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Puede solicitar gratuitamente las soluciones a todas las actividades en el email [email protected] Capacidades que se adquieren con este Manual: - Analizar información del mercado turístico que permita estimar la situación, evolución y tendencias del sector de alojamientos. - Analizar los componentes de un plan de marketing, adecuándolos a una empresa de servicios turísticos. - Reconocer distintas estrategias de comunicación comercial adecuadas a empresas de servicios turísticos para su aplicación en el plan de marketing. - Reconocer las técnicas de venta, aplicando las adecuadas a diferentes tipos de usuarios de servicios de alojamiento y soportes de comunicación.
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Seitenzahl: 295
Veröffentlichungsjahr: 2025
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Diseño y ejecución de acciones comerciales en alojamientos. UF0051.
Autora: Eguzkiñe Urreta Okeranza.
© EDITORIAL TUTOR FORMACIÓN
C/ San Millán, 7, bajo 10
26004 Logroño (La Rioja)
Tlf. 610687276
Email: [email protected]
Web: https://tutorformacion.es o https://editorial.tutorformacion.es o https://tutorformacion.publica.la
Edición: septiembre 2023
ISBN: 978-84-19189-55-4
Depósito legal: LR1077 - 2023
Esta portada ha sido diseñada usando imágenes de Freepik
Reservados todos los derechos de publicación en cualquier idioma.
Según el código penal vigente ninguna parte de este o cualquier otro libro puede ser reproducida, grabada en alguno de los sistemas de almacenamiento existentes o transmitida por cualquier procedimiento, ya sea electrónico, mecánico, reprográfico, magnético o cualquier otro, sin autorización previa y por escrito de D. Miguel Ángel Ladrón Jiménez; su contenido está protegido por la ley vigente que establece penas de prisión y/o multas a quienes intencionadamente reprodujeren o plagiaren, en todo o en parte, una obra literaria, artística o científica.
Contenido
El mercado turístico nacional e internacional
Diferenciación de los elementos componentes de la oferta y la demanda turísticas nacionales e internacionales
Análisis cuantitativo y cualitativo del sector de la hostelería y el turismo
Análisis de la estructura de los mercados del turismo y la hostelería. Principales mercados emisores y receptores.
Especialidades del mercado turísticos relativo al subsector de alojamiento
Identificación de las principales fuentes de información turística
Segmentación y tipología de la demanda turística
Identificación y clasificación de las necesidades humanas. Motivaciones primarias secundarias.
Análisis del comportamiento de consumidores o usuarios en servicios de naturaleza turística
Segmentos y nichos en la demanda turística
Los destinos turísticos frente a la demanda. Destinos asentados. destinos emergentes. Los hechos diferenciales.
Los condicionantes económicos, políticos y sociales
Aplicación del marketing en hostelería y turismo
Manejo de los conceptos básicos de la economía de mercado
Verificación de la evolución de hábitos y procedimientos de transacción comercial
Análisis y argumentación de la evolución del concepto de marketing desde sus inicios. Marketing de servicios.
Diferenciación de las variables o factores básicos propios del mercado y del marketing turístico
Plan de marketing: elementos que lo constituyen. Fases de elaboración. Elaboración de un plan de comunicación / promoción.
Aplicación del plan de acción comercial
CRM: Customer relationship management.
Marketing tradicional versus marketing relacional
Vínculo entre el plan de marketing y el plan de acción comercial
Traslado de objetivos de marketing a objetivos comerciales
Método en cascada
Acciones comerciales vinculadas con los objetivos de marketing
La planificación de acciones comerciales. El plan de ventas: elaboración y control.
Aplicación de las técnicas de venta a las acciones comerciales y reservas en alojamientos
Contacto inicial
Objetivos del contacto inicial
La importancia de las primeras impresiones
Cómo transmitir una imagen profesional
El sondeo: cómo detectar las necesidades del cliente.
Los diferentes tipos de clientes. Las motivaciones de compra. Enfoques de la venta según las motivaciones.
La argumentación: cómo exponer los productos de forma efectiva.
Características, beneficios y argumentos de los productos / servicios. Argumentos en función de las motivaciones del cliente.
Las objeciones: cómo superar las resistencias del cliente.
Actitudes ante las objeciones
El tratamiento de las objeciones
Técnicas de superación de objeciones
El cierre de la operación: cómo conseguir el compromiso del cliente
Actitudes necesarias hacia el cierre. Detección de oportunidades de cierre.
Tipos de cierres. Técnicas de cierre en función de la situación y la tipología del cliente.
La venta personalizada
Tipología de los clientes: atención personalizada.
