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La Historia de Tobías es un drama teatral sacro del autor Lope de Vega. En la línea de los dramas cristianos del Siglo de Oro Español, concatena escenas relevantes en torno al Tobías de la Biblia, tanto el padre como el hijo, ambos famosos por su caridad cristiana y su bondad.-
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Lope de Vega
Tragicomedia
Saga
Historia de TobíasCopyright © 1963, 2020 Lope de Vega and SAGA Egmont All rights reserved ISBN: 9788726617474
1. e-book edition, 2020
Format: EPUB 3.0
All rights reserved. No part of this publication may be reproduced, stored in a retrievial system, or transmitted, in any form or by any means without the prior written permission of the publisher, nor, be otherwise circulated in any form of binding or cover other than in which it is published and without a similar condition being imposed on the subsequent purchaser.
SAGA Egmont www.saga-books.com – a part of Egmont, www.egmont.com
Dirigida a la Sra. Da. María Puente Hurtado de
Mendoza y Zúñiga
Cuando entendiere (dice el divino Jerónimo escribiendo a Cromacio y a Heliodoro) que he cumplido con mi obligación en hacer lo que mandastes (esto es, traducir el libro de Tobías de la lengua caldea a la latina) habré merecido la recompensa de vuestras oraciones. palabras que justamente vienen a mi propósito dedicando a V. m. la misma historia como traducción fiel de la lengua latina a la castellana, que si bien el servicio parece desigual a sus merecimientos, por serlo tanto mi rudo ingenio en la traslación a la sustancia y pureza de este sagrado ejemplo de caridad y limpieza matrimonial en los dos Tobías, y en su bellísima esposa, no le pudiera hallar más a propósito mi obligación en cuanto tengo escrito, y daré a luz si la vida ayudare a los deseos; concurriendo en V. m. tan celestiales partes de hermosura, entendimiento y virtudes, que como no todas las comparaciones deben ser en todo, porque ya serían identidades, y por la opinión de nuestro español Quintiliano muchas cosas son lo mismo, pero de otra manera, pude muy bien hacer elección de la versión de esta sagrada historia, para que V. m. la honre y califique y yo quede, por lo menos, seguro de que supe emplearla si no acerté a traducirla con la licencia y dilación que la poesía permite, introduciendo figuras dialogísticas de que también tenemos ejemplo en los Cantares. Los versos que he escrito en alabanza de tan ilustres partes están en la segunda de mis rimas que aún no han llegado a la estampa, pero ya se acercan. Allí verá V. m. qué pudo ofrecerle mi ruda musa y aquí solo este advertimiento, y que a sus virtudes y gracias se me ofrecían casi atropellados los pensamientos, y como dijoOvidio:
Venían a mis verbos
acomodados números
de propia voluntad, que no forzados,
hallándose la pluma
dicho cuando quería.
Cosa que no sucede al ingenio, ni por naturaleza ni por arte, si no le mueve la grandeza del sujeto a la obligación y amor del poeta a las excelencias que conoce o a las obras que recibe. Aquí se junta todo, y en V. m. un divino ejemplo, para quien con debida pluma supiera imaginarle. Dios guarde a V. m. como desea.
Capellán de V. m.
LOPE DE VEGA CARPIO.
Salen TOBÍAS EL VIEJO y ANA su mujer y TOBÍAS EL MOZO.
