Quien todo lo quiere - Lope de Vega - E-Book

Quien todo lo quiere E-Book

Лопе де Вега

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Beschreibung

Quien todo lo quiere es una comedia teatral del autor Lope de Vega. En la línea de las comedias palatinas del teatro del Siglo de Oro Español, narra la historia de un malentendido amoroso en la corte al que siguen numerosas situaciones de enredo en tono desenfadado y humorístico.

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Seitenzahl: 85

Veröffentlichungsjahr: 2021

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Lope de Vega

Quien todo lo quiere

Saga

Quien todo lo quiere

Copyright © 1635, 2020 Lope de Vega and SAGA Egmont

All rights reserved

ISBN: 9788726618747

1. e-book edition, 2020

Format: EPUB 3.0

All rights reserved. No part of this publication may be reproduced, stored in a retrievial system, or transmitted, in any form or by any means without the prior written permission of the publisher, nor, be otherwise circulated in any form of binding or cover other than in which it is published and without a similar condition being imposed on the subsequent purchaser.

SAGA Egmont www.saga-books.com – a part of Egmont, www.egmont.com

-fol. 1r-

Personas

Don Juan.

Don Fernando.

Don Pedro.

Fabio.

Fabricio.

Bernal, gracioso.

Doña ana.

Otavia.

Celia.1

Leonardo.

[G]Inés.

[Criado.]

Jornada I

Salen Don Fernando, y Don Juan, y Bernal, gracioso.

Don Fernando

Vos no queréis darme a mí

parte de vuestra tristeza,

y yo a vos con más fineza,

don Juan, os la doy ansí.

Traté casar a mi hermana

5

fuera de Madrid, con quien

estaba a los dos tan bien,

que, sin arrogancia vana,

no hay hombre más bien nacido

ni más rico en igualdad

10

de mi hacienda y calidad;

y al partir, que hoy ha partido,

le prendieron, porque ha dado

palabra a cierta mujer,

que aunque niega, puede ser,

15

que en su honor esté culpado.

Veis aquí pues la ocasión

de mi tristeza que os muestra,

cuando negáis de la vuestra

a mi amistad la razón.

20

la causa de mis enojos,

y que la tendré bastante

para que de aquí adelante,

aunque viese en vuestros ojos

escrito cualquier pesar,

25

no me atreveré a enfadaros.

Don Juan

Por querer desengañaros

-fol. 1v-

también os quise escuchar.

Bien sabéis la diferencia

que hay de la melancolía

30

a la tristeza; la mía

tiene esa misma licencia.

Que como es enfermedad

que nace de algún humor,

manda en mí con más rigor

35

que mi propia voluntad.

Veis aquí como no estoy

en lo que decís culpado;

del casamiento tratado

mil parabienes hoy doy.

40

Que no será la prisión

tan fuerte como pensáis,

si en los engaños miráis,

que tan ordinarios son.

Si fue alguna voluntad,

45

sin culpa es justo que sea.

Don Fernando

Lo que serviros desea

mi fe, mi amor y amistad,

habéis, don Juan, conocido.

Dios os guarde.

Don Juan

¿De esa suerte

50

os vais?

Don Fernando

Quien mi enojo advierte

y me desprecia ofendido,

¿qué es lo que quiere de mí?

Don Juan

Oídme.

Don Fernando

Dejadme.

(Vase.)

Don Juan

El cielo

me falte.

Bernal

Fuese, y recelo

55

que labró de jaspe en ti

el alma, con que gobiernas

esa dura condición,

y rebelde corazón

a tantas palabras tiernas.

60

Don Juan

¿Qué le tengo de decir

de mis tristezas, Bernal,

si no hay causa?

Bernal

¡Ay cosa igual!

Mas ¡qué quieres encubrir

lo que es más claro que el día!

65

Don Juan

A Fernando dije yo

la verdad.

Bernal

La verda[d, no.]

Don Juan

¿Luego no es melancolía?

Bernal

Tu misma difinición

te contradice, pues tienes

70

causa de que a estarlo vienes,

y entonces tristezas son.

