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A modo de trilogía, no podía faltar un libro en la historia de Damian, que sea escrito fuera de su tan preciada Argentina. Luego de "Derrochando fantasía y ficción" y "La buena nueva", era necesario e imprescindible, una serie de relatos que dieran a conocer su interpretación de la realidad lejos de su país. Mediante su año y medio en Costa Rica, Santa Teresa, un pueblo que sin dudas quedará siempre guardado en su corazón; adquiere una mirada más integral gracias al marco selvático natural: surf por todos lados, una vida sin calzado, calles de tierra y extrema amabilidad por parte de los costarricenses. Optando por una narrativa formal que enfatiza en lo conceptual y no tanto en la profundidad técnica, el autor nos proporciona una especie de antropología en relación a las diversas formas de comportamiento humano que existen en Costa Rica; sobre todo por la amplia diversidad cultural que hay en dicho lugar. En este libro, Damian logra finalmente liberarse de sus impedimentos mentales ocasionados por el entorno de su tierra natal, obteniendo un nuevo estado de conciencia crítica con respecto a los sucesos de su prometedora biografía; la cual sigue expandiéndose día tras día. Aquí está Damian, el ser humano, el ciudadano, el profesor, el docente y el escritor; y por qué no, el artista.
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Seitenzahl: 236
Veröffentlichungsjahr: 2023
DAMIAN LEONARDO ARCE
Arce, Damian Leonardo Vivir en soledad libertad : diarios de Costa Rica / Damian Leonardo Arce. - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Autores de Argentina, 2022.
Libro digital, EPUB
Archivo Digital: descarga y online
ISBN 978-987-87-3298-5
1. Autobiografías. I. Título. CDD 302.2322
EDITORIAL AUTORES DE [email protected]
I
II
III
IV
V
VI
VII
VIII
IX
X
XI
XII
XIII
XIV
XV
XVI
XVII
XVIII
XIX
XX
XXI
XXII
XXIII
XXIV
XXV
XXVI
XXVII
XXVIII
XXIX
XXX
XXXI
XXXII
XXXIII
XXXIV
XXXV
XXXVI
XXXVII
XXXVIII
XXXIX
XL
XLI
XLII
XLIII
XLIV
XLV
XLVI
XLVII
XLVIII
XLIX
L
LI
LII
LIII
LIV
LV
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LVIII
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LX
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LXII
LXIII
LXIV
LXV
LXVI
LXVII
LXVIII
LXIX
LXX
LXXI
LXXII
LXXIII
LXXIV
LXXV
LXXVI
LXXVII
LXXVIII
BONUS TRACK
Para mi familia, una de las prioridades más importantes en la vida de cualquier ser humano de bien.
Solo hay algunos pasos en el túnel que te lleva hasta al avión. Cuando estés ahí sentado esperando para volar, te sentirás la persona más sola del mundo. Mirarás hacia ambos lados y te encontrarás con gente que seguramente este en circunstancias similares a las tuyas, personas que se van en busca de algo con la inquietud de no saber si van a encontrarlo…
Diario: hoy es 8 de diciembre de 2021 y estoy sentado en el aeropuerto de Ezeiza, esperando con ansias para arribar a Costa Rica.
Al abrir mi cuaderno, observo que las páginas están vacías al igual que mi vida. Llego la hora de hacerlo, de nuevamente comenzar a escribir en silencio.
¡Dulce espera! ¡La buena felicidad me aguarda en Santa Teresa!
El país yace en ruinas y las miradas de los viajantes me proporcionaba una nostalgia bastante angustiante. ¿Por qué hay que irse a otra parte?
¡Todo parece tan lejano! ¿No me habré equivocado a lo largo de estos años?
Al decir verdad, internamente sabía que en algún momento esto sucedería. Debe ser que sigo siendo el mismo inocente de siempre, porque en el fondo no todos tenemos segundas intenciones.
A veces recuerdo cuando era más joven y solo quería ayudar a las personas para que sean mejores que yo.
A veces me canso de ser el principio y el final de mi mundo, el cual es tan pequeño, tan triste y tan solitario.
No sé muy bien lo que me está sucediendo, pero creo que esta vez las cosas terminarán bien muy para mí.