Cómo adaptarse y complementar los comportamientos de los clientes
El perfil de las personas de contacto
El tratamiento de clientes difíciles
Aplicación a casos prácticos
Aplicación de la negociación a las acciones comerciales y reservas en alojamientos
Concepto de negociación. negociación por principios y negociación por concesiones. Conflictos negociables y conflictos no negociables.
Análisis y preparación de la negociación. factores determinantes: información, tiempo y poder. análisis de las influencias en la toma de decisiones.
La rentabilidad de la negociación: el dilema precio volumen; consecuencias de la concesión de descuentos. El intercambio de información: la comunicación como herramienta negociadora; reforzar el poder de convicción: estructuración con argumentos. El intercambio de concesiones y contrapartidas: las reglas de oro para negociar; cuadro de alternativas de opciones.
El cierre de la negociación. Cómo y cuándo provocar el cierre. Técnicas de cierre.
Evaluación final
Preguntas de respuesta breve o definiciones
Preguntas de reflexión o debate en clase, de respuesta abierta.
Preguntas tipo test
La Organización Mundial del Turismo (OMT) define el turismo como las “actividades que las personas realizan en lugares distintos al de su entorno habitual, por un periodo de tiempo consecutivo inferior a un año, con fines de ocio, negocios u otros motivos.”
TIPOS DE VISITANTES
Además, la OMT clasifica los visitantes en dos tipologías: turista y excursionista.
Visitante: es la persona que visita un país diferente de aquel en el cual tiene su residencia habitual, por un periodo inferior a un año. Su motivación principal tendrá que ser diferente a la de ejercer una actividad remunerada en el país de destino.
Turista: son los visitantes que permanecen al menos 24 horas en su destino, pero menos de un año. Esto es, como mínimo tiene que existir una pernoctación para que pueda ser considerado turista.
Excursionista: es el visitante que visita un destino, pero sin pernoctar en él, esto es, permanece menos de 24 horas fuera de su domicilio habitual. En esta categoría están incluidos los pasajeros de un crucero.
CATEGORÍAS DE TURISMO
La clasificación de las categorías de turismo que ha establecido la OMT son las siguientes:
Turismo interno o doméstico: son los viajes que realizan los residentes de un país dentro del mismo país. Esto es, son los movimientos y flujos turísticos que se generan entre distintas comunidades o regiones de un mismo estado.
Por ejemplo, una familia de Madrid que se va de vacaciones a Benidorm.
Turismo receptor: son los visitantes internacionales que visitan un determinado destino. Esto es, son los turistas provenientes de otro país que visitan un Estado distinto al suyo.
Por ejemplo, una familia de alemanes que viajan a Salou.
Turismo emisor: son los residentes de un país que viajan fuera de sus fronteras.
Por ejemplo, los españoles que viajan a Marruecos.
Combinando estos tres tipos de turismo, se generan las siguientes categorías:
Turismo interior: incluye el turismo interno y el turismo receptor.
Son las corrientes turísticas que se dan en un mismo país.
En España, serían los viajes de los españoles que viajan por España y los viajes de los extranjeros que llegan a España.
Turismo nacional: incluye el turismo interno y el turismo emisor.
Son los viajes realizados por los nacionales, esto es, por los habitantes de un país, tanto dentro como fuera de las fronteras.
Por ejemplo, los viajes que realizan los españoles, tanto cuando viajan por España como cuando viajan al extranjero.
Turismo internacional: incluye el turismo receptor y el turismo emisor.
Son los viajes internacionales que traspasan fronteras.
Se incluyen los extranjeros que llegan a España y los españoles que salen de España para viajar al extranjero.
Para que el turismo pueda existir como actividad, es necesario que haya un desplazamiento de personas desde su lugar de residencia habitual hasta el destino de sus vacaciones. A estos movimientos de personas les denominamos “flujos turísticos”.
LA DEMANDA TURÍSTICA
La OMT define la “demanda turística” como “(…) el conjunto de turistas que, de forma individual o colectiva, están motivados por una serie de productos o servicios turísticos con el objetivo de cubrir sus necesidades”.
Así pues, la demanda turística está formada por el conjunto de personas que quieren satisfacer sus necesidades de ocio a través de la utilización de los recursos y servicios turísticos que los distintos destinos ponen a su disposición.
Algunas de las motivaciones a la hora de realizar estos desplazamientos, según la OMT, son las siguientes:
Ocio, recreo y vacaciones
Visitas a familiares y amigos
Negocios y motivos profesionales
Tratamientos de salud
Religión / Peregrinaciones
No se consideran flujos turísticos los viajes que realizan las personas por los siguientes motivos:
Para ocupar un empleo: por ejemplo una graduado en turismo de Madrid cuando viaja a Ibiza en mayo para trabajar en un hotel de la isla durante la temporada de verano.
