Televisión Pública y convergencia digital (2da. edición) E-Book

Adrián Sergio Maglieri

• Herausgeber: Editorial Autores de Argentina
• Kategorie: Geisteswissenschaft
• Sprache: Spanisch

Seitenzahl: 316

Veröffentlichungsjahr: 2023

Beschreibung

Los cambios tecnológicos, obligan a repensar el anacrónico concepto de televidente y a aceptar nuevas formas de audiencia. En la señal pública de televisión argentina, no solo hay que mirar números de rating, sino tener en cuenta a ciudadanos con derecho a acceder a contenidos de carácter público. En la primera edición (2016) de "Televisión pública y convergencia digital (…)" se buscaba aportar respuestas a la transformación de la señal estatal en su adaptación con las nuevas tecnologías e indagar en las causas que motivaron estas transformaciones. Esta nueva edición, ampliada y actualizada, incorpora un artículo que fuera publicado inicialmente en Paisaje ficcional en la TV Pública. La oferta de ficción seriada en la emisora estatal (2009-2019) libro editado desde la Universidad Nacional de Quilmes, en el marco del 70º aniversario del viejo Canal 7. Dicho artículo (incorporado aquí como un nuevo capítulo del libro) explora en detalle la oferta de ficción seriada de la emisora en vinculación con sus redes sociales y las plataformas on demand estatales (Contar, CineAr Play, y el canal de youtube de la TV Pública). Asimismo, suma la voz de Claudio Martínez, Director Ejecutivo de la Televisión Pública, quien repasa los logros y desafíos de su gestión a través de una pregunta crucial: ¿Para qué sirve tener medios públicos? y un prólogo de Alejandra Pía Nicolosi, reconocida investigadora del área de comunicación, especialista en televisión y directora del Observatorio de ficción televisiva de la TV Pública y plataformas on demand estatales de UNQ. Frente a este panorama y sin perder de vista la perspectiva histórica, esta nueva edición del libro de Adrián Maglieri en 2023, nos convoca a pensar sobre la relación entre medios y democracia, y muy especialmente, sobre el rol de la TV Pública en esta relación. Vuelve a interpelarnos sobre: ¿Qué papel juega la TV Pública en el fortalecimiento de la democracia? ¿Cómo contribuir a la inclusión social desde la TV Pública y sus pantallas digitales? ¿Cómo construir nuevas audiencias entre lo digital y lo tradicional? ¿Qué exigir como ciudadanos y ciudadanas a un canal público? ¿A la TV Pública "no la ve nadie"? ¿Quiénes y cómo somos quienes vemos a la televisión Pública? ¿Y qué es "ver" televisión hoy? ¿Es el carácter gubernamental un problema de la TV Pública, o el problema es el gobierno que la gestione? para encontrar algunas posibles respuestas. Sólo así, la Televisión Pública podrá ser situada en su dimensión e importancia política, en tanto parte fundamental del engranaje que hace al funcionamiento de la democracia en la sociedad actual.

Leseprobe

ADRIÁN SERGIO MAGLIERI

Televisión Pública y convergencia digital

(2da. edición)

Maglieri, Adrián SergioTelevisión Pública y convergencia digital / Adrián Sergio Maglieri. - 2a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Autores de Argentina, 2023.

Libro digital, EPUB

Archivo Digital: descarga y online

ISBN 978-987-87-3768-3

1. Comunicación. I. Título.CDD 302.23450982

EDITORIAL AUTORES DE [email protected]

Tabla de contenidos

AGRADECIMIENTOS

Prólogo

TELEVISIÓN PÚBLICA Y LA CONSTRUCCIÓN DE CIUDADANÍA

INTRODUCCIÓN

ESTUDIOS SOBRE LA TELEVISIÓN ESTATAL EN ARGENTINA

PENSANDO CANAL 7 EN INTERNET

CAPÍTULO I: TELEVISIÓN EN EL SIGLO XXI: MÁS CONTENIDOS Y MULTIPLATAFORMAS

I.1. MARCO TEÓRICO Y METODOLÓGICO

I.2. LA TELEVISIÓN EN EL SIGLO XXI

I.3 INTERNET Y LA EMERGENCIADE LA TV NO LINEAL

I.4 EXPANSIÓN DE LOS SERVICIOS Y EQUIPOS

I.5 - CAMBIOS EN MEDICIONES DE AUDIENCIA-ALGUNOS CASOS

I. 6- NUEVAS FORMAS DE MEDICIÓN DE AUDIENCIA EN ARGENTINA

I.7 COPIA Y DERECHOS ENTELEVISIÓN E INTERNET

CAPÍTULO II: DESARROLLO TECNOLÓGICO Y LEGAL DEL CANAL 7 EN ARGENTINA

II.1- DESARROLLO TECNOLÓGICODE LA TV PÚBLICA

II.2-PRINCIPALES CAMBIOSLEGALES DE CANAL 7

II.3 LEY DE SERVICIOS DE COMUNICACIÓN AUDIOVISUAL

II.4- LOS CAMBIOS EN LA IMAGEN INSTITUCIONAL

CAPÍTULO III: EL CONCEPTO DE TV PÚBLICA Y LA AMPLIACIÓN DEL ACCESO

III.1- SOBRE LA IDEA DE UNA TV PÚBLICA

III.2- TV PÚBLICA Y “GANANCIA SOCIAL”

III.3-AMPLIACIÓN DEL ESPACIO PÚBLICO

III.4 ¿MÁS ACCESO ES MÁS PARTICIPACIÓN?