Don Juan

Pintó un sabio a los crïados

con dos alas en los pies,

y sin lengua.

Bernal

Justo es

75

ser ligeros y callados.

Pero otro sabio pintó

los amos con cuatro manos,

y sin ojos.

Don Juan

Cuentos vanos.

Bernal

Antes muy bien lo pensó.

80

Muchas manos obligados

para dar han de tener,

ojos no, para no ver

las faltas de los crïados.

(Sale Doña Ana y Celia.)

Doña Ana

Señor don Juan.

Don Juan

¿Quién es?

Doña Ana

Yo,

85

que a todo lo que ha tratado

mi hermano con vos, he estado

atenta y triste, y me dio

mayor pena que llevó.

Don Juan

Señora, mi voluntad

90

no ha ofendido su amistad;

que aunque dicen que el discreto

se conoce en el secreto,

fuera en mi amor deslealtad.

Doña Ana

Esta vez habéis de ser

95

necio por mí, pues le han dado

este nombre al que ha fiado

su secreto de mujer.

Lo que no alcanzó a saber

aquí, Fernando, de vos

100

me habéis de decir.

Don Juan

Por Dios,

que es resolución notable.

Doña Ana

Hablad, ¿qué dudáis?

Don Juan

¿Que hable?

-fol. 2r-

Doña Ana

Sepamos lo que es los dos;

que puesto que soy mujer,

105

sabré serviros mejor

que mi hermano.

Don Juan

Ese es rigor.

Doña Ana

No hay rigor, esto ha de ser.

Bernal

Bien te puedes atrever,

que tanta resolución

110

no ha sido sin ocasión.

Don Juan

Pues, señora, estad atenta,

que quien lo que vos intenta,

debe de tener razón.

Tiene, Madrid, ya Corte de hermosuras,

115

como de Reyes, una dama hermosa,

por quien las voluntades más seguras

amor condena a cárcel rigurosa;

sale una luz de sus estrellas puras,

norte de un cielo, que de nieve y rosa

120

formó su Autor, que abrasa a quien la mira,

por quien de mil amores flechas tira.

Todas las gracias por estar en ella,

parece que le dan atropelladas,

cual vemos de una fuente clara y bella

125

surtir al aire por las encontradas;

mas cuanto de su luz, su ingenio, y della

del tuyo pueden ser consideradas;

destruye con terribles condiciones

fundada en arrogantes opiniones.

130

Hablarte en coches, galas, y crïadas

servirse a lo divino de rodillas,

sentarse en una calle de almohadas,

eterno verdugado, y lechuguillas,

las paredes en ámbar engastadas,

135

hüir el aire de sufrir pastillas

a los campos, por verse entre las flores,

que olores naturales son mejores.

Es contar a la mar menuda arena,

ni menos ver la gran bachillería

140

con que abona los versos, y condena

la música, destreza, y valentía:

con esto crece mi amorosa pena,

siendo imposible a la pobreza mía

acudir a sus cosas, que la adoro,

145

y la quisiera dar montañas de oro.

Anoche dio en loar cierto vestido

que vio a una dama, y yo con mil colores,

-fol. 2v-

no le ofrecí, porque en nobleza he sido

dichoso, no en dineros, ni en amores;

150

con estos pensamientos no he dormido

Juanelo de artificios de mayores

ruedas de mi confuso entendimiento,

tal es de mi tristeza el fundamento.

Doña Ana

Mucha honra me habéis hecho

155

en haberme confiado

la causa deste cuidado.

Don Juan

Si os abriera todo el pecho

no viérades más en él,

que por esta relación.

160

Doña Ana

Ya me corre obligación

no solo de ser fïel

en guardaros el secreto,

mas de ayudaros a todo.

Don Juan

Pues ¿vos a mí?, ¿de qué modo?

165

Doña Ana

Por cierto estraño sujeto

para un hombre como vos.

Don Juan

Amé, sin saber que amaba.

Doña Ana

La hermosura os disculpaba.

Don Juan

Esa es notable por Dios.

170

Doña Ana

No sé yo por qué rodeo

os pudiera preguntar,

si es materia de casar,

o algún amoroso empleo.

