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El Libro de Enoc es un texto místico atribuido al patriarca Enoc, el hombre que "caminó con Dios" según el Génesis. Nos sumerge en un universo de ángeles caídos, revelaciones divinas y profecías apocalípticas. Relata la historia de los ángeles vigilantes que desobedecieron al Creador y su impacto en la humanidad, además de revelar misterios sobre la estructura del cosmos y los reinos invisibles. Con profecías sobre el juicio final y vínculos con la Biblia y el misticismo judío, esta obra prohibida durante siglos sigue fascinando a teólogos e investigadores. Más que un simple texto antiguo, ofrece una experiencia mística que invita a explorar los límites del conocimiento.
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Seitenzahl: 176
Veröffentlichungsjahr: 2025
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El libro de Enoc
La Colección Tabla Esmeralda es mucho más que una serie de libros: es una invitación a descubrir tu poder interior y a explorar los secretos más ocultos del universo. A través de una selección exquisita de obras emblemáticas en los campos del esoterismo, la autoayuda y el pensamiento espiritual, esta colección está pensada para aquellos que buscan expandir su conciencia y comprender los misterios que han fascinado a la humanidad desde tiempos ancestrales.
Cada libro te guiará en un viaje profundo hacia el conocimiento místico y el desarrollo personal, ayudándote a desentrañar los enigmas que rodean la existencia humana y a conectar con el poder transformador de la mente y el alma. Si sientes el llamado de lo desconocido, si anhelas descubrir verdades ocultas y elevar tu ser a nuevas dimensiones, la Colección Tabla Esmeralda es el compañero perfecto en tu búsqueda espiritual.
Anónimo
El libro
de
Enoc
© Alcaraz Ediciones, 2025
© Traducción:, 2025
Mare Nostrum, 44
46420 – El Perelló
Sueca, Valencia
Teléf.: (+34) 910 46 54 33
e-mail: [email protected]
https://alcarazediciones.es
I.S.B.N.: 979-13-87586-37-9
Diseño y maquetación: Iván García Molinero
Printed in Spain / Impreso en España
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Introducción
El Libro de Enoc es una de las obras apócrifas más enigmáticas y fascinantes de la tradición judeocristiana. Atribuido a Enoc, el bisabuelo de Noé y una figura prominente en el Antiguo Testamento, este texto presenta una visión única del cosmos, los ángeles caídos y el destino de la humanidad. Su contenido ha generado tanto admiración como controversia a lo largo de los siglos, influyendo en diversas tradiciones religiosas y esotéricas.
Contexto histórico y origen
El Libro de Enoc es una recopilación de textos escritos entre los siglos III a.C. y I d.C., en un período de intensa actividad literaria dentro del judaísmo. Se cree que los primeros fragmentos fueron compuestos en arameo o hebreo, aunque la versión más completa que ha llegado hasta nosotros está en ge’ez, la lengua litúrgica de la Iglesia Etíope.
Este libro se compone de varias secciones, incluyendo el Libro de los Vigilantes, el Libro de las Parábolas, el Libro Astronómico, el Libro de los Sueños y la Epístola de Enoc. Cada una de estas partes aborda diferentes temas, como la caída de los ángeles rebeldes, las visiones apocalípticas de Enoc y la cosmología mística de la antigüedad.
El texto fue altamente influyente en la literatura judía y en el cristianismo primitivo, aunque posteriormente fue rechazado por la tradición rabínica y por la mayoría de las iglesias cristianas. No obstante, la Iglesia Etíope Ortodoxa lo ha conservado como parte de su canon bíblico, lo que ha permitido su preservación a lo largo de los siglos.
Traducciones y redescubrimiento
Durante siglos, permaneció prácticamente desconocido en Occidente. Sin embargo, en el siglo XVIII, los exploradores europeos redescubrieron la versión en ge’ez en Etiopía, lo que despertó un renovado interés por el texto. A partir de ese momento, fue traducido a diversas lenguas modernas y se realizaron estudios exhaustivos sobre su contenido y sus implicaciones.
El descubrimiento de los Manuscritos del Mar Muerto en 1947 en Qumrán fue un acontecimiento crucial para el estudio del Libro de Enoc. Se hallaron fragmentos en arameo que confirmaban la antigüedad del texto y su relevancia en la comunidad esenia, lo que refuerza la idea de que influyó en la formación de algunas creencias del cristianismo primitivo.