III.5 AUDIENCIA Y FIDELIZACIÓN

CAPÍTULO IV: TELEVISIÓN PÚBLICA Y CONVERGENCIA DIGITAL.

IV.1- LA TRANSICIÓN TELEVISIVA

IV.2 ALGUNOS PORTALES DE TV ESTATALES EN EL MUNDO

IV.3- LA REVOLUCIÓNDEL CANAL ENCUENTRO

IV.4- EL CASO TESTIGO: “PETER CAPUSOTTO Y SUS VIDEOS”

CAPÍTULO V: PRESENCIA DE LA TV PÚBLICA EN INTERNET.

V.1- EL DESARROLLODEL ÁREA TIC DEL CANAL

V.2 PÁGINAS Y PERFILES OFICIALESDE CANAL 7 EN INTERNET.

CAPÍTULO VI: LA FICCIÓN SERIADA EN LA TV PÚBLICA: ENTRE LA PANTALLA TELEVISIVA Y LAS PLATAFORMAS ON DEMAND

VI. 1 Introducción

VI. 2 - BREVE RECORRIDO POR LAS PLATAFORMAS CONTAR Y CINEAR

VI. 3- UN NUEVO CIRCUITO DE SEÑALES Y PORTALES ÚNICOS

VI. 4- LAS SERIES EN LOS PORTALES ON DEMAND ESTATALES

VI. 5- REPRODUCCIONES EN YOUTUBE Y REDES SOCIALES DE LA TV PÚBLICA

VI. 6- PONIENDO PLAY HACIA ADELANTE

A MODO DE CIERRE

BIBLIOGRAFÍA

Landmarks

Table of Contents

AGRADECIMIENTOS

Como en la primera edición, reitero mi agradecimiento a todos los docentes de la Maestría en Industrias Culturales de la UNQ (Universidad Nacional de Quilmes) y especialmente a mi director durante la investigación y actual rector, Alfredo Alfonso, por la fuerza y el optimismo que me ha dado en el momento justo, sus recomendaciones y su disposición permanente. También a Guillermo Mastrini, Martín Becerra y Santiago Marino, docentes de la carrera de posgrado, que brindaron su enorme experiencia en los seminarios y acompañaron mi crecimiento profesional.

Por supuesto, a la gente de la TV Pública, que brindó la información necesaria, a través de reuniones y entrevistas, especialmente al ingeniero Mateo Gómez Ortega (quien trabajara en el portal Educ.ar, canal Encuentro, TV Pública y el Ministerio de Cultura) cuyos aportes fueron fundamentales para el avance de mi tesis, a Ricardo Olivieri, y a María Fernanda Ruiz, ex coordinadora del área de convergencia del canal.

Sumo a los agradecimientos para esta nueva edición 2023, a Alejandra Pía Nicolosi,

Docente e investigadora en Comunicación Social de la Universidad Nacional de Quilmes, quien dirige actualmente el proyecto “Observatorio de Ficción Televisiva en la TV Pública y plataformas ondemand estatales” (UNQ) a Leandro Murolo, director de la carrera de Comunicación Social de UNQ, quien mi guía en mi tesis de doctorado, y a Claudio Martinez, actual director ejecutivo de la TV Pública Argentina, quien muy amablemente accediera a participar de esta publicación, aportando su experiencia y su mirada, sobre la actualidad del canal.

Prólogo

Desde el sillón fucsia de mi living, cómodamente, “prendo” el libro de Adrián Maglieri:

ZAPPING:

“…caracterizar el nuevo escenario…” “…aumentar su visualización y extender sus fronteras originales”…, “…utilidad común”…, “…activismo digital y el incentivo de la participación…, “…definir y ejecutar políticas públicas con una activa regulación estatal…”, “…desarrollo de la digitalización y la convergencia tecnológica…”, “…ampliando las posibilidades de acceso…”, “…internet, nueva identidad institucional…” “…relación más cercana al ciudadano…”, “…experiencias novedosas desde el punto de vista técnico y estético…”.

Recorro las páginas de la primera edición de Televisión pública y convergencia digital depositando la vista en frases que van emergiendo de forma discontinua, aleatoria, y descontextualizada. No obstante, esta lectura en clave de flujo televisivo se carga de sentido, y no hago otra cosa que pensar en el gran acierto de re-editar este libro en 2023.Pero antes de dejar el CONTROL REMOTO en este punto, me gustaría destacar algunos aportes que nos trae su autor.

MENU RÁPIDO.

Primeramente, subrayar que no abundan publicaciones académicas que centren su interés específico en la Televisión Pública (Canal 7) y menos aún, sobre un tema contemporáneo y en desarrollo constante como son los procesos de digitalización de la televisión. En este sentido, el trabajo de Maglieri podemos ubicarlo entre los pioneros de la temática.

Por otra parte, el autor analiza el periodo 2005-2015, lapso de tiempo en el que él mismo está inscripto como sujeto investigador, siendo así atravesado por la complejidad de la cercanía temporal y el desafío de reflexionar sobre un objeto vivo, dinámico, y en continua transformación.

Asimismo, para comprender el fenómeno en cuestión, Televisión pública y convergencia digital sitúa en detalle el devenir histórico de la señal estatal tanto en su aspecto tecnológico como legal; en el cambio de las formas de medición de audiencia como así también en la transformación de la imagen institucional. Además, hace hincapié en la aparición e incidencia de internet tanto en la reconfiguración del logo del canal como en la expansión de sus contenidos en pantallas y redes sociales digitales en pos de ampliar la participación de la ciudadanía, la difusión de sus contenidos, y el acceso a la programación.

