Profecía del séptimo sello - Adrian Ponteprino - E-Book

Profecía del séptimo sello E-Book

Adrian Ponteprino

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Beschreibung

En Profecía del séptimo Sello, un hombre llamado Christian es guiado por profecías y sueños hacia un futuro incierto, marcado por cataclismos y guerras mundiales. A medida que busca la verdad y la redención, su viaje lo lleva a Neuquén, Argentina, donde espera encontrar un nuevo comienzo para la humanidad en medio de la devastación global. El éxodo a Neuquén comienza guiado por dos misteriosos Cubos Negros que desde los cielos iluminan el camino hacia el Faro del mundo. La novela entrelaza misterio, espiritualidad y un mensaje de esperanza en tiempos oscuros.

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Seitenzahl: 643

Veröffentlichungsjahr: 2024

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ADRIAN PONTEPRINO"El Caminante"

Profecía del séptimo sello

Ponteprino, Adrian Profecía del séptimo sello / Adrian Ponteprino. - 1a ed - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Autores de Argentina, 2024.

Libro digital, EPUB

Archivo Digital: descarga y online

ISBN 978-987-87-5061-3

1. Narrativa. I. Título. CDD A863

EDITORIAL AUTORES DE [email protected]

Tabla de Contenidos

Cap. I - “LUZ ANTE MIS OJOS”

Cap. II - “EL ANTICRISTO”

Cap. III - “UN CAMINO DE OPORTUNIDAD”

Cap. IV - “LA DESCONFIANZA”

Cap. V - “EL GOBIERNO DEL SEÑOR TEMOR”

Cap. VI - “HERCOLUBUS”

Cap. VII - “EUFORIA, UNA RUTA AL PRECIPICIO”

Cap. VIII - “LA VOZ DEL MARTIR”

Cap. IX - “SUEÑO O REALIDAD”

Cap. X - “EL SALVADOR CHINO”

Cap. XI - “LA REVELACION DE LAS TROMPETAS”

Cap. XII - “DEVOCION SIN PRECIO”

Cap. XIII - “TRASLACION DEL EJE TERRESTRE”

Cap. XIV - “LAS COPAS DEL APOCALIPSIS”

Cap. XV - “EL BANQUETE”

Cap. XVI - “EL DRAGON DEL CIELO”

Cap. XVII - “EL DESCANSO DE LOS MARTIRES”

Cap. XVIII - “EL SENTIDO COMUNITARIO”

Cap. XIX - “EL MENSAJE DE URIEL”

Cap. XX - “LOS TRES DIAS DE OSCURIDAD”

Cap. XXI - “NIÑO NUEVO”

Cap. XXII - “EL DILUVIO”

Cap. XXIII - “EL FARO”

Cap. XXIV - “LA CIUDAD LUZ”

Cap. XXV - “LA ASCENCION”

No selles las palabras de las profecías de este libro, pues el tiempo está cerca. El inicuo siga en su iniquidad, y el sucio ensúciese más; el justo obre más justicia, y el santo santifíquese más.

Apocalipsis Cap. 22:10

Prólogo

Esta novela maravillosa forma parte de una saga de cuatro en total. Fui guiado para que cada capítulo sea revelador y nos muestre el camino a tomar, en este gran cambio planetario. Transmutación de la tierra misma y del hombre para llegar a ser humano evolucionado, compasivo y empático con los demás. ¿De qué serviría una humanidad sin solidaridad?

Desde mi tiempo de adolescencia abordando temas proféticos, misterios de Egipto, civilizaciones perdidas, textos antiguos y la vida fuera del planeta, me llevo a buscar la verdad en todos estos temas, pero más encontraba, más faltaba. Nunca llegaba a conocer la Verdad Absoluta, porque ella está conformada de tantas verdades como estrellas hay en el cielo. Cada día era un descubrimiento, cada día es un descubrimiento. Entonces comprendí que importante es estar en un continuo aprendizaje, no desperdiciando momentos en cosas improductivas. Como la evolución no se detiene, tampoco la búsqueda apasionada. Ahí descubrí otra verdad, vivir con pasión, hacer todo de ese modo, entonces le di a mi vida una razón de ser. Conocer a Nostradamus, Parravicini, mis grandes mentores espirituales, me dieron la fuerza inquebrantable del don profético y la interpretación de los mismos.

Las profecías sirven para mostrarnos un sendero, para el individuo y la humanidad. Eventos futuros llegaran para que despertemos de esta ilusión tan estructurada que no nos deja ser un humano pleno y feliz. Cada evento futuro nos advierte del error en que nos estamos conduciendo. Entonces estas advertencias son la oportunidad de mejora. No tomar una profecía con terror por los eventos futuros sino, la clara advertencia de corregir nuestras vidas para que eso no acontezca.

Este es mi aporte a la humanidad. ¡Compártelo!

Introducción

Profecía el Séptimo Sello, está basado en el libro de las Revelaciones, más conocido como Apocalipsis. Momento trascendental en que el conflicto entre naciones estará en su máxima expresión. Guerras devastadoras y la naturaleza interviniendo para que el hombre recapacite por su corazón endurecido como el gran faraón egipcio. Muchas profecías han dicho que dos castigos llegarán, uno de la mano del hombre y otra llegada del cielo. Claramente la primera es generada por la tercera guerra mundial para crear el nuevo orden mundial y sus alianzas geopolíticas y la segunda no solo por los cataclismos terrestres sino por la llegada del gran cometa Pax, que es un collar de 22 fragmentos provenientes del cinturón de asteroides directo a la Tierra. La llegada de Pax, esta profetizada en las psicografias de Parravicini y en las cuartetas de Nostradamus que han mal interpretado la palabra como si fuera la traducción en latín de Paz, pero no, se trata del comenta que llegará desde la constelación de Cáncer, muy cerca de las estrellas Castor y Polux.

Pax será visto como otra señal en el cielo siete días antes de alcanzar a la Tierra, a mitad del trayecto entre nuestro planeta y Marte. Los impactos estarán centrados en el hemisferio norte, desde España, sur de Francia, norte de Italia, centro de Grecia hasta centro América y sur de Estados Unidos. El cometa viene para generar el gran despertar de conciencia entre los hombres, sumidos en una crisis espiritual. Estos impactos también detendrán la guerra del hemisferio norte por un breve tiempo

Los tres días de oscuridad llegara también, por la colisión de dos estrellas y será ella, la señal en el cielo, para advertir que todo lo profetizado será verdad. Esa noche oscura del alma será durante un mes de octubre, como dice Nostradamus, la más tenebrosa que la tarde de la pasión de Jesucristo, cuando el gran Maestro inhalo por última y un terremoto partió el templo, para saber que El, es el Mesías esperado. En estos tiempos proféticos, el helio y el hidrógeno se mezclaran con las aguas de los mares y de los ríos, generando un veneno mortal.

Christian, el gran personaje, guiado por un sueño y la esperanza de nuevas tierras, atravesará Argentina, buscando una luz en el firmamento, una luz que como faro guiará el camino de muchos hacia la tierra prometida espiritual que según las profecías es la provincia de Neuquén. Ese faro ilumina en la noche como la columna de fuego guió el éxodo hebreo, atravesando el desierto y las dificultades del Sinaí, esta vez, en tierra Argenta. Muchos en el camino asistirán como samaritanos. Este viaje a Neuquén es el viaje de muchos.

Cap. I

“LUZ ANTE MIS OJOS”

Carísimo, amémonos unos con otros,

Porque el amor es de Dios, y todo

El que ama, es nacido de Dios.

El que no ama, no ha aprendido

A conocer a Dios.

