Despertar sin miedo a la vida 2 - Vanina Escalante - E-Book

Despertar sin miedo a la vida 2 E-Book

Vanina Escalante

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Beschreibung

Una vez más, despertar sin miedo a la vida me trajo mas experiencias, poder conocer personas fantásticas en el mundo de las redes sociales, dejándome poder contar un poquito de sus vidas y cómo ayudó a la mía al darme cuenta de que todo se puede cuando uno quiere salir adelante. Pude concretar viajes, metas y reflexionar sobre momentos pasados y presentes... el proceso de mis cambios sigue lento pero cada vez más brillante. No tengo dudas que tú también podrás con los desafíos que te impone esta vida que es maravillosa. Avancemos juntos a seguir transitando el cambio, despertando sin miedo a la vida. Identificándonos como mujeres y hombres que dan todo por seguir adelante, sentirse plenos y en paz. Como guerreros de la vida.

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Seitenzahl: 159

Veröffentlichungsjahr: 2024

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AUTOR

Escalante, VaninaDespertar sin miedo a la vida 2 / Vanina Escalante. - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Autores de Argentina, 2023.

Libro digital, EPUB

Archivo Digital: descarga y online

ISBN 978-987-87-4625-8

1. Ensayo. I. Título.CDD A864

EDITORIAL AUTORES DE ARGENTINAwww.autoresdeargentina.cominfo@autoresdeargentina.com

Índice de contenido

Despertar sin miedo a la vida 2

“Las piedras las saltas, las pateaso las esquivas”

Decepciones otra vez...

Abrazos

Decisiones

Resurgir

Caídos

Espíritu Libre

Opiniones de lectores “Despertar sin miedo a la vida”

Todo mi agradecimiento para mis lectores, mis seguidores

de las redes, mis amigos y para Lorenzo Jesus Seijas

que colaboró con el aporte de la edición del libro.

Mi total gratitud a quienes confiaron en mí para escribir

una partecita de sus vidas y a Daniel Mendoza,

Darío Ortega, Abel Duarte, Sergio Beltran.

Despertar sin miedo a la vida 2

Y así comienzo una vez más sentada pero esta vez, en la computadora, escuchando a Ke Personajes, un grupo de música de Argentina del que me enamoré en mi viaje por Bogotá Colombia. Y sí, lo logré viajé antes de que mi amigo viniera aquí, y pasé más de 20 días alucinantes.

Mis cambios se fortalecieron en mi carácter, y hoy me siento más segura que nunca en todas mis decisiones que hacen de mí una persona totalmente sin miedo, sin timidez, sin vergüenza.

Cada paso tuvo y tiene una piedra en el camino, a veces la saltas, o la pateas o directamente la esquivas. Pero no te detienes por nada, ni por nadie.

“Las piedras las saltas, las pateas o las esquivas”

En este tiempo he reflexionado mucho sobre quiénes te apoyan y quiénes no. Quiénes te entienden y quiénes no. Y hoy más que nunca sé que vos me entendés, porque sé, que a vos también te pasa. Y sufres en silencio cuando las decepciones vienen de personas que jamás pensarías que vendrían. Pero como yo digo las comprendo, acepto su decisiones o pensamientos y sigo adelante.

No pierdas el tiempo en dar explicaciones que no están preocupados en entender, ya tienen un concepto hecho y no le cambiarás eso ahora, solo el tiempo hará lo suyo y uno seguirá adelante sin detenerse y desgastar palabras al viento. Pues sabes ¿por qué? Porque las personas no se detienen a pensar el esfuerzo y sacrificio que implica arrancar a hacer algo que a uno lo hace tan feliz. Es por eso que hay que seguir adelante siempre hasta llegar a lo que siempre añoraste.

Cuando tomas decisiones en la vida, uno siempre las piensa mucho, días, horas hasta meses depende qué o cuál es tu proyecto o lo que quieras hacer y eso implica pensar y arriesgar muchas cosas, esa idea sigue instalada en tu cabeza y no se mueve de ahí entonces te mandas a hacerlo y empiezas a moverte, a averiguar y sigues y sigues hasta que todo va tomando forma y es ahí, en ese preciso momento es donde tu alrededor comienza a girar en torno a lo que estás haciendo, empiezan las miradas las preguntas raras, y ahí, es donde tienes que decidir más firme a seguir hacia adelante porque lo que importa es que confías en lo que estás por hacer.