En relación a esto último, esta nueva edición incorpora un artículo del autor que fuera publicado inicialmente en Paisaje ficcional en la TV Pública. La oferta de ficción seriada en la emisora estatal (2009-2019)1, libro que producimos y editamos desde la Universidad Nacional de Quilmes, en el marco del 70º aniversario del viejo Canal 7. Dicho artículo explora en detalle la oferta de ficción seriada de la emisora en vinculación con sus redes sociales y las plataformas ondemand estatales (Contar, CineAr Play, youtube de la TV Pública). Asimismo, esta edición actualizada incorpora la voz de Claudio Martínez, Director Ejecutivo de la Televisión Pública, quien repasa los logros y desafíos de su gestión a través de una pregunta crucial: ¿Para qué sirve tener medios públicos?

Es decir, el libro de Adrián Maglieri, es un estudio que mira la TV Pública en profundidad, proponiendo preguntas y debates que se actualizan y vivifican en esta edición de 2023. Pero…¿Porqué?

SUBIR VOLUMEN.

Este año, por un lado, se cumplen 40 años ininterrumpidos de democracia en Argentina y por el otro, se prevé el “apagón analógico” de las señales de televisión abierta. Se trata de dos hitos que nos invitan a retomar las ideas de Maglieri y pensar en el rol de la televisión pública en la sociedad actual.

El periodo de análisis de Televisión pública y convergencia digital está atravesado por la sanción y aplicación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (Ley SCA) bajo el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. Una Ley fundamental que propulsó la democratización de la comunicación y el fortalecimiento de los medios públicos como bastión para una comunicación plural y diversa, en un sistema de medios históricamente concentrado. Como parte nodal de dicha política pública, se lanzó un plan estratégico de fomento estatal a la producción de contenidos (periodísticos, documentales, ficcionales, de animación) para nutrir las señales de televisión tanto tradicionales como emergentes, y para, al mismo tiempo, fortalecer las capacidades productivas de las distintas regiones del país. Como correlato, se creó el Banco de Contenidos Universales Audiovisuales Argentino (BACUA), el reservorio audiovisual del Estado, de acceso público y gratuito.

Durante este periodo, la TV Pública fue caja de resonancia de dicha política y su oferta televisiva se nutrió de contenidos de calidad y de origen federal, inclusive en formatos de ficción seriada. Un hecho inédito. Por otra parte, la emisora abrió sus redes sociales y extendió sus contenidos en un youtube y sitio web propios, como así también en las nuevas plataformas ondemand estatales por entonces inauguradas2. Además, llegaba la Televisión Digital Terrestre (TDT)3, un sistema de televisión de acceso gratuito a partir de la implantación de 120 antenas trasmisoras, a lo largo y ancho del país4.

Cuando el libro de Maglieri fue publicado en 2016, la Ley de SCA ya estaba intervenida de facto por el ex presidente Mauricio Macri, favoreciendo otra vez los intereses corporativos del poder mediático. Lo que siguió fue el progresivo vaciamiento de los medios públicos: reducción presupuestaria, cientos de despidos arbitrarios y un desplome en la producción de contenidos en todos los géneros. Por su parte, la TDT, que buscaba perfilarse como sistema alternativo a la televisión por cable (monopolizada por el Grupo Clarín) corrió la misma suerte: se detuvo la inversión en infraestructura, hubo despidos de personal, se quitaron arbitrariamente canales privados como Telesur, se cerraron canales públicos como Acua Mayor5,y se paralizó la producción de contenidos para el BACUA. Lo que quedó fue un sistema de televisión fantasmal6.

Llegada la pandemia por COVID en 2020, bajo gobierno de Alberto Fernández se realizaron los primeros anuncios ligados a políticas de comunicación. De hecho, a través del Decreto 690 se repuso la designación de los servicios TIC como “servicio público en competencia”, y se anunció un nuevo Plan Conectar 2020-2023 con el objetivo revitalizar la Televisión Digital Abierta, la construcción del Arsat 3, la ampliación de tendido de la Red Federal de Fibra Óptica, y la construcción de un Data Center de contingencia7. Lo cierto es queentre la crisis sanitaria y las crisis internas del gobierno, no hubo avances en la materia.

No obstante, cabe subrayar el lugar relevante que ocupó la TV Pública durante el periodo de confinamiento, dando respuesta a la crisis sanitaria desde una grilla específica de programación que abarcó educación, información y entretenimiento. La primera acción fue la implementación del programa de acompañamiento escolar “Seguimos educando”8. Asimismo, frente a la proliferación de las fakenews o infodemia, la información9 fue constante y se sustentó con fuentes oficiales y expertos sobre las distintas aristas de la pandemia.

Como señalé en otro escrito10, en materia de entretenimiento, la pantalla de la TV Pública fue la única que priorizó la ficción televisiva nacional como contenido, cubriendo así dos frentes. Por un lado, el frente material vinculado al pago de derechos de reproducción a las y los artistas a través de SAGAI11, constituyéndose así en un ingreso efectivo para un sector económicamente castigado por la pandemia. Por otro lado, el frente ligado a la democratización del acceso gratuito al entretenimiento. Además, en el campo de lo simbólico, representó la decisión y la apuesta política de poner en la grilla historias nacionales que, más allá de entretener e informar, disputan sentidos socialmente construidos en torno a temáticas como la inclusión, problemática de género, identidad, la historia, los medios, el poder. Es decir, narrativas que visibilizan problemáticas y actores sociales desde una mirada alternativa a las historias ficcionales presentes en la televisión comercial hegemónica. A los datos me remito: durante 2020, la TV Pública programó 23 títulos de ficción seriada nacional que sumaron un total de 171hs. Dentro de ese total, 18 títulos (78%) fueron producidos durante el periodo 2009-2015, es decir, en tiempos de plena vigencia de la Ley de SCA; contexto descripto anteriormente.