Primera Carta del Apóstol San Juan

Mi viaje a Neuquén no fue al azar. Guiado por las profecías de Parravicini que nos anunció casi cien años atrás, la nueva tierra luego del caos, sería en la cordillera Argentina. Neuquén faro de faros. Así lo llamaba el profeta en sus pictografías y cuánta razón tuvo en todas. Un mundo colapsado por la guerra mundial como primer castigo y luego lo que vino del cielo. Sin duda, un reseteo de los muchos que tuvo esta humanidad doliente.

Salí a tiempo de Buenos Aires, antes que llegara la ola. Estaba profetizado y en varios sueños vi como las aguas invadían el conurbano bonaerense, muchos más tuvieron la misma visión pero nada supe de ellos. No lo dude, si mis guías a través de sueños me mostraban el evento, no podía dudar en marcharme lo antes posible. Así lo hice. Cargue cuanto pude en la camioneta, mucho antes que la señal en el cielo brillara con todo su poder, porque a partir de ese momento los tiempos comenzarían a correr y las oportunidades de alejarme sin inconvenientes disminuirían. Si, en marzo la señal se manifestó pero pocos lo comprendieron. Antes que la guerra comenzara en abril. Ese estúpido conflicto que aún persiste y seguirá en aumento. La Señal o el Aviso como lo llamaron era para que el hombre re capacite su accionar y no lo comprendió.

María en Garabandal lo anunció, el Aviso fue extraordinario. Todos, pero absolutamente todos los habitantes de la Tierra conocimos el poder de Dios, en esos instantes extraordinarios sin saber el tiempo real, cada uno de los seres humanos vimos, vivimos, sentimos, todo el daño que habíamos hecho al prójimo. Cada acción nuestra fue repasada en esos instantes que para muchos fue eterno. Para otros fue placentero, pero para la mayoría de los humanos fue ver sus propios pecados. Dios nos mostró en esos instantes, cuando todo era silencio en el mundo, nuestros pecados, nuestras malas acciones, nuestras mentiras, todo el daño que le causamos al prójimo. La maldad a la naturaleza, al mundo animal también. Cada uno vio como una película nuestras fechorías, pero pocos vieron sus bondades, porque el mundo estaba colmado de pecado. No hubo lugar en el planeta que esa energía del Aviso llegara para que nos observáramos y aprendiéramos de nuestros pecados, para evitar lo que vendría muy pronto. Pero no, no entendió el hombre que de persistir en esa maldad tendríamos más maldad por nosotros mismos. El corazón de muchos se endureció y en lugar de encontrar la paz y comprender que la guerra era el peor de los recursos, no aceptamos la señal y peor nos fue. Mas blasfemo estuvo el ser humano. Pocos lo comprendieron y fueron ellos los que comenzaron a retirarse de las grandes ciudades, porque la maldad caería sobre ellos. En lugar de agradecer por el Aviso y ver en consciencia nuestros pecados, empeoramos y muchos blasfemaron contra el Altísimo. Estaba todo dicho ya. La humanidad se había condenado

Benjamín nos marcó el éxodo a Neuquén, tierra prometida para argentinos y para millones que desde todos los rincones del mundo irán llegando. Pedro Romaniuck, amigo de Benjamín lo dijo también, 360.000.000 millones de seres llegarán a las tierras Argentas. Aun esto no ha sucedido, pero creo que si acontecerá.

Mi transito por la ruta 152 bastante solitaria hacia general Acha, provincia de La Pampa. Apenas la luz del amanecer comenzaba a emerger a mi espalda, pues de la ruta 35 cambie a la 152 que me llevaría a la próxima ciudad. Estaba tan solo en este camino que me detuve para contemplar emerger el sol entre nubes que anunciaban lluvia muy pronto.

Me sentía bendecido por haber salido a tiempo de la ciudad, como si fuera Lot, el personaje bíblico que se retiro de Sodoma antes de su destrucción, sin volver hacia atrás, porque la nueva Era estaba en el oeste. Deseando desde mi corazón una humanidad nueva, como se venía anunciando luego de la Tribulación. Contemplaba con todo mí ser los primeros rayos solares del horizonte y la ruta seguía vacía, sin nadie que la transitara, solo yo y el fresco aire de La Pampa. Que placer estar acá.

Tenía que asegurarme que las rutas a Neuquén estuvieran en condiciones para seguir, los movimientos sísmicos fueron mundiales y los deterioros enormes. Toda la cordillera estaba pasando por su tránsito de reestructuración, no solo física sino que la energía Kundalini del planeta ya se estaba asentando en Neuquén. La fuerza espiritual del Tíbet comenzó su traslado a las tierras Argentas, pero las profecías nos decían que hacia allá debíamos ir cuando todo se calmara, pero yo había comenzado, mucho antes que llegara la ola, viviendo en el campo, perdido en mi propio país para no padecer lo que sabía que vendría. Un extraño entre los hombres, pero un amigo de la naturaleza. Así habían sido mis últimas semanas fuera de la gran ciudad.

Continué con mi viaje e ingrese a Gral. Acha, muchas viviendas en muy mal estado por los sismos, la calle también estaba mal. Alcance la plaza Belgrano y maneje por la calle Padre Buodo, pero algo mi intrigo, tan temprano y la iglesia del pueblo estaba abierta, la luz tenuemente encendida y sentí la gran necesidad de entrar. Pintada en dos colores, amarillo abajo y en toda su estructura de blanco. Tres ventanas redondas siendo la del centro más grande que las otras, eran la representación del Cristo y los dos ladrones. Siempre era grandioso ver los vitro en las puertas y ventanas, arte antigua de armar figuras con vidrios y jugar con los colores para que la luz haga de lo suyo. Simplemente, maravilloso. Las dos puertas con dos ángeles y arriba escrito: “Santa María, ora por nosotros” Eso me emociono y mi asombro fue aún mayor cuando la imagen de Don Bosco estaba allí también.

Ni siquiera en la iglesia podía dejar de preguntarme, cómo el hombre fue capaz de sumar tantos errores, tantas faltas y tanta soberbia con quienes les rodeaba. Se llegó a la sordera teniendo oídos, a la ceguera teniendo ojos y sentidos en buen estado. Todo se debió a que el corazón fue el Sordomudo, una cuestión de pobreza en espíritu y no de la carne. Así fueron los últimos tristes días de los hombres y aun las desgracias y las calamidades, no terminan, simplemente, se inició el comienzo del fin, un fin que pudimos evitar y no lo hicimos.

Quilmes, más precisamente Don Bosco, fue mi ciudad, bien digo fue, porque ni un edificio alto en pie quedó. No sé el estado actual, pero no hay duda que el colapso en Buenos Aires y el caos social debió ser total. Solo el agua podía purificar tantas imperfecciones. Por mi parte, no pretendí luchar por los bienes, lo cual, sí hicieron la mayoría, como bestias del campo, defendieron lo suyo, que en definitiva, ninguno se quedaría con nada.

Un espíritu caprichoso y de obsesiva posesión por las cosas materiales los dominó a quienes se quedaron. Se terminaron aferraron a ellos, como quien se ata a los pies una gran roca y trataron de nadar en un mar turbulento. ¡Imposible de hacerlo!

Pocos eran quienes rezaban. Una pareja muy joven delante de altar y otros más dispersos en el salón éramos los presentes.

Me había acostumbrado al bullicio de la ciudad, las multitudes, el insoportable tránsito, ahora por el contrario. Deambulaba por el interior del país con una paz desconocida, no terminaba de acomodarme con esta nueva vida, demasiada tranquila y con tan poca gente, me resultaba extraño todo. En todas las ciudades que transite, la misma desolación. Pocos habitantes. Mucho se habían marchado en el día del Arrebatamiento. Millones se fueron a los cielos en todo el mundo. Los buenos se fueron, los otros nos quedamos.