Don Juan

Ya me lo habéis preguntado,

175

y creed que en la verdad

de su limpia honestidad

aun la envidia no ha tocado.

Mas con gustos tan injustos

como hay en esta mujer,

180

casado podría tener

más pesadumbres que gustos.

Porque casada una destas,

que en dama bizarra toca,

mata a un marido por loca,

185

como otras por deshonestas.

Y aunque hay mil que a sus maridos

nunca intentan ofender,

es gran desdicha tener

la deshonra en los vestidos.

190

Doña Ana

Vos habláis como discreto,

comprad, don Juan, esa gala,

y perdonad, que no iguala

a la intención el efeto.

Bien valen estos diamantes

195

quinientos escudos.

Don Juan

Fuera

locura, que yo quisiera

tomar prendas semejantes

para lo que ya sabéis.

Doña Ana

¿No sois, don Juan, caballero?

200

Don Juan

Sí.

Doña Ana

Pues prestároslos quiero,

que vos me los volveréis.

Don Juan

Con condición, que en teniendo

el dinero os le traeré

con ganancia.

Doña Ana

Eso no sé,

205

que es oficio que no entiendo,

aunque en Madrid tan usado:

id con Dios, no me halle aquí

don Fernando.

Don Juan

Siempre fui

dichoso en ser desdichado.

210

Bernal

¿Qué es esto?

Don Juan

Pues ¿selo yo?

Bernal

¿No fuera mejor querer

esta divina mujer?

Don Juan

No Bernal.

Bernal

Pues ¿por qué no?

Don Juan

Porque la tiene casada

215

Fernando, y yo soy su amigo.

Bernal

Ya no hay amigos.

Don Juan

Yo sigo

la ley de amistad honrada,

aunque pierda mi remedio;

soy pobre, hacer no es razón

220

a su hermano esta traición.

Bernal

Si hay mujeres de por medio,

-fol. 3r-

puesto que a tus pensamientos

con verdad me persuades,

yo he visto pocas lealtades,

225

y muchos atrevimientos.

(Vanse.)

Celia

Triste estás.

Doña Ana

Estoy sin mí.

Celia

Dél no te puedes quejar.

Doña Ana

Y haré bien, por dar lugar

para quejarme de mí.

230

Celia

Si no sabe que le quieres,

no tiene culpa.

Doña Ana

Es verdad,

amor es enfermedad,

y locura en las mujeres.

Que mal hace la mujer,

235

que de sus ojos se fía,

de un día, tras otro día,

y de un ver, tras otro ver.

Celia

Pues ¿cómo no te ha querido

don Juan, estando obligado?

240

Doña Ana

Porque estaba enamorado,

y es hombre, y hombre entendido.

Y yo digo que en mujer

el trato enamora y mata,

que lo que mucho se trata,

245

mucho se viene a querer.

Celia

Casaraste, y tu marido

será el remedio mejor,

para quitarte el amor.

(Sale Don Fernando.)

Don Fernando

Vengo enojado y corrido.

250

Doña Ana

¿Es don Fernando?

Don Fernando

Yo soy.

Doña Ana

¿De qué tan triste?

Don Fernando

De ver,

que ya tenga otra mujer

el marido que te doy.

Doña Ana

¿Perdió el pleito?

Don Fernando

No, mas creo,

255

que si es noble la que pide,

para mucho tiempo impide

tu remedio, y mi deseo.

Doña Ana

¿No hay remedio para mí

fuera de ese caballero?

260

Don Fernando

Fue lo que traté primero,

y lo mejor para ti.

Doña Ana

Caballeros hay honrados,

Madrid está llena dellos.

Don Fernando

¿Tengo de andarme tras ellos

265

con tu dote y mis cuidados,

informándome de quién

no juega, ni tiene amor?

Doña Ana

¿Y casareme mejor

sin saber con quién también?

270

Que puede salir después

un majadero cansado;

¿piensas que tomar estado

comprar tus caballos es?

¿Que si uno no es a tu gusto,

275

engañas a otro con él?