A veces pienso que todo esto es muy extraño.
¿Acaso mi supuesta decadencia emocional, habrá sido el comienzo del fin?
¿Qué fue lo que me empujó a ir contra la corriente y comenzar a escribir?
¿Qué fue lo que me apartó del camino que en un principio había forjado?
A veces pienso que las personas que se toman las cosas con demasiada responsabilidad, no saben porque no se permiten disfrutar.
La ansiedad y la constante búsqueda de incomodidades, son solo un reflejo de la necesidad por estar todo el tiempo haciendo algo.
No se trata de demostrarles algo a los demás, se trata de compromiso y responsabilidad para ganarle a la muerte un poco más.
Evidentemente, estaba dominado por una idea: estudiar y comprender al ser humano en un ambiente diferente, donde la vida sea vida y lo material no incidiera directamente en las personas.
Evidentemente, quería hacerlo desde muchos puntos de análisis, embarrándome las manos y realmente comprobar lo equivocados que estamos.
Espero que me recuerden siempre bien, con esa sonrisa contagiosa que invitaba a reírse y a realizar alguna que otra travesura.
No quiero que el día de mañana me recuerden de esta manera, una persona que piensa y se vuelca constantemente hacia la autoexigencia.
No recuerdo cuando fue el último día que estuve bien, cuando fue el día después en el cual comencé a venirme abajo.
Luego de eso, no me recuperé más. Me duele en el alma, pero son cosas de la vida. No todo sale como nuestra mente se lo imagina.
Prefiero que me recuerden como una persona alegre, la cual solo hacía divertir a las personas que tenía a su lado.
Mientras tanto, seguiré viviendo para saber aprender a vivir.
¿Cuánto tiempo? No sé, pero tengo la certeza y la seguridad de que será un verano interesante.
Este libro lo he escrito, para poder ayudar a pensar a los demás, en relación a las dificultades que nosotros mismos nos ponemos a la hora de vivir.
Se puede vivir mejor, pero no pasa tanto por lo exterior, sino más bien por lo interior. Cuanto uno más comprende de sí mismo, más se puede ayudar.
Es así como he llegado a comprenderme, viviendo plenamente, disfrutando el amanecer, el atardecer o un simple café.
Creo que este libro plasma muy bien, la hermosa sensación de darme cuenta de algo, eso por lo que venía trabajando y esperando desde hace rato.
Me tomo muy en serio el papel de autor en este libro. Tras haber viajado a Costa Rica, comprendo muy bien que el impacto positivo que pueda llegar a tener en las personas, proporciona consciencia para con el accionar individual en lo grupal de la sociedad.
Esta humilde intervención escrita, establece un pacto entre los hombres pero también reconcilia al ser humano con la naturaleza: espero que se tome al menos un poco de consciencia.
Aterrado y bastante amargado por las consecuencias del sistema estructural, me atreví a aventurarme con un poco de inseguridad.
Corriendo de aquí para allá, de la orilla al mar, la vida parece ser algo más que solo trabajar y trabajar.
Lo que sucedió desde el momento de arribar, fue comparable a cuando uno tira los dados: nunca se sabe que puede pasar.
Todo cambio para mí, porque el único espejo en el que Damian podía verse, era en el mundo superfluo.
No importaba cuanto lo intentaba desde su aparato mental, el espejo de su reflejo era superficial.
Hasta que aconteció lo más novedoso, llegó a mi mundo la armonía: la naturaleza me estaba proporcionando todo lo que necesitaba.
Ahora entiendo todo: en la esfera que siempre había vivido, todo era artificial y estaba dotado de una falsa interpretación sobre la vida.
Supongo que ante no saber cómo lidiar con el público, el cual se encontraba vacío e incapaz de sentir lo natural, me angustiaba.
El ambiente en el cual viví mucho tiempo, afectaba mis estructuras neurales y emocionales. Si mal no recuerdo, creo que lo he sostenido en mis anteriores libros. ¡Qué bien se siente al menos tener un poco de respiro!
Acostumbrarse a vivir en la ciudad para observar solo edificios y cemento, no me proporcionaba sacar a la luz todo mi potencial.
Llega una edad, en la cual comprendemos que las personas tienen deseos, preferencias y proyectos muy diferentes de los nuestros.