Recuerdo cuando mi hija iba al jardín en el barrio donde vivíamos, la cooperadora estaba con bajos recursos en ese entonces yo trabajaba, tenía mi programa en Radio Líder y recuerdo hablar con el director Carlitos quien me apoyaba con esta idea loca, de hacer un súper evento en el barrio, para la comunidad recaudando libros y útiles escolares, mercadería no perecedera y se me instaló la idea en la mente y no dejaba de persistir allí y me rodeé de gente con las mismas ganas que yo de hacer esta locura. Y si lo hicimos comenzamos a movernos yendo de un lado a otro, municipio, concejales, colectividades, y hasta el ejército. Estaba empecinada que quería una carpa, y molesté tanto con la ayuda de los que querían lo mismo y se consiguió. Y vino al pelo porque ese día llovió un rato, la gente se resguardo allí primero, conseguimos donaciones de chocolatada caliente y medialunas, amablemente lo donó el ejército, para los que actuaban.

Fue tan hermoso ver a los niños del barrio disfrutando de cada actuación de las colectividades, el ejército vino con su banda militar fue épico, vimos danzas árabes, españolas, holandesas, argentinas, y no solo eso, la actuación de un grupo humorístico de payasos, y 3 bandas locales de rock y junto a otra locutora dirigimos desde la mañana hasta más de las 10 de la noche, fue maravillosa la convocatoria algo nunca visto en un barrio humilde, reinaba la alegría en todos en los que venían a disfrutar y los que venían a ofrecer su espectáculos. Y mi mente siempre se disparaba por más, no pude dejar de realizar la idea loca de que pusieran obras de pinturas de algunos amigos míos así que también tuvo un espacio armado para la exposición de las mismas. Fue un súper evento donde los que nos visitaron vinieron y se deleitaron con algunas pinturas artísticas geniales. Luego dejaban alegremente su opinión en un libro armado para eso.

En esa época tenía muchos años menos pero siempre tenía ganas de hacer cosas así, y esa vez me impulsé cada mañana y me rodeé de la misma energía con las personas que fui encontrando, eran unos genios, todos sintonizamos lo mismo y todo salió súper genial; mi corazón rebozaba de gratitud solo al ver las caritas iluminadas de todos los niños mirando maravillados cada presentación. Y esa vez no me detuve a escuchar negativas ni mala onda, solo avancé y avancé con fuerza con todos los demás que hicimos posible ese hermoso evento para el jardín y la biblioteca del barrio. Esas chispas de luz no eran muy fuertes para hacer un incendio a veces porque las responsabilidades y prioridades eran otras en ese entonces.

Estoy segura, que vos también tenés esos momentos de hacer algo así, algo distinto y comienza como una pequeña idea y luego va tomando forma, y te preguntas ¿será posible? Y la sigue la otra pregunta enseguida: ¿Por qué no? ¿Y si comienzo yo y le digo a fulano y después a sultana se irán a enganchar en esto? Lo ideas y de repente ¡pum! ya está el proyecto, la idea, ahora hay que dar el segundo paso ponerlo en marcha, pero en algún momento alguien dice es una locura, estás mal, no lo vas a poder hacer, es loco lo que piensas, no quién te va a dar bolilla, y bla, bla, bla, bla. Y ahí es donde te inhibes o te impulsas, debes decidir y si realmente lo sientes, hazlo. Luego de ese evento sentía que podía con todo, pero me ganó la rutina, la maldita rutina diaria y pensar con poca fuerza que si llegaba a ubicar mis tiempos podría hacerlo seguramente. Me faltó más impulso hoy sí me doy cuenta de ello.

Hoy con más experiencia no dejaré que nunca más me pase, porque no es solo que pienso en mí, sino que también muchos otros salen beneficiados.

Como saben yo me manejo mucho en las redes sociales y conocí a mi gran amigo Sergio y dijimos de algún día vernos, vendría a visitar la Argentina, pero yo le gané cuando las cosas empezaron a verse raras a mi alrededor, él me ofreció de ir y yo lo pensé y dije por qué no, y ahí empezaron los nuevos desafíos. Un par de meses antes donde mi cabeza estaba convulsionada me senté y se lo dije al padre de mis hijos primero. “Me voy a Colombia, me parece una idea genial, terminaré mi libro y veré si puedo llevar algunos allí, mi amigo me ayudará a colocarlos”. Primero fue una mirada rara, y luego la aceptación de él, la verdad no sé qué cara tendría yo, pero mi decisión era clara, me voy y no me detendría nada ni nadie, era una gran oportunidad de conocer a mi amigo y su familia, su ciudad, costumbres, de sentirme viva, de renovar todas mis pilas, de saber que podría lograr más cosas de las que yo pensaba, que nunca haría, una de ellas era el despegar sola.

Los días pasaban ahora era el momento de hablar con mis hijos, aunque no lo comprendían del todo yo no les pedía permiso solo les estaba informando de mi decisión. Como adulta era absolutamente mi responsabilidad y aceptar que luego llegarían las consecuencias por mis decisiones, ya estaba todo pensado, era solo avanzar y confiar que todo saldría más que bien.

