Cantos de la vendimia - Salvador Rueda - E-Book

Cantos de la vendimia E-Book

Salvador Rueda

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Beschreibung

Curiosa colección de poemas del autor Salvador Rueda que tienen como protagonista a la vendimia en Andalucía, su idiosincrasia, sus procesos, sus gentes y su épica, sin por ello renunciar al gusto modernista del autor ni a la plasticidad de su lenguaje a la hora de transmitir emociones.

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Seitenzahl: 50

Veröffentlichungsjahr: 2021

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Salvador Rueda

Cantos de la vendimia

 

Saga

Cantos de la vendimia

 

Copyright © 1891, 2021 SAGA Egmont

 

All rights reserved

 

ISBN: 9788726660401

 

1st ebook edition

Format: EPUB 3.0

 

No part of this publication may be reproduced, stored in a retrievial system, or transmitted, in any form or by any means without the prior written permission of the publisher, nor, be otherwise circulated in any form of binding or cover other than in which it is published and without a similar condition being imposed on the subsequent purchaser.

This work is republished as a historical document. It contains contemporary use of language.

 

www.sagaegmont.com

Saga Egmont - a part of Egmont, www.egmont.com

Al señor don Gabriel Ruiz de Almodóvar.

Mi querido amigo Gabriel: Durante nuestro trato amistoso, que deseo no acabe nunca, he sacado mucho provecho de los talentos de usted; he adquirido enseñanza de sus conversaciones; he experimentado deleite exquisito oyéndole tocar horas y horas la guitarra, y recreo sano y puro al realizar nuestras escursiones campestres, acompañados del siempre presente en nuestra memoria, Matías Méndez Vellido.

En débil correspondencia á esos beneficios que me proporciona su amistad, le dedico este libro, que le pido reciba usted con benevolencia.

Mucho la necesita su amigo que le quiere de corazón,

Salvador .

Madrid, Abril, 1891.

NOTA

Hará cosa de ocho meses escribí el presente libro, y tal como entonces salió de mis manos, lo remití á mi querido amigo don Leopoldo Alas, para que lo leyese, y, en caso de que lo mereciera, lo honrara escribiéndole un prólogo. De entonces acá, he corregido mucho la obra; suprimí diversas poesías, modifiqué otras, añadí alguna, y metí la pluma en no pocos versos. Puede decirse que este libro varía bastante, en lo accesorio, de aquél.

Que anduve atinado al suprimir, entre otras, la sinfonía, composición que encabezaba la obra, lo demuestran las malas ausencias que aquí le hace el ilustre crítico, cuyas censuras, como la poesía no existe, claro es, dan en el aire, con no poca satisfacción mía. Pensaba haber enviado de nuevo al celebérrimo escritor mi libro, en pruebas de imprenta, y con las modificaciones que yo había hecho; pero antes de que pudiera verificarlo, á los ocho días precisamente de haber vendido la edición al señor don Emilio Gutiérrez, ví el prólogo de Clarín en un periódico de esta corte. Más que al público, debo esta leal aclaración al insigne autor de La Regenta.

Y ya que tengo la pluma en la mano, diré que no hube de explicarme bien al dar á entender en la poesía borrada, que las palabras aleve, hado, parca, etc., no se deban usar en poesía; lo que hago es condenarlas como lugares comunes en composiciones donde se trae de la greña al león ibero, y no se deja de recordar al mundo atónito que en nuestros estados no se ponía el sol, y se canta en hemistiquios de yunque y mazo, el nefando día en que á España le ocurrió esto ó lo otro; todo lo cual, con las demás poesías que tengan el mismo aire de familia, me parece pomposa vulgaridad y ruido de nueces.

Para terminar diré, que soy el primero en reconocer, que al ponerse á escribir el prólogo el temido crítico, le cogió en uno de esos momentos en que el espíritu se halla dispuesto á toda clase de benevolencias; no de otro modo me explico que en la síntesis final de su juicio, me coloque del lado adentro del lindero con que él separa á los tres poetas que reconoce en España, á don Manuel del Palacio, á don Ramón de Campoamor y á don Gaspar Núñez de Arce, los cuales forman su famosísima operación poético-matemática.

Nunca aspiré á tanto, y puede creer mi respetado amigo que su generosidad me servirá de persistente estímulo para el estudio y para el trabajo.

Salvador Rueda .

___________

CARTA-PRÓLOGO

Mi querido Rueda: hace más de medio año me pidió usted un prólogo para su colección de versos, titulada Cantos de la vendimia, inédita hasta ahora por culpa mía. Como yo le prometí el prólogo después de dar un vistazo á su obra, no se atrevió usted á publicarla sin tal requisito; y con una paciencia que nace de su modestia, ahí se está aguardando á que yo sacuda la pereza (!) ó me haga un erudito en poesía lírica de las cinco partes del mundo. No hay tal pereza ni tal erudición. Yo no aspiro á saber más de lo que sé, que es bien poco, de los poetas que en el mundo han sido, para cumplir mi promesa; pero sí es verdad que quería, con ocasión de su libro, decir algo de lo que pienso acerca de la poesía lírica, á que doy mucha importancia, sobre todo en el pasado y en el porvenir. De este asunto capital del arte literario yo no he hablado hasta hoy directamente y con alguna extensión; la única vez que algo dije al caso fué al juzgar las comparaciones que Núñez de Arce establecía entre los poetas y los novelistas; y entonces lo que me tocaba no era el panegírico de la lírica sino la defensa de la prosa, y particularmente de la novela, maltratada por el ilustre autor del Idilio. Mi deseo, pues, es cantar, á lo crítico, aunque indigno, la poesía lírica, sacando sus excelencias de ella misma, no de la comparación con otros géneros. Pero esto exige algun tiempo; no para hacerse ya erudito en unos meses, como ciertas personas que para cada librito de sabiduría alquilan, como pudieran alquilar un hotel por temporada, una ciencia de un año, y vienen á parecer Merlines por locución-conducción; exige algun tiempo para escribir materialmente, lo que se me ocurra y lo poco que yo sepa, y este poco tiempo es justamente el que me falta. En cuanto á la pereza ¡válgame Dios! Si yo fuera perezoso no comería.