Establecer una residencia habitual.
Viajeros en tránsito.
Para analizar la demanda turística y sus hábitos, es necesario identificar sus características:
El origen de los viajeros
El territorio al que se desplazan
La duración del viaje, así como el nivel del gasto
El medio de transporte utilizado
EL COMPORTAMIENTO DE LA DEMANDA EN ESPAÑA
La demanda turística tiene unos comportamientos similares y homogéneos en muchos casos, que hacen que se dé la estacionalidad. Así pues, hay algunas áreas receptoras que concentran una gran parte de los turistas:
TIPOS DE FLUJOS TURÍSTICOS
COMPONENTES DE LA DEMANDA TURÍSTICA
Demanda real o efectiva: son las personas que viajan.
Demanda no efectiva o suprimida: son las personas que no viajan por diferentes motivos como la falta de tiempo, la escasez de ingresos,
etc.
También aquí se incluyen las personas que no tienen interés por viajar y las que no pueden viajar por enfermedades o por estar inmersos en contextos familiares complicados. Dentro de este grupo pueden diferenciarse otros tres subgrupos:
Demanda potencial: son las personas que en la actualidad no viajan pero que en un futuro podrían viajar.
Demanda diferida: son las personas que no viajan y que no viajarán a un determinado destino, ya sea porque no les gusta la zona, porque el clima no es favorable para ellas, por miedo a una catástrofe natural, por problemas políticos o legales,
etc.
La no demanda: en este subgrupo están las personas que no viajan y que no quieren viajar.
A lo largo de la historia, las personas han realizado numerosísimos viajes con motivos comerciales, económicos, religiosos, bélicos, de descubrimiento e incluso con objetivos de ocio y de relax. Si bien es cierto que todavía la palabra turismo no existía, estos desplazamientos han ido evolucionando a lo largo del tiempo hasta crear la industria turística que conocemos en la actualidad.
Es necesario dividir la historia del turismo en tres fases principales: la fase inicial, la fase de desarrollo y la fase de consolidación.
FASE INICIAL
Esta fase la dividiremos al mismo tiempo en varias etapas distintas: Prehistoria, Antiguo Egipto, Antigua Grecia, Antigua Roma, Edad Media y Edad Moderna.
PREHISTORIA
Nuestros antepasados, los que vivían en cavernas, realizaban numerosos viajes, tanto de corto como de largo alcance, pero estos siempre tenían como objetivo el de satisfacer una necesidad: la necesidad vital de sobrevivir. Estos viajes los hacían para buscar cobijo en otras cuevas y crear en ellas su hogar, y también obtener sustento. Cuando arrasaban con todos los frutos y animales de un área, buscaban otra que todavía no hubiera sido explotada para asentarse allí durante un tiempo. Eran nómadas, ya que “viajaban” constantemente, pero siempre desde un punto de vista de supervivencia. Eran cazadores y recolectores, ya que comían frutos, pescaban y cazaban animales. Así pues, aprovechaban todos los recursos que la naturaleza les ofrecía hasta que estos ya se agotaban, y entonces comenzaban un nuevo viaje con el objetivo de asentarse en otra zona que todavía tuviera recursos garantizados para otra buena temporada.
Aunque estos viajes no tenían como finalidad el descanso, el ocio o el placer, puede considerarse que fueron los primeros viajes que los seres humanos han realizado a lo largo de la historia.
En el año 3000 a.C. aproximadamente, en las antiguas ciudades de los Sumerios en Mesopotamia ya se realizaron los primeros viajar de placer. También crearon lo que hoy conocemos como “moneda”, fomentando al mismo tiempo el comercio y el deseo de viajar.
En el año 1700 a.C. Hammurabi, el rey de Babilonia, realizó varios viajes a las ciudades de su imperio. Tenía por costumbre realizar numerosos viajes con el fin de participar en fiestas, rituales y eventos, por lo él fue quien creó las primeras peregrinaciones.
ANTIGUO EGIPTO
Unos siglos después, se llevó a cabo el primer crucero de la historia, el año 1490 a.C. La reina – faraón de Egipto viajó en un crucero por las aguas del Nilo con el fin de descansar y apreciar las vistas que el Nilo ofrecía. Ya en el antiguo Egipto, los faraones tenían por costumbre navegar por el Nilo a bordo de embarcaciones con todo lujo de detalles.
Durante los 3.000 años en los que la civilización egipcia se desarrolló en el valle del río Nilo, se realizaron los primeros viajes de placer de la historia. Era habitual que los faraones acudieran al Nilo en época estival, ya que este río estaba considerado como un lugar de ocio y descanso.