Anteriormente, los jóvenes y adolescentes, hacían las cosas que solo los padres preferían que hagan. Trabajaban y se moldeaban para obtener satisfacción en torno a las adquisiciones materiales, siempre y cuando dentro de sus posibilidades.
Hoy en día, tanto en al ámbito de las personas adultas como en el de la juventud, predomina la sensación de que no hay un proyecto concreto: el futuro siempre es incierto.
Ahora, sin embargo, que llevo cumplidos algunos años; hago cosas que mis padres no quieren que haga.
Se trata de llevar al límite las preferencias individuales de la gente, es así como descubrimos que nuestros deseos, preferencias y proyectos, difieren de los del resto. Sé muy bien lo que quiero y lo que no quiero.
Mi obra de vida, si fuera por mí, la doy por terminada. Completarla, me llevará algunos cuantos años más.
Sin embargo, ahí va otro retazo de vida más para Damian.
No puedo decir con exactitud, que ha hecho que cambie tan rápido mi manera de ver, pensar e interpretar el mundo real.
Hace unos años, solía ser bastante negativo y caminaba por la calle muy furioso. Supongo que tenía que ver con no tener una compañera con la cual compartir algunas cosas. Creo que me molestaba eso, sería muy necio de mí parte no admitirlo.
¿Cuáles fueron mis mejores años? No sé, supongo que los que están por venir.
Ahora, miro hacia atrás y siento que no tengo más nada que probar. Siempre tuve esta pelea pendiente en mi interior, esto saldrá como tenga que salir.
Al menos el mundo me sonríe y siento que no es un lugar tan malo y solitario, como solía habitarlo. Claro, todo estaba en las falsas creencias de mi cráneo.
Resta todavía mucho camino por recorrer y faltan muchas más experiencias por transitar, pero cada vez estoy más cerca de que la ficción se convierta en una historia real con final feliz. Solo falta un poco más.
Cambio bastante mi actitud frente a la vida y las cosas, me siento distinto porque ya no soy el mismo. Ya no pienso en saltar por el abismo.
La sociedad y la cultura en la cual vivimos, son modificables solo por nosotros, los seres humanos. Si tan solo nos escucháramos…
Vivimos de paradigmas, nos basamos solo en nuestras interpretaciones individuales de la realidad: no existe la verdad, solo es discursiva y política.
Somos tan básicos, que nosotros mismos creemos en nuestros paradigmas idealizados en nuestra mente. Hay mucha falsedad en las creencias de la gente. Somos tan básicos, que nos creemos el cuento: no somos nada.
Ahora me doy cuenta, que mi reflejo más verdadero y completo, se evidencia con transparencia en el medio de la selva.
La humanidad civilizada, solo suele mirar como realidad, la suya y la de nadie más: por eso debe ser que me encuentro viviendo acá, para desglosar aquellas cosas que no me dejaban escapar.
Por más que fuera consciente, el gran cambio que se había operado en mi carácter, me proporcionaba una mirada más profunda y una postura mucho más meditativa con respecto a las cosas.
Sin embargo, para Damian, lo sencillo no era todavía sencillo. Su estética visual de interpretar la realidad, se apoyaba en aquellos felices recuerdos del pasado. El nudo ya se encuentra desatado, solo conservo lo olvidado.
Vivir en Costa Rica, me permitía estudiar a las personas y a la sociedad local, para de esa manera interpretar su realidad e intentar plasmarla por escrito.
Cuando llegaba la noche, con mayor fuerza se evidenciaba en escena, el eslabón que le faltaba a mi cadena. Esta vez, la pena solo era pasajera.
En cuanto me acostaba, cerraba los parpados y comenzaba a reflexionar. Realmente, poca gente se había interesado tanto en mí como en Costa Rica, provocando que mi objeto de estudio sea mucho más difícil e interesante: es complejo mantenerse al margen, sobre todo cuando uno persigue la objetividad.
La vida humana era lo único que realmente me importaba estudiar.
Lejos de sentirme fuera del mundo, mi humilde poesía de vida, pretende justamente lo opuesto: intentar llegar a interpretar la realidad, para poder concluir en una interpretación de la verdad; siendo lo más objetivo posible.
