Libro cuyo nombre le ponemos todos - Ricardo Percovich - E-Book

Libro cuyo nombre le ponemos todos E-Book

Ricardo Percovich

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Beschreibung

¿Les ha pasado alguna vez que les brota de muy adentro una fuerza extraña que es mucho más que uno mismo, para decir, para dar testimonio de una forma de mirar el mundo? ¿Y no pueden parar, y dan la vida por ello si es necesario? Es mi testimonio de que estamos subiendo. Todos En una eterna espiral. Lenta, eterna. Pero subimos todos juntos. Con retrocesos, con caídas, con bajadas a valles sólo para poder subir a la cumbre que está en la otra montaña de allá enfrente. Porque somos muchísimas tribus, y todos estamos aprendiendo a subir.Si tuviera que definir por qué pongo la abundancia del corazón a escribir este libro, lo haría con esta versión libre de "Fuerza extraña" de Caetano Veloso. Así de transparente. Yo vi a un pibito corriendo, / yo vi al Tiemposaltando y jugando carreras con ese pibito.Yo puse mis pies en el río / y siento que allí los dejé.El sol sigue hermoso en la calle que no caminé. Yo vi a una mujer preparando otra persona,y el tiempo no para, y disfruto de aquella pancita.La vida es amiga del arte, / eso es lo que el sol me enseñó.El sol, que ilumina esa calle que no caminó… Por eso una fuerza me lleva a cantar, / por eso esa fuerza extraña.Por eso es que canto, no puedo parar. / Por eso esa voz tamaña… Cabeza canosa y querida, mi amigo el artista.El tiempo no para, y sin duda que nunca envejece.Conozco al que juega ese juego, jugar con la vida como es,El sol es quien juega, es el tiempo, es la ruta y el pie. Vi barras de gente peleando. Vi su alboroto.Estuve en el fondo de cada intención encubierta.Y tengo segura una cosa: no es bueno esconderse del sol.El sol en la ruta, el sol en el alma... es el sol. Por eso una fuerza me lleva a cantar, / por eso esa fuerza extraña.Por eso es que canto, no puedo parar. / Por eso esa voz tamaña… No me presento, porque este libro me presenta. Soy un ciudadano de este pequeño punto azul.Gracias a tod@s l@s amig@s del alma que han colaborado con este libro a corazón abierto.Ricardo Percovich

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Seitenzahl: 86

Veröffentlichungsjahr: 2015

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Ricardo Percovich

Libro cuyo nombre lo ponemos todos

Editorial Autores de Argentina

 Percovich, Ricardo 

   Libro cuyo nombre le ponemos todos / Ricardo   Percovich. - 1a ed . - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Autores de Argentina, 2015.

   Libro digital, EPUB

   Archivo Digital: descarga y online

   ISBN 978-987-711-455-3

   1. Cuentos Testimoniales. 2. Autobiografías. 3. Reflexiones. I. Título.

   CDD A863

Editorial Autores de Argentina

www.autoresdeargentina.com

Mail:[email protected]

Diseño de portada: Ricardo Percovich

Diseño de maquetado: Autores de Argentina

Índice

Introducción

1 - Un stand up libro

2 - Crecemos en eterna espiral

3 - La búsqueda participativa como expresión de subida

4 – Condicionamientos, modelos mentales y otras yerbas

5 - Terraformación

6 - ¿Subida al patíbulo o a la plenitud?

7 – Más acá del mito. Mi sombra personal.

8 – La subida en intuición y encuentro

9 – El diálogo humano sobre esta visión

10 - ¿Y ahora qué hago con esto?

11 – Sostener el gozo del trabajo

12 – Sostener el gozo de la búsqueda de vida

13 – Dónde empezamos a subir. Un cuento a la manera de

14 – El tapiz de la cosmología

15 – Unos pasos de eternidad

16 – Recuerdos del futuro

17 –Un gran bucle en el río al futuro

18 - A través del espejo

19 – Un principio

20 – El insight en el arte (1)

21 - El insight en el arte (2)

22 – Canto a la creación

Introducción

Si tuviera que definir por qué pongo la abundancia del corazón a escribir este libro, lo haría con esta versión libre de “Fuerza extraña” de Caetano Veloso. Así de transparente.