Así pues, se ve cómo las actividades que realizaban no eran muy diferentes a las que realizan los turistas en la actualidad cuando van a este mismo lugar.
ANTIGUA GRECIA
Para la cultura griega el tiempo de ocio era muy importante. Además, los griegos eran grandes aficionados a la cultura, a la celebración de eventos, espectáculos deportivos y religiosos, y aprovechaban su tiempo libre para practicar estas actividades de ocio.
Los eventos se celebraban de manera constante: las Panateneas y las Dionisiacas en Atenas, las ístmicas en Corinto, las Olímpicas en Olimpia, etc. Estas celebraciones atraían a muchísimos viajeros que realizaban grandes desplazamientos para poder vivir en primera persona estos acontecimientos tan singulares, algo similar a lo que ocurre en la actualidad con las Olimpiadas o los grandes eventos deportivos.
Por lo tanto, se puede decir que en esta época de la historia nació el turismo deportivo, concretamente en el año 776 a.C., cuando se celebran los primeros Juegos Olímpicos en honor a los dioses del Olimpo. Estas celebraciones hacían que muchísimas personas tuvieran que desplazarse al lugar en el que se iba a llevar a cabo el evento, al mismo tiempo que necesitaban consumir servicios de transporte, restauración, alojamiento, etc.
Las peregrinaciones también eran habituales en la antigua Grecia, sobre todo a santuarios y otros lugares de culto. El santuario de Delfos fue uno de los más conocidos santuarios oraculares como lugar de reunión y peregrinación. Entre los santuarios terapéuticos el de Asclepio fue el de mayor importancia. Así, se puede decir que estos acontecimientos fueron los antecesores del turismo religioso similar a cómo lo conocemos hoy en día.
Los griegos también realizaban “turismo de sol y playa” de manera muy parecida a la de la actualidad. Las clases más pudientes viajaban a los resorts de la orilla del mar para darse baños medicinales. Estos viajeros buscaban la tranquilidad y el descanso, a través de actividades y eventos tan variados como los festivales de teatro, visitas a monumentos, etc.
ANTIGUA ROMA
Segundas residencias junto al mar:
Las clases más acomodadas del Imperio romano iban de Roma a las orillas del mar, concretamente a las playas de la Toscana, lugar en el que se daban baños que aseguraban tener propiedades curativas: estos viajes tenían como motivaciones principales la búsqueda del descanso, la salud y el placer.
Era muy habitual que las clases más pudientes de la época romana tuvieran segundas residencias en zonas costeras, y también en el campo o en zonas naturales del interior, algo muy similar a lo que ocurre en la actualidad.
Las primeras termas:
Los romanos también construyeron las primeras termas, y fueron los precursores del termalismo (también denominado turismo termal) que tan de moda está en la actualidad. Las termas son instalaciones que caracterizan la vida de los romanos porque eran el epicentro de la vida social. Iban a compartir experiencias y conversaciones con sus vecinos, y servían para desconectar de la vida doméstica y laboral.
En la actualidad, gracias a las excavaciones arqueológicas realizadas en diferentes yacimientos donde se han conservado los cimientos de estas termas, se sabe que tenían zona de vestuario, sauna, zona de baño caliente (caldarium), zona de baño templado y zona de baño frío (frigidarium).
Algunas de las termas más conocidas cuyos restos han llegado a la actualidad son las Termas romanas de Augusta Emérita (en la actual Mérida, provincia de Badajoz), las Termas romanas de Baelo Claudia (en Tarifa, Cádiz), las Termas romanas de Caesaraugusta (en el centro de la actual ciudad de Zaragoza), las Termas romanas de Clunia Sulpicia (entre las poblaciones de Coruña del Conde y Peñalba de Castro, al sur de la provincia de Burgos), entre muchas otras.
Peregrinaciones a Grecia:
En el Imperio romano, eran muy habituales las peregrinaciones a Grecia, con el objetivo de celebrar fiestas o de visitar santuarios. Atenas recibía muchos viajeros romanos, que ayudaban a mejorar la economía local, que además había quedado mermada durante la época romana.
Creación de rutas y calzadas:
En el Imperio romano también se crean las primeras rutas, que fueron las antecesoras de las actuales carreteras y autovías. En época romana se creó una red eficaz de rutas y calzadas, que tenía como objetivo principal facilitar el desplazamiento entre las ciudades del imperio.
Se crean caminos, rutas y también las primeras distancias, ya que por primera vez en la historia estas rutas tuvieron una denominación y se midieron las distancias, con el fin de hacer más sencillos y efectivos los desplazamientos entre las distintas ciudades del imperio, que se encontraban distribuidas por todos los puntos de la península.