¡Qué maravilloso se presentaba el mundo entero ante mis ojos!
Involuntariamente, mi alma flotaba porque ya no había nada que me pesara. Estaba siendo feliz y el mundo se transformaba día a día, en un lugar cada vez más cálido ante la visión de mis ojos.
Como que estaba viviendo en otra realidad paralela, más inteligible y mucho, pero mucho más perceptible.
Todavía me cuesta comprender mis emociones, pero al mismo tiempo creo que es parte de la mística; la cual me lleva a escribir y no poder dormir.
¿De dónde vienen? ¿Cuán ancestrales son?
Lo que tengo bien asumido es no entender los motivos: ya no estoy tan angustiado y dolorido, una parte de mí se ha ido.
Es muy fácil aconsejar a los demás para que reviertan su situación de ansiedad y angustia, pero es mucho más complejo que eso.
El futuro está en poder controlar las emociones nosotros mismos, creo que es posible, ya que evolucionamos por naturaleza.
Es de verosímil importancia conocer nuestras emociones, comprender porque vienen y porque se van. Algunos cuentan con destreza para significarlas y otros solo tenemos paciencia: en algún momento llegará la respuesta.
Es complejo, pero el autoconocimiento personal, desarrolla una relación más consciente con ellas. Todavía no estoy con los pies sobre la tierra.
Pensemos un momento, presenciamos el siglo XXI y todavía no se conoce una respuesta concreta y definitiva, acerca del porque se produjeron cambios anatómicos y funcionales, con respecto a nuestros antepasados.
Sin embargo, si pensamos con las leyes de la naturaleza y nos volcamos hacia el lado de la supervivencia, la vida es más divertida en la selva.
Mediante la emoción, muchas veces los humanos nos diferenciamos de otras especies por infinidades de razones, una de ellas, es el procesamiento de dichas emociones.
Cuando razonamos guiados por las emociones, las decisiones que tomamos se toman con mucha más facilidad.
¡Lo complejo que se me hace día a día controlar las emociones!
Basta con solo analizarlo un momento, nuestra calidad de vida y nuestra mera existencia, dependen de nuestras emociones.
La vida puede valer la pena o la pena te puede costar la vida: por eso me vine a vivir a Costa Rica.
¿Qué significa entonces Damian? ¿Debe ser que el vacío existencial lo lleva constantemente a ir por más y más? ¿Damian es un concepto de persona o una persona de conceptos?
¡Qué difícil se me hace descifrar los problemas de existencialidad!
¡La solución seguro está en algún que otro problema más por solucionar!
Espero siempre tener algún problema que resolver y algún error que corregir. Siempre con pasión, ya que de esa manera es como la perseverancia ayuda a mantener el esfuerzo a lo largo del tiempo.
La única verdad, es que mi mayor motivación nunca fue ser diferente, mucho menos innovador. Mi motivación es impulsada por el mismo proyecto de siempre: ayudar a las personas a mejorar en su globalidad.
A ustedes que me leen, que tienen la paciencia de prestarme su tan preciado tiempo de atención, les pido por favor que comprendan todo esta mezcla.
Me esfuerzo mucho en tratar de hacer surgir en mis escritos, muchas artes y muchas culturas desde un solo principio: la naturaleza de las cosas.
Mientras el lector tenga que seguir calculando cual es el sentido de todo esto, le resultara imposible interpretar lo que quiero decir en realidad.
En fin, así es como me presento, de acuerdo con las expectativas de los lectores; me desnudo por completo para que quede bien en claro: miserias y fortunas se reflejan en la luna.
Durante las primeras etapas del viaje, busqué a conocidos y respetados surfistas locales. Sin excepción, me recibieron con los brazos abiertos, compartiendo conmigo todos los conocimientos que habían adsorbido del surf y del espiritualismo en sus estrechos caminos junto al mar.
El tiempo en la playa, se me escurría como arena entre los dedos. Amanecía, transcurría el día, y cuando menos lo esperaba, me encontraba durmiendo de nuevo. Descansaba, me recuperaba y surfeaba por la mañana.
También solía caminar un rato por la playa en compañía de mi sombra, para posteriormente volver y escribir algunas líneas más. Siempre mirando el mar.