Algunos fieles se retiraban, otros ingresaban, pero esa pareja llevaba mucho tiempo orando y no pude evitar acercarme, no para dialogar, porque no era el lugar y el motivo para hacerlo no existía, pero los quería ver de cerca. Me aproximé por un pasillo externo, ya que la arquitectura era realmente bella En todo este espacio, los bancos largos y alineados a la perfección, de dura madera y bien plastificado.

Llegué hasta el primer banco y me arrodillé, iba a ser mi último rezo, cuando ella levantó la vista y suavemente me miró. Tanta dulzura en una mujer no podía haber, sin embargo en ella sí. Reiteradamente la vi tocándose la panza, estaba embarazada. Alegre, no con una sonrisa falsamente dibujada, sino, gozosa en todo su rostro. Imposible enojarse con una Ser así, imposible reprocharle algo a tan dulce muchacha. Paz irradiaba. Sin duda, ese hombre quién la acompañaba era un verdadero afortunado. Él no me miró, ni se enteró que me había acercado, continuó muy concentrado en lo suyo, pero ella, había concluido su oración.

En cierto momento, sentí que molestaba y retorné al lugar anterior. Regresé al asiento que me recibió y una imagen de Cristo cerca de mí. Muchas velas de color blanco iluminaban al Rey de reyes y cuanta tristeza sentía yo con solo pensar en el sacrificio que hizo por nosotros, padeciendo una pasión tortuosa, imposible de soportar para cualquier mortal.

¿Sirvió de algo cargar con los pecados del mundo, para haber terminado así? Un planeta colapsado en sí mismo, probando su propio veneno. El mundo se había enloquecido y no tenía marcha atrás, creyeron tenerlo todo controlado, pero demasiado control los atrapó. Unos pocos usaron la tecnología para hacer más rápido las cosas; comprar, vender, pagar y cobrar.

Unos pocos, muy pocos, controlaron a todos y cuando digo a todos, me refiero absolutamente a todos, millones de seres en todo el planeta no pudieron salir del nuevo sistema económico y financiero único que se había establecido. Se pusieron solos la soga al cuello, con la excusa que era la única solución.

Al principio todos estaban cómodos con lo nuevo, lo rápido llegando a lo espontáneo. Una tentación imposible de resistir, el deseo a tener más y con prontitud, les hizo una dependencia o apego a las cosas mundanas, cuando el hombre no necesitaba tanto. Pero fue así, quisieron más y se lo dieron, lo que vino después fue la consecuencia.

La tentación fue un dulce, se lo pusieron en la boca y el hombre mordió ¡Qué débil y fácil tentarlo! Algunos le echaron la culpa al Demonio, pero… ¿qué culpa tiene el Demonio, si los hombres estaban vacíos espiritualmente?

El Demonio usurpa casas, cuerpos, para que se entienda, porque están vacías. Él entra sin pedir permiso, total, la casa está deshabitada. La culpa no fue de él sino del hombre. Si no le hubiésemos dado espacio para que él entrara, sería imposible que la maldad y los malos pensamientos gobernaran nuestras mentes. Pero eso no ocurrió, el hombre estaba tan lleno de egoísmo, avaricia, pecados y maldad, que se transformó en una invitación y el Demonio aceptó ir a cenar, fue un comensal más, pero uno bastante distinto. Luego vinieron otros invitados por él y no por el hombre, el propietario de la vivienda. En realidad ya no era más dueño de sí mismos, el hombre pasó a ser huésped en su propia casa. ¿Una paradoja? Quizás. ¿O buscamos merecerlo?

Esa costumbre de echarle la culpa al Demonio de todo lo malo o de recriminar a Dios por su ausencia. Que equivocados que estábamos. Los dos presentes, pero la culpa es cien por cien nuestra, ahí radican los errores, no nos hacernos cargo de nuestras flaquezas humanas, siempre echándole la culpa al otro, cuando la responsabilidad de nuestros actos es nada más y nada menos que nuestras. Por eso digo, no busquemos otra explicación porque es así. No busquemos a la distancia cuando el Padre Universal y Creador, mora en nosotros mismos. Ahora es tarde.

No solo la imagen de Cristo estaba frente a mí, sino otra que me llamo tanto la atención que no la comprendía. Una obra artística que no comprendí porque estaba allí, siendo un lugar de oración. Abajo una muchedumbre de gente, mirando hacia arriba, al cielo, donde un ángel estaba con una copa y muchos ángeles más. Pero para mí horror parecía una obra apocalíptica, una obra del Dante en los infiernos, solo que acá el ángel no tenia reparo en castigar a esta humanidad, en cierta manera, era lo que estaba sucediendo. Lo que estaba en esa copa no era nada bueno y cayo donde estaba la muchedumbre y se los veía padecer. Realmente era horrible lo que veía.

Salí de la iglesia y no creía que volviera a verla, por eso cuando llegué a la puerta, miré todo el interior y ese juego de luz y sombra por los rayos solares que penetraban de las ventanas en lo alto, eran maravillosos. Como quien no quisiera la cosa, la joven mujer que ante el altar aun rezaba, recibía de pleno, los cálidos y primeros tenues rayos del amanecer sobre su cuerpo. ¿Raro? Me preguntaba en mi interior. ¡No! Una señal clara para una nueva generación llena de luz, para que ellos, no repitan lo que hicimos nosotros tan mal.

No miré más y salí.

Me he enterado que allá en el hemisferio norte, la luz solar brilla de vez en cuando. Los incendios en los campos y las ciudades se multiplicaron, como si las tinieblas hubiesen envuelto a todo Oriente y ahora Occidente. No estoy equivocado en esta apreciación, porque si no hay luz, hay oscuridad, no solo ante los ojos, también en el espíritu. El espíritu, una palabra bastante corta, pero que encierra un significado y un poder tan fundamental, que ya nadie sabe para que sirve o como se pronuncia. El hombre, en forma individual, no puede echarles la culpa a los otros, porque el mismo hombre fue quién se alejó de lo espiritual y abrazó lo material, ahora, el único material que existe, son las armas para defenderse. Eso sí abundaba, las armas están por todas partes y vaya que se necesitan, es tan valiosa como el agua.

¡Qué estúpidos! No aprendieron de las guerras anteriores, creyeron que todo era una linda película, un film cargado de heroísmo y patriotismo. No me refiero a una nación, sino a varias, que por la soberbia o por el terror, creyeron que podían someter al otro.

Ni que hablar del ignorante discurso de luchar por la libertad, cuándo ya eran libres desde el momento de votar. ¿Libertad? No se dieron cuenta que no era libertad sino rebeldía, no supieron darse cuenta que solo era un discurso para convencerlos a ir a la guerra y darles a unos pocos, muchas y buenas ganancias. Unos pocos que desde ya, no enviaron a sus hijos a la guerra, los escondieron, sabían que iba a ser para largo y seguramente no regresarían. Así fue. No me equivoqué en lo absoluto cuando lo dije hasta el cansancio y vaya que mi lengua se fatigó.

¿La lucha por la libertad?

Me vinieron a la mente las palabras de San Pedro en el segundo capítulo, sobre los falsos doctores “Estos tales son fuente sin agua” deberían tener ese tan vital líquido si son fuente, pero ni una gota en ellos. El siguiente versículo habla de ellos, es decir para estos tiempos: “Les prometen libertad cuando ellos son esclavos de su propia corrupción” y cuanta razón tenía San Pedro, hace casi, dos mil años. Realmente las tinieblas están cubriendo el hemisferio norte, el hemisferio que decía ser del primer mundo, sucumbe

Estas reflexiones me la hice más de una vez.