ATRÁS.

Recordemos que el “apagón analógico” implica la desaparición de la transmisión analógica de las señales abiertas de aire. Es decir, que a partir de diciembre de 2023, sólo se podrá acceder a la TV Pública, América TV, Canal 9, Telefé, y El Trece por televisión digital abierta, por televisión por cable, o por streaming en los casos que ofrezcan esta opción.

Según datos del Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM)12, para el 1º trimestre de 2022, existe un 30% de la población que no accede a televisión por suscripción, un 20% no accede a internet, y que la mayor velocidad de conexión de banda ancha está concentrada en la región AMBA. Recordemos también, que la TV Pública alcanza una cobertura del 100% del territorio nacional, y a sus contenidos se puede acceder de forma gratuita ya sea a través de la señal de TV abierta (hasta el “apagón”), vía satélite, o por la TDA.

GUIA.

Frente a este panorama y sin perder de vista la perspectiva histórica, esta nueva edición del libro de Adrián Maglieri en 2023, nos convoca a pensar sobre la relación entre medios y democracia, y muy especialmente, sobre el rol de la TV Pública en esta relación.

En una sociedad marcada por la desigualdad social, la concentración mediática, la junción entre medios corporativos y el poder judicial, y la existencia de las brechas digitales, la reflexión sobre la libertad de expresión, sobre el acceso a la información, a los contenidos, a la producción cultural audiovisual, y a la participación ciudadana, se vuelve ineludible.

¿Qué papel juega la TV Pública en el fortalecimiento de la democracia? ¿Cómo contribuir a la inclusión social desde la TV Pública y sus pantallas digitales? ¿Cómo construir nuevas audiencias entre lo digital y lo tradicional? ¿Qué exigir como ciudadanos y ciudadanas a un canal público?¿A la TV Pública “no la ve nadie”? ¿Quiénes y cómo somos quienes vemos a la televisión Pública? ¿Y qué es “ver” televisión hoy? ¿Es el carácter gubernamental un problema de la TV Pública, o el problema es el gobierno que la gestione? Son algunas de las preguntas que se abren en la lectura de este libro.

Leerlo, buscar, encontrar posibles respuestas es asumir un trabajo crítico que demanda correrse de los estigmas que han recaído históricamente en la TV Pública: “no la ve nadie”, “está ideologizada”, “es de mala calidad”, “es un derroche de dinero”, “la pagamos entre todos”. Sólo así la Televisión Pública podrá ser situada en su dimensión e importancia política en tanto parte fundamental del engranaje que hace al funcionamiento de la democracia en la sociedad actual.

ZÓCALO:

Televisión pública y convergencia digital de Adrián Maglieri propone este camino. Gracias por ello. Quedan todas y todos invitados a emprenderlo.

SALIR.

Alejandra Pía Nicolosi13

Docente e investigadora en Comunicación Social

Universidad Nacional de Quilmes

1 Nicolosi, Alejandra Pía (2021) (Comp.). Paisaje ficcional en la TV Pública. La oferta de ficción seriada en la emisora estatal (2009-2019). Bernal: Universidad Nacional de Quilmes.

2 Principalmente en Contenidos Digitales Abiertos (CDA) que luego pasó a llamarse Cont.ar (2018). Otras de las pantallas on line de exhibición creadas por el Estado en ese momento fueron Odeón que luego pasó a llamarse CineAr Play y el portal Educ.ar.

3 Como señala Krakowiak (2017), la TDT refiere al dispositivo tecnológico, “es entendida como la digitalización de la televisiónanalógica” (p.60), mientras que la TDA es el nombre adjudicado al sistema nacional de distribución de señales. Krakowiak, F. (2017). La pelea por el espectro y su impacto sobre la Televisión Digital Terrestre. En Gonzalez, Daniel y Nicolosi, Alejandra Pía (comp.). Transiciones de la escena audiovisual. Perspectivas y disputas. Bernal: Universidad Nacional de Quilmes. Recuperado de: http://www.unq.edu.ar/advf/documentos/59e79166cba11.pdf

4 Para profundizar sobre la política pública audiovisual a partir de la sanción de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, consultar: Nicolosi, Alejandra Pía (2014) (Comp.) La televisión en la décadakirchnerista: democracia audiovisual y batalla cultural. Bernal: Universidad Nacional de Quilmes.

5 Acua Mayor fue una canal de televisión de la TDA destinado al público adulto mayor.

6 Para ampliar, consultar: Loreti, D. [Et al] (Comp.) Futuro por pasado: regresión de derechos en las políticas de comunicación del gobierno de Mauricio Macri. Ciudad Autónoma de Buenos Aires: Universidad de Buenos Aires. Carrera Ciencias de la Comunicación; Instituto de Estudios de América Latina y el Caribe-IEALC.

7 Krakowiak, F. (14 de septiembre de 2020). El gobierno prepara un nuevo Plan Conectar. Página 12. Recuperado de: https://www.pagina12.com.ar/291835-el-gobierno-prepara-un-nuevo-plan-conectar.

8 Iniciativa conjunta de la Televisión Pública y el Ministerio de Educación de la Nación para ofrecer apoyo y continuidad educativa en pandemia. En este marco, durante 2020, se ofertaron 14 horas por día de contenidos televisivos educativos que se emitieron por la TV Pública, Pakapaka y Encuentro, y 7 horas que se difunden por Radio Nacional (AM 870). Sitio web oficial recuperado de: https://www.educ.ar/noticias/etiqueta/seguimos-educando.