“Yo no pedí permiso, solo estaba informando”

Fue cuando avanzaban los días que un día dije “el pasaporte”, hice los tramites y luego el boleto del avión; en cada paso era firme y decisivo pero también todo tenía sus trabas parecía que todo se complotaba para no viajar, pero yo confié en el Señor y su mano y siempre fue despejando el camino, también entendí que no me iban a entender mucho, este viaje, traería que pensaran muchas cosas equivocadas de mi persona, pero acepté el desafío, después de todo, nadie me frenaría con sus pensamientos.

Fue entonces que me di cuenta de lo herméticos que las personas a veces se ponen, con algunas cosas. Tan cerrados y tan bloqueados que no le entran fichas de ningún tipo solo la que ellos desean y piensan que sus ideas o pensamientos son las únicas validas en la vida.

Pensé mucho en las familias, fotos, ver abrazos, besos, risas una vida llena de alegrías y fue entonces que por un instante se me pasó por mi loca cabeza. ¿La mayoría de las personas son felices en verdad? O siguen el qué dirán los demás si me ven hacer esto, o aquello. Si me ven que me arreglo todos los días para sentirme feliz conmigo misma, si me ven que empiezo a cuidarme más, que empiezo a sentirme más libre de no sentirme obligada a hacer sí o sí cosas que todos esperan que haga.

¿Y si digo? ¡No!, yo no quiero esta hipocresía, de que estamos bien por tener hermosas fotos y que todos aceptan mi vida, porque estamos juntos para todos lados. A veces somos felices haciendo lo que nos gusta y no es lo que le gusta al otro. Como ser, a mí me encanta bailar, poner música a todo volumen y sacudir el esqueleto todo el tiempo y al padre de mis hijos Lorenzo no, y está bien, a él le gusta ver herramientas y a mí ver ropa y me encanta perderme horas mirando en las tiendas, pero a él, no, pasa rápido por esos lugares. Es por eso que veo en todas las redes llenas de fotos felices y también comentarios lindos u ofensivos, pelean, degradaciones, y más ofensas y pienso si no quieren que se metan en su vida para qué publican si después se ofenden si alguien le pone algo que no está de acuerdo con sus pensamientos.

Una vez hace varios años atrás, recuerdo comenzar con la fantasía de trabajar en una radio, y las casualidades de la vida dio la posibilidad de empezar en una radio que estaba cerca de mi barrio, radio Fantasía donde hacíamos un programa que se llamaba “SOS Mujeres en el aire”, éramos 3 amigas nos encontrábamos, hablábamos y pasábamos música. Era bueno, le poníamos mucho humor donde fuimos escuchadas por alguien que nos invitó a trabajar en la radio que él estaba, y fuimos allí. Nos recibieron súper bien el dueño de Radio Líder, Carlos Antista un ser muy especial atento, cordial y responsable. Realmente un Señor, fue un amigo para mí y aún lo es después de tantos años, con él y una amiga hicimos también de noche un espacio se llamaba “Encuentros” donde pasábamos música romántica y durante unas horas los viernes a las 10 de la noche en adelante soltando sentimientos al aire de quienes por el horario era gente que trabajaba en ese horario y nos pedían canciones para pasar el tiempo. También estuve varios años junto a Lorenzo haciendo un programa llamado “Al extremo”, hablaba de películas, estrenos y pasábamos la música de las bandas de sonido de las mismas, él operaba la música y yo me encargaba de hablar. Estuvimos varios años hasta que quedé embarazada y ya no pude seguir. Siempre pensé en volver en algún momento, pero no daban las circunstancias. Allí también quedé con algo hermoso que hasta el día de hoy se mantiene intacto, la amistad con el dueño de la radio y su esposa, siempre que podemos vamos a verlos porque son una familia hermosa, y es justo en esos momentos que al ver sus hijos casados y sus nietos de 9 años me doy cuenta cómo pasa el tiempo y que viví esa hermosa experiencia en mi vida. Y allí también aprendí por algunas experiencias que pasé, que hay personas que siempre están pendientes de lo que estás haciendo y piensan que no se veía bien lo que hacía, tienen esa facilidad de juzgar a lo lejos y pensar sin límites, pero no me importó solo dejé que pasara el tiempo, como siempre digo si vivieran de lo que dice la gente sería millonaria. Jajaja. Es duro si lo piensas, manejar tus pensamientos y concentrarte en lo que deseas cuando hay otros que no quieren y te lo hacen sentir.

“Solo dejé que pasara el tiempo si viviera de lo que dice la gente sería millonaria”

Decepciones otra vez...