TOBÍAS VIEJO Pues que por nuestros pecados
quiso el gran Dios de Israel
que fuésemos castigados
con cautiverio cruel,
y a tierra extraña arrojados; 5
pues entre Medos y Asirios
pasamos tantos martirios,
cuantos van tristes deseos
a los campos Idumeos,
a los Samarios y Sirios: 10
aplaquemos al gran Dios,
Ana, mi amada mujer,
y vos, mi hijo; que en vos
como en espejo he de ver
si somos uno los dos. 15
Por eso os puse Tobías,
como mis padres a mí,
aunque en más felices días:
pues que yo mi nombre os di
tomad vos las obras mías. 20
Cuando el rey Salmanasar
reinaba, el que cautivó
nuestros Tribus, pude yo
gracia en sus ojos hallar:
muchas doy al que la dio. 25
Fui, siendo su esclavo herrado,
como sabéis, su privado,
y fui de todos consuelo;
presté mi hacienda a Gabelo,
mi deudo, aunque pobre, honrado. 30
Agora que su cruel hijo
reina, tan mal, quiere
todo el reino de Israel,
que por darle muerte muere,
y no hallamos gracia en él. 35
Es ido contra Ecechías,
santo Rey, con tal furor,
que dice que en breves días
el gran templo del Señor
ha de ser cenizas frías. 40
Con este aborrecimiento
tan mal trató sus cautivos,
que se mueren ciento a ciento,
y aun esos que quedan vivos
lo tienen por más tormento. 45
Hijos, y amada mujer,
Dios lo da; de Dios es todo;
hagamos bien; que ha de ser
el hacerles bien, el modo
por donde Dios le ha de hacer. 50
¿Qué tendremos hoy que dar?
ANA No tengáis deso cuidado,
señor; que no ha de faltar.
TOBÍAS MOZO Alguna gente ha llegado.
TOBÍAS VIEJO Hijo, dejaldos entrar. 55
TOBÍAS MOZO A todos la puerta doy.
TOBÍAS VIEJO Sois mi querido retrato.
Sale una mujer pobre.
MUJER Gracias al cielo que estoy
a tus pies; el tiempo ingrato 60
me trata así: noble soy:
manto me falta: querría
cubrir tanta desnudez.
TOBÍAS VIEJO ¡Ay corta haciendilla mía!
Pero cúbrate esta vez 65
el que a mi mujer cubría;
toma y ve en paz.
MUJER Dios te guarde.
(Vase.)
(Sale otro POBRE.)
POBRE No quisiera llegar tarde,
si has dado limosna a todos;
aunque en ti de muchos modos 70
amor de Prójimos arde.
ANA ¿Vos pedís con tal salud?
TOBÍAS VIEJO Ana, callad, que es mal hecho:
no hagáis vicio la virtud:
que inquirir del pobre el pecho 75
es vana solicitud.
Él pide por Dios, y es Dios;
¿pues cómo vos presumís
entender a Dios? Si vos
esto de Dios recibís, 80
daldo por Dios a los dos;
tomad, hijo, este vestido.
POBRE Dios os pague tanto bien.
(Vase.)
(Sale un VIEJO.)
VIEJO ¡A qué buen tiempo he venido!
TOBÍAS VIEJO ¿Quién es?
VIEJO En Jerusalén 85
ya fui de vos conocido;
de un tiempo somos cautivos,
del tribu de Neptalín.
Soy como vos: los esquivos
tiempos han dado este fin 90
a mis intentos altivos.
Un hijo tengo en prisión
por deudas.
TOBÍAS VIEJO Los deudos son
para las deudas muy buenos:
no sé si son más o menos, 95
mas sé que es más la intención.
En esa bolsa tendréis,
pariente, con que paguéis.
VIEJO Dios os prospere y aumente.
(Vase.)
TOBÍAS MOZO Afuera espera gran gente 100
para que a comer les deis;
mas no sé si habrá comida
para tantos.
TOBÍAS VIEJO ¿Vos dudáis,
hijo?
TOBÍAS MOZO ¡Es poca!
TOBÍAS VIEJO Repartida,
si a Dios primero miráis, 105
que es sustento, amparo y vida,
veréis que basta y que sobra.
TOBÍAS MOZO Si él echa su bendición,
bien sé el aumento que cobra.
(Sale un CRIADO.)
CRIADO Aquí ha llegado Filón. 110
TOBÍAS VIEJO ¿Qué pide?
CRIADO Una buena obra.
Del tribu de Benjamín
hay un difunto, y en fin,
aún no le cubre mortaja.
