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Esta humilde obra tiene como propósito compartir contigo la salida de desgarradores sentires, por los cuales transite luego de estar hospitalizada por un accidente, dos años y tres meses, postrada en una cama con 6 operaciones Esta salida hacia paisajes más luminosos de mi mente y mi realidad existencial, es la que narro en un intento de acercarte herramientas, herramentales, para que Tu Mismo, puedas elevarte de cualquier conflicto y superarlo. Tómalo como un complemento, un aporte para que Tu Yo Único y Vivencial alquimice los NO Puedo, en Nuevos Puedos Esperanzadores, Reales, En Acción Concreta hacia tu vida mejor y posible. Va en ello todo mi amor.
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Seitenzahl: 56
Veröffentlichungsjahr: 2022
Mabel Scaglione
Scaglione, Mabel Acuarela lumínica de una desgracia / Mabel Scaglione. - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Autores de Argentina, 2022.
Libro digital, EPUB
Archivo Digital: descarga y online
ISBN 978-987-87-2880-3
1. Narrativa Argentina. 2. Espiritualidad. I. Título. CDD A863
EDITORIAL AUTORES DE [email protected]
Agradecimientos
Almas con cuerpos
Ir sanando
Ser y parecer
La soledad, la ayuda y tú
La sanación
Duelarte a ti mismo para asumir tu nueva forma
Soltar, siempre soltar
Quererse bien
La tristeza
Celebración
Parirse uno mismo
Comprender lo casi incomprensible
La desolación
Creencias
La impotencia
La experiencia
La risa sanadora
Festejo
No juzgar
La alquimia
El amor
Las energías positivas
La nostalgia
La culpa
El péndulo de nuestro acontecer
Las carencias
Desdramatizar
SUGERENCIA
No te dejes engañar por las máscaras de la Hipocresía, busca siempre el verdadero rostro.
Aléjate de las caretas, busca lo que subyace en lo profundo.
Y si no te gusta lo que encuentras, retírate sin juzgar...
Sé libre de los falsos amores, sé fiel a tus convicciones permitiéndote cambiarlas si están equivocadas.
La vida es camino, prueba, mudanza, evolución y autenticidad contigo mismo.
Habítate bien.
Cuida tu libertad interior.
¡¡¡Intenta ser feliz!!!
Este renacer que experimenté, no hubiese sido posible sin la contención de mis afectos incondicionales.
Motores fundamentales de mi salida del Infierno.
Mi esposo Guillermo, mi gran sostén, el que me sopló aliento vital cada día de mi no vida.
El que vistió de esperanza mis alas rotas y trato de remontarme, a un paisaje más amigable, a pesar de la pesadilla que vivíamos…
Es el que mantuvo la fe, cuando yo la olvidé totalmente en un destino muy lejos, inaccesible para mi alma entonces.
Aquel que no dejó de sostener mi mano y me arropó de amor y luz en mi noche más oscura.
El que me sigue acompañando en este retorno a mí misma, el que me cuida y cuidó con amor incondicional.
A vos Guille… Mi agradecimiento, mi bendición y mi amor Infinito.
Tus valores son del cielo, no de la tierra, por eso sos mi ángel, la antorcha de mi vida.
Mi hijo Nicolás, el milagro de amor más grande que la vida me regaló.
Mi querido hijo, cuánto sufriste…
Cómo quisiera reparar mágicamente todo el dolor que te causé, todo ese tiempo que estuve internada y no pude ser mamá…
Quiero que sepas que sos mi sol y mi todo, el propósito fundamental de mi existencia.
Vos me honraste con tu nacimiento, y me seguís honrando por tus valores, por el hombre bueno que sos en cada acción de vida.
Perdón hijo por tus lágrimas… Te amo tanto…
Sé que lo sabes, pero mi deuda con vos la siento Eterna.
Tan eterna como el Amor que siempre te tuve, te tengo, y te tendré.
Mamá te ama desde siempre y para siempre…
Gracias Inmensas también, a familiares, conocidos y casi desconocidos que elevaron una plegaria por mí, en tiempos de tanta incertidumbre y desconcierto.
A nuestro amigo Oscar que con su presencia y rezos, mitigó nuestras horas de mayor desaliento.
A vos lector que te sumas, espero que juntos generemos entre nuestras almas los tan necesarios puentes de amor, hacia la sanidad de nuestro íntimo.
Va en ello, mi anhelo, mi esperanza, mi sueño, mi creencia plena.
Gracias a todos. A todos mi Amor.
Esta humilde obra refiere a los diferentes estadíos de mi alma, luego de sufrir un accidente muy grave por el cual estuve dos años postrada en una cama, con múltiples operaciones.
Verás que a toda esa etapa que atravesé la llamo EL INFIERNO, porque así lo vivencié, lo sentí, lo experimenté.
Mas luego de mucho trabajo interior y el apoyo fundamental de los afectos cercanos, pude mudar, transformar, alquimizar todos los sentires no lumínicos, en paisajes luminosos para mi mente y mi realidad existencial.
Comparto mi experiencia, con el propósito que estos pensares volcados aquí te sean un complemento de ayuda, un refugio para reflexionar, en el intento de superar los diversos estados de conflictos, que surgen en la psiquis y en la vida.
Mi mensaje. SI YO PUDE, VOS TAMBIÉN.
Somos para mi creencia alma con cuerpos, cuerpos que debemos cuidar para que el alma se desarrolle en plenitud, nuestro vehículo físico permite la expresión de nuestra alma, por eso su valor es fundamental.
¿Qué pasa cuando el cuerpo no te responde invalidado en una cama y sufriente, por múltiples operaciones?
¿Y hasta la posibilidad de darte vuelta, o sea girar en la cama te es negada?
Tu ser responde solo al dolor y cada minuto es desgarradoramente eterno y las pérdidas se suceden una tras otra. Pierdes tu libertad, tesoro dado, cuidado y fortalecido por tu actitud en el pasado, pierdes la alegría de tu propia existencia, pierdes esa unión a todo lo creado… pasas a ser un objeto casi inanimado, a tal punto que haces alianza emocional con la lámpara del techo que ilumina tu despojado ser, pues la haces compañera de tu desgracia no comprendida, mirás cada movimiento cómo queriendo moverte con él, pero seguís ahí, en tu mortaja impecablemente blanca… tu cama.
Sueros, antibióticos, transfusiones, anestesias, ayunos, operaciones, son rutinas que se imponen para un bien que no logras del todo interpretar, pero tenés que asumir.
La magia de la vida muere contigo cada día de tu no vida, el placer y el asombro con que despertabas cada mañana se transforma en una rutina burda, sufriente, sin expectativas de nada, solo más de lo mismo.
Te digo, nunca te acostumbras a ella.
Solo sucumbes ante ella y ante el espantoso traje con el que te viste. Surgen los porqués, que no puedes contestar y el alma pareciera que para siempre vivencia el Eterno sufrir.
El dolor vence tu vapuleado sentir y las esperanzas se esfuman en un cotidiano no ser, no ser que te acompaña por años y que no pueden evitar tus afectos, tus queridos, por más que intenten innumerables veces darte ese aliento de vida, ese aliento vital que ya casi no reconoces.
Cuando me refiero al infierno que viví, es tan cruel que solo puedo darte un leve parpadeo de él, suficiente creo, para que comprendas que aún de lo peor, siempre se sale.
La salida del infierno no es nada fácil se requiere de un cambio integral, como puente de salida hacia el ser.
