La fe de Hungría - Antonio Mira de Amescua - E-Book

La fe de Hungría E-Book

Antonio Mira de Amescua

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Beschreibung

La fe de Hungría es un auto sacramental del dramaturgo Antonio Mira de Amescua. Como todas las obras del subgénero, se centra en transmitir un mensaje de profundas raíces católicas, en este caso al presentar el tira y afloja entre las Virtudes Cardinales y los Pecados Capitales por el alma de un hombre.

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Seitenzahl: 32

Veröffentlichungsjahr: 2021

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Antonio Mira de Amescua

La fe de Hungría

Edición de Pedro Correa

Saga

La fe de Hungría

 

Copyright © 2007, 2021 SAGA Egmont

 

All rights reserved

 

ISBN: 9788726660906

 

1st ebook edition

Format: EPUB 3.0

 

No part of this publication may be reproduced, stored in a retrievial system, or transmitted, in any form or by any means without the prior written permission of the publisher, nor, be otherwise circulated in any form of binding or cover other than in which it is published and without a similar condition being imposed on the subsequent purchaser.

This work is republished as a historical document. It contains contemporary use of language.

 

www.sagaegmont.com

Saga Egmont - a part of Egmont, www.egmont.com

Auto Sacramental de Mira de Mescua

Personas dél

hugo alberto honorio un alcalde un ángel un sacristán matilde de austria un cura músicos

Salen Hugo y Honorio riñendo con Alberto y un criado, sacadas las espadas

hugo ¡No es ansí!

alberto ¡Blasfemo, calla!

hugo Entre los fuertes blasones

de las armas, dad razones

sin reducillo a batalla.

5 ¿Cómo en la hostia y el cielo

Dios puede obrar?

alberto Fácil es;

mayores milagros ves.

hugo Eso dudo.

alberto Explicarélo.

Si es el ocupar lugar

10 intrínseco a la potencia

del cuerpo, de su presencia

en el cáliz del altar

¿quién duda?

hugo Explícalo ya.

alberto

Un ejemplo nos conviene.

15 El postrer cielo ¿no tiene

cuerpo?

hugo Sí.

alberto ¿Pues claro está

que lugar no ocupa? No.

hugo Yo esas consecuencias niego;

y contigo, que eres lego,

disputar no quiero.

20 alberto ¿No?

Pues la espada será agora

la lengua que sin piedad

defenderá mi verdad.

Sale Matilde con venablo y acompañamiento

matilde

¿ Qué es esto?

alberto Nada, señora.

matilde

25 Referidme lo que pasa.

alberto

Es su obstinada porfía.

matilde

A Austria pasaste de Hungría,

y me sirves en mi casa,

Hugo, y agora sospecho

30 cuál ha sido la ocasión

desta bárbara quistión;

porque ha días que en mi pecho

he observado que no tienes

católico sentimiento

35 del divino Sacramento

del altar. Si a Austria vienes

a sembrar falsas doctrinas,

te engañas; porque su fe

sobre los astros se ve

40 de las esferas divinas.

El Archiduque, mi hermano,

que será de nombre eterno,

es pequeño, y lo gobierno

con afecto soberano.

45 Sus Estados, la fe mía,

ni aún vislumbres de herejía

ha de permitir, si el cielo

mi buena intención ampara.

hugo Señora, no te apasiones;

50 escúchame mis razones,

pues ingenio de luz clara

te dio el cielo; porque ansí

verás que ciego no voy.

matilde

Aunque inmóvil, roca soy

55 en la fe constante. Di.

hugo Los hombres doctos de Hungría,

en dos bandos divididos,

« huérfanos» y « taboritas»

se apellidan. Yo he nacido

60 católico; y, deseoso

de no poner a peligro

el alma, estuve dudando

por cuál de los dos caminos,

a la verdad, se llegaba;

65 y una noche, que el estío

hizo apacible y serena,

ni despierto ni dormido,

un ángel vi de tinieblas

discurriendo ansí con Cristo:

70 Ya que corona mi frente

hermosa luz del Imperio,

escúchenme, Rey eterno,

tus alcázares divinos.

Émulos somos los dos,

75 ansí el apóstol lo dijo.

Luchando a brazos andamos,

y mis angélicos bríos

ni se aumentan vencedores

ni se acobardan vencidos.

80 Corte hiciste, reino hicistes

en esos altos zafiros;

yo hice corte, reino hice

en los profundos abismos.

Ángeles y hechuras haces

85 para tu aplauso y servicio,

casi la mitad me truje

para blasones del mío.

Esta fábrica del mundo

en los dos se ha dividido;

90 tuya es la parte celeste,

el orbe inferior habito.

Criaste al hombre y amor

con soberano artificio

tercera naturaleza

95 supo hallar, Amor la quiso.

A imagen tuya le hiciste,

y yo, siguiendo tu estilo,

la deshice y la borré,

y en serpiente que da silbos

100 la convertí a imagen mía.

Pero al fin tuvo dos hijos;