Interpretaciones y trascendencia religiosa
A lo largo de la historia, ha sido interpretado de diversas maneras. En el judaísmo, aunque no fue incluido en el canon hebreo, algunas de sus ideas aparecen en la literatura rabínica y en textos místicos como el Zohar. En el cristianismo, influyó en la escatología del Nuevo Testamento, especialmente en la Epístola de Judas, donde se cita directamente un fragmento del libro.
En la actualidad, sigue siendo objeto de estudio y fascinación, especialmente en círculos esotéricos y en la literatura apocalíptica. Su relato sobre los ángeles caídos, los Nephilim y la intervención divina en la historia humana ha inspirado numerosas interpretaciones tanto religiosas como literarias.
En conclusión, es una obra de gran valor histórico y espiritual. Aunque su exclusión de la mayoría de los cánones religiosos lo relegó al olvido durante siglos, su redescubrimiento ha permitido una apreciación renovada de su riqueza narrativa y simbólica. Su influencia en la teología, la literatura y el pensamiento místico demuestra que su legado sigue vivo, ofreciendo una perspectiva única sobre la relación entre el mundo divino y la humanidad.
Libro del Juicio
Capítulo 1
Palabras de bendición con las que bendijo Enoc a los elegidos justos que vivirán en el día de la tribulación, cuando serán rechazados todos los malvados e impíos, mientras los justos serán salvados.
Enoc, hombre justo a quien le fue revelada una visión del Santo y del cielo pronunció su oráculo y dijo: la visión del Santo de los cielos me fue revelada y oí todas las palabras de los Vigilantes y de los Santos y porque las escuché he aprendido todo de ellos y he comprendido que no hablaré para esta generación sino para una lejana que está por venir.
Es acerca de los elegidos que hablo y a causa de ellos que pronuncio mi oráculo: el Único Gran Santo vendrá desde su morada.
El Dios eterno andará sobre la tierra, sobre el monte Sinaí aparecerá con su gran ejército y surgirá en la fuerza de su poder desde lo alto de los cielos.
Y todos los Vigilantes temblarán y serán castigados en lugares secretos y todas las extremidades de la tierra se resquebrajarán y el temor y un gran temblor se apoderarán de ellos hasta los confines de la tierra.(St 2:19)
La altas montañas se resquebrajarán y derrumbarán y las colinas se rebajarán y fundirán, como la cera ante la llama.
Y la tierra se dividirá y todo lo que está sobre la tierra perecerá y habrá un juicio sobre todos.
Pero con los justos Él hará la paz y protegerá a los elegidos y sobre ellos recaerá la clemencia y todos ellos pertenecerán a Dios, serán dichosos y benditos, los ayudará a todos y para ellos brillará la luz de Dios. (4Es 2:35)
Mirad que Él viene con una multitud de sus santos, para ejecutar el juicio sobre todos y aniquilará a los impíos y castigará a toda carne por todas sus obras impías, las cuales ellos han perversamente cometido y de todas las palabras altaneras y duras que los malvados pecadores han hablado contra Él.
(Dt 33:2; Judas 14-15)
Capítulo 2
Observad todas las cosas que ocurren en el cielo, cómo las luminarias del cielo no cambian su ruta en las posiciones de sus luces y cómo todas nacen y se ponen, ordenadas cada una según su estación y no desobedecen su orden. (Ac 17:26,25)
Mirad la tierra y prestad atención a sus obras, desde el principio hasta el fin, cómo ninguna obra de Dios sobre la tierra cambia, y todas son visibles para vosotros.
Ved las señales del verano y las señales del invierno, cómo la tierra entera se llena de agua y las nubes rocían la lluvia sobre ella. (Mt 16:3; Lc 12:54-57)
Capítulo 3
1 Observad y ved cómo todos los árboles se secan y cae todo su follaje; excepto catorce árboles cuyo follaje permanece y esperan con todas sus hojas viejas hasta que vengan nuevas tras dos o tres años.
Capítulo 4
1 Y otra vez observad las señales del verano, cómo en él el sol quema y rescalda y entonces sobre la superficie ardiente de la tierra buscáis sombra y refugio del ardor del sol, sin encontrar forma de marchar ni por el suelo y ni por las rocas, a causa del calor.