Yo vi a un pibito corriendo, yo vi al Tiempo saltando y jugando carreras con ese pibito. Yo puse mis pies en el río y siento que allí los dejé. El sol sigue hermoso en la calle que no caminé.

Yo vi a una mujer preparando otra persona, y el tiempo no para, y disfruto de aquella pancita. La vida es amiga del arte, eso es lo que el sol me enseñó.

El sol, que ilumina esa calle que no caminó…

Por eso una fuerza me lleva a cantar, por eso esa fuerza extraña. Por eso es que canto, no puedo parar. Por eso esa voz tamaña… 

Cabeza canosa y querida, mi amigo el artista. El tiempo no para, y sin duda que nunca envejece. Conozco al que juega ese juego, jugar con la vida como es,

El sol es quien juega, es el tiempo, es la ruta y el pie.

Vi barras de gente peleando. Vi su alboroto. Estuve en el fondo de cada intención encubierta. Y tengo segura una cosa: no es bueno esconderse del sol. El sol en la ruta, el sol en el alma... es el sol.

Por eso una fuerza me lleva a cantar, por eso esa fuerza extraña. Por eso es que canto, no puedo parar. Por eso esa voz tamaña… 

No me presento, porque este libro me presenta. Soy un ciudadano de este pequeño punto azul.

1 - Un stand up libro

En este pequeño punto azul donde estamos conectados todos con todos, tengo la intuición y necesidad de superar nuestro milenario concepto de libro.

Antes uno paría trabajosa y dichosamente la idea orientadora / inspiradora, y la volcaba al papiro. Allí yacía congelada, o sacudida por revisiones posteriores, hasta que los papiros eran integrados en un libro. Y éste se copiaba, o se imprimía, para que otros, los verdaderos copartícipes del libro, lo leyeran y… Podían disentir, apoyar, celebrar. Pero había una brecha de espacio y tiempo entre los destinatarios y el que escribe. Muy trabajosamente el autor podía inferir respuestas y volcarlas en un segundo libro enriquecido. Era la misma soledad de un Miguel Ángel pintando o esculpiendo. O de Newton meditando el manzanazo.

Hoy las redes conversacionales de nuestra aldea global permiten un sueño para el que propone una idea: ponerla a la luz de tod@s, o de l@s que comparten más asiduamente el diálogo, para enriquecerla, pulirla, o dejarla morir por no fermentadora de un crecimiento eficaz.

Amo escribir, pero también amo y más el ser actor. El escenario tiene un aroma fascinante… pero lo que me llama es algo muchísimo más potente: poner el alma / cuerpo al servicio de un mensaje poderoso. Y ese mensaje es para los que participan. El actor es un mensajero, un conmovedor de la realidad para que ésta crezca, se repiense, se movilice.

La vida es dialogante. Todas las especies dialogan. Primero para alejar las mareas de la extinción, y luego lentamente para ver dónde está la subida en eterna espiral hacia la comunidad de las consciencias… El fuego, la música, el arte, la mirada del cosmos, y las estrellas. Que nos llaman con una nostalgia inexplicable.

Y para eso el diálogo. Entonces, en lugar del diálogo lento y paciente del libro y sus páginas, propongo un diálogo diferente, mucho más parecido a un stand up libro donde yo provoco y digo, para que inmediatamente los que escuchan se sientan conmovidos y llevados al diálogo que aporte. Para que el mensaje lo vayamos armando entre todos. No hay autores magistrales, hay comunidades dialogantes que van pariendo su visión de cómo es y debe ser el mundo. Para irlo cincelando así. Porque primero dialogamos, y luego hacemos. Como pintaban Quinquela o Torres García, en comunidad de estudio con sus allegados.

¿Qué tal entonces si probamos este estilo, donde yo voy diciendo, y ustedes van aportando, pateando, riendo, postulando, arrojando al fuego, y pariendo entre todos una nueva forma de mirar el cosmos?

Y cada trozo / capítulo va armando un libro árbol que, dada esa metodología, se parecerá más a un laberinto de muchas posibilidades, tal cual es la red de nuestras comunicaciones y afectos.

Aquí vamos entonces.

2 - Crecemos en eterna espiral

Como especies pensantes tenemos dos miradas aparentemente contradictorias de nuestra vida y nuestro mundo.