TOBÍAS VIEJO Sólo en eso se aventaja 115
el rico al pobre: en el fin:
tendrála el rico delgada,
y ése la tendrá grosera;
voyle a enterrar, Ana amada:
dando de comer, me espera, 120
a esa pobre gente honrada.
Tú, hijo, ayuda.
TOBÍAS MOZO Estad cierto
del contento que recibo.
TOBÍAS VIEJO Mucho obliga a Dios, te advierto,
el dar de comer al vivo, 125
y el ir a enterrar el muerto.
(Vanse y sale una caja, soldados y banderas, y elrey SENACHERIB y RAPSACES, capitán.)
RAPSACES Hablé con Eliachín, hijo de Elchías,
amenazando el pueblo de tu parte.
SENACHERIB ¿En qué confía el mísero Ezechías?
RAPSACES Faltóle el oro ya con que rogarte. 130
SENACHERIB Si en el rey Faraón de Egipto fías,
¿cómo puede valerte ni ayudarte
un báculo de caña quebradizo
que engaña a quien su fuerza satisfizo?
¡Triste Jerusalén! si el padre mío 135
llevó desde una a otra provincia varia
al Habor y al Gozán, de Media río,
cautivos a los tribus de Samaria,
¿dónde está de tu Dios el poderío?
¿A dónde está la fuerza necesaria 140
para hacer a mis armas resistencia?
Ampáraste de escudos de paciencia.
Tu alcázar de Sión fundada en alto,
de tu David humilde a mi trofeo,
rendida miro en el primero asalto 145
por más que la defienda el Dios hebreo;
no está mi Dios Nefrach de fuerzas falto
como estuvo el del otro Filisteo:
cuando con sus hazañas me respondas,
no temo yo las pastoriles hondas. 150
Soy yo Senacherib, el Rey de Asiria;
tengo más fuerte la cerviz y frente,
que desde Gaza hasta la playa Tiria
los campos cubriré de armada gente;
hoy baño en sangre a Palestina y Siria, 155
al hermoso Carmelo, al eminente
Líbano, cuyos cedros a mis rojas
plantas de sangre, estrado harán sus hojas.
Tú verás al Cedrón pasar al Medo
sobre puentes de cuerpos infelices, 160
y el templo cuya altura puso miedo
a las estrellas, y que santo dices
de mí, que su más alta torre excedo,
y a la más fértil palma las raíces,
bañado en fuego y humo y derribada 165
por el suelo su cúpula dorada.
Gigante soy en quien Asiria estriba
el peso de su imperio soberano:
vuestra arca santa llevaré cautiva:
sus serafines temblarán mi mano; 170
no me corono yo de verde oliva
ni he de temer que aparte el vidrio cano
del mar bermejo en frágiles canceles,
ese Dios de Abrahanes e Israeles.
Parte, Rapsaces: llevarás firmada 175
de mi espantosa firma al Rey cercado,
carta en que diga que su infame espada
rinda a mis pies.
RAPSACES Yo voy.
SENACHERIB Fuera excusado,
pero quiero mostrar cuánto me agrada
tener piedad de un hombre desdichado, 180
porque si saco la que tiembla el suelo,
aun es corta defensa todo el cielo.
(Vase y salen el rey EZEQUÍAS, de Jerusalén, y ELIACHÍN.)
EZEQUÍAS Rasgaré por el dolor
mis vestidos, Eliachín.
ELIACHÍN Ten esperanza; que al fin 185
has de salir vencedor.
EZEQUÍAS Si está nuestro Dios airado,
¿dónde hallaremos defensa?
ELIACHÍN Contra el Rey de Asiria piensa
que está airado y enojado, 190
no contra Jerusalén;
mira que el hijo de Amós
dice, de parte de Dios,
que este crédito le den.
EZEQUÍAS Creo, Eliachín, a Isaías, 195
mas pésame que blasfeme
quien a nuestro Dios no teme.
ELIACHÍN ¡ Si piensa que son los días
de Hieroboán y Achaz
tan lamentados en Siria! 200