Hace muchos años tuve un sueño, una visión diría. Vi un valle hermoso, donde un gran río lo atravesaba, todo era sumamente placentero ante mis ojos, pero sentí mucha hambre y un colapso eléctrico en el país iba a suceder y todo se iba a paralizar, nada iba a funcionar y no habría comunicación. Esta primera parte de la visión ya se cumplió cuando el Gran Apagón llegó y los sistemas colapsaron y el hambre se sentía en todos. Pero hubo algo más. Dos Cubos Negros gigantes emergían del río, entendía que era río Negro, cerca de la frontera con la provincia de Neuquén. Estos dos Cubos levitaban en la región y tenían ranuras blancas, tres arriba y tres abajo, lo mismo del lado opuesto. El cubo tenía la función de concentrar la energía del cosmos y a través de las ranuras la luz iba a salir con una fuerza descomunal. Entendí entonces que estos dos cubos eran el Faro que el profeta Parravicini habló hace décadas atrás. El Faro de Neuquén como guía de muchos, para los tiempos de hambre, oscuridad y ceguera. Quien se encontrara perdido podía ir hacia ella y de esa manera encontrar el sendero para llegar a este gran valle que abunda el alimento. Desde entonces entendí, que pese al gran conflicto mundial y las catástrofes climáticas, la asistencia de nuestros guías estarían presentes. Debía encontrar esos dos cubos negros en este viaje.

En Córdoba otro faro brillaba, pero no era igual, sino, un lugar llamado Faro de Sarumah, donde mi compañera de camino espiritual Arista, “Maestra de Llaves”, Leyla Frascino, canalizadora y maestra en incontables técnicas holísticas. Estaba recibiendo a miles de personas en Erks, Capilla del Monte. Muchos buscaron amparo en Córdoba. Nosotros les llamamos “Remanentes” El lugar es un refugio en que muchos llegaron para asistencia espiritual y mucho más. Los que no se quedaban, usaban Faros de Sarumah como posta para continuar su viaje a otras tierras, pero la gran mayoría se estableció allí. Pequeñas comunidades emergieron con total unión comunitaria, porque así sería el mundo de aquí en más. Vivir en comunidad es vivir en “Común Unidad” Tierra comechingona maravillosa y ancestral. Pero algo más maravilloso aún, en todas las provincias Argentinas, en cada asentamiento aborigen, se han creado ciudades luz, comunitarias, basados en esos principios circulares y no verticales. Comechingones, Mapuches, Charrúas, Guaraníes… las viejas ciudades cosmopolitas cayeron por su propio peso y lujos desmedidos. Centrándose ahora en zonas rurales. La Pampa, Córdoba, Neuquén, Mendoza, Entre Ríos, todas están formando sus ciudades comunitarias con los principios tradicionales más antiguos de sus tierras.

Cap. II

“EL ANTICRISTO”

Dichosos de vosotros si sois difamado,

Por el nombre de Cristo,

Porque el espíritu de la gloria.

Que es el espíritu de Dios,

Reposa sobre vosotros.

Primera Carta del Apóstol San Pedro

Me alejé caminando para buscar un lugar donde desayunar y un bar bastante pintoresco hallé. Para mi sorpresa, varias personas tomando café y las típicas medialunas de manteca, que sin duda estaban recién hechas, pues el aroma se sentía desde varios metros, la ventana de la cocina abierta, buena táctica para atraer clientes, sin duda funcionaba. Caí en la deliciosa trampa y no me resistí.

Ocupé una pequeña mesa de madera y silla rustica, demasiado bonito el lugar y muy bien atendido, sin duda la camarera robaba todas las miradas.

No podía dejar de sentir tristeza por aquellos que estaban lejos, padeciendo miles de tormentos en vida. Pero... algo es bien claro, ellos están así, porque se equivocaron y no corrigieron lo que debían, tuvieron tiempo para resarcirse, sin embargo, siguieron en su ceguera hasta que todo colapsó.

—Buenos días, le dejo la carta. – Amablemente la camarera me atendió.

—Muchas gracias. Café doble y cuatro medialunas de manteca por favor.

No estaba solo, varios más desayunando y cada uno entablaba sus conversaciones. Las noticias en la pantalla eran de Medio Oriente. Irán invadiendo todo el Mediterráneo y ocupando gran parte de las islas en un gran saqueo de todas las que estaban en el mar Egeo. Rusia ocupando toda Europa. Alemania defendiéndose como podía. Italia acorralada en su península y tratando de sostener a Roma casi ya colapsada. Pero el silencio se hizo al instante cuando apareció en la pantalla el Anticristo. Todos centraron sus miradas allí, y reconocieron el gran error de no haber visto con tiempo, la intenciones de ese hombre endemoniado.

—Permiso – La camarera me dejaba el café y las medialunas.

—Muchas gracias.

—¿Quién lo hubiese dicho? – Exclamo ella mirando al Anticristo.

—Hubo dos pastores que predicaron en Jerusalén – Dijo un hombre que estaba al otro lado del mostrador. Parecía ser el dueño. – Nos advirtieron lo que estaba por suceder. Pero nadie quiso ver la verdad.

—Es cierto. – Asegure – Esos dos monjes vestidos de lino recorrieron todo Israel predicando lo que estaba por venir. Quien se proclamaba ser el Mesías, era un engañador.

—Así es mi amigo. Todo estaba escrito y profetizado. Me llamo Omar.

—Me llamo Christian. Gracias por tan rico café. – Me presente

—Gracias. Y del mejor… pueden recordar cuando estos dos hombres hablaron día tras día. Y cumpliendo las profecías anunciadas, lo hicieron durante 1260 días.

—Si, y como siempre, nadie es profeta en su tierra. A ellos le sucedieron lo mismo. Poco entendieron el mensaje.

—Christian… no entendieron el mensaje y no supieron ver las señales en el cielo ni en la tierra, que todo estaba por cumplirse. Ellos vinieron para dar testimonio que el fin de los tiempos estaba comenzando. Que los engaños comenzarían inmediatamente y todos como ganado iban al matadero.

—Así es Omar, en Buenos Aires hable una y otra vez, haciéndome eco de cada advertencia de los dos monjes, pues ellos eran Elías y Enoc…

—Bien dicho. Dios los arrebato en su carroza de fuego en tiempos bíblicos y prometió enviarlos para el final de los tiempos para una misión muy precisa que fue advertir la llegada del falso Mesías… – Todos prestaban más atención a nuestro dialogo que a las noticia. – Los monjes intentaron llegar al corazón de los judíos y de todos los moradores del cercano oriente, pues lo que sucedería, de no cambiar, alteraría la historia de la humanidad.

—A veces siento Omar, que su grito fue como el clamor en el desierto semejante a Juan el Bautista.

—Por su puesto mi amigo, ellos son como el Bautista, porque clamaron por el arrepentimiento, el cambio de hábitos, el retorno a la oración y el arrepentimiento. ¿Pero qué sucedió?

—Pocos escucharon y se internaron al desierto, lejos de Jerusalén. Lo sé, porque amigos míos, emprendieron la marcha a tierras lejanas como estaba profetizado. Las montañas son ahora su nuevo hogar, porque está escrito que serán perseguidos por no haber aceptado la Marca de la Bestia. – Todos endurecieron sus rostros y apretaron sus puños con tanta fuerza, que su energía logre sentirla al instante.

—Cuando clamaron ser auténticos, fieles a las escrituras y a no adorar a la Bestia y por sobre todas las cosas seguir la Ley original que el sexto día era el día del descanso del señor.

—¡El sábado! – Exclamo la mesera.

—El sábado. Siempre debió ser el sábado. – Dijo Omar

—Pero la nueva ley tomo el jueves como día de descanso para todos los hebreos y eso fue aberrante, pero…

—Pero nadie lo entendió Christian. Luego de la Agenda 2030, todo estaba listo para el gran cambio planetario y control global. Como borregos todos, ignoraron tamaña conspiración. Nunca entendieron nada. Ignorancia total en los humanos.