Cuando hablo de las amistades te pegas algunos sinsabores cuando no te aprueban y encima no te lo esperas.

Recuerdo cuando entré a la iglesia me sentía tan feliz, y espiritual un contacto muy cercano al Señor, realmente aun lo tengo, pero en el principio era tan hermoso sentirse tan elevada que realmente como una gran torta de chocolate llena de crema y cerezas que tienes, la quieres compartir con tus seres amados y esperas que ellos también la reciban con el mismo amor que tú se las das.

Una tarde estaba en la casa de una amiga contándole mi experiencia tan bonita para mí con Dios y compartiéndole mi felicidad y alegría de estar así, ella después de escucharme antes de irme me compartió unas palabras. —Vanina, en verdad no me interesa y te pido no hables más de este tema en mi casa, gracias. Para mí fue un bombazo tan fuerte, que nunca hubiera pensado que alguien podía sentirse mal por yo expresar mi felicidad y fue ahí donde entendí que no todos los que nos decimos amigos entendemos el concepto. Ok, nada más sé que me di cuenta de que no todo lo que brilla es oro y mi amiga del pedestal se cayó, y fue a parar a una mesa ratona simple y sencillo como eso.

“No todos los que nos decimos amigos entendemos el concepto”

Cuántas veces querer hablar de cualquier tema con quienes piensas son tus amigos, resultaba en que te ignoraban más que un extraño y uno solo siempre estando atento a todos sus reclamos, catarsis, berrinches. Y luego te preguntas, para qué me desgasto tanto si no van a darme ni 5 de atención.

Este año aprendí que solo son contados con el dedo de una mano, los verdaderos amigos, esos los que te bancan, no te critican, te aconsejan, te escuchan y muchas veces te ayudan a salir de estados de ansiedad mejor que una pastilla. Haré un punto para hablar de mi amigo Córdoba, Darío, uno encontrado en las redes, persona muy atenta, graciosa y servicial, con un corazón lleno de amor, para su amor verdadero. Cuando he pasado por algún episodio difícil en mi ansiedad, él me ha ayudado más de una vez, y aunque parezca mentira una llamada a tiempo pidiendo auxilio ayuda mucho sobre todo cuando sabes que estará del otro lado para contenerte de una forma muy útil, porque él sabe y conoce muy bien el proceso que una vez fue parte de su vida también.

Yo no tengo duda que el Señor siempre me dio sus mejores ángeles terrenales para sostenerme, pero siempre están en la distancia. Tal vez porque así se valora más esa calidad de personas y amistades puras y desinteresadas. El conocer a mi amigo Sergio abrió un camino maravilloso donde conocí personas maravillosas, con un punto en común la búsqueda de reforzar la fe en Dios, el eterno Padre Celestial, diferentes culturas, diferentes países pero todos creyendo en el mismo Dios, quien nos unió para apoyarnos y fortalecernos en un momento que necesitábamos mucha contención, y es maravilloso como un grupo de desconocidos pasan a ser un sostén y una columna de apoyo tan fuerte que nos hace olvidar de nuestros problemas y enfocarnos en cómo ayudar al otro.

Amo a Dios por confiar en que puedo a veces dar una palabra de aliento y recordar que siempre hay alguien que nos ama y cuida de nosotros y que no nos olvidemos nunca de él, siempre trato de recordar que la lejanía que tenemos con Dios en una oración de distancia, tan simple como eso.

“La lejanía con Dios es una oración de distancia”

Abrazos

Qué importante es en la vida de las personas.

He tenido unas experiencias maravillosas con las redes y Dios, no solo dentro de la Iglesia sino por fuera y me sentí tan feliz y libre expresando lo maravilloso que es sentirse amada por Dios y Jesucristo. Se me viene a la mente un amigo nuevo se llama Pedro y lo amo tan divinamente, es muy especial, la primera vez tuve contacto con él por teléfono una charla muy buena, y luego lo vi en la capilla una actividad de un baile, lo vi caminando y no pude dejar de mirarlo y darme cuenta que algo tenía súper especial, lo paré y me puse a hablar con él, luego de unas horas le pedí permiso para darle mi súper abrazo de oso, y me permitió fue tan fortalecedor para ambos.

Yo porque sentía ese amor, esa energía que solo se pasa a través de un abrazo, te contiene, te hace sentir feliz, te llena de amor y de buena onda, te eleva y te da seguridad sobre todo la bienvenida. Darle ese abrazo a Pedro me dio paz a mi alma y un cariño muy especial y la sensación de que él sintió todo mi amor. Y hoy me comparte así —“Vani querida los abrazos sanan, mente, corazón y alma” imagínense la emoción que siento al escuchar eso de mi amigo tan querido Pedro.

“Los abrazos sanan, la mente, el corazón y el alma”



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