9 Así, se trasmitieron 22horas y 30minutos semanales (sin contar los flash informativos sobre Covid).

10 Nicolosi, Alejandra Pía (18 de abril de 2021). Pandemia, ficción seriada y TV Pública: toda oferta es política. Agencia Paco Urondo. Recuperado de: https://www.agenciapacourondo.com.ar/cultura/pandemia-ficcion-seriada-y-tv-publica-toda-oferta-es-politica

11 SAGAI - Sociedad Argentina de Gestión de Actores Intérpretes: https://www.sagai.org/

12 Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM): https://datosabiertos.enacom.gob.ar/home

13 Licenciada en Comunicación Social por la Universidad Nacional de Quilmes y Magíster en Ciencias de la Comunicación por la Escuela de Comunicaciones y Artes de la Universidad de San Pablo, Brasil. Investigadora, y profesora de grado y posgrado en la UNQ. Dirige el Proyecto “Observatorio de Ficción Televisiva en la TV Pública y plataformas ondemand estatales” (UNQ). Fue Directora de la Maestría y Especialización en Comunicación Digital Audiovisual (UNQ), y Secretaria General de Asociación Argentina de Estudios sobre Cine y Audiovisual (AsAECA). Durante 2006-2009 fue investigadora para Brasil, del Observatorio Iberoamericano de Ficción Televisiva (Obitel), y participó del Observatorio del Sector Audiovisual de la República Argentina, durante 2012-2015. Ha publicado numerosos artículos y ponencias sobre telenovela y ficción televisiva, tanto a nivel nacional como internacional.

TELEVISIÓN PÚBLICA Y LA CONSTRUCCIÓN DE CIUDADANÍA

Por Claudio Martinez

Ejerce el periodismo desde 1982. Trabajó en prensa gráfica, radio y televisión, donde se especializó en la producción de ciclos periodísticos, educativos y culturales. En diciembre de 2019 fue designado Subsecretario de Medios Públicos de la Nación. Desde mayo de 2021 a la actualidad se desempeña como Director Ejecutivo de la Televisión Pública

¿Para qué sirve tener medios públicos? Para los que nos toca tomar decisiones desde el Estado la pregunta no es sencilla y la respuesta no es única. Obviamente depende de dónde esté parado cada uno y cuál sea su mirada, no sólo sobre el sistema de medios sino fundamentalmente sobre la construcción democrática en la Argentina.

Mi posición como Subsecretario de Medios Públicos, antes, y como Director Ejecutivo de la Televisión Pública, ahora; parte de un concepto que puede aplicarse a todas las áreas de la gestión en el Estado: los medios públicos tienen que servir para equilibrar la cancha, para garantizar el derecho a la información y al entretenimiento, para promover la innovación tecnológica y de contenidos, para comunicar y debatir políticas públicas, para integrar culturalmente a un país amplio y diverso, para combatir la desinformación y las noticias falsas, y sobre todo para construir ciudadanía.

Estos conceptos nos identifican y, a la vez, nos diferencian del modelo de gestión que llevó adelante el macrismo entre 2015 y 2019. En particular en la TV Pública, en ese período se dejó de invertir en contenidos y tecnología, se promovió un achicamiento irracional de la planta de trabajadores y trabajadoras, y se dio marcha atrás con programas que, como Fútbol para Todos, garantizaban el acceso popular al entretenimiento deportivo, entre otros lamentables retrocesos.

LA RECONSTRUCCIÓN

Desde diciembre de 2019, bajo la presidencia de Rosario Lufrano en Radio y Televisión Argentina; se comenzó a revertir ese modelo, reconstruyendo el canal de manera integral. Es decir, no sólo su pantalla, sino también en materia de recursos humanos, salarios, derechos laborales, tecnología, innovación, gestión, transparencia, ética, género y relaciones internacionales.

La explosión del Covid19 tuvo un efecto dual en la vida de la TVP. Por un ladopostergó buena parte de los planes iniciales de la gestión porque obligó a reenfocar los objetivos, y por otro lado sirvió para responder de manera contundente aquella pregunta inicial sobre “para qué sirven los medios públicos”.

La Televisión Pública, Canal Encuentro, PakaPaka, Radio Nacional y DeporTV reaccionaron en tiempo record. En 48 horas estuvo en el aire “Seguimos Educando”, un programa coordinado con el Ministerio de Educación de la Nación que pudo garantizar que los niños, niñas y jóvenes de todos los niveles educativos no perdieran el vínculo con la escuela durante la pandemia. Fueron ocho horas diarias de programación en vivo, realizadas con el esfuerzo de los trabajadores y trabajadoras que arriesgaron su salud para que los contenidos pedagógicos llegaran de manera libre y gratuita a todos los hogares argentinos.

La TVP y la Agencia de Noticias Télam desarrollaron contenidos para combatir la infodemia, es decir, las noticias falsas que circulaban a tanta velocidad como el virus, complicando las estrategias sanitarias.

En materia artística, el canal tomó decisiones que honraron su condición de servicio público. Se emitieron series y películas nacionales, de modo que nuestros creadores y creadoras pudieran cobrar derechos de autor por esas repeticiones. En el mismo sentido, toda la música utilizada en la programación fue de autores y autoras nacionales. Se reforzaron los contenidos científicos para sumar información precisa en momentos de enorme incertidumbre. Con el estreno de “Altavoz” se recuperó el espacio de los jóvenes en la pantalla, integrando miradas de chicos y chicas de todo el país, representando a una generación que sufrió como pocas las consecuencias del aislamiento. También se crearon ciclos como “Todos Estamos Conectados” y “Mañanas Públicas”, que se sumaron al imprescindible “Cocineros Argentinos” en la necesaria recomposición del tejido federal que había sido dañado.