Capítulo 5
Observad y ved todos los árboles, cómo en todos ellos despuntan las hojas verdes y los cubren y todos sus frutos son para adorno y gloria, Ensalzad y considerad todas estas obras y sabed cómo el Dios vivo, el que vive eternamente, Él ha hecho todas esas cosas.
Cómo todas sus obras prosiguen de año en año hasta siempre y todas le obedecen sin alteraciones y todo pasa como Dios lo ha instituido.
[Y ved como los mares y los ríos de igual forma cumplen y no cambian sus tareas, según los mandamientos de Él].
Pero, vosotros cambiáis sus tareas y no cumplís su palabra y en cambio la habéis transgredido y habéis ultrajado su grandeza con palabras altaneras e hirientes de vuestra boca impura. Duros de corazón, ¡no habrá paz para vosotros!
Por ello maldeciréis vuestros días y los años de vuestra vida se perderán; pero los años de vuestra destrucción se multiplicarán como una maldición eterna, y no habrá misericordia ni paz para vosotros.
En esos días vuestros nombres significarán maldición eterna para todos los justos y en vosotros serán malditos todos los malditos y por vosotros jurarán todos los pecadores y malvados.
Para los elegidos habrá luz, alegría y paz y heredarán la tierra, pero para vosotros impíos habrá maldición. (Sal 37:11; Mt 5:4)
Y entonces la sabiduría se dará a los elegidos y vivirán todos, y no pecarán más ni por olvido ni por orgullo, sino que en cambio los que sean sabios serán humildes.
No transgredirán más ni pecarán el resto de su vida, ni morirán por el castigo o por la ira divina, sino que completarán el número de los días de su vida. Su vida será aumentada en paz y sus años de regocijo serán multiplicados en eterna alegría y paz por todos los días de su vida.
Libro de los Vigilantes
Capítulo 6
Así sucedió, que cuando en aquellos días se multiplicaron los hijos de los hombres, les nacieron hijas hermosas y bonitas; y los Vigilantes, hijos del cielo las vieron y las desearon, y se dijeron unos a otros: «Vayamos y escojamos mujeres de entre las hijas de los hombres y engendremos hijos». Entonces Shemihaza que era su jefe, les dijo: «Temo que no queráis cumplir con esta acción(Gn 6:1-4) y sea yo el único responsable de un gran pecado».
Pero ellos le respondieron: «Hagamos todos un juramento y comprometámonos todos bajo un anatema a no retroceder en este proyecto hasta ejecutarlo realmente».
Entonces todos juraron unidos y se comprometieron al respecto los unos con los otros, bajo anatema.
Y eran en total doscientos los que descendieron sobre la cima del monte que llamaron «Hermon», porque sobre él habían jurado y se habían comprometido mutuamente bajo anatema.
Estos son los nombres de sus jefes: Shemihaza, quien era el principal y en orden con relación a él, Ar’taqof, Rama’el, Kokab’el, Ra’ma’el, Dani’el, Zeq’el, Baraq’el, ’Asa’el, Harmoni, Matra’el, ’Anan’el, Sato’el, Shamsi’el, Sahari’el, Tumi’el, Turi’el, Yomi’el, y Yehadi’el.
Estos son los jefes de decena.
Capítulo 7
Todos y sus jefes tomaron para sí mujeres y cada uno escogió entre todas y comenzaron a entrar en ellas y a contaminarse con ellas, a enseñarles la brujería, la magia y el corte de raíces y a enseñarles sobre las plantas.
Quedaron embarazadas de ellos y parieron gigantes de unos tres mil codos de altura que nacieron sobre la tierra y conforme a su niñez crecieron;
y devoraban el trabajo de todos los hijos de los hombres hasta que los humanos ya no lograban abastecerles.
Entonces, los gigantes se volvieron contra los humanos para matarlos y devorarlos; (Sal 14:4; Mi 3:3)
y empezaron a pecar contra todos los pájaros del cielo y contra todas las bestias de la tierra, contra los reptiles y contra los peces del mar y se devoraban los unos la carne de los otros y bebían sangre.