La Vía Augusta fue la calzada romana más larga de Hispania, con una longitud de 1.500 km. También fue la más transitada de la época. Empezaba en Cádiz y terminaba en la actual localidad de La Junquera (provincia de Girona). Allí se unía con la Vía Domitia, que bordeaba la actual costa francesa hasta llegar a Roma.
La Vía de la Plata fue otra importante calzada romana de la época de la que también conservamos restos a la actualidad. Atravesaba Hispania de norte a sur por el oeste peninsular: desde Augusta Emerita (actual Mérida, Badajoz) hasta Asturica Augusta (actual Astorga, provincia de León). Dos milenios después, esta ruta sirvió como inspiración para la creación de la Autovía Ruta de la Plata, que une Gijón con Sevilla. También se creó la Asociación de Pueblos de la Vía de la Plata, que defiende su ruta originaria entre Mérida y Astorga y rechazan la extensión artificial de la vía hasta Gijón por el norte y hasta Sevilla por el sur. Muchos peregrinos y senderistas realizan el recorrido llamado “Vía de la Plata” a pie, de manera similar a la que otros realizan el Camino de Santiago, existiendo una red de infraestructuras, albergues, etc. para proporcionar los servicios necesarios a los caminantes.
Los primeros albergues:
La creación de estas rutas creó una necesidad: la de construir distintos servicios e infraestructuras que necesitaban los viajeros. La administración romana instaló diversos “mutationes” y “mansiones” por las vías de Hispania.
Las “mutatio” eran estaciones de descanso que había cada 10-15 km para descansar y cambiar la montura de los animales. También había una “mansio” cada tres “mutatio”, esto es, cada 30-50 km aproximadamente. Estas estaban pintadas de rojo para poderlas identificar y estaban mejor equipadas que las “mutatio”. Estas “mansio” permitían pasar allí la noche: proporcionaban servicio de cena, establos para los caballos, herrero, etc. Fueron los primeros albergues que se conocen en la historia de la humanidad, cuyo concepto era similar a los moteles que se crearon siglos después, ya que tenían como objetivo parar y descansar en mitad de un largo viaje.
También han tenido otras denominaciones como “tabernae”, y algunas fuentes lo han traducido al castellano como “ventas de carretera”. Esto nos hace entender que los hoteles y alojamientos actuales no son un concepto reciente, ya que los primeros albergues fueron creados, posiblemente, por los romanos.
Los primeros guías:
Los romanos también crearon unos servicios de guías turísticos llamados “courties”, cuya función principal era la de ayudar y asistir a los viajeros y mercaderes en su estancia en Roma. Debido a que en esta ciudad había muchísimos visitantes que acudían a mercadear, a realizar negocios, a vender –o comprar-productos, etc. se vio necesaria la existencia de una figura profesional que ayudara a estos viajeros en las gestiones derivadas de su estancia en la ciudad.
EDAD MEDIA
Movimientos de soldados y mercaderes:
Esta época se caracteriza por las cruzadas, que eran los movimientos de soldados y los viajes de los mercaderes. Las cruzadas fueron una serie de campañas militares que impulsó el Papa por gran parte de la Europa latina cristiana, con el fin de restablecer el control sobre Tierra Santa: las víctimas principales fueron musulmanes, paganos, judíos, etc. Estas cruzadas tuvieron lugar entre los años 1095 y 1291.
Los movimientos realizados por mercaderes con objetivos comerciales también eran cada vez más habituales, pero ni en el caso de las cruzadas, ni el de los soldados, ni en el de los mercaderes se puede hablar de turismo ni se hacían con motivos de ocio, relax o descanso. No obstante, a partir del siglo XVI los mercaderes y comerciantes que viajaban a Egipto para hacer negocios, aprovechaban sus viajes de trabajo para admirar los monumentos del país, principalmente la majestuosidad de sus pirámides, por lo que aquí si entra el factor “cultura”, “ocio” en juego.
Peregrinaciones y la primera guía turística:
Las peregrinaciones comienzan a coger un fervor mayor que en épocas anteriores, principalmente hacia Santiago de Compostela, Roma y Tierra Santa.
Aymeric Picaud fue un peregrino francés que escribió en el año 1140 la primera guía turística del Camino de Santiago: denominada “Codex Calixtinus”. Aunque su autoría ha quedado en entredicho estos últimos años y no se sabe a ciencia cierta si él fue el verdadero autor, hasta ahora se había pensado que si. Esta guía proporcionaba información útil y práctica para los peregrinos hacia su objetivo final: Santiago de Compostela. La guía incluía información sobre aposentos y albergues, iglesias y lugares de oración, lugares culturales y monumentales para visitar, etc.