Por las tardes exploraba en solitario la selva, y antes de que el sol se fuera, me metía nuevamente al agua con todas mis fuerzas.
¿Qué fue lo que me motivo de manera determinante a realizar este viaje?
Si alguien me hiciera esta pregunta, yo respondería que se trató de una cuestión de necesidad, y al mismo tiempo, de incertidumbre por seguir resolviendo cosas desde lo personal y lo profesional.
La mayoría de las personas se dan cuenta de lo que realmente quieren cuando es demasiado tarde y yo no quería permitir que me pase de nuevo.
De niños soñamos, de adolescentes proyectamos, de jóvenes nos frustramos, de adultos nos amoldamos y llegamos a viejos entristeciendo y lamentando.
Mi filosofía de vida, no se basa tanto en la teoría, sino más bien en la práctica. Yo solamente proceso información y trato de ayudar a la gente de una manera diferente, aunque a veces resulte difícil no dejar vencerse.
¿De qué me serviría escribir como Nietzsche si no seduciría a la mayoría?
Para abordar el trabajo que llevo a cabo, por supuesto que es prioridad formar mi intelecto leyendo e interpretando los viejos reglamentos.
Elijo relatar como si fuera una canción, para que mi obra de vida, se torne más apetecible desde el ojo de quien lo lea.
Creo que es siempre mejor estudiar algún grupo en particular de personas, que globalizar y deliberar como generalidad algunas cuestiones de la sociedad: la gente en Costa Rica es muy particular. Su amabilidad y su predisposición sea cual fuera la ocasión, me sorprenden cada día un poco más.
Dios es y siempre va a ser, sin embargo, las condiciones climáticas y geográficas influyen drásticamente en la cultura.
Esta claro, venimos de África y nos adosamos a un entorno social, donde poco a poco nos van moldeando según las exigencias del medio natural.
Hasta el momento, solo puedo decir esto: primero, que el humano africano se ha ido domesticando en relación a las costumbres sociales y culturales particulares de donde vive. Segundo, aunque nuestras culturas argentinas difieran abismalmente, podemos adoptar de Santa Teresa algunas cuestiones para que la vida sea un poco más ligera: nos hacemos mucho problema.
Creo que necesitamos un cambio cultural, promover otros valores y co-crear actitudes que nos estimulen a disfrutar de las mismas.
Se trata de siempre buscar lo poco convencional y ortodoxo, ya que lo consensuado y estructurado por la sociedad, solo reproduce lo que ya no sirve más. Es más fácil de lo que pensamos, solo hay que imaginarlo.
A pesar de que los tiempos cambien, lo más importante son los referentes culturales. Mi intención solo es incentivarte, nunca es demasiado tarde para aventurarse.
Las cosas ya cambiaron y no me gustan nada como lo hicieron ¿nadie pudo ver lo que estaba pasando? ¿Recién ahora lo vemos? ¿Y ahora que lo vemos, qué hacemos? ¿Salimos corriendo a buscar a cualquiera para que nos solucione el problema? Solamente estoy buscando respuestas.
Gracias a Dios, he podido contemplar el drama y penetrar con mi mirada, hasta el interior del mundo. Sin embargo, la claridad parcial del cuadro, hasta ahora no me alcanza para descifrar a la raza humana.
Todavía me quedan esperanzas de descubrir con exactitud, aquellas cuestiones de las personas que me intrigan.
Profundo, lleno de amor y entusiasmo, mediante solitarias meditaciones seguiré indagando metafísicamente algunas cuestiones de la vida.
La distancia entre lo humano y lo divino es tan grande, que falta conocer aún un poco más al ser humano con respecto de sus límites. Solo así, podremos acercarnos un poco más hacía la verdad.
Parece claro que los seres humanos, para que produzcamos importantes cambios con respecto a nuestros hábitos, creencias y costumbres; tenemos que exponernos durante varias generaciones para generar adaptaciones.
Estoy seguro que un cambio en las condiciones ambientales, producirán un efecto positivamente hereditario en los humanos.
El creciente uso o desuso de los músculos, ha tenido origen artificial y genéticamente en lo familiar. Por suerte, el cambio ya ha comenzado.