Los noticieros recuperaron espacio en la programación, con más de treinta horas semanales de informativos, incluyendo las ediciones de los fines de semana que habían sido discontinuadas. Las columnas sobre ciencia y asuntos indígenas fueron algunas de las innovaciones de esta nueva etapa, cuyo objetivo central fue ofrecer un periodismo preciso, sereno, que combata las noticias falsas y que evite la alarma innecesaria, los discursos de odio y la espectacularización de la violencia.

En ese sentido, vale la pena destacar al Noticiero Internacional de la TV Pública, único ciclo en la televisión abierta que aborda la información del mundo. También es único el espacio que el canal le ofrece a las personas con discapacidad. El programa “Desde la Vida” lleva más de una década en el aire, haciéndose cargo de la integración.

A su vez, se retomó una sana costumbre. La que el canal sea la pantalla de la Selección Argentina de Fútbol. Un romance que arrancó con las Eliminatorias para el Mundial Qatar 2022 y se consolidó con la transmisión de la Copa América 2021 en Brasil. Para reforzar ese vínculo se conformó un equipo periodístico capaz de representar el sentimiento que une a nuestra audiencia con la camiseta argentina e incorporando mujeres en roles centrales de la cobertura. Además, a partir del regreso del torneo local, luego de la etapa más restrictiva de la pandemia, el canal comenzó a transmitir dos partidos del campeonato de Primera División de Fútbol, con lo cual se restituyó (al menos parcialmente) el derecho de los ciudadanos a ver fútbol de manera libre y gratuita.

La Televisión Pública es el espacio de los grandes debates. Así nació “Desiguales”, un programa que, antes de pasar al formato diario, supo albergar las discusiones sobre los temas de fondo que atraviesan a la sociedad argentina. A mediados de 2021, cuando el peor momento de la pandemia quedó atrás, la TVP junto con el Ministerio de Cultura de la Nación produjeron “Estudio 1”, un gran show musical que, más allá de su búsqueda artística, tuvo el objetivo de ofrecer trabajo y visibilidad a los y las intérpretes que aún no podían ofrecer su arte en espectáculos presenciales por las restricciones sanitarias.

Además, los medios públicos en su conjunto desarrollaron campañas de concientización sanitaria en las distintas etapas de la pandemia, convocando a artistas, deportistas y periodistas para que participaran de esos mensajes.

LA PANTALLA Y LA DIMENSIÓN INSTITUCIONAL

Toda esa actividad no detuvo el proceso de reconstrucción institucional liderado por Rosario Lufrano desde RTA. En medio de la crisis sanitaria los trabajadores y trabajadoras protagonizaron un hito que quedará en la historia del canal: la discusión y redacción del primer Código de Ética de la televisión argentina, impulsado por Cynthia Ottaviano, integrante del Directorio de la empresa.

Las políticas de género implementadas desde el Gobierno Nacional tuvieron un capítulo destacado. Se creó la Dirección de Género de RTA y se tomaron decisiones inéditas en materia de igualdad e inclusión; no sólo con impacto en la pantalla, sino también en la trama laboral cotidiana de la empresa. Mujeres directoras, mujeres relatoras y comentaristas de fútbol, mujeres carpinteras y personas trans al frente de un noticiero; son algunos de los hitos de esta etapa.

En agosto de 2021, la TV Pública y DeporTV comenzaron a transmitir todos los partidos de la Liga de Fútbol Femenino; lo cual significó un espaldarazo para el proceso de profesionalización de la actividad, ofreciendo visibilidad al torneo, a los clubes y a las jugadoras. En esa dinámica fue fundamental la puesta en el aire de “Relatoras Argentinas”, la competencia por la cual el canal dio un espacio relevante al nuevo rol de la mujer dentro del periodismo deportivo. Aún hoy, la ganadora del concurso forma parte del equipo de la TV Pública, no sólo en la cobertura de los partidos de la Liga Femenina de AFA, sino que también protagonizó un hecho histórico, al ser la primera mujer en relatar un partido de un Mundial de Fútbol.

A su vez, por iniciativa del vicepresidente de RTA, Osvaldo Santoro, se puso en marcha el Laboratorio de Innovación, un espacio que pone la mirada en el futuro, donde las nuevas narrativas son protagonistas; en el que participan trabajadores y trabajadoras de la TVP y Radio Nacional. Históricamente el canal público fue terreno fértil para la innovación. El hecho de no tener una programación atada exclusivamente al resultado del rating ofrece la posibilidad de abrir la pantalla a nuevas maneras de contar y a talentos emergentes. Con la creación del Laboratorio se intenta institucionalizar esa búsqueda, es decir, que la innovación sea una política permanente y sistemática.

Otro punto importante, que no se puede dejar de mencionar, es la creación del Programa Transparencia, encabezado por la oposición dentro del Directorio de RTA. Este programa permite mostrar con claridad presupuestos, escalas salariales, declaraciones juradas, compras y contrataciones hechas por la empresa. Cuando se inició la gestión, RTA se ubicaba en el ranking de transparencia de organismos y empresas del Estado en 9/100. En la última medición está en 72/100.

