que, como veremos, estaban reunidos en dicha ciudad preparando el golpe.

En esa tarde, distintos dirigentes conservadores, aun no estando en la conspiración, fueron avisados para que se marcharan de Madrid o Barcelona. Los que sí estaban implicados ya lo habían hecho después del entierro de Calvo Sotelo.

Por la mañana, varios oficiales se reúnen en el Departamento Cartográfico de Melilla para organizar la ocupación de edificios e instituciones públicas de la ciudad, con el apoyo de falangistas. Uno de estos informa a un dirigente republicano, y este a su vez al general Romerales, comandante militar de Melilla, poniéndose en contacto con el Gobierno, además de enviar por la tarde una patrulla al Departamento, pero el oficial al mando avisa a la Legión, que envía un grupo de legionarios. La patrulla se rinde, y los sublevados marchan a arrestar al general Romerales, que es fusilado.

Se proclama el estado de guerra, se detiene a dirigentes republicanos y del movimiento obrero, aunque hubo algunas resistencias.

En la Base aeronaval de El Atalayón se produjo la mayor resistencia, con el capitán Virgilio Leret Ruiz hasta que se quedó con sus hombres sin munición, y los regulares le vencieron. Fue inmediatamente fusilado. La sublevación había comenzado.

En Ceuta por la noche, el teniente coronel Yagüe se apodera con la Legión fácilmente de la plaza.

La situación en Larache fue más complicada por la resistencia de los militares leales, hasta que al amanecer del día 18 la ciudad cayó. En la tarde del 18 de julio todo el Protectorado era fiel a los rebeldes. En un corto espacio de tiempo se detuvo a un considerable número de altos oficiales leales a la República que, junto con Leret, serían los primeros represaliados por los rebeldes.

Las autoridades marroquíes, informadas de la sublevación, apoyan a la misma.

Tanto el jalifa Muley Hassan como el Gran visir de Tetuán son informados por el coronel Beigbeder. Por decisión del jalifa habrá voluntarios marroquíes entre las tropas sublevadas.

En Madrid, el Gobierno comienza a reaccionar por la tarde.

Santiago Casares Quiroga ordena a la Aviación y la Marina que bombardeen las posiciones rebeldes, mientras que José Giral, a la sazón ministro de Marina, ordena que los buques de guerra bloqueen el Estrecho de Gibraltar. Las dotaciones de los barcos se rebelan contra los oficiales, involucrados en el golpe, por lo que Franco no dispone de la Marina y el bloqueo se consuma. Desde el aeródromo de Tablada en Sevilla salen reconvertidos distintos aviones comerciales, para bombardear las principales ciudades del Protectorado. El bombardeo en Tetuán causó numerosas víctimas, irritando a los marroquíes. También bombardearon los barcos.

Día 18

Franco proclama el estado de guerra en Canarias desde la Comandancia de Las Palmas.

Los militares toman los edificios oficiales y se detiene a los gobernadores civiles. En Las Palmas se declara la huelga general que es frenada en seco por las tropas. Se emite por la radio el conocido como

Manifiesto de Las Palmas

de Franco. Por la tarde Franco despega con el

Dragon Rapide

rumbo a Casablanca, llegando a las diez de la noche. Allí le espera Luis Bolín, periodista de ABC, que es quien había alquilado el avión en Inglaterra. Franco duerme en dicha ciudad.

Huelga en La Palma.

Se declara la huelga general en la ciudad y se forman milicias populares. La isla permanece una semana en manos republicanas, la conocida como Semana Roja, hasta la llegada del cañonero «Canalejas».

Ricardo de la Puente Bahamonde se rinde en el aeródromo de Samia Ramel en Tetuán.

El primo de Franco, y leal a la República, se rinde ante las fuerzas de Sáez de Buruaga, inutilizando los aviones. Fue fusilado el 4 de agosto. La resistencia republicana en Marruecos cesa.

Detenido el Comisario Español en Marruecos interino, Álvarez Buylla.

Sería fusilado el 17 de marzo de 1937.

Sublevación por la tarde de una parte de la guarnición de Sevilla.

Hacia las dos de la tarde una parte de la guarnición de Sevilla se subleva. Se arresta al general José Fernández de Villa−Abrille, y se pone en su lugar Queipo de Llano. Los sublevados se hacen con el control de la ciudad, manteniéndose leales el Gobierno Civil, la Guardia de Asalto y la Base Aérea de Tablada, con el apoyo de militantes de partidos de izquierda y de las organizaciones obreras, aunque no consiguieron armas, como solicitó el dirigente sevillano Saturnino Barneto al gobernador José María Varela Rendueles. El Gobierno Civil es defendido por la Guardia de Asalto, pero la artillería doblegó la resistencia. A las ocho de la tarde, se rinde el gobernador Varela Rendueles y posteriormente el Cuartel de la Guardia de Asalto y la base de Tablada. Los milicianos de las organizaciones obreras resisten en Triana, la Macarena y San Bernardo, pero escasos de armas, aunque desde Huelva se mandan refuerzos (Guardia Civil y de Asalto, así como una columna de mineros con dinamita). El día 22 los sublevados terminan con toda la resistencia, también gracias al refuerzo de la Legión y de los Regulares.

Asesinado el comandante de la Guardia Civil, José Rodríguez-Mendel Briones.

Destinado en Pamplona se opone al golpe, e intenta organizar a los guardias civiles para repeler la sublevación de Mola.

Desde Madrid se consigue impedir que los mandos de la Armada retransmitan el mensaje de Franco.

Rebelión de suboficiales y marinería en Cartagena.

Los sublevados consiguen impedir que los oficiales se rebelen y los detienen.

Declaración de la Huelga General y llamamiento de las organizaciones obreras.