Con el auge del Camino de Santiago comienzan a erigirse monasterios y hospederías, la mayoría de los cuales ha llegado hasta nuestros días. Así, los municipios por los que pasa el Camino de Santiago son los que conservan la mayor parte de los edificios románicos como ermitas, conventos y monasterios, antiguas hospederías y hospitales, puentes, etc.
Primer gremio de posaderos:
En el siglo XIII, pero sobre todo en el siglo XV, Venecia y Florencia se convierten en importantes destinos turísticos. Así, en el año 1282 se crea en Florencia el primer gremio de posaderos, con el fin de aunar esfuerzos y trabajar conjuntamente para transformar el concepto de hospedaje que se tenía hasta la fecha, que consistía casi en una acción de caridad.
El objetivo era convertir el sector en una actividad comercial y económica reglada y profesional. Este gremio de posaderos fue el antecesor de las actuales asociaciones de hostelería que hay en la mayoría de las ciudades y provincias españolas.
Universidades:
En esta época también comienzan a crearse las primeras universidades, tanto en España como en Europa.
La primera universidad europea fue fundada en Bolonia en el año 1088, que ofrecía principalmente estudios de Derecho. Oxford fue la segunda 12 años después. En España, las primeras fueron Palencia en el año 1208 y Salamanca en 1218.
Entre 1200 y 1400 fueron fundadas en Europa 52 universidades, y la consecuencia fue una profunda transformación cultural. La cultura se difundió rápidamente y una parte –todavía pequeña-de la población tuvo por primera vez acceso a estudios universitarios. Así pues, a mayor nivel de formación y nivel cultural de la población, mayor interés por viajar y descubrir otras culturas.
Este movimiento cultural y la creación de estas primeras universidades hizo que se incrementaran los viajes y movimientos de estudiantes y profesores, que tenían que trasladarse para recibir (en el caso de los alumnos) o impartir (en el caso de los profesores) educación universitaria.
EDAD MODERNA
La motivación principal de los viajeros en esta época, como consecuencia de esa transformación cultural, era el conocimiento de la cultura y el arte. El hecho más característico de la época fue el nacimiento y auge del GRAND TOUR.
“Grand Tour”:
Este término aparece escrito por primera vez en el año 1670. Este viaje está considerado como el antecesor del turismo moderno y tuvo su auge entre el siglo XVII y primeras décadas del siglo XIX.
Era un itinerario cultural que realizaban los hijos de los nobles y aristócratas como parte de su educación, y se hacía para poner fin a su etapa de formación en la época de adolescentes. Era un viaje que duraba algunos meses o incluso años y se visitaban varios países europeos que elegía el alumno o sus tutores. Estaba considerado como un elemento clave en la educación de las clases altas, que lo veían como una oportunidad para mejorar la formación de los jóvenes y abrirles paso a la vida adulta. Sus principales objetivos eran aprender idiomas y conocer el arte clásico y del Renacimiento.
Este viaje era realizado sobre todo por los jóvenes británicos, y era una transición entre la época juvenil y la edad adulta. En la segunda mitad del siglo XVIII ya era casi una obligación o costumbre que los jóvenes de las clases altas realizaran este tour formativo.
Algunos de los destinos más habituales para realizar el viaje eran Francia e Italia, principalmente, así como Países Bajos, Bélgica, Alemania, Suiza, etc.
Generalmente, el joven viajaba con una persona mayor de edad, que podría ser el maestro que les había instruido, un clérigo o un familiar soltero. También era habitual que a mitad del viaje esta persona dejara solo al joven para que tuviera libertad y autonomía, para que así le sirviera para obtener una madurez plena que les permitiera prepararse para la vida profesional que les esperaba después de su viaje.
FASE DE DESARROLLO
Esta fase también suele ser denominada “Etapa del transporte” porque se mejoraron la mayor parte de las infraestructuras y medios de transporte, y es aquí cuando se asientan las bases de la industria turística.
Con la creación de la máquina de vapor, mejoran el transporte por ferrocarril y el transporte marítimo. La consecuencia es que los viajes en tren y en barco empiezan a ser más rápidos que hasta la fecha, suponiendo un gran avance para el sector turístico.
Transporte por diligencias:
Entre 1814 y 1860 se utilizaban las diligencias, las caballerías, y las galeras para realizar los trayectos de viajeros por carretera. En esta fecha las innovaciones en materia de transporte de viajeros son importantes.
En el 1815 se crea la primera red de diligencias en Barcelona y en 1819 se pone en servicio una red similar en Madrid, para unir el centro de las ciudades con la periferia y con las localidades cercanas a la ciudad. La primera línea regular del estado fue la que conectaba Barcelona con Reus, y realizaba el itinerario de 110 kilómetros en 10 horas y media.