En la mayoría de las cosas, la humanidad se ha vuelto plástica, desviándose de sus progenitores con respecto a las malas costumbres.
Siempre estuvimos en movimiento.
Ya sea por cuestiones climáticas o para buscar alimentos, cruzamos el planeta para buscar un mejor ambiente en el cual vivir.
Hemos cruzado ríos, océanos, montañas, selvas y desiertos.
De África hasta nuestra casa, nos movilizamos por necesidad y pulsión biológica de evolucionar.
Siempre estuvimos en movimiento ¿por qué dejar de hacerlo?
Una vez que el humano ha comenzado a mutar, continuará haciéndolo sin parar. Siempre es un buen día para cambiar.
Vagué durante algunos días por la selva. A veces deseaba con encontrarla, otras tantas estaba decidido a abandonar este mundo y mis miserias.
Estoy solo, soy desdichado y nadie quiere compartir la vida conmigo.
Poco a poco me iba dando cuenta, a medida que ciertos recuerdos se despolarizaban de mi memoria, que recurría a una amabilidad cada vez más exquisita. Es como si la dulzura de los modales gobernara a la razón.
Al mirar a la gente pasar y poner mi atención con intención de encontrarla, en determinado momento, por esmerarme lo suficiente, la terminaría encontrando.
Lo que me llevaría a encontrarla, sería mi nueva predisposición: cambiar el sentido de atención con intención de encontrarla.
Para mí la melancolía es fundamental, es como un eje central y crucial para toda mi creatividad: por mucho tiempo no la he podido controlar.
Hoy en día estoy en proceso de manipularla y utilizarla para crear algo más que una simple tristeza vulgar: eso es quedarse y no avanzar.
Elegir sufrir alguna que otra depresión, es como darle poder a un mono. Si me pidieran un consejo, les diría que no se arriesguen.
No se trata de estar loco, se trata de profundizar la atención de mis sentidos e intentar visualizar en el más allá.
Solo se trata de elegir estar un poco triste, para de esa manera elaborar algo realmente que pueda llegar a impactarles a los demás.
El mágico efecto fue haber sido impulsado por mis estados de ánimo, primordialmente por la angustia.
Esta es mi esfera de la belleza, en la cual supe encontrar algunas armas para luchar contra la soledad.
Ustedes no tienen idea. Se piensan que por leer mis libros, me conocen de arriba abajo, pero están equivocados.
Ustedes no tienen idea. No saben lo que es caminar por los círculos del infierno, conocer las tinieblas y seguir andando sobre la tierra como si no me dolieran las penas ajenas.
Ustedes no tienen idea. Hoy tendría que estar disfrutando, surfeando o relajando en la playa, pero ustedes no tienen idea.
Es la guerra, la guerra sin fin contra Damian.
Soy una persona con mucha energía física, aunque generalmente me encuentre sentado frente a la computadora leyendo, planificando o escribiendo.
Trabajo muchas horas, con mucha concentración y empeño. A veces, solo a veces, tengo la sensación de estar en paz conmigo mismo por hacer lo que hago: siempre me encuentro pensado o reformulando algo.
Siempre trato de estar encendido, siempre trato de murmurar algunas cosas en mi cabeza: la mayoría son objetivos y metas.
¡Hablo mucho conmigo, hablo mucho solo!
Así somos las personas que vamos por todo, así somos los locos.
Si “Derrochando fantasía y ficción” se volvió una daga al corazón en relación a mis recuerdos, si “La buena nueva” un trago amargo en relación a mi realidad profesional, “Vivir en soledad libertad” completa la trilogía: me siento más vivo.
Debe ser que Jesús resucitó al tercer día, debe ser que por eso continúo escribiendo: poco a poco voy renaciendo.
¡Qué mi tercer libro sirva para seguir generando conciencia!
Ha pasado tiempo desde mi primera confesión, supongo que uno solo busca ser bendecido y obtener a cambio al menos un poco de afecto.
El secreto de confesión también se aplica al café, debe ser por eso que me gusta tanto tomarlo en solitario. Todas esas cosas que ocurren en mi cabeza cuando me tomo un café, se quedan en el café.
Ahora entiendo todo, creo que he perdido más de lo que he ganado en aquellos tiempos. A pesar de todo, aun así podía resistir, podía recibir golpes.
