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La poesía no es más que un vuelo; dejarse llevar por el viento de la verdad. Es cuando los ojos atrapan el alma y el sentimiento, y se dejan llevar, como trapos al viento. Roberta Mezzabarba, poeta de carisma inconfundible, le pone alas a sus versos y los lanza a surcar el cielo de la dignidad. Leer la colección titulada Como trapos al viento abre de par en par la mirada del lector y proyecta imágenes tan vivas que lo arrastran hacia esas verdades, muchas veces incómodas, y lo elevan sobre momentos de libertad escrita. A menudo, somos retratados por «pintores» que desconocen los colores de nuestro afecto y de nuestras emociones. Pero Roberta supo escuchar al tiempo, que le enseñó a conducir la vida, y le dio voz a sus obras. Mis palabras son humildes, pero sinceras, para una poeta como Roberta Mezzabarba. Podemos o, más bien, debemos tratar de ver la vida a través de sus ojos. Al llegar a la última página de esta obra, será difícil arrepentirse. Que disfruten la lectura.
PUBLISHER: TEKTIME
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Veröffentlichungsjahr: 2025
Título | Como trapos al viento - Poemas para un año
Autor | Roberta Mezzabarba
2019 - Todos los derechos reservados por la Autora
La Autora es la titular exclusiva de todos los derechos. Por lo tanto, ninguna parte de este libro puede ser reproducida sin el consentimiento previo de la Autora.
En portada: © imagen de Diana Martignoni
Primeraedicióndiciembre 2019
COMO TRAPOS AL VIENTO
Poemas para un año
ROBERTA MEZZABARBA
Traducido por Josué Palacios
A los poetas no se les salva;
hay que dejarlos volar
entre los árboles, como ruiseñores
dispuestos a morir.
Alda Merini
La poesía no es más que un vuelo; dejarse llevar por el viento de la verdad.
Es cuando los ojos atrapan el alma y el sentimiento, y se dejan llevar, como trapos al viento.
Roberta Mezzabarba, poeta de carisma inconfundible, le pone alas a sus versos y los lanza a surcar el cielo de la dignidad.
Leer la colección titulada Como trapos al viento abre de par en par la mirada del lector y proyecta imágenes tan vivas que lo arrastran hacia esas verdades, muchas veces incómodas, y lo elevan sobre momentos de libertad escrita.
A menudo, somos retratados por pintores que desconocen los colores de nuestro afecto y de nuestras emociones.
Pero Roberta supo escuchar al tiempo, que le enseñó a conducir la vida, y le dio voz a sus obras.
Mis palabras son humildes, pero sinceras, para una poeta como Roberta Mezzabarba.
Podemos o, más bien, debemos tratar de ver la vida a través de sus ojos.
Al llegar a la última página de esta obra, será difícil arrepentirse.
Que disfruten la lectura.
Umberto Coro
Escritor, poeta, actor, pintor
Presidente del Premio Internacional de Narrativa y Poesía
La Rosa d’Oro a Torre Alfina (VT)
Quel vecchio,
con un labbro orridamente arricciato
grida la sua strana verità.
La verità è una coperta corta,
una coperta corta e stretta,
che l’uomo tira da una parte e dall’altra.
Ogni giorno questa
diventa sempre più piccola,
e la coperta che un tempo
ci lasciava scoperta solo la punta delle dita,
ora basta appena a coprire le nostre vergogne.
Quel vecchio,
con un labbro orridamente arricciato
grida la sua strana verità:
la sua coperta è divenuta
da tempo troppo piccola.
Troppe meschinità aveva dovuto coprire,
troppe guerre aveva dovuto conoscere.
Eppure sarebbero bastate solo
poche parole buone
ed un sorriso
per donare un po’ di pace.
Ese anciano,
con el labio torcido de forma espantosa,
grita su verdad extraña.
La verdad es una manta corta,
una manta breve y angosta,
que el hombre jala de un lado y del otro.
Cada día
se encoge un poco más
aquella que antes
dejaba al aire apenas la punta de los dedos,
hoy alcanza, a duras penas, para tapar nuestras vergüenzas.
Ese anciano,
con el labio torcido de forma espantosa,
grita su verdad extraña:
su manta se hizo demasiado pequeña hace tiempo.
Demasiadas miserias tuvo que ocultar,
demasiadas guerras le tocó presenciar.
Y, sin embargo, habrían bastado
unas pocas palabras buenas y una sonrisa
para que algo de paz brotara.
Donna, in un silenzio che sa di eternità.
Durante la prossima luna crescerai una nuova vita;
a luglio prenderai il colore della spiga,
ma vestirai semplicemente e camminerai con fatica.
La canna del fucile proteggerà il tuo nido
mentre il vino sarà poggiato sulla tovaglia tesa...
Se la mano del tuo uomo ti sfiorerà
la tua voce, come per vergogna, salirà
alla tua bocca, come vino rosso in un bicchiere.
Il cielo dei tuoi occhi sarà un cielo di nuvole,
il tuo corpo, tutto intero, sarà una fonte
da cui sgorghi acqua limpida,
i tuoi sogni come la rugiada,
e le tue risa come l’onda che risale il fiume.
In onore della giornata contro la violenza sule donne
Mujer, en un silencio que huele a eternidad.
Bajo la luna próxima, gestarás otra vida;
en julio tomarás el color del trigo maduro,
pero andarás con esfuerzo, vestida con lo justo.
El cañón del fusil custodiará tu nido,
mientras el vino espera sobre el mantel bien tendido…
Si la mano de tu hombre te roza,
tu voz, como si tuviera pudor, subirá
hasta tu boca como vino tinto llenando una copa.
El cielo en tus ojos será un cielo cubierto,
tu cuerpo entero una fuente viva
donde brota agua clara,
tus sueños, como el rocío,
tus risas, como la ola que remonta el río.
En honor al día contra la violencia hacia las mujeres
Se mai dovessi
o potessi
è lì che tornerei
fra le pieghe di quei pomeriggi
mai troppo lunghi,
ginocchia sbucciate,
vento nei capelli,
e nessuna colpa
da espiare sulle spalle.
Se mai potessi
o dovessi
cercherei le tue mani
sapienti e musicali
che tutto chetavano,
che magia portavano
con le loro carezze,
ad occhi chiusi
e cuore cheto.