En los años posteriores nacieron otras líneas para unir diversas ciudades de la península, creándose así rutas entre Madrid y Valencia, Madrid y Burgos, etc.
No obstante, las diligencias tuvieron una vida corta, ya que llegaron tarde y fueron relegadas por el ferrocarril. Lo que en su día supuso un adelanto y una innovación para la época, fue cayendo en desuso. Al inicio convivieron con el tren durante unos años, ya que estos carruajes garantizaban el desplazamiento hacia los destinos a los que todavía no llegaba la vía férrea. Pero el ritmo con el que se explotó el nuevo medio de transporte y la mala calidad de la red de carreteras hizo que se frenara el uso de estas diligencias, quedando poco a poco en el olvido.
Posadas y mesones:
Las “posadas” eran los lugares donde paraban las diligencias para que los viajeros descansaran y comieran. Cuando un establecimiento ofrecía al mismo tiempo servicio de pernoctación se llamaba “paradores”. Estos eran similares a las posadas, pero ofrecían además un servicio similar al de un hotel actual. Aunque la denominación sea similar, es importante no confundirlos con los “Paradores de Turismo” actuales.
Existía el denominado “Manual de Diligencias” que se redactó en el año 1842 por las compañías de diligencias. Este manual servía para exigir a las posadas y paradores que tuvieran una calidad aceptable en el servicio al cliente, y garantizar así unas condiciones óptimas en la pernocta de los clientes. Por ello, las camas de estos alojamientos eran buenas y contaban con sábanas limpias.
Las denominadas “fondas” eran similares a los “paradores”, pero estaban ubicadas en grandes ciudades y en los principales puertos o terminales de transporte.
El ferrocarril:
En el año 1830 se creó la primera línea de pasajeros por ferrocarril del mundo entre Liverpool y Manchester.
En el año 1837 se abrió la primera línea férrea española en Cuba, entre La Habana y Bejual, con el fin de transportar las mercancías de la región agrícola de Güines hasta el puerto de La Habana. También fue la primera línea de ferrocarril de Iberoamérica y la séptima del mundo.
11 años después, en el 1848, fue inaugurada la primera línea férrea en la península entre Barcelona y Mataró.
Thomas Cook y el primer bono de hotel:
Thomas Cook creó el primer paquete turístico en el año 1841. Un paquete turístico es el viaje combinado que incluye como mínimo dos de los siguientes servicios: transporte, alojamiento y actividades complementarias (que pueden ser visitas guiadas, actividades, comidas, excursiones…).
Thomas Cook organizó este primer paquete turístico que posteriormente ha sido denominado como “el primer viaje organizado de la historia”. En este viaje trasladó a un grupo de personas desde Harborough a Leicester, en Inglaterra. Para ello, Thomas Cook fletó un tren para llevar a estas personas, negociando con la compañía ferroviaria para quedarse con un porcentaje por la venta de cada billete, naciendo también en este momento el concepto de la comisión de las agencias de viajes como la conocemos en la actualidad.
Aunque esta primera experiencia no tuvo el éxito económico esperado, Thomas Cook vio una buena oportunidad de negocio y siguió adelante con su iniciativa. En 1845 creó la agencia de viajes “Thomas Cook & Soon”, siendo la primera de la historia. Vio una oportunidad de negocio que nadie había sabido aprovechar hasta el momento: la de diseñar y comercializar estos viajes organizados. Su negocio siguió en auge, organizado también excursiones de un día para niños los domingos.
En 1845 llevó a 165.000 personas a la Exposición Universal de Londres. Realizó convenios con varias empresas ferroviarias de Europa para organizar paquetes turísticos para diversos grupos de pasajeros, comenzando así a realizar viajes al extranjero. El primer destino internacional fue Paris, con motivo de la Exposición Universal del año 1855, y prosiguió con la organización de viajes para la clase media, que tenían como destino Italia, Suiza, Estados Unidos y Egipto.
También fue el precursor de las revistas de viajes y de los catálogos que se utilizan en las agencias de viajes: en al año 1845 redactó un folleto de 60 páginas describiendo la ruta y detalles de uno de los viajes que organizaba en su agencia de viajes.
Por otra parte, Thomas Cook vio la necesidad de crear un documento que acompañara estas ventas que realizaba en forma de paquete turístico. Por lo que la “invención” de los viajes organizados trajo consigo otra famosa creación: la del bono de hotel. Así, en el año 1867 creó el primer bono de hotel, también denominado “voucher”. En la actualidad, las agencias de viajes siguen utilizando estos bonos exactamente de la misma manera y para la misma finalidad para la que fueron creados hace más de 150 años.