Nunca pudieron noquear a Damian. Lo han tirado, revolcado y destrozado; pero el final siempre era el mismo: siempre se levantaba, se paraba y terminaba con la frente alta. Siempre quedaba de pie cuando perdía.
De vez en cuando lo golpeaban y como que algo dentro de él se quebraba, de todas formas mucho no le importaba.
A veces, a pesar de que te dejen de rodillas, podes ganar igual porque perder también es ganar: soy bueno recibiendo golpes.
Ahora entiendo todo, a veces mi reflejo me enloquecía, sobre todo cuando poseía esa especie de mirada muerta por las penas.
Ahora entiendo todo, dejaba salir al diablo.
Yo para ese entonces no entendía lo que sentía en mi interior, al momento de pasar a la acción, pero creo que esta vez el mar se lo llevó.
No soy solo un guerrero porque no solo se trata de la vida, también está presente la muerte: siempre me pregunto cuánto más tendré que esperar.
Los más malos de todos los malos, los más buenos de todos los buenos: ellos sabían lo que tenían que hacer y lo hicieron.
¿Qué hicieron? Se liberaron de todo.
Hay que aprender a liberarse, sobre todo de las comodidades y de los trabajos rentables. Si podes controlar eso, quédate tranquilo que es solo el comienzo.
A veces pienso, que las relaciones individuales afectivas, son un lujo que personas como yo no se pueden dar.
Creo que no importan tanto las personas que perdés a lo largo de vida, sino aquellas a las cuales salvas de su propio infierno.
Creo que tampoco soy un idealista sensible que se compromete a medias con la audiencia: el valor gris se lo dejo a la materia encargada del razonamiento, esa misma que se encuentra en nuestro cerebro.
¿A cuántas personas he ayudado y/o le he cambiado la vida?
No lo sé, pero ya no tengo miedo de cruzar la línea de lo multitudinario: por eso voy cada día por más y más. Ya no más cosas a medias, ya no más.
¿Tengo lo que merezco? Suelo preguntarme, luego me duermo.
Soy una persona que ha sobrevivido durante años, pero considero que no estoy realmente donde quiero estar todavía.
Algunas personas tienen más de lo que merecen porque creen que son distintas al resto. Las reglas que siguen son diferentes en relación a las personas que siempre se quedan quietas.
Creo que podemos hacer lo que queremos y ser felices al mismo tiempo, pero para eso es conveniente seguir escribiendo desde la sombra.
La sombra que yo mismo proyecto es sinónimo de cansancio, de lo cansado que estoy por esforzarme demasiado.
Por suerte, la mente gobierna al cuerpo. El cuerpo es el arma más poderosa que tenemos a la hora de ejecutar las cosas.
Entender eso es solo el comienzo, asimilarlo y comprenderlo, es un indicio de que estas evolucionando hacía el autoconocimiento.
Hay que aprender a controlar los sentimientos que se encuentran en lo más profundo nuestro: para eso generalmente sirve el entrenamiento.
La meditación, es muy sabia en eso: te volvés más fuerte, más enfocado e incluso tus heridas sanan más rápido. ¿Cómo creen que sigo vivo?
El sol de Santa Teresa empezó a esconderse. Un gran círculo anaranjado poco a poco se dormía, debido al tan agotador día de surf.
Damian había cambiado muchas cosas más con respecto a su forma de vivir. Todo pasaba por la buena salud mental que fácilmente se le notaba en el brillo de su mirada: poco a poco, el pasado ya no le pesaba.
Realmente había cambiado. El antiguo pesimismo que de vez en cuando frecuentaba, gradualmente desaparecía con el correr de los días.
La falta de negatividad personal ocasionada por el ambiente en el cual me encontraba actualmente, me daba la impresión, de que por primera vez en mucho tiempo estaba en paz conmigo mismo.
Me conmovía con tan solo mirar el alba, ya que con eso me alcanzaba y me sobraba. Mis sentidos explotaban por la excitación neuronal que el mar me proporcionaba al momento de observarlo.
Siempre he sido honesto y lo más sincero que puedo, ya sea con ustedes y conmigo a partir de todo lo que escribo. ¡Ojalá fuera ficticio!