Mientras se desplegaban estas políticas institucionales, se fueron reparando las heridas que la anterior gestión dejó en materia de recursos humanos. Se promovió la recuperación de los salarios, la restitución de derechos laborales y la recategorización de los trabajadores y trabajadoras a través de concursos internos.

Además, dentro de los márgenes estrechos que ofrece el presupuesto de RTA, se reactivaron las compras de cámaras y luces de última generación para recuperar terreno en la carrera tecnológica. Esta etapa se caracterizó además por una intensa actividad en materia de relaciones internacionales. La Presidenta de RTA firmó convenios de colaboración con diferentes canales públicos del mundo.

El caso emblemático fue el acuerdo con el sistema de medios estatales de México, ya que significó la puesta en marcha de la coproducción “FIFAGATE, por el bien del fútbol?”; un serie documental integramente realizada en pandemia, que puso el foco en la corrupción de las máximas autoridades del fútbol mundial. Los convenios internacionales firmados por RTA fueron fundamentales además para que durante el Mundial de Qatar la TV Pública desarrollara una cobertura colaborativa con televisoras públicas de diferentes latitudes.

Los 70 años de la Televisión Pública, celebrados el 17 de octubre de 2021, encontraron a un canal de pie; mirando con orgullo a su historia y con expectativa a su futuro. De ese festejo quedaron dos producciones que ya forman parte del patrimonio de la emisora: “Aire”, una serie documental que se propuso contar la historia de las siete décadas del canal y “Espíritu Pionero”, una serie de micros animados para homenajear a las figuras fundamentales de los primeros años de la televisión argentina. “Espíritu Pionero” fue nominado a los Premios Emmy, galardón que distingue a lo mejor de producción televisiva mundial.

HERRAMIENTAS DIGITALES Y ESPÍRITU FEDERAL

Los contenidos digitales de la Televisión Pública también experimentaron un crecimiento sostenido. Cuando comenzó la gestión el canal de YouTube tenía 952.700 suscriptores. Al momento de escribir este texto tenemos 3.193.241 seguidores. El número crece día a día. Además, la producción de contenidos originales en todas las plataformas tuvo un salto muy significativo. Nuestros medios digitales generan programas y micros de ciencia, noticias, deportes, humor, música y cultura joven; que tienen un público propio cada vez más numeroso.

Un eje irrenunciable de la gestión tiene que ver con el carácter federal de la pantalla. La TVP es el único canal verdaderamente federal. Es decir, es el único que puede verse de modo libre y gratuito por aire en todo el país. Nuestro presupuesto se sostiene con el aporte de todos los argentinos y argentinas. Por eso es inaceptable que ofrezcamos una programación eminentemente porteña. No podemos proponer un federalismo de mano única, desde Buenos Aires hacia las provincias. Nos comprometimos a construir el contracarril. Es decir, la autopista que traiga los contenidos de las provincias a la pantalla federal. Es un proceso complejo y costoso, ya que nuestro centro de producción, con todo su personal, está en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Pero en la programación hay cada vez más contenidos que reflejan esa búsqueda que atraviesa todos los géneros y formatos. El emblema de este eje de gestión es la cobertura de los festivales que se desarrollan en todo el país durante los meses de verano. Los clásicos, es decir, los grandes festivales folclóricos tuvieron desde siempre una presencia destacada en la programación estival. La innovación en las últimas temporadas es que se incorporaron fiestas de distinta envergadura, de géneros diversos y en todos los puntos del país; ampliando la oferta cultural de la TVP.

El alivio que ofreció la pandemia a principios de 2022 permitió que se desplegaran nuevas estrategias de programación que habían quedado demoradas. Así surgieron “SIC, Periodismo Textual”, un ciclo que va al territorio para reflejar cuestiones centrales para la democracia argentina; “Noche de Mente”, un programa que sabe combinar humor, entretenimiento y ciencia; y Mundo Rep, que de la mano del talento y la sensibilidad de Miguel Rep, homenajea a personajes y sucesos de la historia cultural argentina.

La TV Pública volvió a producir ficción. “2.20. Te puede pasar a vos”, con sus dos temporadas, fue un ciclo de producción propia, que convocó a grandes actores y actrices en torno a un formato innovador. Además, se programaron ficciones producidas en provincias como Córdoba y Santa Fe, abriendo espacio en una pantalla de alcance nacional a expresiones audiovisuales poco difundidas.

Siempre es arbitrario e injusto mencionar a unos pocos programas dentro de una programación vasta y plural, pero es necesario destacar los aportes de Felipe Pigna con “Archivo General de la Emoción”, las Madres de Plaza de Mayo con su ciclo semanal conducido por la inolvidable Hebe de Bonafini, los programas culturales conducidos por Cristina Mucci y Osvaldo Quiroga; “La Liga de la Ciencia”, el imprescindible “Unísono”, producido por el Instituto Nacional de la Música; “El Festival del Bien Público” y el sorprendente “Ser Esencial”, que contiene el espíritu y el compromiso social de los curas villeros.

Para los 40 años de la Guerra del Atlántico Sur, la TV Pública preparó dos producciones especiales: “Los Medios de la Guerra”, un documental coproducido con la Agencia Télam, y “Malvinas y yo”, una serie documental que fue en busca de las historias personales en torno al conflicto. Además, sobre fines de 2022, se emitió la serie “Malvinas, la Guerra Civil”, en la que se puso el foco en aquellos que tuvieron roles destacados en el combate, sin pertenecer a las fuerzas armadas. La renovación de la pantalla fue reconocida con premios y nominaciones nacionales e internacionales

EL MUNDIAL COMO SÍNTESIS DE UNA GESTIÓN

El Mundial de Fútbol Qatar 2022 puede tomarse como la síntesis de cómo se aplicaron buena parte de los conceptos que estuvimos desarrollando dentro de un evento de escala global, con alto impacto en la audiencia. Nuestras convicciones en torno a las políticas de género, el federalismo, la racionalidad en el gasto, la inclusión digital y la imprescindible colaboración entre los medios públicos se pusieron a prueba en una programación seguida por millones de personas.

