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"La respiración es la condición primera de la vida, y es cuando el hombre respira bien que puede aprender a alimentarse bien". "Todo el mundo respira, pero cada persona absorbe el aire de manera diferente, por esta razón los resultados son diferentes para cada uno. […/…] Para estar sano, el hombre debe respirar profundamente, con la totalidad de sus pulmones. Cuanto más profunda es la respiración, más grande es la cantidad de energía que penetra en ellos. Por mediación del aire, esta energía llega a todas las células pulmonares, ayuda para una buena purificación de la sangre y mejora la salud."
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Seitenzahl: 55
Veröffentlichungsjahr: 2025
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Traducción del francés
ISBN 978-84-10379-53-4
© Copyright reservado a Editions Prosveta, S.A. para todos los países. Prohibida cualquier reproducción, adaptación, representación o edición sin la autorización del autor y del editor. Tampoco está permitida la reproducción de copias individuales, audiovisuales o de cualquier otro tipo sin la debida autorización del autor y del editor (Ley del 11 de marzo 1957, revisada). - www.prosveta.es
Este libro recoge una parte de las enseñanzas del Maestro Peter Deunov (Beinsá Dounó) sobre la respiración, extraídas de las conferencias dadas entre 1897 y 1944. Estos textos ya han sido publicados en búlgaro. Hemos destacado algunos consejos importantes (Nota de los editores).
La respiración es la condición primera de la vida, y es cuando el hombre respira bien que puede aprender a alimentarse bien.
Podemos leer en la Biblia: “Y Dios sopló en su nariz el aliento de la vida, y se convirtió en un alma viva” (Génesis 2:7). Así, por la nariz, Dios infundió el aire en el hombre y recibió en él la vida divina. Gracias a la respiración por la nariz, el hombre encontrará al Señor. Cuando se respira correctamente, se empieza a pensar, y después del pensamiento, vienen los sentimientos. Solo quien respira conscientemente puede encontrar a Dios, que dice así a los hombres: “Cuando respires por la nariz, me encontrarás y oirás lo que te digo...” El aire está cargado de electricidad y de magnetismo, y esta energía, al pasar por la nariz, renueva el sistema nervioso.
Durante los primeros días de primavera, salid a caminar cada mañana. Cuando antes salgáis, mejor. Respirad entonces profundamente. Pero antes de emprender vuestro trabajo, debéis primero purificar vuestra “máquina” ajustarla bien, de lo contrario, ella os puede sorprender desagradablemente en el momento más inesperado y, entonces, no os bastará con una hora, sino que necesitareis decenas de horas para repararla.
La respiración completa incluye la participación, no solo de los pulmones sino de la piel y de todo el cuerpo; cada célula debe respirar. El organismo no soporta ninguna impureza, ninguna sustancia extraña, y si, a pesar de todo, no puede eliminarlas, será la enfermedad la que aparecerá para liberarle de los sobrantes acumulados. La médula espinal posee la propiedad de captar el alimento contenido en el aire y transmitirlo a todo el organismo. Si uno de los canales de la columna vertebral está obstruido, el hombre pierde su vitalidad.
En la vida, la respiración es un tema esencial. Se efectúa por la nariz y los pulmones, pero también por la piel; más de siete millones de poros participan en el proceso de la respiración y, si se obstruyen, el hombre puede morir. Mientras respiráis, debéis mantener vuestra cabeza y vuestra columna vertebral derechas, perpendiculares a la tierra. Se puede observar que ciertas personas poseen un buen estado de salud sin ser fuertes. ¿De dónde proviene la fuerza humana? De los pulmones. Si alguien no respira correctamente, no puede ser fuerte.
Ser o no un hombre espiritual depende del plexo solar y de su funcionamiento, mientras que ser un hombre fuerte depende del sistema respiratorio y del funcionamiento de los pulmones. El estómago realiza movimientos verticales y horizontales, mientras que los pulmones se dilatan. Esto significa que el alimento provoca un cierto movimiento en el estómago, y el aire provoca otro en los pulmones. El hombre debe comer solo después de sentir una atracción por la comida. Cuando se alimenta bien, respira bien; y si respira bien, piensa bien. Este es el mecanismo del pensamiento.
En el aire existe un elemento de inmortalidad que proviene del sol. Los seres humanos poseen conocimientos, aprenden muchas cosas, pero no saben sacar provecho de este elixir que les atraviesa, pero que no permanece en ellos. Los hindúes, aunque sean conocedores de numerosos métodos de respiración, aún no han descubierto este gran secreto de la Naturaleza.
Por lo tanto, en las condiciones actuales de vida, el elemento más importante que el hombre debe cuidar es el aire. El aire es portador de pensamientos puros, claros, divinos. Estos pensamientos penetran así en el hombre a través del sistema respiratorio y, desde allí, suben al cerebro. Éste no puede recibirlos directamente a través del cráneo sin la mediación del aire, que sigue siendo el principal conductor del pensamiento.
Yo os hablo aquí de la esencia del aire, como elemento primario que condiciona la vida del hombre, y no del aire que definen los químicos como una mezcla compuesta principalmente de
oxígeno y nitrógeno. Además del oxígeno, el ser humano recibe del aire fuerzas vitales – como el prana - en mayor o menor medida, dependiendo de si se conoce y aplica ciertas reglas o no las conoce.
En primer lugar, debemos amar el aire que respiramos, alegrarnos de su sabor, de su frescura, de la ligereza que nos aporta. Gracias a este estado de ánimo, las fuerzas contenidas en el aire penetran más profundamente en nosotros y en mayor abundancia.
Todo el mundo respira, pero cada persona absorbe el aire de manera diferente, por esta razón los resultados son diferentes para cada uno. La mayoría de la gente respira con la parte superior de los pulmones. A esto se le llama respiración superficial. Para estar sano, el hombre debe respirar profundamente, con la totalidad de sus pulmones. Cuanto más profunda es la respiración, más grande es la cantidad de energía que penetra en ellos. Por mediación del aire, esta energía llega a todas las células pulmonares y ayuda para una buena purificación de la sangre. Todo depende de una buena respiración que permita extraer toda la energía contenida en el aire. Cuando no ha recibido suficiente alimento a través del aire, el hombre es débil, atormentado, sin vida y sin fuerzas.
Al inspirar, pensad en el Amor divino.
Cuando exhaléis, pensad en la Sabiduría divina.
En la columna vertebral existen tres canales. Dos de ellos están abiertos, uno relacionado con la parte superior del cerebro y el otro con el sistema nervioso simpático. (Uno de estos dos canales está más desarrollado en la mujer y el otro en el hombre.) En el hombre contemporáneo, el tercero, el canal de la verdad está cerrado, y de ahí provienen todos los males. Cuando se abra, el aire podrá entrar libremente en el cerebro, donde circulan los otros dos canales. Después, recorrerán la parte frontal y la parte superior de la cabeza. Así es como el hombre obtendrá una conciencia cósmica. Y su aspecto físico cambiará y tendrá nuevas fuerzas a su disposición.
Aunque el hombre esté evolucionado y sea grande en muchas áreas, es débil e impotente en otras. Por eso es importante que aprenda a respirar correctamente.
Los buenos métodos de respiración son numerosos, pero les falta un elemento esencial, un elemento que depende de la voluntad. Durante miles de años, los hindúes se han