Ya en el año 1950, la agencia de Thomas Cook trabajaba con más de un millón de turistas británicos, a los que llevaba a otros países del extranjero y en el año 1965 superan por primera vez un millón de euros en ventas.
Hasta el año 2019 la empresa seguía en plena expansión, con sucursales y filiales en diversos países: contaba con 27.000 empleados en 17 países, que atendían a 23 millones de clientes cada año; tenían 105 aviones y 200 hoteles y complejos hoteleros con su marca. En septiembre del 2019 la empresa quebró, dejando “tirados” a 600.000 pasajeros en distintos países del mundo y una deuda de 200 millones de euros. El Reino Unido lanzó la operación de rescate más grande desde la Segunda Guerra Mundial para repatriar a los pasajeros afectados hasta Inglaterra.
Karl Baedeker:
Karl Baedeker fue un editor alemán, descendiente de una larga saga de impresores, libreros y editores. En el año 1827 fundó una empresa que adquirió muchísima importancia por sus guías turísticas y guías de viaje, siendo en el año 1828 cuando creó la primera.
Tanto el formato como la información que tenían estaban muy trabajados, para que el viajero pudiera viajar por libre y no perderse los puntos más importantes de cada destino. Estas guías tenían información útil y práctica como horarios y precios de los transportes, precios de hoteles y restaurantes, así como recomendaciones de los mismos, rutas y recorridos para hacer en las distintas ciudades (con mapas y planos), gastronomía, costumbres locales, etc.
También inventó un sistema de estrellas (o asteriscos) para recomendar lugares de interés, hoteles de confianza y restaurantes de buena calidad, algo similar a las actuales “estrellas Michelín”. Sus guías cada vez eran más vendidas y se tradujeron a varios idiomas. Fueron ampliando el catálogo, y acabaron publicando guías de todos los países y regiones europeas, de muchos destinos del Norte de América, y también de algunos países africanos y de varias colonias europeas.
La editorial desapareció en el año 1943, y la editorial actual denominada Baedeker no guarda relación con esta empresa que fundó Karl Baedeker.
Como curiosidad, en el año 1913 se editó la guía de España y Portugal, y esta ofrece una visión muy curiosa de la España de la época, dejando también en evidencia la mala imagen que tenían de nuestro país. Algunas de estas curiosas frases, extraídas de esta guía, son las siguientes:
“Se debería tener a mano un cepillo e insecticida cuando se utilicen los cojines de los medios de transporte”.
“A pesar de las regulaciones oficiales, la taquilla no se abre hasta que el dependiente opine que la cola de espera tiene la longitud suficiente”.
“La velocidad límite en España es de 28 km por hora”.
“El hotelero español tiene como regla ignorar la forma de gestionar un moderno hotel. Se entiende y habla inglés y francés malamente”.
“El uso de cerveza española ordinaria casi seguro producirá diarrea en el extranjero no aclimatado”.
“Los guías profesionales son generalmente muy ignorantes y de escasa utilidad”.
“La Guardia Civil (capa azul oscuro con ribetes rojos y tricornios) es un cuerpo selecto de hombres firmes y serios en los cuales el extranjero puede confiar”.
Paralelamente, en Inglaterra, el editor John Murray III fue el primero en darle forma a las guías de viaje. En el año 1836 ya publicó su primera guía de viaje, siendo también todo un éxito.
En Francia hubo que esperar hasta el año 1900 para que alguien decidiera publicar guías de viaje, siendo la primera la de la compañía de neumáticos Michelin, que comenzó a regalar a sus clientes la afamada guía Michelin como parte de una promoción comercial, con el fin de que los franceses hicieran más viajes y así tener la necesidad de cambiar de manera más asidua los neumáticos de los coches, logrando la empresa un mayor beneficio económico. Estas guías incluían mapas de las principales ciudades, así como información útil de gasolineras y talleres.
Con el tiempo estas guías fueron ampliándose y mejorando, incluyendo también alojamientos, rutas, monumentos y restaurantes: a estos últimos se les aplicó un sistema de puntuación con estrellas, similar a los que las guías Baedeker utilizaban para los puntos de interés turístico. Hoy en día estas guías continúan comercializándose y se pueden encontrar en cualquier librería, supermercado o grandes superficies. Los chefs de todo el mundo trabajan muy duro para conseguir una de estas prestigiosas “estrellas Michelin”.
Cesar Ritz:
Cesar Ritz es conocido como “el padre de la hotelería moderna” y ha sido uno de los personajes más relevantes en el sector turístico. Nació en el año 1850 en Suiza y murió en 1918. Realizó grandes aportaciones al turismo. Una de ellas fue la profesionalización y valoración de las profesiones relacionadas con la hotelería.