—Siempre lo dije. – Exclame con fuerza. – La Agenda y la llegada de la tecnología 6 G, era la señal inequívoca que la humanidad comenzaba a transitar el camino al juicio final. Porque esa tecnología, nueva, integraba todo, velocidad, datos, banda ancha y por sobre todas las cosas implantación de la tecnología holográfica en el cuerpo, como lo fueron los nuevos celulares.

—Alto ahí. – Omar me interrumpió. – Acá fue el caramelo que todos aceptaron. El dulce que el demonio entrego a la humanidad y cayeron en su red. El hombre aceptó los implantes, la telefonía inalámbrica en el cuerpo, los chip.

—¡Y se condenó!

—Se condeno. Sin dudas.

—¿Sabes lo que siento Omar? La humanidad aceptó esta tecnología tan avanzada. Se conectó a la gran red informática que surcaron los cielos de la tierra y se introdujo en esta red artificial, tan desamorada, tan vacía de sentimientos para estar todos conectados a una gran mentira y por consiguiente se desconectaron de Dios. Dejaron de sentir a Dios en sus corazones y solo sentir la velocidad de lo intangible. – Con mucho pesar, me expresaba. – Todos conectados a la gran red y desconectados del Creador.

—Sabias palabras Christian. Este fue el gran objetivo del Falso Profeta.

—Por supuesto.

—Su conexión a la gran red de 6 G y los implantes, fue la Marca de la Bestia.

—Así lo siento. El 666 no es nada más y nada menos que la sexta generación del hombre nuevo. El hombre implantado con estos procesadores y estos sistemas que los une a todos a la gran red diabólica. 6G6 es la Marca de la Bestia. – Lo asegure.

—Sin esta tecnología de avanzada, no se hubiese fusionado con el hombre. Incorporado en su cuerpo. Pero para eso mi amigo Christian, se debió pasar por la Agenda 2030 para que todo estuviera regido por las leyes y la autorización de todas las naciones. Con leyes globales, que todos los presidentes y ministros aceptaron.

—¡Aceptaron pactar con el demonio!

—Por supuesto. Pero sucedió. El nuevo hombre así como fue creado según el Génesis en el sexto día, este nuevo hombre se gesto a través de la tecnología del 6 G, como dices tú.

—Ese fue el Falso Profeta. El dueño de todos los satélites nuevos, el dueño de las empresas de redes sociales y comunicación. Y de la energía eléctrica autónoma y los autos eléctricos y ecológicos. No fue más que una pantalla para mostrarse aliado a la naturaleza y ferviente luchador contra el cambio climático.

—Bien falso.

—Por supuesto.

—Porque el Falso Profeta tenía la obligación y misión de ascender a la tierra desde los infiernos, para asistir al Anticristo. – Todos estaban paralizados. Nuestra conversación estaba llevando a una atención extrema. – Él, vino a dar publicidad y sostener las labores del falso Mesías. Para proclamar su reino desde Jerusalén. El Falso Profeta, ese que ahora todos reconocemos como tal, no se rindió ni se rinde para seguir asistiendo al gran mentiroso.

—Nostradamus también hablo del gran Mendosus, el gran mentiroso. – Recordé

—Nadie como Él.

—Pero aun lo siguen y se multiplican.

—Porque la tecnología los ha atrapado a todos. Están marcados y no se dan cuenta a quien adoran. Entregaron su alma. Para poder comprar y vender.

—Escrito esta.

—Escrito esta. Grande y pequeños, ricos y pobres, todos recibieron la Marca de la Bestia, en sus manos y en sus frentes. Y a partir de allí, todos quedaron conectados a la matriz bestial.

Los recuerdos de nuestros errores fluían al instante. Fue un momento trascendental en la humanidad y claramente no logro ver los sucesos como un gran salto evolutivo. Por el contrario, los hombres se condenaron a la esclavitud por completo. La tecnología fue el gran grillete del que nadie podía liberarse. Por comodidad, entretenimiento. Por estar incorporado al nuevo sistema financiero mundial del cual ninguno quería estar afuera. Ricos, poderosos, empresarios, comerciantes y el trabajador mismo. Todos incorporados a la gran red inalámbrica que les daba todo al instante. Pero condenaron sus almas.

—Disculpen que haga esta pregunta. – La mesera quería hacer su consulta. – ¿Por qué el pueblo hebreo y todos los árabes que estaban y están con el Anticristo no se dan cuenta y siguen con Él?

—Porque están todos cegados por el engaño. Los artilugios que tiene el Anticristo son enormes y el falso profeta les da todo lo que están necesitando en esta nueva era tecnológica. Quien se proclamo rey sobre la tierra gesto el famoso pacto de “Paz y seguridad” – Explicaba Omar.

—Y trajo paz al mundo. Una paz mentirosa. – Afirme.

—Una paz que solo estaba sostenida por los beneficios económicos. Los conflictos se detuvieron gracias a Él y los acuerdos con los nueve países árabes.

—Esos son Omar, los diez cuernos que vio el profeta Daniel. – Aporte.

—Correcto. Esos diez cuernos, son los nueve países árabes más Israel. Pero de uno de los cuernos grandes salió el cuerno pequeño que es el Anticristo. Quien hizo firmar los pactos de no agresión y de beneficios económico para el pueblo de Palestina. Cuando el Pacto se consolido. Con las diez naciones, Palestina recibió muchísimo dinero para reconstruir sus ciudades destrozadas después de la guerra. Y eso habilitó a otro evento.

—¡La reconstrucción del Templo! – Sabía muy bien lo que Omar quería explicar.

—La reconstrucción del tercer Templo estaba en marcha. Palestina recibió una gran suma de dinero para reconstruir su ciudad devastada pero a cambio, el acuerdo era que se debía ceder la mitad de la explanada donde está el Domo de la Roca.

—Voy entendiendo. – Aseguro la camarera.

—Los palestinos reconstruyeron sus ciudades, con todo lo que una ciudad moderna tenía que tener. Israel recibió la mitad de la tierra de la explanada de la mequita y re construyera el templo. Y fue el presidente de EE.UU quien se encargó de la reconstrucción del gran edificio santo… – Hizo una pausa para que siguiera yo

—¡La Bestia del mar! – Exclame. – El edifico, el templo. Estaba en su destino hacerlo. La Bestia siempre tuvo esa misión y su poder político aumento más cuando sobrevivió al atentado perpetrado hacia él. Y como todos saben, los dos disparos, uno en la garganta y otro en la frente, no fueron suficientes para matarlo.

—¡Murió y revivió! – Dijo ella.

—Así lo presentaron. Ese evento que todos vimos, fue anunciado como una resurrección tan sorprendente como el mismo evento de Jesucristo. Por eso, despertó tanta adoración y fanatismo a este hombre que hoy se sienta al lado del Anticristo. – Aseguré. – La Bestia, tuvo todo el poder político y militar del país más poderoso del mundo. Todos lo amaron y aun siguen amándolo como el hombre que resucito de aquel ataque mortífero. Lo adoraron y siguen sintiendo por él, fascinación que no logro comprender aún. Pero lo cierto es que la Bestia, concentra todo el poder militar de América del norte y la protección total desde Egipto, Arabia y Cercano Oriente, incluyendo a los países árabes que firmaron el Pacto de Paz y Seguridad. Para que los ataques terroristas y anti sionistas no llegaran a Israel. No solo estaba el acuerdo de Paz y seguridad sino también, el Triunvirato entre Egipto, Israel y Estados Unidos.

—¡Muchos pactos! – Exclamo la mesera.

—Pactos del hombre y no de Dios. – Le conteste.

