Alas - Alberto Ghiraldo - E-Book

Alas E-Book

Alberto Ghiraldo

0,0

Beschreibung

«Alas» (1916) es una obra de teatro en un acto y tres cuadros de Alberto Ghiraldo. En un sitio de recreo en Buenos Aires, un grupo de amigas se dan cita para disfrutar de un tentempié y de las novedades sentimentales de cada una. Mientras, Óscar, un joven idealista, les presta atención desde una mesa cercana.

Sie lesen das E-Book in den Legimi-Apps auf:

Android
iOS
von Legimi
zertifizierten E-Readern
Kindle™-E-Readern
(für ausgewählte Pakete)

Seitenzahl: 35

Veröffentlichungsjahr: 2021

Das E-Book (TTS) können Sie hören im Abo „Legimi Premium” in Legimi-Apps auf:

Android
iOS
Bewertungen
0,0
0
0
0
0
0
Mehr Informationen
Mehr Informationen
Legimi prüft nicht, ob Rezensionen von Nutzern stammen, die den betreffenden Titel tatsächlich gekauft oder gelesen/gehört haben. Wir entfernen aber gefälschte Rezensionen.



Alberto Ghiraldo

Alas

(TEATRO: 1 ACTO Y 3 CUADROS)

Saga

Alas

 

Copyright © 1906, 2021 SAGA Egmont

 

All rights reserved

 

ISBN: 9788726681239

 

1st ebook edition

Format: EPUB 3.0

 

No part of this publication may be reproduced, stored in a retrievial system, or transmitted, in any form or by any means without the prior written permission of the publisher, nor, be otherwise circulated in any form of binding or cover other than in which it is published and without a similar condition being imposed on the subsequent purchaser.

This work is republished as a historical document. It contains contemporary use of language.

 

www.sagaegmont.com

Saga Egmont - a part of Egmont, www.egmont.com

PERSONAJES

OSCAR, 30 años ANGÉLICA, 24 años GERTRUDIS FIERRO Madre de Angélica MAURICIO Hermanitos de Angélica PEPITO Hermanitos de Angélica JUANITA Hermanitos de Angélica LOLA Amigas de Angélica MARÍA LUISA Amigas de Angélica CARLOS Amigo de Osear UN CAMARERO UNA SEÑORA Matrimonio de edad UN CABALLERO Matrimonio de edad UN CANTOR POPULAR UN ACOMPAÑANTE

La acción en Buenos Aires. Época contemponánea.

CUADRO I

Sitio de recreo en los alrededores de Buenos Aires. Telón de bosque al fondo. Enrejado con puerta, al centro. Mesas, sillas y estatuas adornando el jardín. Al levantarse el telón, Oscar se entretiene, á la izquierda, en dar libertad á un grupo de pájaros que va sacando de una jaula Toma á cada animal, lo acaricia un momento en sus manos, y lo deja escapar siguiendo el vuelo con mirada arsiosa.

ESCENA I

Oscar, luego un camarero.

 

Oscar . (Sentado). ¡Libre! . . . ¡Libre como ellos! ... (Pone en libertad á otro pájaro.) ¡Qué este vivir nuestro, así, siempre con las alas cortadas, no es vivir! (Teniendo uno de los pájaros en la mano y contemplándole.) ¡Oh! ¡qué deseo, qué ansia! ¡Cómo palpita la carne viva! ¡Qué temblor de alas! Cada pío-pío, es un grito de libertad, de vida, que lanza el pecho. ¡Vé á los aires, vé á la vida! (Lo deja escapar.) ¡Manos gloriosas, manos mías! (Un camareroatraviesa la escena. Oscar le llama.) ¿No hay más pájaros en la casa?

Camarero . Vivos, no señor.

Oscar . (Después de un intervalo, y como hablando consigo mismo. Tonoenigmático.) Carceleros y asesinos . . . ¡También héroes!

Camarero . (Interesándose por las palabras de Oscar.) No entiendo bien, señor. ¿Qué es eso? (Entran varias jóvenes: Angélica, Lola y María Luisa. Angélica viene adelante; entra cantando; trae el sombreroen la mano.)

ESCENA II

Los m í smos — Angélica, Lola, Mar ia Luisa. — Después una pareja. Todos por la puerta del centro.

 

Angélica . (Cantando.)

La alegría es la fuente,

Fuente de vida:

No envenenes sus aguas . . .

(Al advertir á Oscar interrumpe el canto.)

Oscar . (Como hablando consigo mismo).

Siento algo así como un batir de alas; todo esplende en mi torno. ¡Joven feliz, canta, canta! (Siéntanse las jóvenes. Dirigiéndose al camarero). ¿Qué es eso, decías? ¡El mundo! (Lola y María Luisa llaman impertinentemente. Angélica arregla su “toilette”.)

Camarero . (Aparte) ¡Diablos de muchachas! (En voz alta.) ¡Vá enseguida! (Se dirige á Oscar). ¿Deseaba algo el señor?

Oscar . Sí; tráeme cerveza. (Deja que se aleje el camarero.) ¡Ah, si entendieras bien, pájaro vivo! (Se sienta aparentando distracción. Después se levanta, examinando el jardín. Váse al interior.)

Camarero . (Dirigiéndose á las jóvenes.)—¿Y ustedes, señoritas?

Lola . ¡Ah, por fín! A ver... (Como consultando con las compañeras.) Té, cerveza; y orchata para esta nerviosa. (Se dirige á Angélica. Váse el camarero, por la izquierda.)

Angélica . ¡Bravo por el buen humor! Esta tarde de primavera ha de concluir por revivificarnos á todos. Vaya, me alegro. Pero conste que eres una malísima compañera. Por poco me haces herir en ese maldito alambre.

Lola . Lo cierto es que yo no quería asustarte. Pero tú...

M .a Luisa . Claro está. Tú gritabas: ¡Ahí viene un hombre! ¿Y quién no se asusta de eso? (Ríen.)

Lola . ¿Qué me dicen ustedes del solitario? (Mirando al interior.) Es todo un buen mozo, y muy original, por cierto. (Con intención.)Qué candidato para vos, Angélica, que sos tan impresionista...

Angélica