(Jr 12:4)
Entonces la tierra acusó a los impíos por todo lo que se había hecho en ella. (Gn 6:5-11,13; Ap 12:16)
Capítulo 8
Y ’Asa’el enseñó a los hombres a fabricar espadas de hierro y corazas de cobre y les mostró cómo se extrae y se trabaja el oro hasta dejarlo listo y en lo que respecta a la plata a repujarla para brazaletes y otros adornos. A las mujeres les enseñó sobre el antimonio, el maquillaje de los ojos, las piedras preciosas y las tinturas Y entonces creció mucho la impiedad y ellos tomaron los caminos equivocados y llegaron a corromperse en todas las formas.
Shemihaza enseñó encantamientos y a cortar raíces; Harmoni a romper hechizos, brujería, magia y habilidades afines; Baraq’el los signos de los rayos; Kokab’el los presagios de las estrellas; Zeq’el los de los relámpagos; -’el enseñó los significados; Ar’taqof enseñó las señales de la tierra; Shamsi’el los presagios del sol; y Sahari’el los de la luna, y todos comenzaron a revelar secretos a sus esposas.
Como parte de los hombres estaban siendo aniquilados, su grito subía hasta el cielo.
(Ex 3:7-9)
Capítulo 9
Entonces Miguel, Sariel, Rafael y Gabriel observaron la tierra desde el santuario de los cielos y vieron mucha sangre derramada sobre la tierra y estaba toda llena de la injusticia y de la violencia que se cometía sobre ella.
Considerando esto, los cuatro fueron y se dijeron: «el grito y el lamento por la destrucción de los hijos de la tierra sube hasta las puertas del cielo».
Y dijeron a los santos del cielo: «Es ahora a vosotros a quienes las almas de los hijos de los hombres suplican diciendo “llevad nuestra causa ante el Altísimo, nuestra destrucción ante la gloria majestuosa y ante el Señor de todos los señores” en cuanto a majestad».
Y Rafael, Miguel, Sariel y Gabriel dijeron al Señor del mundo: «Tú eres nuestro gran Señor, el Señor del mundo, el Dios de dioses, el Señor de señores y el Rey de reyes; los cielos son el trono de tu gloria por todas las generaciones que existen desde siempre; toda la tierra es el escabel ante ti para siempre, y tu nombre es grande, santo y bendito por toda la eternidad.
“Eres tú quien todo lo ha creado y en ti reside el poder sobre todas las cosas; todo es descubierto en toda su desnudez ante ti; tú lo ves todo y nada se te puede esconder. (1Cr 29:10-12, Hb4:13)
“Tú has visto lo que ha hecho ’Asa’el, cómo ha enseñado toda injusticia sobre la tierra y revelado los secretos eternos que se cumplen en los cielos;
y lo que ha enseñado a los humanos Shemihaza, al que tú habías dado la facultad de gobernar sobre sus compañeros.
“Ellos han ido hacia las hijas de los hombres y se han acostado con ellas y se han profanado a sí mismos descubriéndoles todo pecado.
“Luego, estas mujeres han parido en el mundo gigantes, por lo que la tierra se ha llenado de sangre e injusticia. (Gn 6:4,5,11)
“Y ahora mira que las almas de los que han muerto gritan y se lamentan hasta las puertas del cielo y su gemido ha subido y no puede cesar debido a la injusticia que se comete en la tierra. (Ap 6:10) “Pero tú que conoces todas las cosas antes de que sucedan, tú que sabes aquello, tú los toleras y no nos dices qué debemos hacerles al observar eso». (Ha 1:2-4)
Capítulo 10
Entonces el Altísimo, Grande y Santo habló y envió a Sariel al hijo de Lamec.
Y le dijo: «Ve hacia Noé y dile en mi nombre, “escóndete”; y revélale la consumación que viene, pues la tierra entera va a perecer, un diluvio está por venir sobre toda la tierra y todo lo que se encuentre sobre ella perecerá.
“En seguida enseña al Justo, al hijo de Lamec, lo que debe hacer para preservar su alma para la vida y escapar definitivamente, pues por él será sembrada una planta y serán establecidas todas las generaciones».
Y además, el Señor le dijo a Rafael: “Encadena a ’Asa’el de pies y manos, arrójalo en las tinieblas, abre el desierto que está en Dudael y arrójalo en él; bota sobre él piedras ásperas y cortantes, cúbrelo de tinieblas, déjalo allí eternamente sin que pueda ver la luz, y en el gran día del Juicio que sea arrojado al fuego.