—Pero esos pactos. – Omar agregaba. – Si bien todos fueron económicos, fueron para sostener el reinado del Anticristo. Todo pactado en los infiernos. – Esa afirmación daba mucho miedo y reacción en todos. – La Bestia, tiene el poder sobre la tierra de hacer cuanto quiera y contra quien quiera, porque él, tiene la fuerza de todas las armadas…

—¿Y los robots y clones Omar? ¿Qué tienes que decirme de eso? – No pude dejar de preguntar sobre ellos, pues las noticias cada vez eran menos.

—Ellos, los robots, los clones, todo creado y diseñado por el falso profeta una década antes que todo sucediera. Antes que todo se manifestara. En secreto. Para tener un ejército magnánimo, una fuerza militar que se complementara con las tropas que aceptaron la Marca.

—Los chipeados? – Pregunte.

—¡Sí! Todos los que se chipearon. Los que dejaron que la Marca de la Bestia se inyectaran en los cuerpos, frente o mano. Todos ellos unidos a los clones y robots de última generación fueron y son la fuerza de choque más formidable que se haya podido crear. Por eso, el falso profeta quien es el creador de las tecnologías más increíbles sobre la tierra, tiene el control y ha dispuesto un escudo o murallas alrededor de Jerusalén impenetrable.

—Y combaten más allá de las murallas.

—Salen a combatir y vencen en cada incursión. Eso se está diciendo en cada comunicación. Llegando a tierras caldeas o persas. Irak e Irán. Van mas allá de sus fronteras y como bestias feroces con dientes de hierro, devoran y destrozan todo. El poder militar de la Bestia y el Anticristo es descomunal.

—Son una fábrica de crear robots para el combate.

—Si. El falso profeta y sus empresas han logrado crear y asociarse a otras, una producción de máquinas cyborg insuperable. A eso, vinieron a este mundo.

—Cumplida la profecía que el falso profeta haría descender fuego del cielo.

—Así es Christian. – Omar tenía muy en claro lo que quería decir. – Nadie entendía el mensaje del libro del Apocalipsis, y veo que tú si lo entendiste.

—Así es. Desde el primer momento me di cuenta que era él.

—Cuando las profecías decían que el Falso Profeta haría maravillas y haría descender fuego del cielo, todos pensaron en algo mágico o supersticioso, pero muy alejado de la realidad…

—…o más bien….real… – Agregue con una sonrisa irónica.

—Jajajajaja… es verdad mi amigo. Muy real. Porque el falso profeta hacia descender fuego del cielo y lo hace con sus cohetes de alta tecnología que luego de descargar todos sus nuevos satélites para otorgar wifi inalámbrico, comunicación ilimitada y todos sus aparatos tecnológicos nuevos, aquellos que forman parte de la gran red global que envuelve el planeta como una malla electrónica gigantesca, de miles y miles de aparatos surcando el cielo, los vehículos de re entrada, es decir, los cohetes, en lugar de caer al mar, como lo hacían siempre, sus artefactos, descendía del cielo, lanzando grandes llamaradas sus motores, para aterrizar plácidamente en su lugar de despegue inicial. Una proeza tecnológica única, que solo él consiguió. Ese fuego de las toberas de los cohetes, es el fuego profetizado por San Juan en el libro del Apocalipsis.

—“…y hará descender fuego del cielo sobre la tierra, y todos los hombres se maravillarán…” – Dije

—Y así sucedió y sucede. Pero todos al leer el libro profético, imaginaban un evento de magia, lo cual no era así. Solo tecnología que Juan, al tener las visiones, hace 2.000 años, no las podía comprender. Pero en definitiva era esto. El descenso de los cohetes.

Sin dudas nuestra conversación era reveladora para muchos y los que estaban allí presente tenían deseo de preguntar. Conocer porque la vida nos cambio tanto. Desde los eventos proféticos a los sucesos catastróficos que azotan al mundo y Argentina no es la excepción.

—Quisiera hacerles una consulta desde mi ignorancia en todo esto, porque los escucho a los dos y es maravilloso comprenderlo, pero, no entiendo, ¿Si los palestinos obtuvieron su ciudad nueva, Israel obtuvo su templo, como es que todo esta tan mal? ¿Por qué Dios está ausente? – Alguien que estaba desayunando con nosotros se sumo a la charla y sus preguntas nos dio la posibilidad de explicarlo

—Todo suyo amigo. – Me cedió la respuesta Omar. Intuyendo que podía responder.

—Gracias. – Con un leve movimiento de cabeza me dispuse a responder. – Yo retrocedería más aún para comprender el tema de los pactos. El profeta Daniel vaticinó este suceso hace más de 2.500 años, en tiempos de su cautiverio en Babilonia (Irak). El vio cuatro bestias espantosas que salían del mar, pero una, la más importante, que les hablaré ahora. Esta bestia poseía diez cuernos, pero de uno de esos salió otro pequeño, que con el correr del tiempo el cuerno pequeño creció y fue más espantoso que todos los cuernos juntos. Este pequeño cuerno, creció más que todos y arranco a tres cuernos y Él, se quedó con el dominio sobre los seis primeros.

Entonces… los diez cuernos que les hablo, son las nueve naciones árabes que firmaron el “Primer Pacto” el conocido como Paz & Seguridad, con el cuerno decimo que es Israel. Cuando todos creyeron que iban a ser naciones de la Unión Europea. Esa confusión o distracción, permitió que los planes diabólicos continuaran sin obstáculos. Pues las miradas estarían puestas en los países de Europa y no de Medio Oriente.

Este primer pacto, con los diez, duro tres años y medio. – Todos abrieron los ojos ante mi relato, porque inmediatamente comprendieron lo que iba a decir. – Durante esos 42 meses fueron los más gloriosos de la humanidad, porque los problemas económicos desaparecieron por completo en todo el mundo, como si la crisis financiera que sucedió años atrás hubiese sido superada por completo y que hablar del gran apagón en Argentina en noviembre.

—Eso fue muy duro. – Exclamó quien había hecho la pregunta.

—Muchos días sin luz y con la producción detenida en casi todo el país. Las necesidades se sintieron. Ese noviembre de oscuridad no lo vamos a olvidar. Todo colapso. Nada funcionaba. La dependencia al sistema eléctrico fue tan grande y sin salida que quienes apoyaban la energía libre tuvieron su gran salto multimillonario y la fama de ellos creció exponencialmente sin rival. – Al momento de explicarlo, quien hizo la primera pregunta dijo lo que ya todos sabíamos.

—¡¡¡El Falso Profeta!!!

—Exacto. El tenía todo el control y el desarrollo de la Inteligencia Artificial y de las energías libres y renovables. Con este suceso a nivel mundial, sus patentes, desarrollos e influencias empresariales y políticas acrecentó su fortuna y fama a cifras inimaginables. El se catapultó como uno de los hombres más ilustres del mundo, por su aporte tecnológico, espacial y energías sustentables.

—Que astuto. Fue tapa de todas las revistas. Fama y gloria para él.

—Dos años después llega la gran crisis financiera mundial. Todo, pero todos los bancos y sistemas financieros cayeron como en 1927. El desastre económico fue descomunal. Para la población, las pequeñas, medianas y grandes empresas que no pertenecían a la Elite gobernante mundial. Ese conglomerado corporativo que planifico absolutamente todo. Luego la Agenda 2030 pareció ser la solución. El mundo se re organizo financieramente gracias al 6 G. ¿Se va entendiendo? – Pregunte a todos.

—¡Sí! – Respondían al unisonó.

—El Tercer templo ya estaba en marcha gracias a la Bestia, que ya todos conocemos. Porque su marca 666 estaba en su frente. Luego del atentado y de las cirugías pareció haber desaparecido. Pero es él.