Todo empezó con una pregunta: ¿Para qué tiene que transmitir la TV Pública el Mundial? La respuesta fue unívoca: porque somos el único canal que puede garantizar el derecho a ver el Mundial gratis a todos los argentinos y argentinas. A partir de ahí, todo fue más claro.

Convocamos a los canales públicos de todo el país para que retransmitieran nuestra señal de modo de garantizar una mayor cobertura territorial. Además, los invitamos a sumar periodistas a nuestro equipo para darle mayor contenido federal a las transmisiones.

Hicimos historia con la primera mujer en comentar partidos de la Selección Nacional en un Mundial, Ángela Lerena, y con la primera mujer en relatar partidos de una Copa del Mundo, Lola del Carril. Además de tener en el equipo a Sofía Martínez, en un rol periodístico muy relevante dentro de las transmisiones.

Sin resignar calidad, hicimos una gestión eficiente del gasto logístico y de producción, para lograr un balance positivo entre inversión e ingresos publicitarios; de modo que el Mundial nos significara una carga para los contribuyentes.

Desde Qatar ofrecimos un menú digital que registró records de audiencia; al tiempo que organizamos una cobertura colaborativa con los medios públicos nacionales y provinciales, sumando esfuerzos y multiplicando posibilidades. De este modo, Télam, Radio Nacional, DeporTV y los 24 canales públicos provinciales trabajaron junto con la TV Pública en una transmisión histórica, con una calidad reconocida de manera unánime y con niveles de rating pocas veces alcanzados. Gracias a los convenios internacionales firmados por RTA, desarrollamos colaboraciones con los canales públicos de México, España, Uruguay y Francia; enriqueciendo la cobertura con miradas complementarias, tanto desde lo deportivo como desde lo cultural.

LO PENDIENTE

En 2023 enfrentamos el último año de nuestra gestión. El momento en el que buscamos consolidar los avances y afrontar lo pendiente. Tenemos una deuda con la producción de ficción. Las circunstancias generadas por la pandemia y las estrecheces presupuestarias no nos permitieron avanzar todo lo deseado en este formato que tiene tanta historia en nuestro canal.

Nos preparamos para celebrar con contenidos especiales los 40 años de la democracia argentina. Además, la TV Pública producirá los debates previos a las elecciones presidenciales del mes de octubre.

Nuestros medios digitales tienen que seguir creciendo. Debemos institucionalizar los avances en materia de ética, innovación, transparencia y políticas de género. Tenemos que consolidar nuestra propuesta periodística, apostando por una comunicación serena y firme, que combata las noticias falsas y la desinformación. Hay mucho para hacer en materia de federalismo. Recién dimos los primeros pasos hacia la pantalla inclusiva que merecen los argentinos y argentinas de todas las latitudes.

A simple vista no parecen existir diferencias entre la TVP y el resto de los canales de televisión. En el control remoto de cualquier televidente todos están disponibles. Sin embargo, nuestro canal es único y diferente. Es el único que puede verse por aire y de manera gratuita en cualquier lugar de la Argentina. Es el único que tiene en su programación ciclos de cine, libros, pensamiento, derechos humanos, religiones, discapacidad, ciencia y educación.

Es el único que no trata a su audiencia como consumidores, sino como ciudadanos. Es un canal que no está dispuesto a recurrir a cualquier estrategia para sumar un punto de rating, ya que respeta a su audiencia y tiene claro su rol en la sociedad democrática argentina.

La reconstrucción de nuestra Televisión Pública tiene todavía muchos capítulos por ser escritos. Reflexiones como las que propone este libro de Adrián Maglieri son textos de consulta imprescindibles para los que estamos convencidos que los medios públicos son herramientas muy valiosas a la hora de construir ciudadanía.

INTRODUCCIÓN

Hablar de los nuevos vínculos de la televisión del siglo XXI con los sujetos, es hablar de una profunda transformación socio cultural sucedida centralmente en la primera década del nuevo milenio.

La llamada “convergencia tecnológica” (Castells), que ya era visible en los ‘90 por el constante desarrollo de la red Internet y la digitalización de los contenidos multimedia, no tardaría mucho tiempo en modificar la forma de ver y entender la televisión.

Desde el año 2000, el aumento de las velocidades en la red, dado por el desarrollo de la banda ancha y mejores sistemas tecnológicos para la compresión y la reproducción de videos en línea, provocaría profundos cambios en el terreno del audiovisual y modificaría la idea de ver televisión.

Ver televisión, ya no sería solo mirar y consumir contenidos emitidos para una audiencia masiva o estar sentado junto a la familia, observando un programa desde el equipo receptor, ubicado estratégicamente en un lugar central de la casa.

Ver televisión, en este nuevo siglo, y principalmente para las nuevas generaciones, es mirar en soledad, cambiar entre infinitas señales, fragmentar contenidos, bajar audiovisual desde Internet, copiar, socializar, comentar, enviar, responder e interactuar.

La insistente complementariedad entre la televisión analógica masiva y la red Internet, se dio en un contexto de aparente armonía, que permitió correr continuamente las líneas fronterizas de las pantallas y trasvasar contenidos en ambos sentidos.