“Después, sana la tierra que los Vigilantes han corrompido y anuncia su curación, a fin de que se sanen de la plaga y que todos los hijos de los hombres no se pierdan debido al misterio que los Vigilantes descubrieron y han enseñado a sus hijos. «Toda la tierra ha sido corrompida por (Jl 2:22) medio de las obras que fueron enseñadas por ’Asa’el, impútale entonces todo pecado».
Y el Señor dijo a Gabriel: “Procede contra los bastardos y réprobos hijos de la fornicación y haz desaparecer a los hijos de los Vigilantes de entre los humanos y hazlos entrar en una guerra de destrucción, pues no habrá para ellos muchos días.
“Ninguna petición en su favor será concedida, pues esperan vivir una vida eterna o que cada uno viva quinientos años.
Y a Miguel le dijo el Señor: ve y anuncia a Shemihaza y a todos sus cómplices que se unieron con mujeres y se contaminaron con ellas en su impureza, ¡que sus hijos perecerán y ellos verán la destrucción de sus queridos! Encadénalos durante setenta generaciones en los valles de la tierra hasta el gran día de su juicio. “En esos días se les llevará al abismo de fuego, a los tormentos y(2P 2:4; Judas 6) al encierro en la prisión eterna. (Ap 20:10)
“Todo el que sea condenado, estará perdido de ahí en adelante y será encadenado con ellos hasta la destrucción de su generación. Y en la época del juicio que yo juzgaré, perecerán por todas las generaciones.
“Destruye todos los espíritus de los bastardos y de los hijos de los Vigilantes porque han hecho obrar mal a los humanos.
“Destruye la opresión de la faz de la tierra, haz perecer toda obra de impiedad y haz que aparezca la planta de justicia; ella será una bendición y las obras de los justos serán plantadas en alegría para siempre.
“En ese tiempo todos los justos escaparán y vivirán hasta que engendren millares. Todos los días de vuestra juventud y vuestra vejez se completarán en paz.
“Entonces toda la tierra será cultivada en justicia y toda ella será plantada de árboles y llena de bendición.
“Todos los árboles de la tierra que deseen serán plantados en ella y sembrarán allí viñas y cada una de ellas producirá mil jarras de vino y cada semilla producirá mil medidas por una, y una medida de aceitunas producirá diez lagares de aceite.
“Y limpia tú la tierra de toda opresión, de toda violencia, de todo pecado, de toda impiedad y de toda maldad que ocurre en ella y hazles desaparecer de la tierra.
“Y todos los hijos de los hombres llegarán a ser justos y todas las naciones me adorarán, se dirigirán en oración a mí y me alabarán.
“Y la tierra estará limpia de toda corrupción, de todo pecado, de todo castigo y de todo dolor y yo no enviaré más plagas sobre la tierra, hasta las generaciones de las generaciones ni por toda la eternidad.
Capítulo 11
“Y en esos días abriré los tesoros de bendición que están en el cielo, para hacerlos descender sobre la tierra, sobre las obras y el trabajo de los hijos de los hombres “Y la paz y la verdad estarán unidas todos los días del mundo y por todas las generaciones
Capítulo 12
Ante esos sucesos Enoc había sido ocultado y no había ningún humano que supiera dónde fue escondido ni dónde están ni qué le sucedió. Él hacía todas sus(Gn 5:24; Si 44:16; Sb 4:10,11; Hb 11:5) acciones con los Vigilantes y pasaba sus días con los santos.
Así, yo Enoc estaba comenzando a bendecir al Señor de majestad, al Rey de los tiempos, y he aquí que el Vigilante del gran Santo me llamó a mí, Enoc el escribiente y me dijo: “Enoc, escriba de justicia, ve a los Vigilantes del cielo que han abandonado las alturas del cielo, el eterno lugar santo y que se han contaminado con las mujeres haciendo como hacen los hijos de los hombres, y han tomado mujeres y han forjado una gran obra de corrupción sobre la tierra, y hazles saber que no habrá para ellos paz ni redención de su pecado.
«Y así como gozaron a causa de sus hijos ellos verán la muerte de sus bienamados y llorarán por la pérdida de sus hijos y suplicarán eternamente, pero no habrá para ellos misericordia ni paz».