El pacto a punto de cumplirse con los diez y el Anticristo quien gestionaba esta alianza, política y religiosa, por la presunta paz. Estaba detrás de todo, pero, su espíritu diabólico aun no emergía. Se mostraba diplomáticamente correcto, religiosamente centrado y conciliador hasta con los más duros y ortodoxo. Y el falso profeta, aportando todo su poder informático y comunicación al servicio de la causa satánica que nadie vislumbraba. Todo parecía ser perfecto. Los implantes en la piel, modificando el ADN humano, uno tras otro se marcaban. Millones.

Y en ese tiempo. Desde que comienza la construcción del templo….aparecen ellos… – Hice una pausa.

—¡Los dos Testigos! – Dijo la mesera.

—Si. Ellos comenzaron a predicar. Los dos Testigos, que eran Elías y Enoc, tuvieron cuarenta y dos meses, es decir 1260 días como estaba profetizado en la Biblia. El tiempo que llevo la re construcción del templo. Y que el pacto de las diez naciones se mantuvo sin alteración, como debía ser. En ese tiempo de prosperidad económica, los palestinos construían su nueva ciudad, después de la tremenda guerra que lo destruyo todo. Claramente, la destrucción de Gaza estaba ya planificada de ante mano, para que aceptaran la ayuda financiera de los diez cuernos. Y también ellos, re edificar sus ciudades. Y todo, gracias al Anticristo que ya estaba siendo mencionado como el Mesías, por sus logros tanto para uno como para otros. Judíos y gentiles…

—¿Puedo decir algo? – Ella quería decir.

—Por supuesto.

—¿Si los dos Testigos predicaron? ¿Y los dos pueblos re edificaron y los dos son descendiente del mismo Padre? ¿Entonces los dos testigos pueden representar a esos dos pueblos tan antagónicos? – Omar se sorprendió por lo que su empleada acababa de decir.

—Que bello escucharte Sarah – Era su nombre. Y gran sorpresa lo que Omar diría. – Permíteme Christian explicar esto. Los dos pueblos, hebreos y musulmanes, tiene como padre al mismo, Abraham, pero sus madres son distintas. Adgar, esclava de Abraham, tuvo a Ismael, de donde proviene el Islam. Y con Sarah su esposa mayor de edad, tuvo a Isaac, de donde descienden los hebreos. Aquí la línea y las familias se dividen. – La mesera se sorprendió, pues era su mismo nombre. – Entonces, Enoc y Elías, quieren ejemplificar a los dos pueblos para que se hermanen. Se unan en amor. Pues ellos son los dos olivos. – Sorprendidos todos, por entender y comprender

—Si Omar, así es. Los dos Testigos buscaron que todos oyeran. Que todos entendieran, más pocos fueron. Pero los que entendieron se aprestaron a salir de Jerusalén, pues los tiempos finales ya eran y en las montañas se escondieron, mientras las ciudades se levantaban y el templo crecía, los Testigos cobraban fama. Algunos atendían y otros se burlaban. Porque el falso Mesías sabía que ellos eran un gran estorbo para él, pero aún, no tenía poder sobre ellos. No los podía matar. Hasta que llegara el día que estaba decretado.

Entendamos esto. El Anticristo, el hijo de Satanás de los infiernos, va a tener poco tiempo para hacer todo lo que pretende, y es llevarse la mayor cantidad de almas posibles al infierno, no conquistar la tierra, porque el triunfo es de Cristo ya establecido desde la creación del mundo. Sabe que va a perecer en el momento de su mayor esplendor, porque así está escrito. En el valle el pie de Yahve hará estremecer las montañas y las fauces de la tierra.

Y sucedió que se cumplían los 1260 días, los que intentaron matar a los Testigos, fallecían, porque en ellos había poder en su palabra y en sus acciones. Y ellos, anunciaron que no llovería, y no llovió. El cielo contuvo sus aguas y no hubo precipitación por tres años y medio. Eso generó mucho odio en el mundo musulmán contra los Dos Testigos, porque anunciaron que ni una gota de agua descendería del cielo a la tierra, lo cual generó muchos problemas en los cultivos. De hecho, no hubo cosechas y se debió importar todo.

Y luego, con la sequia, comenzaron las plagas que azotaron Israel y otras naciones de Medio Oriente. Así estaba escrito y así sucedió.

Y llegó ese día, en que se confirmó el pacto. Y de los diez, tres naciones se odiaron tanto entre sí, las tres naciones árabes que aún se hacen la guerra en la península arábiga. Esas tres naciones se destruyen mutuamente, entre alianzas secretas y con engaños. El oro se les agota y el petróleo también. Esos tres príncipes se enemistaron y se juraron aniquilación hasta que llegue el fin de los tiempos.

Y el pacto a mitad de semana se “confirmo” con solo seis naciones árabes y la hebrea y el templo ya estaba terminado. Es acá, en este momento, que Satanás, asciende de los infiernos y toma control total del cuerpo biológico del Anticristo, su amado hijo, colmando de una energía terrorífica y un poder en su boca que cautivó a todo quienes lo adoraban. Sus discursos tuvieron y tienen un poder magnético sobre la gente, ha logrado tener el control mental de todos.

Y las leyes en Israel se cambiaron. El jueves se transformó en el día del descanso, no más el sábado, y quien comprendió, se marcho de Jerusalén, pero la gran mayoría se quedaron y recibieron la Marca la Bestia, hasta el último y se subordinaron al Anticristo, a la Bestia y el Falso Profeta. Y fue ahí, que lo proclamaron el Mesías y entro al templo y se consagró Dios sobre la tierra y nadie como él, llegaba a ser mejor. Y así, la profecía se cumplió, porque él era hebreo y vivía en New York, pero que desde el comienzo gesto el pacto, porque todo estaba planeado para su grandeza. Y los jueves fueron los días en que los magnates del mundo llegaban a Jerusalén a adorarlo y alabarlo. El Anticristo así, se engrandeció a sí mismo y ordenó matar a los dos Testigos. Y ellos murieron, porque fue la hora para ellos. En medio de la plaza sus cuerpos permanecieron sin que recibieran sepultura, estaba decretado que los dos, debían podrirse irremediablemente. Esto fue una muestra de poder para quienes intentaran enfrentarlo. Los que odiaron a los Testigos, se hicieron regalos y festejaron, no solo en Jerusalén, sino también en el resto del mundo. Fue una celebración, porque no había amor entre esas personas.

Pero, en esos días, la tierra tembló. Jerusalén se sacudió ferozmente y siete mil personas murieron. Esto también estaba profetizado y trajo un pavor enorme en todos, principalmente en aquellos que habían festejado la muerte de los Testigos de Dios. Porque sabían que si el cumplimiento de la profecía surgía, lo que vendría después, seria caos, persecución, guerra, pestes y quien quisiera encontrar la muerte para evitar el dolor, no la hallaría. Porque por un tiempo, la muerte huiría de ellos.

—En el tercer día y medio, el aliento de vida de Dios resucitó a los Dos Testigos. – dijo Omar.

—Y sus cuerpos, se pusieron sobres sus pies. Y una voz bajo del cielo, y una gran nube cubrió Jerusalén y dijo: “Subid acá” Y esa voz fue poderosa, Elías y Enoc, otra vez, fueron arrebatados al cielo. Se envolvieron en una luz incandescente, una luz de transfiguración, porque se cumplieron los 1260 días en que ellos predicaron. Esa voz que bajo por entre las nubes fue escuchada por todos y el horror los tomó, pero no se arrepintieron…

—Pero también hubo otro evento. Que el Anticristo uso para mitigar el dolor de muchos. – Dijo Omar.

—Por supuesto. – Contesté.