Por un parte tendemos a conservar cuidadosamente lo que nos ha permitido sobrevivir hoy, porque nos da seguridad. Por otra parte buscamos, como el río que busca el mar, nuevos caminos y formas de sobrevivir que no necesariamente son las que nos han legado los ancestros. Conservamos y creamos, en una doble espiral que la misma ciencia reconoce que es la que muestra el crecimiento del universo. Se parece divertidamente – y está reflejada en - el ADN de los genes, como propone David Deutsch, pero luego sigue en los memes de la cultura, como proponen Richard Dawkins y Alan Turing.

Si no hubiéramos buscado, - miles de intentos, - no hubiéramos aprendido a manejar el fuego, a cortar las pieles, a vivir de nuestros plantíos, a armar tiendas y casas, a llevar el agua a las mismas, a orientarnos por las estrellas, a transmitirnos esa experiencia en un lenguaje cada vez más eficaz…

La ciencia ha reconocido que, a lo largo de miles de millones de años de universo conocido – no sabemos aún si el universo real es infinito – lo que llamamos materia que compone ese universo se ha ido organizando.

Primero en base a las leyes más simples de la materia gruesa: la gravedad, la inercia, las interacciones físicas y químicas. Pero luego han aparecido formas muchísimo más complejas en que la materia se ha organizado en seres autorreplicantes, fenómeno que llamamos vida e inteligencia. Y allí aparece la característica de que dichos seres se auto-organizan, en esa búsqueda permanente que antes mencionábamos. Los genes constituyen un peldaño vital, pero son formas de un conocimiento logrado por la naturaleza. Luego la subida continúa por el conocimiento de la vida y de las consciencias personales y grupales.

Es un fenómeno de muy alta especialización. Conduce de las estrellas a los planetas aptos para los fenómenos vitales; de éstos a la aparición de infinitas variedades de vida e inteligencia, que busca entender y organizar – ahora voluntariamente – su entorno para encontrarle un sentido y una forma eficaz de vivir y disfrutar de esa vida. Es lo que Rupert Sheldrake llama “los sistemas auto-organizadores”; y también la “resonancia mórfica” que pasa el conocimiento de una a otra comunidad de la especie aun a distancia…

Es esta figura de organización a la cual llamo “la subida en eterna espiral hacia la comunidad de las consciencias”.

Esta frase o propuesta parece todavía muy primaria y poco probable, quizá forzada para mostrar algo que no aparece todavía: el que haya una subida.

Subida remite a crecimiento, a cada vez más posibilidades, cada vez más claridad y eficacia y felicidad por el sentido mayor sobre el universo.

Es aquí que, con un profundo respeto por las formas de mirar el universo, yo propongo – es una propuesta o hipótesis, no una afirmación ni mucho menos una ideología, la percibo junto con muchos que piensan en forma similar, - que si miramos los resultados de esa auto-organización de los sistemas físicos, hay efectivamente un mejoramiento de las posibilidades de vida, crecimiento y felicidad.

Aquí siento estallar la controversia, porque la mirada sobre el universo depende de qué experiencia y condicionamientos anteriores tengamos para mirar.

Por un lado parece objetivo si miramos en conjunto – muchas personas y grupos investigadores lo dicen - que estamos al borde de la extinción como especie. Que la especie humana está diezmando el planeta.

También parece objetivo que la cantidad de seres vivientes, y su calidad potencial de vida, salud y vuelo creativo es mucho mayor que la que era en el neolítico.

Y es en este punto donde propongo percibir un quiebre de potencialidad en la materia que se va organizando. Porque hablábamos de leyes de la física y la química, donde dichas leyes actúan en forma predeterminada y absoluta. Pero ahora estamos hablando de opciones libres tomadas por seres inteligentes, donde las leyes de actuación son estadísticas porque cada persona es en realidad libre de asumir diferentes posturas ante la realidad.

Eso es muy riesgoso. Y sin embargo es vital porque es la forma como el universo va buscando rutas de subida, en forma laberíntica. Y en esta etapa de la subida hay infinitas posibilidades. Por lo tanto, somos CREADORES de nuestro futuro.

La libertad supone AMBAS posibilidades: que crezcamos en felicidad y posibilidades como especie; o que nos extingamos.