—¡El Arrebatamiento! – Omar comenzó a explicarlo. – Este evento sin duda fue lo que marcó para toda la vida a los humanos. En todo el mundo se produjo el arrebatamiento tan anunciado. No solo de la iglesia de Dios como se decía, sino de todos los seres bondadosos e inocentes para que no pasen el periodo de Tribulación. Y no calificó para los cristianos solamente, sino para todo ser humano. Ese día, mientras se re construía el Tercer Templo, millones de seres desaparecieron en un instante en un estallido de luz, como profetizado estaba, los cuerpos ascendieron al cielo y todos recibieron vestiduras nuevas, radiantes, como la transfiguración de Cristo en el monte Tabor. La mayoría fueron niños, los hubo adultos, pero los inocentes eran los más pequeños y todos sabemos bien que este evento celestial fue para que no pasaran la Tribulación que estaba por llegar. El Anticristo, que por entonces era el diplomático más ilustre del momento, uso este evento para consolar a todos los padres o familiares que se vieron afectados por el Arrebatamiento. Poco se podía hacer, ante semejante suceso, pero se aprovecharon ante el dolor emocional de la desaparición espontanea de millones de niños principalmente…

—En cada familia un arrebatado existió. – Dijo Sarah. Mostrando su dolor claramente.

—Si. Pero Dios los arrebato para que sus almas no padecieran lo que estamos aquejando ahora todos nosotros. Peor en medio Oriente y Europa. – Aclaré. – Pero se en mi corazón, como lo he visto en un sueño, que ellos, los arrebatados, volverán a la tierra, pero cuando ésta se encuentre renovada, cuando la maldad no tenga mas lugar aquí, cuando los nuevos cielos y nuevas tierras con la energía Crística instalada para la generaciones futuras, sea el lugar ideal para vivir en paz. Todos ellos retornarán, como nuestro Maestro Jesús lo hará también. Y todo habrá pasado. Los colores serán radiante ante nuestros ojos. Nada será como ahora. Por eso tengo Fe, que los buenos vientos llegarán y aquellos niños y adultos arrebatados y renovados serán nuestros maestros, aunque para ellos, el tiempo no habrá transcurridos. Como si hubiesen saltado en el tiempo y nada de lo malo, de la Tribulación sabrán. Todo habrá pasado pronto.

—Que bello lo que nos has contado Christian. Te honro. – Omar me halagaba.

—Muchas gracias. Creo que ya es el momento de retirarme y continuar mi camino. – Pedí la cuenta. Pague y me levante. No pude dejar de estrechar un gran abrazo con Omar. Por tan maravillosa hospitalidad y sabiduría.

—Gracias a ti Christian por este momento. Eres bien recibido siempre a mi hogar y mi lugar de labores. Estaremos aquí por un tiempo más…seguramente.

—Volveré. No sé cuándo. Pero volveré.

—Otro café estará servido para usted. Ahhh, si se pierde en su viaje hacia la cordillera, porque creo que ese es su destino, le digo que algo raro está sucediendo camino a rio Negro y Neuquén.

—¿A qué te refiere?

—Dicen que en la oscuridad una luz muy fuerte brilla en la noche, como un gran faro de luz, pero no en el mar sino en tierra, alumbra incesantemente. – Mi sorpresa fue enorme. No podía creer lo que estaba escuchando. Pues esto confirmaba la revelación de mi sueño. Los dos Cubos Negros de mi sueño que por sus pequeñas ranuras, salía una gran luz universal que al estar los dos cubos muy cercanos, iluminaban todo el valle, tal cual lo acababa de decir Omar. Como un Faro en la noche. Pero esos faros eran dos cubos negros.

—Que increíble lo que me dices Omar.

—Así es. Muchos están en un éxodo hacia allá, pero el mal clima, las rutas y caminos destruidos por el terremoto, imposibilitan el viaje rápido. Ten cuidado con la caída de agua, porque es un diluvio sin precedente. Por el valle de rio Negro, próximo a Cipolleti es donde está la luz que emerge como un faro. Así que si te encuentras perdido mi amigo…sigue al faro.

—Muchas gracias de verdad. – No quería explicarles la visión que había tenido, no por maldad sino, por el deseo inmediato de salir tras esta nueva información, que certificaba mi sueño profético. Sin más para decir. Salí del bar.

Cap. III

“UN CAMINO DE OPORTUNIDAD”

Uno mismo es su propio refugio,

¡Qué otro refugio podría haber!

Habiéndose controlado a uno mismo,

Se obtiene un refugio difícil de conseguir.

Dhammapada. 160.

Dejé atrás el bar y esa tan maravillosa charla que tanto me agrado. Caminé para ir por mi camioneta y pude ver que la destrucción también había llegado aquí muy violentamente. Ningún lugar en el planeta parece haberse salvado de los terremotos y los daños colaterales de los impactos de los cometas. Varias casas ya no estaban en pie. Prolijamente acomodaron los escombros en diversos sectores e inservibles las viviendas para continuar la vida. Quizás sus moradores hayan muerto al momento pues nadie parecía estar realizando alguna obra para reparar las varias casas que fui observando al caminar. Si esta devastación llegó hasta aquí, no quería imaginar de lo que pudo haber sido el conurbano bonaerense o la misma capital de la Argentina.

Mucha destrucción, tanto de un lado como del otro, hasta los árboles se derrumbaron. Debía agacharme para continuar por la vereda pues uno de ellos, el tronco colapsó sobre lo que fue un hermoso chalet y su techo sirvió para detener su brutal caída. Pasé por debajo y continué hasta que llegue y puse en marcha la 4 por 4 que tanto me ayudó en este viaje tan escabroso o doloroso hacia Neuquén, lugar donde muchos están migrando.

La ruta estaba despejada, toda para mí. Deseaba profundamente, compartirla, pero mi camioneta, era la única.

Tenía la oportunidad y las primeras horas de la mañana por delante. El sol más hermoso no podía ser, el cielo celeste, estaba por ser invadido con algunas delgadas nubes blancas que la atravesaban, se asemejaba al manto de la Virgen de Luján, pero a lo lejos, el cielo estaba muy cubierto. Detuve la camioneta a varios kilómetros de la ciudad con todo lo que llevaba conmigo. El vehículo era mi casa, ya que en Buenos Aires todo se había perdido. Salí del camino y estacioné en una amplia banquina, mucho campo y árboles para disfrutar, pero la mañana era lo que quería deleitar.

Sin duda que La Virgen hizo el último esfuerzo, habló en todos los idiomas al hombre, pero no hicieron caso o quizás, no tenían ganas de escuchar ¿Quién sabe? Pero yo, acá, sentado, contemplando la paz absoluta y en soledad.

Ante mis ojos, una cuadro natural, una postal, una obra de arte. El campo y los árboles bellísimos. Los animales por doquier y las aves ni que hablar, por todos lados. Ellos ni idea tienen de lo que aconteció y acontece aun en el mundo ¿Y por qué deberían? No es problema de ellos. Me deja una reflexión. Nosotros lo tuvimos todo, nos creímos superiores y ahora estamos padeciendo. Nada nos quedó, solo lo que podemos cargar. Mientras que las aves, siguen con sus vidas como cualquier otro día y no las veo preocupadas o estresadas. ¿Quién es más feliz, nosotros o las aves? ¿Quién llora más por los bienes perdidos, nosotros o los animales? Ahora, nada nos quedó.

Me acerqué a la camioneta y me aseguré que todo estuviera bien, la moto atrás bien atornillada y encadenada, por las dudas. El tanque de combustible lleno y los tubos de gas por la mitad, por ahora alcanzaba. Traté de sintonizar la radio, una antena muy larga le había colocado, algo se podía escuchar pero no, quizás pasando las colinas que adelante estaban, podría ayudarme para sintonizar mejor y ponerme al tanto de las noticias locales, por lo menos, debía de haber algo del Tsunami, de Buenos Aires, España, Italia o de los sobrevivientes, pero nada de eso, por lo tanto, no había duda que me encontraba desinformado, me resistía a la idea de ser unos de los pocos. Tanto planeta para mi solo no era justo.